Tribunas

Aquel V Centenario de Santa Teresa…

José Francisco Serrano Oceja

Ha concluido el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús en silencio, demasiado silencio. En Ávila sí se ha armado ruido, el franciscano lío. No sé en cuántos sitios más…

Es cierto que los jóvenes se congregaron este verano entre las murallas, y que se han producido los siguientes eventos, entre otros: Las huellas de Teresa, en la Biblioteca Nacional; la exposición de la Fundación Las Edades del Hombre; así como los congresos promovidos por la Universidad Católica de Ávila o la Universidad Mística de Ávila.

Atrás quedó la misa de clausura presidida por el cardenal Blázquez, arzobispo de Valladolid. Una misa en la que ciertamente estuvo muy arropado por el pueblo.

Es hora de hacer balance. Primero, el del obispo de Ávila, monseñor Jesús García Burillo, quien ha señalado que, quizá, uno de los descubrimientos de esta efeméride ha sido, para los peregrinos, Ávila.

La ciudad amurallada, metáfora de la ciudad de Dios y de la ciudad de los hombres: “Se vive –señala monseñor García Burillo en unomasdoce- cuando se llega como verdadero peregrino. Se descubre que la muralla de Ávila tiene 9 puertas continuamente abiertas y que dentro está el diamante, el castillo interior, las personas, la Catedral, en la cumbre de la ladera y en el centro de la ciudad. Entrar a la ciudad física es entrar al espíritu de Santa Teresa y convivir con las gentes que hoy trabajan aquí, que sufren, que reciben, que son acogedores. Si se es peregrino de verdad, a Ávila se llega buscando a Cristo de la mano de Santa Teresa”.

El segundo, el del General de los Carmelitas Descalzos, P. Saverio Cannistrào en “El Norte de Castilla”. Afirma el General de los Carmelitas que “la difusión de la doctrina y la persona de Teresa ha sido enorme en todo el mundo, no solo en España”.

Preguntado si percibe que España se ha volcado de manera especial con la efeméride , contesta que “en todas las diócesis españolas se han programado actividades, infinidad de parroquias han programado actos y hemos sentido una enorme cercanía con nuestros obispos, comenzando por el presidente de la Conferencia episcopal, el cardenal Blázquez. Creo que ha sido un año de gracia en todos los sentidos, también y sobre todo espiritual, en la cantidad de personas que han vivido este año jubilar como un paso de a través de Santa Teresa, por su vida”.

Ya lo dijo el Papa Francisco, los “consejos de la Santa son de perenne actualidad”.

 

 

José Francisco Serrano Oceja