Vaticano
El número de fallecidos asciende a 38

El papa Francisco: “Unámonos en oración por las personas presentes en los lugares afectados por el terremoto”

Sustituyó la catequesis por el rezo del Santo Rosario. Aseguró a las víctimas del seísmo el "abrazo" de toda la Iglesia

El papa Francisco modificó en la jornada de ayer toda su agenda. El terremoto que arrasó las localidades de Amatrice, Accumoli, Aquat del Tronto y Norcia ha causado en Italia una conmoción tal, que Su Santidad decidió cambiar su catequesis por el rezo del Santo Rosario en la plaza de San Pedro.


Como todos los miércoles de este Año de la Misericordia, el Papa Francisco había preparado la catequesis. El tema a tratar iba a ser la cercanía con Jesucristo. Expresó su dolor por las localidades, personas y familias afectadas.

“Ante las noticias del terremoto que ha golpeado el centro de Italia, devastando enteras zonas y dejando muertos y heridos, no puedo hacer otra cosa que expresar mi gran dolor y mi cercanía a todas las personas presentes en los lugares golpeados por los temblores, a todas las personas que han perdido a sus familiares y que ahora están compungidos por el miedo y el terror", señaló el Pontífice.

Además, en Instagram, la red social que más frecuenta, colgó un mensaje de apoyo a todas las víctimas, junto a una fotografía del Rosario en sus manos. Además del español, incluyó la traducción al inglés, portugués, italiano, francés y alemán.

Dejémonos conmover con Jesús. Unámonos en oración por las personas presentes en los lugares afectados por el terremoto”, fue el texto de Su Santidad. En él, expresa su deseo de unirnos en paz y oración por el episodio sísmico.

El ser humano no es un bien de consumo, que se puede usar y luego tirar”, expresó Francisco en su publicación anterior, escasas horas antes del seísmo.

Es la primera vez que un Pontífice anula la catequesis de la audiencia general, que retomará en los próximos días.

"Dejamos la catequesis para la próxima semana. Os invito a recitar conmigo por estos hermanos y hermanas nuestros una parte del santo Rosario", dijo para dar paso a la oración frente a los más de 10 millares de fieles que se congregaron en la plaza romana.

Declaró también en su discurso de oración que leer el mensaje del alcalde de Amatrice, Sergio Pirozzi, a la cadena italiana pública RAI, le entristeció. “No queda nada del pueblo, ya no existe”, fue lo que dijo el alcalde.

El papa prosiguió lamentando y ofreciendo su pésame a los afectados, en especial a las familias y a los niños. “Saber que entre los muertos hay niños, me conmueve mucho", subrayó.

Para finalizar, quiso "asegurar la oración" a todos los afectados, a quienes pidió que "confíen en la caricia y el abrazo de toda la Iglesia, que en este momento desea abrazarlos con su amor materno". Mandó y aseguró a las localidades y afectados el "abrazo" de toda la Iglesia, sobre todo el de los fieles que se encontraban en la Plaza de San Pedro.