Solidaridad

 

Misión América da fe de que el dinero llega y se gasta de forma legítima

 

La ONGD de la Iglesia, que ha cumplido 25 años, apoya a 457 proyectos en 27 países gestionados por misioneros y sacerdotes diocesanos

 

 

05/12/18


 

 

La ONGD Misión América ha celebrado su 25 aniversario en Madrid.  "Misión América ha nacido para servir, para ayudar a los que ayudan: los misioneros Hay ONGD que apoyan a congregaciones concretas, pero los sacerdotes diocesanos no tenían este apoyo, estaban mucho más solos. Por eso nació esta entidad", ha explicado Ana Álvarez de Lara, presidenta de esta ONGD que está amparada por la Comisión Episcopal de Misiones y Cooperación entre las Iglesias de la Conferencia Episcopal Española.

En esos 25 años ha logrado apoyar 457 proyectos en 27 países. Esta institución sale adelante exclusivamente gracias al trabajo de voluntarios, y su radio de acción se ha ampliado a África, y a otros misioneros españoles.

La gran ventaja es que, gracias a que la institución está muy vinculada a la Comisión Episcopal de Misiones, conocen a los responsables de los proyectos -los misioneros-, y dan fe de que el dinero llega y se gasta de forma legítima. Somos una gran familia", ha afirmado Álvarez de Lara en un encuentro con la prensa.

En cuanto al origen de las ayudas, gran parte viene de las subvenciones públicas. "Una vez que un misionero nos pide ayuda, nos movilizamos para canalizar las posibles ayudas, estamos atentos a las convocatorias públicas de ayuda al desarrollo.". Esto es posible, según ha explicado, gracias a que las 69 Delegaciones de Misiones, presentes en toda la geografía española, colaboran con esta iniciativa.

 

Implicar a más personas

"El gran reto que tiene Misión América es el de implicar al mayor número de personas en nuestro país", ha señalado la presidenta.

En el acto han estado presentes también  monseñor Francisco Pérez, arzobispo de Pamplona-Tudela y presidente de la Comisión Episcopal de Misiones de la Conferencia Episcopal Española (CEE) así como el misionero de Togo Joan Soler.

"Yo era misionero en Dapaong (Togo), y llevaba adelante la misión en una parroquia, a la que habíamos añadido muchos otros servicios. Daba clases en los institutos públicos, y la situación era inviable: más de 130 por aula, el 25% de escolarización", ha contado el sacerdote misionero Joan Soler, beneficiario de las ayudas de Misión América. "Entonces el Estado me pidió que creara una escuela en mi parroquia, porque era algo muy necesario. Pero humanamente yo no podía abarcar más, y no tenía di un céntimo".

El misionero ha reconocido que, a pesar de su miedo inicial, decidió comenzar con el proyecto gracias a un primer donativo de 15 dólares de una mujer del pueblo. Inmediatamente pidió ayuda a Misión América, y esta ONGD le ayudó a comenzar la escuela. "Si estoy hoy aquí es porque estoy muy agradecido. Gracias a vosotros, en Togo hay una escuela, y los togoleses se dan cuenta que hay un occidente que es muy bueno".

Por su parte, Francisco Pérez, arzobispo de Pamplona  ha dado las gracias a la ONGD Misión América por estos 25 años, y ha compartido cómo en sus viajes por muchos países de África ha conocido el trabajo de la Iglesia. También ha reivindicado la necesidad de que todas las instituciones de la Iglesia que trabajan a favor de la misión lo hagan en comunión, respetando la especificidad de cada uno, pero en una misma dirección.

No ha faltado un especial recuerdo a Anastasio Gil García, gran impulsor de la institución, y vicepresidente de la misma hasta que falleció el pasado septiembre.