VATICANO | China

 

Dar un nuevo impulso a la evangelización en China

 

El objetivo de la Santa Sede en su diálogo con la República Popular China es pastoral no política. Los católicos son así apoyados en la reconciliación y normalización de su vida de fe

 

 

22 septiembre 2018, 14:00 | Ciudad del Vaticano


 

 

Hoy se ha firmado en Beijing el Acuerdo Provisorio entre la Santa Sede y la República Popular China sobre el nombramiento de los Obispos. El objetivo que persigue la Santa Sede no es político, sino eclesial y pastoral: que las comunidades católicas de China puedan tener buenos pastores en comunión con la Santa Sede y reconocidos por las autoridades civiles.

 

Objetivo eclesial no político

A este objetivo particular están vinculados otros de carácter pastoral general: dar un nuevo impulso al compromiso de evangelización; ayudar a los católicos en el camino de la reconciliación y de la progresiva normalización de su vida de fe; contribuir, con la luz del Evangelio, al bien de su país, según el principio "plenamente católicos y plenamente chinos".

La Santa Sede es consciente de que la acción pastoral de la Iglesia en la historia tiene siempre implicaciones políticas. La Iglesia, en efecto, tiene una contribución original para aportar a la construcción del bien común de la sociedad. Como dice al respecto el Concilio Vaticano: "La comunidad política y la Iglesia son independientes y autónomas, cada una en su propio terreno. Ambas, sin embargo, aunque por diverso título, están al servicio de la vocación personal y social del hombre. Este servicio lo realizarán con tanta mayor eficacia, para bien de todos, cuanto más sana y mejor sea la cooperación entre ellas, habida cuesta de las circunstancias de lugar y tiempo".  (Constitución Pastoral sobre la Iglesia en el Mundo Actual, n. 76).

 

El método que condujo al Acuerdo

La Santa Sede y las autoridades de la República Popular China han continuado hablando, han seguido reuniéndose regularmente con un espíritu de confianza y de diálogo para buscar soluciones: la confianza ha crecido gradualmente y han decaído algunos prejuicios y preconceptos. Esto ha permitido llegar a un Acuerdo sobre un asunto de gran importancia, a saber, el nombramiento de los Obispos.

Otro aspecto importante es que las Partes han acordado la importancia de seguir el método de "solución amistosa" en la resolución de eventuales divergencias que pudieran surgir en la interpretación y  en la aplicación del Acuerdo Provisorio sobre el nombramiento de Obispos.

 

El texto del Acuerdo

El texto del Acuerdo no se hace público porque tiene la característica de ser un texto, sí vigente  y normativo, pero provisorio y en cierto modo también experimental. Futuras revisiones y perfeccionamientos son posibles y deseables. En este momento es importante para la Santa Sede que todos comprendan y estén convencidos de que lo que se ha hecho es por el bien de todos,  es por el bien espiritual de los Católicos en China y por el bien del Pueblo Chino.