Tribunas

Los obispos del Papa Francisco

 

 

José Francisco Serrano Oceja

 

 

Hay quien se pregunta quiénes son los obispos del Papa Francisco, suponiendo –y es demasiado suponer- que se puede ser obispo en la Iglesia católica sin estar en comunión con el sucesor de Pedro, el Vicario de Cristo en la tierra. En general y en particular, por cierto.

Partamos de la base de que el Papa no ha dicho quienes son los suyos y quiénes no lo son. Sin embargo, en estos días pasados, en reiteradas ocasiones, se ha reunido con obispos de todo el mundo y les ha hablado de cómo ser obispo en la Iglesia. Debemos entender que quienes cumplen lo que ha dicho el Papa son sus obispos.

Por ejemplo. El Papa ha pedido a los obispos dialoguen con sus fieles, que tengan una especial atención al clero y a los seminarios. “No podemos –ha señalado- responder a las responsabilidades que tenemos con ellos, sin antes actualizar nuestros procesos de selección, acompañamiento y evaluación”. ¿Conocen ustedes algún obispo que no se lleva bien con su clero? Pues…

El Papa ha añadido que “cada uno de ustedes tiene que entrar en lo más profundo de sí mismo y preguntarse qué se puede hacer para hacer más santo el rostro de la Iglesia que gobernamos en nombre del Supremo Pastor. No sirve de nada señalar con el dedo a los demás, fabricar chivos expiatorios, arrancarse los vestidos, excavar en la debilidad de los demás”. ¿Conocen ustedes algún obispo que se pasa el día hablando de los demás, señalando sus faltas, quejándose de los otros? Pues…

El Papa ha insistido en que “el obispo que ama a Jesús no es un escalador que va adelante con su vocación como si fuera una función, tal vez mirando a otra posibilidad de avanzar y subir, no. El obispo se siente elegido. Y tiene la certeza de haber sido elegido. Y esto le lleva a dialogar con el Señor: “me has elegido a mí, que soy poca cosa, que soy un pecador ...”: tiene humildad”. ¿Conocen ustedes algún obispo que haya ido de diócesis en diócesis, siempre mejorando? Pues…

El Papa ha señalado que el obispo “no busca el refugio de los poderosos, de las élites: no. Serán las élites quienes criticarán al obispo; el pueblo tiene esta actitud de amor hacia el obispo, y tiene esta -como si fuera- esta unción especial: confirma al obispo en su vocación”. ¿Conocen ustedes algún obispo alabado por la élites, incluso las de lo políticamente correcto? Pues…

Y así podríamos seguir. Pero parece ya suficiente.

Ah, y lo dice el Papa.

 

José Francisco Serrano Oceja