Francisco \ Encuentros y Eventos

Rumbo al Encuentro Mundial de las Familias 2018

RV | 31/03/2017


 

«¿La familia sigue siendo una buena noticia para el mundo de hoy?» Es la pregunta que plantea el Papa Francisco en su Carta para el Encuentro Mundial de las Familias 2018 signada 25 de marzo de 2017 dirigida al cardenal Kevin Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida.

La próxima reunión de las familias del mundo tendrá lugar en Dublín, capital de la República de Irlanda, del 21 al 26 de agosto de 2018, y llevará como lema: «El Evangelio de la familia: alegría para el mundo». 

Es precisamente a partir de ese lema que el Obispo de Roma lanza la pregunta: «El Evangelio sigue siendo alegría para el mundo?» Y también: «¿La familia sigue siendo una buena noticia para el mundo de hoy?».

"¡Yo estoy seguro de que sí!  - responde en la carta y prosigue - "este 'sí' está firmemente fundado en el plan de Dios. El amor de Dios es su 'sí' a toda la creación y al corazón de la misma, que es el hombre. Es el 'sí' de Dios a la unión entre el hombre y la mujer, abierta a la vida y al servicio de ella en todas sus fases; es el 'sí' y el compromiso de Dios con una humanidad a menudo herida, maltratada y dominada por la falta de amor. La familia, por lo tanto, es el 'sí del Dios Amor. Sólo partiendo del amor la familia puede manifestar, difundir y regenerar el amor de Dios en el mundo. Sin amor no se puede vivir como hijos de Dios, como cónyuges, padres y hermanos".

El Papa Francisco hace hincapié una vez más en cosas que parecen darse por descontado en la dinámica familiar, es decir, en la importancia de la utilización de aquellas palabras: "permiso, gracias, lo siento", y asevera asimismo, cuánto mejoraría la vida familiar si cada día se vivieran esas tres sencillas palabras. 

"Todos los días experimentamos la fragilidad y la debilidad, - añade - y por eso todos nosotros, familias y pastores, necesitamos una humildad renovada que plasme el deseo de formarnos, de educarnos y de ser educados, de ayudar y de ser ayudados, de acompañar, discernir e integrar a todos los hombres de buena voluntad. Sueño con una Iglesia en salida, no autorreferencial, una Iglesia que no pase lejos de las heridas del hombre, una Iglesia misericordiosa que anuncie el corazón de la revelación de Dios Amor, que es la Misericordia. Es la misma misericordia que nos hace nuevos en el amor; y sabemos cuánto las familias cristianas sean lugares de misericordia y testigos de misericordia; después del Jubileo extraordinario lo serán todavía más, y el Encuentro de Dublín podrá dar señales concretas".

Así pues, el Romano Pontífice invita a toda la Iglesia a recordar estas indicaciones en la preparación pastoral para el próximo Encuentro Mundial.  

A continuación, presentamos el Vídeo promocional del Encuentro Mundial de las Familias 2018: 

(Griselda Mutual - Radio Vaticano)