Servicio diario - 18 de marzo de 2019


 

Misa del Papa en Santa Marta: "No juzguen a los demás, no condenen y perdonen"
Rosa Die Alcolea

Abusos en la Iglesia de Costa Rica: Los obispos piden "perdón por estos crímenes"
Rosa Die Alcolea

Francia: El Cardenal Barbarin es recibido por el Papa Francisco
Anne Kurian

Sudán del Sur: El Papa expresa al Presidente Mayardit su deseo de viajar al país
Rosa Die Alcolea

Papa Francisco: "La ternura es la 'médula' de nuestro encuentro con las personas que sufren"
Rosa Die Alcolea

Perú: Crece labor de los padres palotinos en el país
Esther Nuñez Balbín

Iglesia Patriarcal de Antioquía de los Greco-Melkitas: El Papa acepta la elección del arzobispo de Akka, Israel
Redacción

San José, 19 de marzo
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

18/03/2019-19:19
Rosa Die Alcolea

Misa del Papa en Santa Marta: "No juzguen a los demás, no condenen y perdonen"

(ZENIT — 18 marzo 2019).- "La misericordia de Dios es tan grande, tan grande. No olvidemos esto. Cuántas personas dicen: "He hecho cosas tan malas. He comprado mi lugar en el infierno, no puedo volver atrás. Pero ¿piensa en la misericordia de Dios?".

Así ha hablado el Papa Francisco esta mañana, 18 de marzo de 2019, en su homilía de la Eucaristía celebrada en la capilla de Santa Marta, tras estar varios días retirado en Ariccia, de ejercicios espirituales, con sus hermanos sacerdotes de la Curia Romana.

"No juzguen a los demás, no condenen y perdonen: así se imita la misericordia del Padre". Francisco ha exhortado a "imitar a Dios" para "no equivocarse en la vida", y "caminar ante los ojos del Padre". Partiendo del Evangelio de Lucas (Lc 6, 36-38), el Pontífice habla ante todo de la misericordia de Dios, capaz de perdonar las acciones más "feas", reporta Vatican News en español.

El cura de Ars, en sus numerosas confesiones, hablaba de la misericordia de Dios, tal y como ha narrado el Papa: "Recordemos la historia de la pobre viuda que fue a confesarse con el cura de Ars (su marido se había suicidado; había saltado del puente al río. Y lloraba. Y dijo: 'Yo soy una pecadora, pobrecilla. ¡Pero, pobre mi marido! ¡Está en el infierno! Se suicidó y el suicidio es un pecado mortal. Está en el infierno'. Y el cura de Ars dijo: 'Deténgase, señora, porque entre el puente y el río está la misericordia de Dios'. Hasta el final, hasta el final, está la misericordia de Dios".

 

No juzgar

El Santo Padre ha dado a los fieles unos consejos prácticos para actuar con misericordia: no juzgar y perdonar.

El primero de todos es "no juzgar". Esta es una "mala costumbre", dice el Papa, de la que abstenerse, sobre todo en este tiempo de Cuaresma.

En este sentido, Francisco ha comentado: "También, hay una costumbre que se mezcla en nuestras vidas incluso sin que nos demos cuenta. ¡Siempre! Hasta para iniciar una conversación: `¿Has visto aquel lo que ha hecho?'. El juicio al otro. Pensemos en cuántas veces al día juzgamos. ¡Por favor! Parecemos todos jueces fallidos ¡no! Todos Siempre para empezar una conversación, un comentario sobre otro: 'Pero mirá, ¡se hizo cirugía estética! Es más fea que antes"'.

Finalmente —ha dicho el Papa— hay que "perdonar, aunque sea "tan difícil", porque nuestras acciones dan "la medida a Dios de lo que debe hacer con nosotros".

 

 

 

18/03/2019-20:03
Rosa Die Alcolea

Abusos en la Iglesia de Costa Rica: Los obispos piden "perdón por estos crímenes"

(ZENIT — 18 marzo 2019).- Los obispos de Costa Rica, con el arzobispo de San José a la cabeza, Mons. José Rafael Quirós, reconocieron haber cobrado "una mayor conciencia del gravísimo problema que constituye el abuso sexual", por lo que pidieron "perdón por estos crímenes que han dañado gravemente a los más pequeños del rebaño del Señor".

Al término de la 117a Asamblea Ordinaria que los obispos de Costa Rica han celebrado, enmarcada en el inicio del tiempo de Cuaresma, publicaron un videomensaje, el 15 de marzo de 2019, a través de la cuenta oficial de Facebook de la Conferencia Episcopal de Costa Rica.

"Sin querer juzgar el pasado, admitimos humildemente que no siempre se ha dado la atención debida a estos delitos, ni su lugar a las víctimas y a sus familiares. Como pastores, nuestro actuar al abordar este grave problema va a estar movido por dar la mejor atención a las víctimas y proteger a los fieles, así como acabar con cualquier acción tendente a encubrir estos delitos", argumentaron.

En su comunicado —también difundido por Facebook—, los prelados anuncian los trabajos que están realizando con el objetivo de analizar la realidad de la Iglesia en Costa Rica y abordar los aportes del reciente Encuentro de Protección de Menores convocado en el Vaticano y presidido por el Papa Francisco en Roma.

 

Vademecum

Asimismo, los pastores costarricenses aseguran que tendrán en cuenta en primer lugar "el testimonio de las víctimas", a quienes ofrecerán "apoyo espiritual y psicológico" en su proceso de sanación interior.

Con el objetivo de erradicar de los ambientes clericales este crimen, señalan los obispos, se apoyarán en los documentos de la Santa Sede como fruto del Encuentro de Protección de Menores: El Vadecum (Protocolo de acatamiento obligatorio para la Iglesia Universal) y las nuevas normas que sobre este tema emanará el papa Francisco.

 

Plan de trabajo

Los obispos de Costa Rica han dado a conocer un plan de trabajo para lograr un ambiente seguro para los menores y adultos vulnerables en la Iglesia de ese país.

En primer lugar, desde la Conferencia Episcopal se habla de la creación de comisiones interdisciplinarias, involucrando la perspectiva psicológica, legal y canónica, a nivel nacional y diocesano; además de emitir las "Líneas Guía de Protección de Menores en ambientes eclesiales" en todo el territorio de la Provincia Eclesiástica de Costa Rica.

Otras medidas que anuncian son: "Incluir políticas y procedimientos para responder a las denuncias y revelaciones de abusos en la Iglesia, además de crear conciencia a través de la educación en la comunidad, escuelas y colegios católicos, para prevenir el abuso".

Los obispos indicaron que "redoblarán esfuerzos" en el acompañamiento a los sacerdotes en general, y en especial de aquellos que han fallado, y crearán mecanismos que aseguren la transparencia en el tema de la prevención y la erradicación del abuso sexual a las personas menores y adultos vulnerables en la Iglesia.

 

 

 

18/03/2019-20:12
Anne Kurian

Francia: El Cardenal Barbarin es recibido por el Papa Francisco

(ZENIT — 28 marzo 2019).- El Cardenal Philippe Barbarin, Arzobispo de Lyon, fue recibido por el Papa Francisco en el Vaticano la mañana del 18 de marzo de 2019: Entregó su renuncia, tal como lo había anunciado el 7 de marzo, tras recibir la condena por el Justicia francesa a seis meses de prisión suspendida por no denuncia de abuso sexual.

La Santa Sede aún no se ha comunicado sobre la decisión del Papa de aceptar esta renuncia.

"Tomo nota de la decisión del Tribunal", dijo el Cardenal a la prensa. Independientemente de mi destino personal, quiero reiterar mi compasión por las víctimas y por todo el lugar donde mis y sus familias guardan mi oración. Añadió: "Decidí ir a ver al Santo Padre para entregarle mi renuncia. Me recibirá en unos días".

El Primado de las Galias, nombrado Arzobispo de Lyon en 2002, estuvo implicado desde 2016 por "no denuncia" de agresión sexual por parte de un sacerdote de su diócesis, el padre Bernard Preynat, quien abusó de unos 70 menores en el Movimiento Scout en las décadas de 1970 y 1980. El Cardenal fue declarado culpable de "no denuncia de abuso infantil entre 2014 y 2015".

El Cardenal apeló la sentencia, al igual que la oficina del fiscal de Lyon. Esta es una "práctica habitual", explicó el fiscal, para "darle al tribunal la oportunidad de reabrir el caso en su conjunto".

 

 

 

18/03/2019-13:29
Rosa Die Alcolea

Sudán del Sur: El Papa expresa al Presidente Mayardit su deseo de viajar al país

(ZENIT — 18 marzo 2019).- El sábado 16 de marzo de 2019, el Santo Padre Francisco recibió en audiencia al Sr. Salva Kiir Mayardit, Presidente de la República de Sudán del Sur, el cual, sucesivamente se encontró con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado, acompañado por Mons. Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados, informó el mismo día la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

El "proceso de reconciliación y reconstrucción" de la Nación ha sido uno de los temas abordados durante las conversaciones entre el Santo Padre y el Presidente Kiir Mayardit, transcurridas "en un clima de cordialidad", describe la Santa Sede.

En la reunión, los jefes de Estado han abordado las cuestiones relativas a la implementación del acuerdo alcanzado recientemente por los diversos sujetos políticos de cara a la “resolución definitiva de los conflictos”, el “regreso de los refugiados y las personas desplazadas” y el “desarrollo integral del país”, aseguran en el comunicado.

Asimismo, se han destacado las buenas relaciones bilaterales, así como la contribución de la Iglesia Católica en el ámbito educativo y sanitario.

En este contexto, Su Santidad "ha expresado el deseo de que se verifiquen las condiciones para su posible visita a Sudán del Sur, como signo de cercanía a la población y aliento al proceso", concluye la nota.

 

 

 

18/03/2019-18:17
Rosa Die Alcolea

Papa Francisco: "La ternura es la 'médula' de nuestro encuentro con las personas que sufren"

(ZENIT — 18 marzo 2019).- El Santo Padre ha recibido en audiencia esta mañana, 18 de marzo de 2019, a las 11:30 horas en la Sala Clementina del Palacio Apostólico a los religiosos y religiosas de la Familia carismática Camiliana.

El Papa ha felicitado a los miembros de la Familia Camiliana por estar “constantemente comprometidos en una entrega amorosa y generosa a los enfermos, realizando una misión preciosa, en la Iglesia y en la sociedad, al lado de los que sufren”.

A San Camilo de Lelis y a todos aquellos que siguen su ejemplo, “Dios les ha otorgado el don de revivir y de dar testimonio del amor misericordioso de Cristo por los enfermos”, ha explicado el Obispo de Roma, en esta audiencia.

En este marco, el Papa Francisco se ha detenido la palabra ternura: “Es una palabra que hoy corre el peligro de caerse del diccionario”, ha dicho el Santo Padre, así como en anteriores ocasiones. “Tenemos que retomarla y actuarla de nuevo. El cristianismo sin ternura no va. La ternura es una actitud propiamente cristiana; es también la ‘médula’ de nuestro encuentro con las personas que sufren”.

La Iglesia “lo ha reconocido como un auténtico carisma del Espíritu”, ha indicado, y dirigiéndose a los camilianos, les ha reafirmado: “Vosotros lo vivís de manera ejemplar, traduciéndolo en vida, según la doble vía de asistir directamente a los enfermos, especialmente a los más pobres, en sus necesidades corporales y espirituales, y del enseñar a otros la mejor manera de servirlos, en beneficio de la Iglesia y de la humanidad”.

 

Comunión

Del carisma suscitado inicialmente en San Camilo, gradualmente se han formado varias realidades eclesiales que hoy forman una sola constelación, es decir, una “familia carismática” compuesta por religiosos y religiosas, consagrados seculares y fieles laicos. El Papa les ha insistido en que “ninguna de estas realidades es la única depositaria o titular del carisma, pero cada una la recibe en don y la interpreta y actualiza según su vocación específica, en diferentes contextos históricos y geográficos. En el centro permanece el carisma original”.

El Santo Padre les ha exhortado a cultivar la comunión entre ellos, en “ese estilo sinodal” que ha propuesto a toda la Iglesia, “escuchándonos unos a otros y escuchando al Espíritu Santo, para valorar la contribución que cada realidad única ofrece a la única Familia”, ha descrito.

A continuación ofrecemos el discurso completo del Papa Francisco en la audiencia con la Familia Carismática Camiliana.

***

 

Discurso del Santo Padre

Queridas hermanas y queridos hermanos:

¡Con alegría os doy la bienvenida a todos, representantes de las diferentes expresiones de la Familia Camiliana! Os saludo con afecto y agradezco al Padre Pessini sus palabras. Y pido al Señor que le conserve el sentido del humorismo: ¡Usted no tendrá nunca úlcera de estómago! Estáis constantemente comprometidos en una entrega amorosa y generosa a los enfermos, realizando una misión preciosa, en la Iglesia y en la sociedad, al lado de los que sufren. Cuando la enfermedad llega a turbar y, a veces, a trastornar nuestras vidas, sentimos con fuerza la necesidad de tener a nuestro lado un hermano o una hermana compasivo y también competente, que nos consuela, nos sostiene, nos ayuda a recobrar el bien precioso de la salud, o nos acompaña hasta el umbral de nuestro último encuentro con el Señor!

La Iglesia entera ha recibido de su Maestro y Señor el mandato de anunciar el Reino de Dios y curar a los enfermos (ver Lc 9, 2), a imitación suya, Buen Pastor, Buen Samaritano, que pasó sobre esta tierra “beneficiando y sanando a todos aquellos que eran prisioneros del mal “(Prefacio común VIII). Pero en particular a San Camilo de Lelis y a todos aquellos que siguen su ejemplo, Dios les ha otorgado el don de revivir y de dar testimonio del amor misericordioso de Cristo por los enfermos. La Iglesia lo ha reconocido como un auténtico carisma del Espíritu. Vosotros lo vivís de manera ejemplar, traduciéndolo en vida, según la doble vía de asistir directamente a los enfermos, especialmente a los más pobres, en sus necesidades corporales y espirituales, y del enseñar a otros la mejor manera de servirlos, en beneficio de la Iglesia y de la humanidad.

Todos los carismas “son los dones que nos da el Espíritu Santo […]. Regalos dados no para que queden ocultos, sino para compartirlos con los demás. No se dan para beneficio de quien los recibe, sino para utilidad del pueblo de Dios. Si un carisma, en cambio, uno de estos regalos, sirve para afirmarse a sí mismo, hay que dudar si se trata de un carisma auténtico o de que sea vivido fielmente. Los carismas son gracias particulares, dadas a algunos para hacer el bien a muchos otros” (Catequesis, 6 de noviembre de 2013). Tienen siempre un carácter transitivo, están orientados hacia los demás. A lo largo de los años, os habéis esforzado por encarnar fielmente vuestro carisma, traduciéndolo en una multiplicidad de obras apostólicas y servicios pastorales en beneficio de la humanidad que sufre en todo el mundo.

En el surco de esta misión, que algunos miembros de vuestras familias religiosas han vivido heroicamente para convertirse en modelos de santidad, estáis llamados a continuar vuestro servicio de manera profética. Se trata de mirar al futuro, abiertos a nuevas formas de apostolado que el Espíritu os inspire y que requieran las necesidades del mundo y de la Iglesia. El gran don que habéis recibido sigue siendo actual y necesario también para esta época nuestra, porque se funda en la caridad que nunca tendrá fin (véase 1 Corintios 13: 8). Como parte viva de la Iglesia, enviada a difundir el Evangelio para que los hombres “tengan vida y la tengan en abundancia” (Jn 10,10), tenéis la maravillosa oportunidad de hacerlo a través de los gestos de cuidar de la vida y de la salus integral, tan necesarias también en nuestro tiempo.

Del carisma suscitado inicialmente en San Camilo, gradualmente se han formado varias realidades eclesiales que hoy forman una sola constelación, es decir, una “familia carismática” compuesta por religiosos y religiosas, consagrados seculares y fieles laicos. Ninguna de estas realidades es la única depositaria o titular del carisma, pero cada una  la recibe en  don  y la interpreta y  actualiza según su vocación específica, en diferentes contextos históricos y geográficos. En el centro permanece el carisma original, como fuente perenne de luz e inspiración, que se comprende y encarna dinámicamente en las diversas formas. Cada uno de ellas se ofrece a las demás en un intercambio recíproco de dones que enriquece a todos, para la utilidad común y en vista de la actuación de dicha misión. ¿Cuál es? Dar testimonio en todo tiempo y lugar del amor misericordioso de Cristo hacia los enfermos.

San Camilo de Lellis, a quien todos reconocen como “Padre”, vivió en una época en la que la posibilidad de una vida consagrada activa para las mujeres aún no había madurado, sino solo la de tipo contemplativo y monástico. Por lo tanto, constituyó una Orden de hombres solamente. Sin embargo, entendió bien que el cuidado de los enfermos debía practicarse también con las actitudes típicas del alma femenina, tanto como para pedir a sus religiosos que atendieran a los enfermos “con ese afecto que una madre amorosa suele tener para su único hijo enfermo” (Reglas de la Compañía de los Siervos de los Enfermos, 1584, XXVII).

Las dos congregaciones de mujeres nacidas en el siglo XIX y los institutos seculares nacidos en el siglo pasado dieron forma completa a la expresión del carisma de la misericordia hacia los enfermos, enriqueciéndolo con las cualidades distintivamente femeninas del amor y el cuidado. ¡Qué la Virgen María, Salud de los Enfermos y Madre de las Personas Consagradas, os acompañe y guíe en esto! De ella aprendemos a estar cerca de quienes sufren con la ternura y la dedicación de una madre. Me detengo un poco en esta palabra, “ternura”. Es una palabra que hoy corre el peligro de caerse del diccionario. Tenemos que retomarla y actuarla de nuevo. El cristianismo sin ternura no va. La ternura es una actitud propiamente cristiana; es también la “médula” de nuestro encuentro con las personas que sufren.

Queridos hermanos y hermanas, os animo a que cultivéis siempre la comunión entre vosotros, en ese estilo sinodal que he propuesto a toda la Iglesia, escuchándonos unos a otros y escuchando al Espíritu Santo, para valorar la contribución que cada realidad única ofrece a la única Familia, para expresar más plenamente las múltiples potencialidades que abarca el carisma. Sed cada vez más consciente de que es “en la comunión, aunque duela, es donde un carisma se vuelve auténtica y misteriosamente fecundo” (Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, 130). En fidelidad a la inspiración inicial del Fundador y de las Fundadoras, y escuchando las muchas formas de sufrimiento y pobreza de la humanidad de hoy, sabréis así hacer que brille con una luz siempre nueva el don recibido; y tantos y tantas jóvenes de todo el mundo podrán sentirse atraídos por él y unirse a vosotros, para seguir dando testimonio de la ternura de Dios.

Queridos hermanos y hermanas, le pido al Espíritu Santo que os sostenga en esta nueva etapa de vuestro camino como Familia carismática Camiliana. Os bendigo calurosamente a todos vosotros, a vuestras comunidades y a las personas que servís. A todos. Y por favor seguid rezando también por mí. Gracias.

 

© Librería Editorial Vaticano

 

 

 

18/03/2019-17:04
Esther Nuñez Balbín

Perú: Crece labor de los padres palotinos en el país

(ZENIT — 18 marzo 2019).- Lo dejaron todo en su tierra natal para continuar la misión en el Perú. Procedentes de Brasil y Camerún, el padre párroco Manuel Santana Viera y su vicario padre Joseph Fils Mballa respectivamente, recibieron de manos de monseñor Lino Panizza Richero —franciscano, obispo de Carabayllo— la segunda parroquia que los miembros de la Sociedad del Apostolado Católico, conocidos como "padres palotinos", llevarán adelante en tierras peruanas.

Fundada en el año 1835, la congregación cuenta con cerca de 2.500 miembros repartidos en 300 comunidades, en 56 países en todos los continentes. Los sacerdotes y los hermanos integrantes provienen de más de 40 naciones.

Como misioneros y discípulos, los miembros de la Sociedad del Apostolado Católico cumplen su labor con la esperanza de llegar al lugar donde Dios quiere que anuncien el evangelio. Al igual que san Vicente Pallotti "queremos reavivar la fe en la gente y fortalecer la doctrina en la vida diaria", comentó durante una entrevista el padre Joseph Mballa para Zenit.

"Vamos a continuar el trabajo de acompañamiento a las familias en el cono norte de Lima", asegura este misionero de 35 años. "Como Iglesia en salida, seguiremos acogiendo a los pobladores de las periferias".

 

Palotinos en Lima

Fue así que, durante una misa de acción de gracias celebrada el 24 de febrero último, los miembros de la Sociedad del Apostolado Católico se comprometieron a continuar la misión de evangelización iniciada cerca de 25 años atrás por los Misioneros de San Columbano en la zona.

"Nosotros seguimos la misión. Ahora les toca a ustedes continuar con esta labor", compartió el sacerdote Eduardo O'Connel, párroco saliente, en medio de aplausos de los asistentes.

En su homilía, monseñor Lino Panizza agradeció al arzobispo de Ayacucho monseñor Salvador Piñeiro, por haber recibido por primera vez en el Perú a los sacerdotes palotinos en su jurisdicción. La misión, inaugurada en febrero de 2014 en la provincia ayacuchana de Vilcashuamán, ha celebrado su quinto aniversario con la alegría de contar ya con un joven novicio que estudia la filosofía en Brasil.

Los miembros de la Sociedad del Apostolado Católico asumen ahora la parroquia "Nuestra Señora de las Misiones", que está organizada en doce comunidades con sus respectivas capillas, distribuidas por sectores de esta realidad emprendedora en las periferias de Lima.

 

Voluntarios palotinos

Los palotinos lograron conectar con la comunidad en medio de cantos y alabanzas. Al término de la celebración eucarística ambas congregaciones compartieron un ágape amenizado por los sacerdotes misioneros brasileños Marcone Silva Castro y Sergilson Brandao Santos, llegados desde Vilcashuamán, quienes impresionaron a los fieles con su contagiosa zamba.

Un grupo de voluntarios estadounidenses de la parroquia palotina de Nueva Jersey (EEUU), estuvieron presentes en esta actividad religiosa para integrarse un poco más como laicos palotinos. Ellos llegaban de la misión ayacuchana, donde pasaron días junto a los niños de la Casa Hogar Juan Pablo II, obra a cargo de la familia palotina en dicha jurisdicción, la que han visitado varias veces junto al párroco y provincial de la provincia estadounidense de la Inmaculada Concepción, padre Peter Sticco, palotino (Sociedad del Apostolado Católico).

El deseo de Pallotti se cumple cuando laicos, religiosos y sacerdotes van juntos hacia un mismo camino. ¡La misión es de todos!

Puede conocer más de la congregación a nivel mundial en: www.sac.info

 

 

 

18/03/2019-19:33
Redacción

Iglesia Patriarcal de Antioquía de los Greco-Melkitas: El Papa acepta la elección del arzobispo de Akka, Israel

(ZENIT — 18 marzo 2019).- El Santo Padre ha concedido su asenso al Reverendo Youssef Matta, elegido canónicamente por el Sínodo de los Obispos de la Iglesia Patriarcal de Antioquía de los Greco-Melkitas para el cargo de arzobispo de Akka (Israel).

 

Mons. Youssef Matta

Mons. Youssef Matta nació el 3 de diciembre de 1968 en Nazaret. De 1991 a 1992 estudió informática en la Technion University de Haifa. De 1992 a 1998 llevó a cabo su formación en el seminario diocesano latino de Beit Jala. Fue ordenado sacerdote el 19 de junio de 1999 para la archieparquía de Akka de los Greco- melquitas.

De 1990 a 2003 fue secretario privado de Mons. Pierre Mouallem; De 2004 a 2007, estudió en el Pontificio Instituto Oriental de Roma, donde se doctoró en Derecho canónico oriental. De 2008 a 2009 fue secretario privado de Mons. Elias Chacour.

Desde 2009 hasta 2011 ocupó el cargo de formador en el Seminario Greco-Melquita de Santa Ana en Raboueh (Líbano). De 2011 a 2013 fue párroco de San Jorge en Ibilin. Desde 2013 es coadjutor de la parroquia de la Anunciación en Nazaret. El Sínodo de los Obispos de la Iglesia patriarcal de Antioquía de los Greco- melkitas, reunido el 5 y 9 de noviembre de 2018 en Raboueh (Líbano), lo eligió arzobispo de Akka de los Greco-melkitas.

 

 

 

18/03/2019-09:13
Isabel Orellana Vilches

San José, 19 de marzo

«El santo por antonomasia. Esposo virginal de la Virgen María, custodio de la Sagrada Familia, padre y guardián de la Iglesia, abogado de la buena muerte. Proclamado por Pío IX patrono de la Iglesia universal»

Como afirmó san Pedro Crisólogo: «José fue un hombre perfecto, que posee todo género de virtudes». Por tanto, no cabe buscar en la fecha de hoy otro modelo más sublime para la vida espiritual que la del Santo Patriarca. Puesto que solo contamos con los someros datos que ofrece el evangelio, habiendo quedado envuelta su gloriosa vida en el silencio, cada uno ha glosado de él matices que le llamaban especialmente la atención. En cualquier santoral se hallan referencias proporcionadas por santos y santas que meditaron en ella y que se han ido transmitiendo a lo largo de los siglos. Es el caso de Tomás de Aquino, Gertrudis, Vicente Ferrer, Bernardo, Brígida de Suecia, Francisco de Sales y Bernardino de Siena.

Estos, entre otros, en numerosas ocasiones reflejaron en sus escritos los frutos de su reflexión y predicaron en sus sermones las excelsas virtudes que le adornaron. San Bernardino de Siena manifestó en uno de ellos: «La norma general que regula la concesión de gracias singulares a una criatura racional determinada es la de que, cuando la gracia divina elige a alguien para otorgarle una gracia singular o para ponerle en un estado preferente, le concede todos aquellos carismas que son necesarios para el ministerio que dicha persona ha de desempeñar. Esta norma se ha verificado de un modo excelente en san José, padre putativo de nuestro Señor Jesucristo y verdadero esposo de la Reina del universo y Señora de los ángeles. José fue elegido por el eterno Padre como protector y custodio fiel de sus principales tesoros, esto es, de su Hijo y de su Esposa, y cumplió su oficio con insobornable fidelidad. Por eso le dice el Señor: `Siervo bueno y fiel, entra en el gozo de tu Señor'».

De este hombre «justo» por antonomasia, «esposo virginal de la Virgen María», « custodio de la Sagrada Familia» se han enaltecido hasta la saciedad, como se ha dicho, sus incontables virtudes. Junto a las teologales, se hallan arracimadas en su santa vida: fidelidad, inocencia evangélica, fortaleza, docilidad, prontitud, pureza, generosidad, prudencia, disponibilidad, sencillez, templanza, obediencia, pobreza, humildad, discreción, justicia, honestidad, diligencia, paciencia, etc. Estuvo adornado por todas; por tanto, son imposibles de condensar. Y hoy, como antaño, continúan mostrando la grandeza de este «padre y guardián de la Iglesia», «abogado de la buena muerte», que vivió cada segundo de su existencia con inquebrantable adecuación de su voluntad a la divina, señalándonos el camino que hemos de seguir.

San Alfonso María de Ligorio ensalzó el trato familiar que tuvo con Jesús, subrayando lo que pudo significar este eminentísimo vínculo entre ambos para la santidad del padre que durante un tiempo le acompañó en la tierra: «José durante esos treinta años fue el mejor amigo, el compañero de trabajo con quién Jesús conversaba y oraba. José escuchaba las palabras de vida eterna de Jesús, observaba su ejemplo de perfecta humildad, de paciencia, y de obediencia, aceptaba siempre la ayuda servicial de Jesús en los quehaceres y responsabilidades diarios. Por todo esto, no podemos dudar que mientras José vivió en la compañía de Jesús, creció tanto en méritos y santificación que aventajó a todos los santos».

También los pontífices han quedado conmovidos por el ejemplo del Santo Patriarca. Juan XXIII iniciaba y culminaba su jornada poniéndose bajo su amparo. Lo proclamó patrono del concilio Vaticano II.Pablo VI el 19 de marzo de 1969 manifestó: «San José es la prueba de que para ser buenos y auténticos seguidores de Cristo no se necesitan `grandes cosas', sino que se requieren solamente las virtudes comunes, humanas, sencillas, pero verdaderas y auténticas».

Juan Pablo II le dedicó la exhortación apostólica Redemptoris custos el 15 de agosto de 1989. Y entre otras cosas, en ella calificaba la «fe, sostenida por la oración»como «el tesoro más valioso que san José nos transmite». Por su parte, a Benedicto XVI le llamó la atención su silencio. Y así, se dirigió a los fieles en uno de sus Ángelus en 2005, diciendo: «¡Dejémonos invadir por el silencio de san José!». Sixto IV incluyó la fiesta de san José en el Calendario Romano en torno al año 1479. Pío IX lo proclamó Patrono de la Iglesia universal en 1870; León XIII precisó los fundamentos de este patrocinio el 15 de agosto de 1889, y Pío XII en 1955 designó el 1° de mayo como la fiesta de san José obrero.

Los carmelitas han dado siempre gran impulso a la devoción a san José. Quizá por ello, impregnada de este carisma al que se abrazó, la gran santa castellana Teresa de Jesús ha sido una de sus mayores propagadoras. Fue agraciada por él en grave situación de enfermedad, y desde entonces lo tomó como protector. Además, puso bajo su tutela las numerosas fundaciones que instituyó. Decía: «Otros santos parece que tienen especial poder para solucionar ciertos problemas. Pero a san José le ha concedido Dios un gran poder para ayudar en todo». «Parece que Jesucristo quiere demostrar que así como san José lo trató tan sumamente bien a Él en esta tierra, Él le concede ahora en el cielo todo lo que le pida para nosotros. Pido a todos que hagan la prueba y se darán cuenta de cuán ventajoso es ser devotos de este santo Patriarca».

Durante cuatro décadas, todos los años el 19 de marzo acudía a él puntualmente solicitándole «alguna gracia o favor especial»,y siempre le respondió. Por eso insistía: « Yo les digo a los que me escuchan que hagan el ensayo de rezar con fe a este gran santo, y verán qué grandes frutos van a conseguir».

En esta misma línea, Fernando Rielo, fundador de los misioneros identes, también infundió en sus hijos el amor a san José:« Tened mucha devoción a san José, cualquier problema, cualquier cosa, os la concederá: bienes materiales y bienes espirituales, especialmente la santidad [...]. Pedidle la conversión de la humanidad, suplicadle la santidad de la Iglesia, rogadle la comunión de todos los cristianos».