Sociedad y Familia

 

Menores que ven porno: Reino Unido les restringe el acceso, ¿por qué no lo hace España?

 

Los niños y adolescentes españoles acceden a la pornografía a edades cada vez más tempranas. Una ley con medidas “rigurosas” como la británica reforzaría el ineficaz Código Penal español, que en teoría penaliza la difusión del porno entre menores

 

 

19 julio, 2019 | Ferran Esteve


 

 

 

 

 

Ante el preocupante incremento de menores que ven porno en internet, el Reino Unido pone en marcha una ley que restringe duramente el acceso de niños y adolescentes a webs de contenido pornográfico.

El pasado lunes, 15 de julio, entró en vigor una normativa por la que todos los usuarios de internet que quieran ver contenidos para adultos se verán obligados a demostrar que son mayores de 18 años o se les impedirá el acceso.

Así, la ley establece que cualquier proveedor comercial de pornografía online deberá realizar “comprobaciones sólidas de verificación de la edad de los usuarios” que garanticen que sus visitantes sean adultos, según informaba The Independent.


El Reino Unido ha puesto veto al acceso de menores al porno en internet

 

Restricciones “rigurosas”

El Gobierno británico calificó de “rigurosas” las diferentes medidas que contempla la ley para frenar el consumo de pornografía por parte de niños y adolescentes, que en demasiados casos empieza entre los ocho y los diez años.

Una de las restricciones es que los usuarios de internet para adultos tendrán que introducir sus datos personales en una base de datos de propiedad privada. Otra de las opciones será adquirir un pase especial en los quioscos de prensa.

En cualquier caso, si los sitios web de contenido pornográfico no cumplen con las reglas establecidas en la normativa, se les podrían retirar los servicios de pago o ser bloqueados para todos los usuarios del Reino Unido.

Por su parte, los defensores de los derechos digitales y de la privacidad atacan la nueva normativa y argumentan que vulnera el funcionamiento de internet. También denuncian que se compromete la privacidad de las personas, que las fugas de datos podrían ser desastrosas y que el responsable sería el Gobierno.

Además, consideran que, aunque se haga por motivos de seguridad, siempre será fácil para algunas personas saltarse las reglas.


“El contenido para adultos actualmente es demasiado fácil para que los niños accedan online“, afirma el Gobierno británico

 

“Una medida innovadora de protección infantil”

Sin embargo, el Gobierno asegura que ha introducido estas reglas para evitar que los niños sufran daños por el contenido porno en Internet, que en su opinión está demasiado disponible.

El contenido para adultos actualmente es demasiado fácil para que los niños accedan online“, afirmó Margot James, ministra británica de asuntos digitales e industrias creativas.

“La introducción de la verificación de edad obligatoria es primordial en el mundo, y nos hemos tomado el tiempo para equilibrar las preocupaciones de privacidad con la necesidad de proteger a los niños de contenido inapropiado”, añadió.

La ministra mostró su firme decisión a que “el Reino Unido sea el lugar más seguro del mundo para estar online, y estas nuevas leyes nos ayudarán a lograrlo”, añadió.

Las nuevas reglas serán impuestas por la British Board of Film Classification (BBFC), la organización que califica las películas que se muestran y venden en el Reino Unido.

El presidente ejecutivo de BBFC, David Austin, insistió en que “la introducción de la verificación de edad para restringir el acceso a sitios web comerciales pornográficos para adultos es una medida innovadora de protección infantil”.

La verificación de edad ayudará a evitar que los niños accedan a contenido pornográfico online y significa que el Reino Unido está liderando el camino en la seguridad de Internet”, aseguró.

Desde otra entidad, la Asociación de Proveedores de Servicios de Internet (ISPA), se considera que a las compañías de internet se les puede pedir que prohíban por completo los sitios web que no cumplan las reglas, pero que esperan que la mayoría de proveedores de pornografía lo hagan.

“Nuestros miembros esperan altos niveles de cumplimiento por parte de los proveedores de pornografía en línea, y es el rol del regulador, la BBFC, garantizar que estos sitios sigan comprometidos con la verificación de la edad”, dijo Andrew Glover, presidente de ISPA.

En cualquier caso, lo cierto es que, con su decisión, el Gobierno del Reino Unido puede reducir significativamente los riesgos que corren los menores que consumen porno y los nocivos efectos que esta práctica tiene sobre ellos. Unos riesgos que también afectan a las adolescentes que exploran sexo online.


La pornografía denigra y convierte en objeto sexual a la mujer, y hace crecer la ´violencia de género’ entre los jóvenes

 

España, ineficaz ante la lacra del porno

Siendo esto así, no se entiende cómo en España, donde muchos niños y adolescentes se inician en el consumo de porno entre los 8 y los 10 años, no se adoptan medidas como la británica para frenar esta lacra.

Ante la facilidad con la que los más pequeños pueden acceder a la pornografía en internet, uno de los efectos nocivos que genera ese consumo es que ya hay menores que graban vídeos sexuales que luego cuelgan en la red.

Los expertos advierten de que un tercio de chicos 10 y 14 años ve porno con frecuencia; y aseguran que aumenta la práctica de subir a las redes sociales imágenes o vídeos de contenido pornográfico grabados por ellos mismos.

De hecho, la Policía Nacional señalaba el pasado 27 de abril que han identificado a más de 100 menores que han publicado vídeos sexuales grabados por ellos mismos en redes como Instagram, Twitter, Periscope o YouTube.

Otra cuestión a destacar es que el consumo de pornografía entre menores les conduce a considerar las relaciones sexuales en unos términos que se alejan de las que mantiene una pareja real basada en el respeto hacia el otro.

Las webs porno transmiten normalmente una imagen de la mujer como objeto sexual con el que se pueden mantener relaciones sexuales sin su consentimiento y de forma degradante o incluso violenta.

Que adolescentes a edades tempranas lleguen a normalizar este tipo de relaciones dice mucho de hasta qué punto actualmente, a pesar de los avances sociales alcanzados, la ‘violencia de género’ crece más entre los jóvenes.

Así lo constataba el Instituto Nacional de Estadística (INE) el pasado mes de mayo, apuntando a edades comprendidas entre los 18 y 19 años. Son los efectos de una sociedad hipersexualizada, sobre los que ya informábamos en septiembre de 2013.

Ante esta realidad, no se puede dudar de que el consumo de porno produce daños entre los más pequeños y representa por tanto un peligro social. Siendo esto así, la pornografía es un problema político ante el que las Administraciones deberían reaccionar.

Cabe recordar que el Código Penal español penaliza la difusión de pornografía en su Artículo 186: “El que, por cualquier medio directo, vendiere, difundiere o exhibiere material pornográfico entre menores de edad o personas con discapacidad necesitadas de especial protección, será castigado con la pena de prisión de seis meses a un año o multa de 12 a 24 meses”.

Sin embargo, esta medida no se aplica debido a la actual dificultad para establecer qué edad tiene la persona que accede a webs de contenido porno.

En ese sentido, lo interesante de la nueva ley británica es que contempla herramientas que permiten ejercer ese control y restringir así el acceso de menores a la pornografía.

La normativa aprobada en Reino Unido utiliza los mismos criterios o parecidos a los que se aplican al juego o al acceso a webs de juego online para evitar el acceso de menores. Bueno sería que España tomara ejemplo.