Solidaridad
La conferencia de religiosos publicará en los próximos días “Juntos somos más”

El descenso de vocaciones levanta la creatividad de las congregaciones: se unen en proyectos solidarios

Confer reacciona a las palabras del Papa “la actitud de supervivencia nos vuelve miedosos” y crea Intercongregacionalidad

La Conferencia Española de Religiosos (CONFER) ha reaccionado a las palabras del   Papa Francisco que les ha impulsado a despertar la “creatividad” ante los nuevos retos y no dejarse abatir por el descenso de vocaciones. De esta manera, ha creado  Intercongregacionalidad, un proyecto que busca unir distintas instituciones religiosas en la realización de proyectos sociales para mejorar la vida de personas vulnerables, jóvenes, mujeres o refugiados.


 

En los próximos días, Confer publicará un artículo titulado “Juntos Somos más, una propuesta de vida nueva”, al que ha tenido acceso Religión Confidencial. El texto explica algunos aspectos de Intercongregacionalidad cuyo objetivo es “recoger lo mejor de cada uno”.  

El artículo hace referencia a las palabras del Papa Francisco a los religiosos en una reciente homilía: “La actitud de supervivencia nos vuelve reaccionarios, miedosos, nos va encerrando lenta y silenciosamente en nuestras casas y en nuestros esquemas. Nos proyecta hacia atrás, hacia las gestas gloriosas —pero pasadas—que, lejos de despertar la creatividad profética nacida de los sueños de nuestros fundadores, nos conformamos con buscar atajos para evadir los desafíos que hoy golpean nuestras puertas. La psicología de la supervivencia le roba fuerza a nuestros carismas porque nos lleva a domesticarlos, hacerlos accesibles a la mano pero privándolos de aquella fuerza creativa que inauguraron; nos hace querer proteger espacios, edificios o estructuras más que posibilitar nuevos procesos…” ¡Este es el reto de la intercongregacionalidad!”, dice el texto.

El sacerdote jesuita Alberto Ares, uno de los responsables de Intercongregacionalidad y delegado del sector social de la Provincia de España de la Compañía de Jesús, explica a este Confidencial que este proyecto, cuyo objetivo es unir fuerzas entre las distintas instituciones religiosas, “nace, de momento, en el ámbito social”.

Respecto al problema del descenso de vocaciones y que en España se cierra un convento de clausura al mes, debido fundamentalmente, a la avanzada edad de los religiosos y a las dificultades económicas, (según un estudio de Vida Nueva), Ares aclara que “muchas congregaciones están cediendo sus edificios o conventos a Cáritas, para albergues de personas sin techo, de refugiados o de otros servicios sociales”.

 

El futuro de la vida religiosa

En el artículo que publicará Confer se explica algunos objetivos de  Intercongregacionalidad: “Juntos y convocados expresamos una mejor comprensión del Evangelio y de las necesidades actuales, así como sucedió en los orígenes de las congregaciones. La vida religiosa hoy depende de la calidad de las relaciones y no sólo de lo que hacemos. Se espera de nosotros que seamos expertos en comunión”.

De esta manera, Confer está impulsando la mutua colaboración entre los diversos Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica, permaneciendo siempre fieles a su propio carisma, pero teniendo presente la amistad espiritual que frecuentemente ha unido en la tierra diversos fundadores y fundadoras.

“Con este deseo de intensificar el trabajo intercongregacional y a la luz de nuestras últimas Asambleas Generales, hemos comenzado a dar pasos en la formación de un equipo dependiente de la Secretaria General, que pueda acompañar y ayudar a dinamizar proyectos intercongregacionales en el ámbito social. Tenemos la certeza de que juntos y en comunión, podremos acercarnos con más realidad a las periferias existenciales de nuestros días, que claman una respuesta evangélica”, se lee en el artículo.

 

Proyectos sociales

Algunos de los proyectos que ya han iniciado son por ejemplo, la constitución de la Fundación Red Íncola en la que forman parte diez congregaciones: Compañía de María, Dominicos, Esclavas del Sagrado Corazón, Filipenses mosioenras de la Enseñanza, Institución Teresiana, Religiosas de María Inmaculada, Hijas de la Caridad, Carmelitas de la Caridad Vedruna y Jesuítas, junto al Teléfono de la Esperanza.

Red Íncola está formada por personas organizadas en una red intercongregacional cuya misión es apoyar a las personas en situación de exclusión, promoción y defensa de sus derechos. Los más de veinte proyectos que desarrollan cubren diversos ámbitos: acogida, formación, infancia y juventud, empleo, voluntariado, pastoral y presencia social. Los voluntarios son esenciales para prestar los servicios en los diferentes programas, de menores, apoyo escolar, madres, personas sin hogar.  Durante este año se ha contado con unos 450 voluntarios.

Otro proyecto intecongregacional es la Asociación Puente de Esperanza, que surge de la iniciativa de once congregaciones religiosas que residen en el distrito Tetuán de Madrid que ayudan a personas de origen extranjero en acogida, formación, asesoría psicológica y búsqueda de empleo.

Asociación Atalaya Intercultural es otro programa. Formada por cinco congregaciones, prestan servicio a los inmigrantes de Burgos.  También está la Associació Saó Prat, que nace de la experiencia de tres comunidades religiosas para acompañar a jóvenes en situación de vulnerabilidad. Y por último, la Asociación Lar-Betania, en Zaragoza cuyo objetivo es la inserción laboral y la acogida de mujeres de mayor vulnerabilidad.  Apoyan al programa “Le damos la vuelta”, una empresa de inserción social que se dedica a restaurar y vender productos del mundo infantil.

La ilusión en la CONFER y en el equipo intercongregacional es poder seguir sumando en esta misión común. Por esta razón, animan a enviar iniciativas y proyectos intercongregacionales a proyectosinter@confer.es