Economía

 

¿La seguridad tiene un precio?

 

Los Estados Unidos podrían estar poniendo en peligro el transporte aéreo con un fin meramente recaudatorio. Por 72 dólares los pasajeros pueden librarse de los controles exhaustivos que se llevan a cabo en los aeropuertos

 

 

5 octubre, 2018 | ForumLibertas.com


 

 

La Administración de la Seguridad del Transporte, Transportation Security Administration (TSA) en inglés, está llevando a cabo una novedosa medida: pagar para no ser examinado en los controles de los aeropuertos. Esta iniciativa, de clara finalidad recaudatoria, consta de una entrevista en la que la TSA se asegura de que el individuo no sea un peligro para las demás personas.

La TSA, creada durante la administración Bush tras el atentado del 11S, se convirtió en un modelo mundial en cuanto a los nuevos controles exhaustivos que se implantaron en todos los aeropuertos internacionales.

Este programa de pago, llamado TSA precheck, es definido por la Administración como “un programa de revisión acelerado que realiza evaluaciones de riesgos sobre los pasajeros antes de su llegada al punto de control del aeropuerto”. El proceso para beneficiarse del programa es la superación de una entrevista personal de entre 10 y 15 minutos para verificar los antecedentes del pasajero y pagar 72 euros, en el caso de ser aceptado.

 

 

A modo de promoción para que más viajeros se apunten, la TSA también indica que la espera media no supera los cinco minutos en el 95% de los casos, frente a colas más largas que experimentan aquellos pasajeros cuya aerolínea no está integrada en el programa, los que por alguna razón el gobierno no los considera “de confianza” o simplemente aquellos que no han pagado los 72 dólares.

El hecho de examinar las maletas se ha acabado, poniendo en cuestión si siguen siendo útiles los controles de seguridad. En caso afirmativo, los Estados Unidos estarían poniendo en peligro el transporte aéreo a cambio de dinero.

Actualmente hay 200 aeropuertos, 54 aerolíneas y más de seis millones de pasajeros inscritos en el TSA precheck, por los que hasta ahora esta institución ha ingresado ya más de 525 millones de dólares, teniendo en cuenta los pasajeros actuales y los que ya han vuelto a pagar la cifra, pues la validez caduca a los cinco años.