Cáritas | Noticia • 11 Marzo 2019

 

«Moda re-» consolida sus objetivos de reciclado textil con criterios éticos para insertar personas

 

En su primer año de andadura, se han tratado 32.000 toneladas de ropa y se han donado en tienda 250.000 prendas a personas vulnerables.

 

 

 


 

 

Cuando está a punto de cumplirse un año desde su lanzamiento, el proyecto moda re-, una ambiciosa iniciativa liderada por Cáritas Española en abril de 2018 de reciclado de ropa de segunda mano a nivel estatal, ha visto cumplidos con amplio margen sus objetivos de apostar por un modelo innovador de economía solidaria y sostenible, basada en criterios éticos y capaz de generar empleo de inserción para personas en situación de exclusión social.

 

Las cifras de explotación de este proyecto durante los últimos doce meses así lo confirman:

 

– 32.000 toneladas de ropa usada tratadas en una red de 27 plantas de transferencia y otras 3 de gestión integral con tecnología de última generación. Este proceso ha permitido ahorrar 39 millones de metros cúbicos de agua y 850.000 toneladas de CO2 (Fuente: Fashion Global Agenda).

– 4.500 contenedores de recogida selectiva instalados en la calle.

– 750 puestos de trabajo creados, de los cuales 380 son puestos de inserción ocupados por personas en situación o riesgo de exclusión social.

– Presencia en 30 diócesis.

– 100 puntos de venta y donación en toda España: 73 tiendas y 30 “espacios con corazón”.

– 250.000 prendas donadas en tienda a personas con necesidades de vestido.

– 700 voluntarios.

 

 

Una economía circular

Toda la actividad que se ha estado desarrollando en este primer año de recorrido ha seguido una estructura de economía circular. El modelo de reciclado textil de moda re- está pensado para poner a las personas en el centro, gracias a una actividad empresarial basada en el consumo sostenible y en la generación de empleo normalizado para aquellas personas en situación de exclusión social que participan en los programas de acogida y acompañamiento de Cáritas.

Las cifras del proyecto reflejan esos objetivos, ya que el funcionamiento de moda re- es posible gracias a una bolsa laboral de 750 empleos sociales y el apoyo de 700 voluntarios en toda España. Junto a ello, el compromiso con la sostenibilidad del planeta es otra de sus fortalezas, si se tiene en cuenta que la actividad de este proyecto textil permite ahorrar 39 millones de metros cúbicos de agua y evita la emisión a la atmósfera de unas 850.000 toneladas de CO2.

 

Colaboración e innovación

El Grupo Inditex ha sido un socio estratégico de este proyecto desde sus inicios. Junto al apoyo económico brindado a los proyectos de economía social de Cáritas, moda re- y el Grupo Inditex cuentan actualmente con convenios de colaboración que, más allá de participar en la recogida de ropa en sus superficies comerciales, se centran en el impulso a la innovación tecnológica I+D+i mediante la puesta en marcha proyectos de investigación orientados a la obtención de nuevas fibras textiles y derivados a partir de la ropa usada.

Asimismo, a lo largo de este año, moda re- ha suscrito de acuerdos de colaboración en la línea de mejora y avance conjunto en la gestión de proyectos de economía circular en el ámbito textil con empresas como El Corte Inglés y Carrefour, entre otras.

 

Una marca que lo expresa todo

La elección del nombre de la marca para esta iniciativa social no es accidental. Como señala Rubén Requena, coordinador del proyecto, “con el nombre moda re- queremos poner en valor la importancia de re-coger, re-utilizar o re-ciclar para re-construir, re-iniciar, re-emplear o re-vivir las biografías de todas las personas en situación social precaria a las que acompañamos”.

La apuesta de Cáritas por transformar la gestión de la ropa usada que tradicionalmente se ha venido haciendo a través de los roperos supone una apuesta por transformar el concepto de esa actividad. “Dar nueva vida a la ropa y a las personas que lo necesitan a través de este proyecto –añade Rubén—significa entender que vale más de lo que cuesta, porque no es lo mismo hacer negocio con la ropa usada que hacer justicia social”.

Y es que, además de favorecer la inserción laboral de los participantes en los programas sociales de Cáritas, el proyecto permite dignificar la forma en que reciben la ropa aquellas personas que necesitan vestido, que pueden hacerlo en los distintos puntos de venta de moda re- como unos clientes más, pero de manera gratuita.