Se desarrolla en la localidad vallisoletana de Villagarcía de Campos el XXXV Encuentro de Obispos, Vicarios y Arciprestes de las diócesis de Iglesia en Castilla. Más de 125 personas se reúnen para reflexionar sobre el nº 25 de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium, del Papa Francisco: “Espero que todas las comunidades procuren poner los medios necesarios para avanzar en el camino de una conversión pastoral y misionera, que no puede dejar las cosas como están. Ya no nos sirve una «simple administración». Constituyámonos en todas las regiones de la tierra en un «estado permanente de misión»”.

En los arciprestazgos ya se esta trabajando sobre “la pastoral en conversión”  para “expresar más directamente el corazón del Evangelio” (EG 36).  El Papa proclama con fuerza que ese corazón es “la belleza del amor salvífico de Dios manifestado en Jesucristo muerto y resucitado”.  El Año jubilar extraordinario de la Misericordia apunta en la misma dirección, acoger y ofrecer lo nuclear de la Buena Noticia a los hombres y mujeres de hoy.

Al XXXV Encuentro de Obispos, Vicarios y Arciprestes de Villagarcía de Campos asisten 8 obispos, 9 vicarios generales, y los vicarios de pastoral y arciprestes de las 9 diócesis que forman Iglesia en Castilla (todas las diócesis de castilla y León excepto León y Astorga).

Para el trabajo en Villagarcía se cuenta con la colaboración del sacerdote argentino Carlos Mª Galli, doctor en teología, profesor de Eclesiología y Pastoral en la Universidad Católica Argentina y teólogo cercano al Cardenal Bergoglio en Buenos Aires y Aparecida; ahora nombrado por el Papa Francisco miembro de la Comisión Teológica Internacional y perito teológico en la Secretaría del Sínodo de los Obispos.

El deseo es acoger la llamada misionera del Papa con la ayuda de alguien que ha caminado cerca de él. El ritmo del encuentro inluye la escucha del ponente, diálogo con él, trabajo en grupos, asamblea y liturgia y pretende sintonizar con el “sueño” del Papa: “una opción misionera capaz de transformarlo todo, para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se convierta en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual”  (EG27).

Estos encuentros de Villagarcía nacieron hace 36 años como respuesta a las preocupaciones de los Obispos de Iglesia en Castilla, muy a tono con la eclesiología del Concilio Vaticano II. Desde entonces, estos encuentros han marcado orientaciones pastorales comunes para todas las diócesis participantes.

(Archidiócesis de Valladolid)