Diócesis

 

Munilla explica en un vídeo por qué es lícito la venta del patrimonio de su diócesis para hacer un aparthotel

 

El obispo de San Sebastián promueve operaciones económicas que convertirán en 26 apartamentos edificios emblemáticos de la Iglesia guipuzcoana

 

 

27/11/18


 

 

"Tenemos la obligación y la responsabilidad de que los bienes de la Iglesia sean utilizados con la finalidad con la que fueron dados, ya sea mediante su venta o su renta, para que el dinero vaya destinado a Cáritas, las misiones o el sostenimiento de la Iglesia", ha explicado el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, a Religión Confidencial.

Y es que mil personas entre clérigos y laicos han firmado un documento por el que denunciaban el desmantelamiento de la diócesis.

El obispo Munilla remite a un vídeo explicativo que da aclaraciones a los que han cuestionado la operación por la cual el gobierno municipal de Donostia ha aprobado la licencia de obra para convertir la sede de la curia diocesana (el edificio que alberga las dependencias del gobierno de la iglesia en el territorio) en un aparthotel de 26 apartamentos que será gestionado por el obispado con la participación de un inversor privado sobre un presupuesto inicial superior a los cuatro millones de euros, informa noticias de Guipüzcoa.

 

Organización pastoral y evangelizadora

El edificio en cuestión es el número 5 de la calle Zabaleta del barrio de Gros, un inmueble de siete plantas que acoge los servicios centrales del obispado. Además del despacho del obispo, alberga servicios como la secretaría general, la vicaría, las pastorales diocesanas, patrimonio artístico, derecho canónico, etcétera. Una infraestructura clave para la organización pastoral, evangelizadora y organizativa de la diócesis.

No es esta la única operación impulsada por el obispo Munilla. Igual suerte va a correr la esquina de la calle Urdaneta frente al edificio de Correos, la que se alza sobre la librería diocesana Idatz. Hogar del obispo y de los sacerdotes ya jubilados, según fuentes consultadas por este diario, está previsto también destinarlo a actividades hoteleras susceptibles de convertirse en apartamentos turísticos.

Recientemente, también se vendió la parroquia de Intxaurrondo sur para convertirla en una residencia de ancianos y, al parecer, también existen planes similares para la iglesia de la Sagrada Familia o, al menos, para una parte de ella.

 

Autofinanciación sostenible

En el canal "Guipüzcoa al día", Munilla explica la autofinanciación sostenible de la diócesis. "La Iglesia tiene distintos patrimonios que no se han podido utilizar, pero en la medida que la vida avanza,  podemos y debemos arreglarnos con menos patrimonio y organizarnos de manera más austera. Y ese patrimonio que los fieles, con sus legados, han puesto en nuestras manos, pues tenemos que ser responsables para que cumpla con la finalidad última directa o indirecta que se nos encomendó", explica el obispo de San Sebastián.

Y pone un ejemplo. Algunos servicios de evangelización de la diócesis, como las Obras Misionales Pontificias,  se han trasladado de los dos pisos emblemáticos en los que estaban antes, y se han concentrado ahora en una parroquia de San Sebastián, pudiendo vender esos dos pisos para dedicar el dinero directamente a las misiones.

En otros casos, se alquilan esas propiedades, para que se puedan seguir cumpliendo los fines pastorales por las que fueron dados esos edificios.  Otra de las operaciones que se están llevando a cabo es el traslado del obispado al Seminario, edificio enorme y que ahora no albergan tantos seminaristas.

Munilla también explica que mantener todo el patrimonio artístico y religioso de la Iglesia en Guipüzcoa es un gran reto y "antes recibíamos más dinero de la Administración. Pasar de dos millones de euros a 69.000 euros de este año pues es una gran diferencia".

El obispo pone otro ejemplo para argumentar las operaciones inmobiliarias en las que está inmersa la diócesis. Por ejemplo, en la parroquia de Andoain se han movido los cimientos y su reestructuración cuesta unos cinco millones de euros y, por lo tanto, necesitan esa autofinanciación sostenible para hacer frente a estos imprevistos.

Asímismo, Munilla explica que los grandes beneficiados de estas operaciones también van a ser las parroquias de los municipios de San Sebastián que no tienen medios para sostenerse.

Respecto al alquiler de los 26 apartamentos, el obispo de Munilla repite que lo que no es de recibo es infrautiilizar el patrimonio y con el alquiler de estos pisos, se ayudará al sostenimiento de los servicios pastorales de la Iglesia en Güipuzcoa.