Servicio diario - 02 de enero de 2019


 

Padre Nuestro: La oración "es un diálogo íntimo con el Padre que nos ama"
Rosa Die Alcolea

Artistas del Circo Cubano actúan para el Papa: "La belleza siempre nos acerca a Dios"
Rosa Die Alcolea

Audiencia general, 2 de enero de 2019 — Catequesis del Papa
Rosa Die Alcolea

Oficina de Prensa Vaticana: El nuevo director agradece el apoyo y la confianza
Rosa Die Alcolea

Hispanohablantes: "Mantengan siempre abierto ese canal de comunicación con Dios"
Rosa Die Alcolea

El Papa invita a "levantar la mirada hacia el cielo, como los Magos"
Rosa Die Alcolea

Oriente Medio: La oración puede ser "silenciosa", es suficiente ponerse "bajo la mirada de Dios"
Rosa Die Alcolea

Indonesia: La comunidad católica se compromete a ayudar a las víctimas del tsunami
Redacción

Mons. Felipe Arizmendi: "Artesanos de paz, para un año nuevo"
Felipe Arizmendi Esquivel

San Ciriaco Elías Chavara, 3 de enero
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

02/01/2019-10:24
Rosa Die Alcolea

Padre Nuestro: La oración "es un diálogo íntimo con el Padre que nos ama"

(ZENIT – 2 enero 2019).- El Papa Francisco ha recordado que la oración “no es un acto hipócrita, ateo, que no tiene otro interés que ser admirados por los demás”. Al contrario, el único testigo de la oración cristiana “es la propia conciencia, pues es un diálogo íntimo con el Padre que nos ama”, ha asegurado.

Dios no quiere ser “amansado” con largas retahílas de adulaciones, como hacían los paganos para captar la benevolencia de la divinidad; basta hablarle como a un padre que sabe lo que necesitamos antes incluso de decírselo.

Hoy, continuando con la catequesis del Padre Nuestro, el Santo Padre ha invitado a “fijarnos en el contexto donde el evangelista Mateo coloca esta oración”, que es el discurso de la Montaña.

 

Invirtiendo las categorías

Ese relato que comienza con las bienaventuranzas “resume la enseñanza de Jesús” y se abre precisamente “invirtiendo las categorías humanas corrientes”, llamando dichosos a unas personas que ni entonces ni ahora tenían gran prestigio en la sociedad, pero que son capaces de amar, de trabajar por la paz y, por ello, de ser constructores del reino, ha explicado Francisco.

“La ley llega a su cumplimiento en el mandamiento del amor, del amor a los enemigos, de ese amor que Dios nos enseña y que lleva hasta las  últimas consecuencias”, ha señalado el Pontífice.

 

“Llamarle Padre”

Nosotros somos hijos de ese Dios, indica el Papa, “no superhombres capaces de lo que nadie puede hacer”; al contrario, “somos tan pecadores como los demás”, pero “podemos ponernos delante de la zarza ardiente del misterio divino y llamarle Padre”, dejándonos “renovar por su potencia” y “reflejar un rayo de su bondad en este mundo sediento de bien”.

Así, el Santo Padre ha aclarado que la enseñanza del Padre Nuestro se encuadra en este contexto, y ha recordado que la oración no es un acto “hipócrita”, que no tiene otro interés que ser admirados por los demás. Al contrario, se trata de un “diálogo íntimo con el Padre que nos ama”.

 

 

 

02/01/2019-13:18
Rosa Die Alcolea

Artistas del Circo Cubano actúan para el acerca a Dios"

(ZENIT – 2 enero 2019).- “La belleza nos hace mejores, a todos; la belleza nos dirige a la bondad, nos lleva a Dios”, ha expresado el Pontífice.

“La belleza siempre nos acerca a Dios”, son palabras del Papa Francisco durante la audiencia general, celebrada el 2 de enero de 2019, al agradecer al Circo Cubano, quienes actuaron para él tras el saludo en italiano del Santo Padre.

Dando las gracias, el Papa les ha dicho: “Os involucráis en la belleza y la belleza siempre nos acerca a Dios. Os doy las gracias por esto.

“Ellos, con su actuación, aportan belleza; una belleza que requiere mucho esfuerzo –lo hemos visto–, mucho entrenamiento, mucho que hacer… Pero la belleza siempre eleva el corazón”.

Por lo tanto, el Papa no ha dejado de agradecerles su trabajo a los artistas del circo: “¡Muchas gracias y continuad así, ofreciendo belleza al mundo entero. Gracias!”. “¡Feliz año nuevo a todos!”.

Con Deborah Castellano Lubov

 

 

02/01/2019-19:55
Rosa Die Alcolea

Audiencia general, 2 de enero de 2019 — Catequesis del Papa

(ZENIT – 2 enero 2019).- “No sean como los hipócritas que, en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, les gusta orar de pie, ser vistos por el pueblo”, ha recordado el Papa Francisco del Evangelio de San Mateo. “Cuando vayas a orar, entra en tu aposento, y después de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está allí, en lo secreto”. (Mt 6: 6).

El ‘Padre Nuestro’, ha dicho, también puede ser una oración silenciosa: basta con ponernos bajo la mirada de Dios, para recordar el amor del Padre, y esto es suficiente para cumplir.

La audiencia general de esta mañana tiene lugar a las 9:20 horas, en el aula Pablo VI, donde el Santo Padre Francisco se ha reunido con grupos de peregrinos y fieles de Italia y de todo el mundo.

En su discurso en italiano, el Papa, al reanudar el ciclo de catequesis en ‘Padre Nuestro’, centra su meditación en “En el centro del discurso de la montaña” (Del Evangelio según Mateo 6, 5-6).

“¡Qué bueno pensar que nuestro Dios no necesita sacrificios para ganar su favor! No necesita nada nuestro Dios: en la oración, solo pide que mantengamos abierto un canal de comunicación con Él para descubrir siempre a sus amados hijos”, ha señalado Francisco.

Después de haber resumido la catequesis en varios idiomas, el Pontífice ha dirigido unas palabras a los diferentes grupos de peregrinos en varios idiomas. La audiencia general ha concluido con el canto del Pater Noster y la bendición apostólica del Santo Padre.

A continuación ofrecemos la catequesis completa del Papa Francisco, pronunciada hoy en la audiencia general:

***

 

Catequesis del Papa Francisco

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días y buen año!

Continuamos nuestra catequesis sobre el ‘Padre Nuestro’, iluminados por el misterio de Navidad que acabamos de celebrar.

El Evangelio de Mateo coloca el texto del ‘Padre Nuestro’ en un punto estratégico, al centro del discurso de la montaña (cfr 6,9-13). Mientras tanto observamos la escena: Jesús sale de la colina en el lago, se sienta; en su alrededor, él tiene el círculo de sus discípulos más íntimos, y después una gran multitud de caras anónimas. Y esta asamblea heterogénea recibe primero la entrega del “Padre Nuestro”.

La colocación, come se mencionó, es muy significativa; porque en esta larga enseñanza, que lleva el nombre de “lenguaje de montaña” (cfr Mt 5,1-7,27), Jesús condensa los aspectos fundamentales de su mensaje.

El debut es como un arco decorado para la fiesta: las Bienaventuranzas. Jesús corona con felicidad una serie de categorías de personas que en su tiempo, –¡y también en la nuestra!– no estaban muy consideradas. Beatos y pobres, los mansos, los misericordiosos, las personas humildes de corazón… Y la revolución del Evangelio. Todas las personas capaces de amar, los artesanos de paz que hasta entonces habían estado al margen de la historia, son en cambio los constructores del Reino de Dios. Es como si Jesús dijera: “¡Adelante vosotros que traéis en el corazón el misterio de un Dios que ha revelado su omnipotencia en el amor y el perdón!”.

Desde este portal de entrada, que revierte los valores de la historia, surge la novedad del Evangelio. La Ley no debe ser abolida sino que necesita una nueva interpretación, que la reconduzca a su significado original. Si una persona tiene un buen corazón, predispuesto al amor, entonces entiende que cada palabra de Dios debe encarnarse hasta sus últimas consecuencias. El amor no tiene límites: uno puede amar al cónyuge, al amigo e incluso al enemigo con una perspectiva completamente nueva: “Pero yo les digo: amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen, para que sean hijos de su Padre que está en el cielo; hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueva sobre justos e injustos “(Mt 5,44-45).

Aquí está el gran secreto que subyace a todo lo que se habla de la montaña: sed hijos de vuestro Padre que está en el cielo. Aparentemente, estos capítulos del Evangelio de Mateo parecen ser un discurso moral, parecen evocar una ética tan exigente que parece impracticable, y en cambio encontramos que son sobre todo un discurso teológico. El cristiano no está comprometido a ser mejor que los demás: sabe que es un pecador como todos los demás. El cristiano es simplemente el hombre que se detiene ante la nueva Zarza Ardiente, ante la revelación de un Dios que no lleva el enigma de un nombre impronunciable, pero que pide a sus hijos que lo invoquen con el nombre de “Padre”, dejarse renovar por su poder y reflejar un rayo de su bondad para este mundo tan sediento de bien, esperando tan buenas noticias.

Aquí es cómo Jesús introduce la enseñanza de la oración del ‘Padre Nuestro’. Lo hace distanciándose de dos grupos de su tiempo. En primer lugar, los hipócritas: “No sean como los hipócritas que, en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, les gusta orar de pie, ser vistos por el pueblo” (Mt 6, 5). Hay personas que pueden pronunciar oraciones ateas, sin Dios: lo hacen para ser admirados por los hombres. La oración cristiana, por otro lado, no tiene otro testimonio creíble más que su propia conciencia, donde un diálogo continuo con el Padre, que se entrelaza intensamente: «Cuando vayas a orar, entra en tu aposento, y después de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está allí, en lo secreto» (Mt 6: 6).

Después Jesús toma distancia de la oración de los paganos: “No hay una palabra especial: […] los gentiles se figuran que por su palabrería van a ser escuchados (Mt, 6,7). Aquí quizás Jesús alude a esa “captatio benevolentiae” (“de ganar la buena voluntad”) que era la premisa necesaria de muchas oraciones antiguas: la divinidad tenía que ser un tanto domada por una larga serie de alabanzas. En cambio, vosotros –dice Jesús– cuando oréis, no seáis como ellos, porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes de pedírselo (Mt, 6,8). También puede ser una oración silenciosa, el ‘Padre Nuestro’: basta con ponernos bajo la mirada de Dios, para recordar el amor del Padre, y esto es suficiente para cumplir.

¡Qué bueno pensar que nuestro Dios no necesita sacrificios para ganar su favor! No necesita nada nuestro Dios: en la oración, solo pide que mantengamos abierto un canal de comunicación con Él para descubrir siempre a sus amados hijos.

© Traducción de Zenit, Rosa Die Alcolea

 

 

02/01/2019-12:56
Rosa Die Alcolea

Oficina de Prensa Vaticana: El nuevo director agradece el apoyo y la confianza

(ZENIT — 2 enero 2019).- "Me gustaría agradecer a los colegas por tantos mensajes recibidos y que demuestran el cariño hacia mí y la comprensión por un momento particular para la comunicación de la Santa Sede y para la Oficina de Prensa", ha anunciado Alessandro Gisotti, director ad interim de la Oficina de Prensa Vaticana, esta mañana, 2 de enero de 2019, en la misma Sala Stampa.

La Oficina de Prensa ha publicado las palabras del nuevo responsable: "Como ya se ha anunciado, en el supuesto de la asignación provisional, lo hago con espíritu de servicio y de responsabilidad, confortado por la confianza del Santo Padre y del Prefecto Paolo Ruffini, del apoyo de mi familia y de la gran profesionalidad y dedicación de mis colegas, a quienes también el prefecto quería esta mañana expresar su pleno apoyo en esta delicada situación, mientras trabaja para la nueva estructura de la Sala de Prensa".

Alessandro Gisotti, hasta ahora periodista en Vatican News y coordinador de las redes sociales de los medios vaticanos, ha asegurado a los periodistas acreditados en la Oficina de Prensa de la Santa Sede su "más absoluta disponibilidad, pidiendo al mismo tiempo, un poco de paciencia por los errores e incertidumbres que puedo hacer en estos mis primeros pasos", ha dicho.

El profesional italiano ha concluido compartiendo que Greg Burke y Paloma García Ovejero han brindado toda su disposición y cooperación para ayudarle "en este delicado pasaje", y ha contado que ayer pasaron juntos todo el día en la Oficina de Prensa. "Es algo que aprecio mucho y que quiero compartir con vosotros", ha añadido Gisotti.

 

 

02/01/2019-10:36
Rosa Die Alcolea

Hispanohablantes: "Mantengan siempre abierto ese canal de comunicación con Dios"

(ZENIT — 2 enero 2019).- "Los animo a que mantengan siempre abierto ese canal de comunicación con Dios, pues él los ama, los espera y no quiere nada más que darles su amor".

En la audiencia general celebrada en la mañana del miércoles, 2 de enero de 2019, primera del nuevo año, Francisco ha dirigido unas palabras a los peregrinos de lengua española, en modo particular a los grupos provenientes de España y América Latina.

Asimismo, el Papa ha deseado a los hispanohablantes y a sus familias "un año nuevo lleno de la cercanía y de la ternura de Dios".

"Veo mexicanos por allí atrás, ¿no?", ha dicho sonriendo, a lo que han respondido con un gran bullicio de aplausos y risas por parte de los latinoamericanos.

 

 

02/01/2019-12:30
Rosa Die Alcolea

El Papa invita a "levantar la mirada hacia el cielo, como los Magos"

(ZENIT — 2 enero 2019).- El Papa ha exhortado en la audiencia general celebrada esta mañana, 2 de enero de 2019, a imitar a los Reyes Magos y a levantar también nosotros la mirada hacia el cielo; "solo así lograremos ver la estrella que nos invita a recorrer el camino del bien".

Así se ha dirigido el Santo Padre en italiano a los jóvenes, a los ancianos, a los enfermos y a los nuevos esposos, presentes en el aula Pablo VI, y a todos los que atendían la catequesis a través de los medios de comunicación.

Francisco ha recordado que el próximo domingo, 6 de enero, celebraremos la Solemnidad de la Epifanía del Señor y ha deseado a todos un buen año.

 

 

02/01/2019-12:02
Rosa Die Alcolea

Oriente Medio: La oración puede ser "silenciosa", es suficiente ponerse "bajo la mirada de Dios"

(ZENIT — 2 enero 2019).- El Pontífice ha pronunciado unas palabras para los peregrinos de lengua árabe, esta mañana, 2 enero 2019, en la audiencia general, celebrada en el aula Pablo VI, en el Vaticano, en particular, Francisco se ha dirigido a aquellos provenientes del Oriente Medio.

"Queridos hermanos y hermanas, nuestra oración podría ser también oración silenciosa", ha anunciado el Santo Padre. "Es suficiente ponerse bajo la mirada de Dios, recordar el amor del Padre, y esto es suficiente para que se cumpla. ¡El Señor os bendiga!".

En la catequesis de hoy, el Papa ha contextualizado la oración del Padre Nuestro en el discurso de la Montaña, y ha recordado que la oración "no es un acto hipócrita, ateo, que no tiene otro interés que ser admirados por los demás". Al contrario, el único testigo de la oración cristiana "es la propia conciencia, pues es un diálogo íntimo con el Padre que nos ama".

 

 

02/01/2019-18:59
Redacción

Indonesia: La comunidad católica se compromete a ayudar a las víctimas del tsunami

(ZENIT — 2 enero 2019).- A pesar de las dificultades, se está realizando un "inmenso esfuerzo humanitario" por parte de la comunidad católica en Indonesia para ayudar a los supervivientes del tsunami el 22 de diciembre, reporta la Agencia Fides, de las Obras Misionales Pontificias, este 2 de enero de 2019.

La ola causada por la erupción de un volcán submarino, golpeó las costas de las islas indonesias de Java y Sumatra, en el estrecho de Sunda, causando la muerte de al menos 437 personas, 14.000 heridos y más de 33.000 desplazados en los pueblos costeros.

Según se informó a la Agencia Fides, en el distrito de Pandanglang, en la provincia de Banten, las Hermanas Franciscanas Sukabumi (SFS) que dirigían el hospital católico en Misi Lebak organizaron una misión humanitaria en la zona afectada.

 

Primeros auxilios

Las actividades de primeros auxilios están en marcha en los tres centros de crisis establecidos por el Hospital Misi Lebak en colaboración con la Asociación Católica de Servicios de Salud Perdhaki, mientras que algunos grupos católicos están trabajando en el lugar, como la agencia humanitaria de la Archidiócesis de Yakarta, voluntarios de la Iglesia de María Inmaculada en Rangkasbitung y la parroquia de Cristo Rey Serang, ambos en la provincia de Banten.

 

Asistencia médica, comedor y recuperación

Monseñor Paskalis Bruno Syukur OFM, obispo de Bogor donde se encuentra el distrito de Pandeglang, el más afectado, apoyó esta iniciativa humanitaria del Hospital Misi Lebak y sus socios con sede en Yakarta, que garantizan el apoyo logístico. "Nos ocupamos de tres tipos de servicios para la población en el distrito de Pandenglang: asistencia médica para los heridos, servicio de comedor y recuperación de traumas", dijo a Fides la Hermana Atanasia SFS, Directora Adjunta del Hospital Misi Lebak. "Nuestra principal preocupación es llegar a las zonas donde aún falta la ayuda humanitaria", explica la religiosa.

 

Llamamiento a la solidaridad

"Me sumo al Papa Francisco en el llamamiento urgente para que estos hermanos y hermanas no carezcan de nuestra solidaridad y el apoyo de la comunidad internacional", escribió en el mensaje enviado a Fides, el cardenal birmano Charles Maung Bo, el nuevo presidente de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC).

"Invito a todos a unirse en oración por las víctimas y sus seres queridos y expresar la cercanía espiritual con los afectados por la tragedia, implorando el consuelo de Dios en su sufrimiento", escribe el cardenal, instando a "aliviar de manera tangible el sufrimiento de nuestros hermanos. y las hermanas indonesios".

 

437 muertes

El tsunami que golpeó Pandeglang y algunas áreas en el sur de Sumatra ha destruido vidas humanas, barcos de pesca y establecimientos turísticos en los Anyer y Carita. El número de muertos, publicado a principios de 2019, se estima en 437 muertes, 14.059 heridos, 16 desaparecidos y 33.721 desplazados. Según la National Mitigation and Disaster Management Agency (BNPB), el número de muertos "va en aumento".

 

 

02/01/2019-10:44
Felipe Arizmendi Esquivel

Mons. Felipe Arizmendi: "Artesanos de paz, para un año nuevo"

+ Felipe Arizmendi Esquivel
Obispo Emérito de San Cristóbal de Las Casas

 

VER

Que no estamos en paz, es un hecho que diariamente podemos comprobar. A pesar de las promesas de campañas pasadas, sigue habiendo violencia e inseguridad. Hay grupos y bandas delincuenciales que tienen aterradas algunas regiones del país. Aun en nuestras pequeñas poblaciones, donde antes se respiraba tranquilidad, ahora hay temores y las personas no salen confiadamente a las carreteras por las noches.

En muchas familias, tampoco se respiran armonía y serenidad, sino que imperan gritos, insultos, malas palabras, miedos de los hijos y de la esposa ante un marido violento, machista y acomplejado. Entre vecinos, hay envidias, desconfianzas, resentimientos. Hay molestos ruidos nocturnos que impiden descansar, y nadie se atreve a pedir que bajen el volumen, por temor a reacciones agresivas. Hay familiares que, por herencias, o por malos entendidos no aclarados, hace tiempo no se dirigen la palabra. Entre pueblos limítrofes, persisten pleitos ancestrales por tierras, sin que las autoridades resuelvan sus diferencias.

La economía nacional vive incertidumbres, ante el cambio de gobierno. Las inversiones no perciben seguridad. Las decisiones mayoritarias de quienes hoy nos presiden no generan confianza en amplios sectores. Parecemos depender de ocurrencias y de consultas populares convenencieras y populistas, sin bases seguras y realmente representativas.

¿Qué año nos espera? Nos deseamos felicidad, amor y paz, pero ¿cómo construir esto sobre bases firmes? ¿Qué nos toca al ciudadano común y corriente, y qué a las autoridades? ¿En qué se implica nuestra Iglesia?

 

PENSAR

Los obispos mexicanos, en nuestro Proyecto Global de Pastoral 2031+2033, decimos:

"El Reino de Dios no es una promesa futura para después de la muerte, sino una realidad que ha comenzado ya en la persona de Jesús. Esta realidad tiene valores concretos que pueden descubrirse en la vida de la comunidad: santidad y gracia, verdad y vida, justicia, amor y paz" (119).

"Pentecostés culmina el misterio pascual de Jesús, y por eso la obra redentora de Jesús se prolonga en la acción del Espíritu en sus discípulos, como ministros de reconciliación, no simplemente como hombres y mujeres pacíficos, sino como constructores de paz" (128).

"Es posible superar las diferencias entre las razas a través de la paz y la armonía... En una sociedad fragmentada, como la nuestra, todos, los obispos y los agentes de pastoral estamos llamados a trabajar por la unidad. Todos estamos invitados a superar las diferencias que nos lastiman y entristecen" (161).

Hicimos la "opción por una iglesia comprometida con la paz y las causas sociales", con fundamentos bíblicos y compromisos pastorales:

"El corazón del Reino de Dios es el `shalom, la paz. Esta palabra bíblica tan rica y expresiva, comprende mucho más que la ausencia de guerra y de violencia; en ella se alcanza todo el bienestar y concordia que Dios proporciona a sus hijos para una sana armonía con Él, con los demás hermanos, consigo mismo y con la naturaleza. Para nosotros los creyentes, la paz es una Persona, es el Don de amor de Dios por excelencia, es Jesucristo mismo que, en su misterio de Redención, ha venido a restaurar nuestra imagen de hijos de Dios en Él y a reconciliar consigo todos los pueblos. Así, cuando hablamos de una tarea y compromiso de la Iglesia por la paz, no sólo pensamos en los actos de violencia contra la vida humana y todas las injusticias que la provocan, sino que queremos poner en el centro de nuestra vida a Jesús y su Reino de Vida para que crezca y se establezca, pues la paz es una tarea y un compromiso para todas las personas, que ha de ser acogida en la vida de cada día" (174).

 

ACTUAR

En el mismo documento, expresamos:

"La necesidad inaplazable por construir una paz firme y duradera en nuestro país, reclama que la Iglesia pueda sentarse a la mesa con muchos otros invitados: organizaciones ciudadanas, confesiones religiosas, autoridades civiles, entidades educativas, sectores políticos y medios de comunicación, entre otros, para que juntos, y aportando lo que le es propio a cada uno, podamos reconstruir el tejido social de nuestro país. Creemos que es urgente trabajar por la paz de nuestros pueblos y llegar a compromisos concretos. Como sociedad mexicana es necesario combatir todas aquellas situaciones de corrupción, impunidad e ilegalidad que generan violencia y restablecer las condiciones de justicia, igualdad y solidaridad que construyen la paz" (175).

"Todo el Pueblo de Dios en su conjunto, estamos llamados, por el bautismo, a trabajar por la reconstrucción de la paz, a ejercer nuestro sentido profético ante esta situación, no sólo al anunciar con el testimonio el proyecto de Dios, sino denunciando con valor las injusticias y atropellos que se cometen, dejando de lado temores y egoísmos, muchas veces aún a costa de la propia vida, como ha sucedido con periodistas, defensores de los derechos humanos, líderes sociales, laicos y sacerdotes" (176).

"El sueño de Dios está tejido de los mejores sueños de todos los hombres y mujeres: la paz, la justicia, la unidad, la fraternidad, la dignidad de sus hijos, etc. Estos son también los sueños de nosotros los Obispos y de toda la Iglesia de México ¡No dejemos de soñar y trabajar para que estos sueños se hagan realidad!" (189).

 

 

02/01/2019-07:29
Isabel Orellana Vilches

San Ciriaco Elías Chavara, 3 de enero

«Este hindú, fundador de la Congregación de la Madre del Carmelo, fue un apóstol de la Eucaristía, de la unidad y de la reconciliación. Realizó su intensa labor apostólica en Kerala, donde instituyó las Cuarenta Horas»

En esta festividad del Santísimo Nombre de Jesús, se celebra la vida de este santo que nació en Kainakary, Kerala, India, el 10 de febrero de 1805 y se convertiría en uno de los grandes defensores de la unidad de la Iglesia mediando en el grave conflicto creado por el prelado Thomas Rochosen el sur de su país. Su vida desde la infancia estuvo caracterizada por singularísimo amor al Santísimo Sacramento y a María, a quien lo consagraron sus padres a los pocos días de nacer depositándolo ante Ella en el santuario de Nuestra Señora de Vechour. Debía su piedad a su madre que le enseñó a recitar las primeras oraciones antes de iniciar el descanso cotidiano; ambos las compartían en medio de gran recogimiento.

Integrado en la comunidad de rito siro-malabar, apenas despuntaba en su adolescencia cuando el padre Thomas Palackal, que atisbaba en el muchacho gestos inequívocos de virtud y clara aptitud hacia el sacerdocio, le animó a ingresar en el seminario de Pallipuram que estaba bajo su dirección. Antes de ser ordenado sacerdote, el santo perdió a sus padres y a un hermano, por lo cual unos parientes cercanos consideraron que era mejor que abandonara los estudios y ayudara a su sobrina, hija del hermano fallecido. Ciriaco asumió sus responsabilidades sin dejar la formación, y después de haber pasado por el seminario de Verapoly fue ordenado sacerdote en 1829.

Al saber que el padre Palackal y el padre Perukkara, amigo de aquél, aspiraban a vivir la experiencia eremítica, se unió a ellos. Yen 1831 se iniciaba la construcción del monasterio de Mannanam que pusieron bajo el amparo de san José. La idea del prelado Stabilini era contar con un movimiento religioso indígena, labor que encomendó a estos sacerdotes. La comunidad creció y fue el germen de otro seminario colindante que sería de gran fecundidad para el clero lo cual repercutió en la vida de los fieles. Signado por el espíritu de la fidelidad y la autenticidad, Ciriaco se convirtió en un pilar de la Iglesia en ese estado de la India y fue motivo de descanso para el vicario apostólico de Verapoly que le encomendó misiones eclesiales relevantes. Entre tanto, con el afán de contribuir a la formación de los fieles se hizo con una imprenta de madera y con ella difundió la revista La flor del Carmelo, el periódico El Deepika y numerosos textos espirituales.
Hombre de oración, acostumbrado a pasar largas horas ante el Santísimo, recorría afanoso todas las parroquias de Kerala con una acción apostólica vigorosa que conllevaba numerosas bendiciones. En 1846 se convirtió en el superior del monasterio de Mannanam, ya que los sacerdotes que encabezaron la fundación junto a él habían fallecido. El incremento de vocaciones que se produjeron bajo su amparo dio lugar a la Congregación de los Siervos de María Inmaculada del Monte Carmelo.

En 1858 se hicieron notorias las desavenencias entre sacerdotes de rito siro-malabar y el vicario apostólico de rito latino, monseñor Bacinelli. Los primeros llevaron los malos entendidos al patriarca caldeo José VI, con la esperanza de que designara un prelado afín a ellos. Roma no lo autorizó, pero el patriarca nombró a Thomas Rochos, quien hizo creer a los católicos que contaba con la aquiescencia de la Santa Sede intoxicando más aún las relaciones entre los fieles que aceptaron su versión. En la gravísima sima que se abrió acarreando la separación del legítimo vicario apostólico de Verapoly, Rochos no pudo anexionarse la voluntad de Ciriaco que actuó con absoluta fidelidad a Roma y en calidad de vicario general para los siro-malabares con sumo tacto y prudencia impidió que se consumara un cisma.

Todo su quehacer estuvo guiado por el anhelo de mantener la unidad y la reconciliación dentro de la Iglesia. Amaba profundamente al Santo Padre. Era humilde, caritativo y misericordioso; un gran apóstol que vivía entregado a los demás. El rezo del Rosario, la adoración al Santísimo y devoción por las llagas de Cristo, los dolores de María y los gozos y pruebas de san José, en los que meditaba y difundía entre sus hermanos, formaban parte de su quehacer y acción apostólica. En medio de sus múltiples tareas incluía la escritura siempre con finalidad apostólica. Decía: «Los días en que no hemos ayudado a nadie no merecen considerarse entre los días útiles de nuestra vida».

Instituyó en Kerala las Cuarenta horas. Ha sido denominado apóstol de la Eucaristía. Vivió volcado en los enfermos y los desvalidos para los que abrió una casa. En 1866 fundó la Congregación de la Madre del Carmelo, integrada por monjas carmelitas de rito siro-malabar. Este santo, primer prior general de los Carmelitas de María Inmaculada, murió enKoonammavu, localidad india cercana a la de Kochiel 3 de enero de 1871. Fue beatificado por Juan Pablo II el 8 de febrero de 1986, y Francisco lo canonizó el 23 de noviembre de 2014.