Tribunas

Arzobispos españoles en Estrasburgo

 

 

José Francisco Serrano Oceja

 

Esta semana se ha celebrado en Estrasburgo, ciudad del Parlamento europeo, un encuentro entre obispos y europarlamentarios organizado por la Conferencia de Obispos Europeos y la Misión Permanente de la Santa Sede en el Consejo de Europa.

Por cierto, que el arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz Montes, ha sido nombrado director de la sección de cultura de la Conferencia de obispos europeos.

El encuentro giró en torno a la cultura del camino, peregrinaciones y encuentros. Y en el desarrollo de los actos tuvo un lugar muy destacado, como no podía ser menos hablando de Europa y las peregrinaciones, el arzobispo compostelano, monseñor Julián Barrio.

De hecho, el arzobispo de Compostela participó en una mesa redonda, moderada por el arzobispo de Oviedo.

Monseñor Julián Barrió, recordando a Moreno Báez, insistió en que “la peregrinación a Santiago fue uno de los elementos fuertes que favorecieron el entendimiento mutuo de diferentes pueblos europeos, como los latinos, los alemanes, los celtas, los anglosajones y los eslavos. La peregrinación puso en contacto y unió a aquellas personas que, de siglo en siglo... abrazaron el Evangelio”.

No es posible pensar en Europa sin tener en cuenta el profundo intercambio generado por la peregrinación jacobea y su camino. En palabras de M. Durliat, es una de las manifestaciones más permanentes de la civilización cristiana y la más antigua y tenaz de sus tradiciones.

No es posible, como apuntó en varias de sus obras mi recordado monseñor Eugenio Romero Pose, que el Camino de Santiago no sea para los europeos hoy un camino de esperanza, de esa Europa que, según Goethe, nació peregrinando.

“Haz que la esperanza resuene desde aquí”. Palabras que, dirigidas al apóstol Santiago, fueron colocadas por Dante en boca de Beatriz y que nosotros debemos hacer nuestras.

 

José Francisco Serrano Oceja