Tribunas

Cabreos y doctrina moral sexual

 

 

Daniel Tirapu


 

 

Es una experiencia, que simplemente constato y comento. En mis clases, con colegas, amigos, sale el tema de la doctrina de la Iglesia sobre moral sexual dentro y fuera del matrimonio. La expongo con sencillez, sólo el matrimonio de hombre y mujer, monógamo e indisoluble asegura las condiciones de dignidad para la entrega sexual plena, encaminada a la vida de la prole; el sexo así es santo.

Fuera de esas condiciones es incompleto, un poco mentiroso, egoísta. El personal se rebota mucho; ¿qué pasa, entonces hay que tener todos los hijos que vengan, por qué? ¿entonces no puedo hacer nada si no me caso?

Constato que, con otros temas, como el hambre, injusticia, calumnia, etc., la gente no se apura tan fuerte ni de inmediato. Algo debe tener de valor moral personal, cuando se constata que la doctrina enfada tanto, se percibe como más personal, que interpela a la propia conciencia. Esta es la doctrina, difícil, excelsa, labor de toda la vida, con la gracia para vivirla.

Matrimonio es una comunidad de vida y amor, puso de relieve el Vaticano II, pero de vida, apertura a la prole, respeto de la naturaleza de los actos sexuales y de amor, de entrega, compromiso, y para eso hace falta sacrificio, paciencia, ternura, inteligencia y donación.

 

Daniel Tirapu