Servicio diario - 23 de julio de 2019


 

Venezuela: El cardenal Urosa exige de nuevo la salida de Maduro del gobierno
Larissa I López

"No os olvidéis de Siria" — Llamamiento del cardenal Zenari en declaraciones a 'zenit'
Deborah Castellano Lubov

Cuba: Los obispos celebran el indulto concedido a 2.604 personas
Larissa I López

Ecuador: Denuncian "la otra cara" del proyecto minero `Mirador'
Larissa I López

Perú: Los obispos lanzan "Redes de solidaridad con los pueblos originarios de la Amazonía"
Redacción

Padre Antonio Rivero: "El Wi-Fi de Dios está siempre conectado. ¿Sé la contraseña?"
Antonio Rivero

Beato Cristóbal de Santa Catalina, 24 de julio
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

23/07/2019-11:57
Larissa I. López

Venezuela: El cardenal Urosa exige de nuevo la salida de Maduro del gobierno

(ZENIT- 23 julio 2019).- El cardenal Jorge Urosa, arzobispo emérito de Caracas, denuncia al gobierno de Nicolás Maduro como "un violador de los derechos humanos" y le exige abandonar el poder para permitir que se resuelvan los graves problemas de Venezuela.

Así informó ayer, 22 de julio de 2019, la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), en una nota de prensa publicada en El Guardián Católico.

La nota remite a una entrevista de ACI Prensa en la que el cardenal afirmaba: "A fines del mes de junio estuvo en Venezuela la señora Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Luego de su visita, ella emitió un informe que revela y desenmascara la realidad del actual gobierno de Venezuela como un violador de los derechos humanos".

Así, el cardenal ratificó que dicho informe "corrobora las críticas y denuncias que desde hace varios años han venido haciendo los obispos venezolanos".

 

La exhortación de los obispos

Igualmente, hizo referencia a que el pasado 11 de julio, en la asamblea general ordinaria de la CEV, los obispos venezolanos difundieron una exhortación en la que ya señalaron "la necesidad de que Nicolás Maduro abandone el poder que ocupa de facto".

Y agregó que "ya en enero de este año, habíamos indicado la ilegitimidad de la pretensión de Maduro de seguir gobernando a Venezuela".

Después, en julio, prosigue el purpurado, "por primera vez, indicamos la necesidad de que deje el poder para permitir un cambio de gobierno que resuelva los graves problemas que confronta el pueblo venezolano".

Se trata de una decisión a la que los prelados llegaron "por la convicción de que Maduro no está en capacidad de manejar la marcha del país. Simplemente no puede hacerlo".

Por otro lado, a lo largo de sus declaraciones, el arzobispo emérito de Caracas hizo referencia a que "desde hace varios años, ni Hugo Chávez ni Nicolás Maduro han respondido nuestros mensajes, ni siquiera cuando, hace algún tiempo, con la mejor buena voluntad, enviábamos opiniones y consejos para resolver los problemas del pueblo". Y que solo "esporádicamente han respondido a algunas declaraciones con algunos ataques, pero no a nuestra exhortación pastoral del 11 de julio".

 

Violación sistemática de los derechos humanos

Por otra parte, la nota del episcopado resaltó que el cardenal Urosa "aseguró que Venezuela está en ruinas": "La inflación absolutamente desbocada; no hay luz, no hay agua, no hay gas ni gasolina; no hay dinero en efectivo, papel moneda; no hay comida o están los precios por las nubes; no hay medicinas, ni repuestos para vehículos ni maquinarias. Simplemente Maduro no sabe y no puede gobernar, expuso.

Asimismo, recalcó que el gobierno de Maduro "ha violado sistemáticamente los derechos humanos de los venezolanos". Y reiteró, "por eso, como lo he dicho en repetidas declaraciones desde abril de este año, Maduro debe irse".

 

Grave situación de los presos políticos

El arzobispo venezolano destacó especialmente la situación de los presos políticos, "algunos de los cuales han muerto bajo custodia del gobierno, en circunstancias que indican responsabilidad de funcionarios del estado".

Al mismo tiempo, denunció que existen en el país militares y presos civiles que sufren el aislamiento y la citada violación de derechos, como es el caso del diputado Edgar Zambrano, entre otros: "Recientemente murió asesinado luego de sufrir torturas durante varios días en una instalación militar, el capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo. Eso clama al cielo, debe cesar inmediatamente y debe ser severamente castigado por la ley".

 

Mensaje a los venezolanos

Al dirigirse al pueblo venezolano, el cardenal aludió la exhortación pastoral del 11 de julio, en la que los obispos llaman a la ciudadanía "a una convivencia cívica plural, pacífica, en justicia, libertad y solidaridad. Debemos participar activamente en la renovación ética y espiritual de Venezuela".

También se refirió a los venezolanos que han emigrado forzosamente, manifestando su "solidaridad y un llamado a la fortaleza para afrontar la dura situación en que se encuentran, y a la esperanza. Que se acerquen más a Dios que los ayudará a superar las actuales dificultades".

Por último, mandó "un saludo y gratitud a los pueblos y gobiernos, como el de Perú, que ha recibido a tantos venezolanos que se han visto obligados a emigrar. ¡Bendiciones para todos!".

 

 

 

23/07/2019-09:57
Deborah Castellano Lubov

"No os olvidéis de Siria" — Llamamiento del cardenal Zenari en declaraciones a 'zenit'

(ZENIT- 23 julio 2019).- "No os olvidéis de Siria. Porque un ciclón está llegando... Pero además, no olvidéis ni desestiméis a los Buenos Samaritanos, a todas las Verónicas que enjugaron las lágrimas...".

Este es el llamamiento del cardenal Mario Zenari, nuncio apostólico en Siria, transmitido a zenit. Hablamos con él en la Embajada de Italia ante la Santa Sede en Roma, en el acto titulado: "Hospitales abiertos en Siria: la primera fase ha terminado, el llamamiento se renueva", el 31 de mayo de 2019, en el Palazzo Borromeo.

 

"Profunda preocupación" del Papa ante la crisis humanitaria

Ayer, 22 de julio de 2019, el cardenal Peter Turkson, prefecto del Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, acompañado por el cardenal Zenari, se reunió con el presidente de Siria, Bashar Hafez Al-Assad.

El Papa Francisco escribió una carta, que el cardenal Tukson entregó en Damasco al presidente, expresando su "profunda preocupación" por la crisis humanitaria en la nación, con especial referencia a "las dramáticas condiciones de la población civil en Idlib".

El Papa redactó esta carta, explicó el cardenal Pietro Parolin en una entrevista con Andrea Tornielli, director editorial del Vaticano, "para renovar su llamamiento a la protección de la vida civil y a la preservación de las principales infraestructuras, como escuelas, hospitales y centros de salud".

"Lo que está sucediendo es intolerable e inhumano", añadió el cardenal Parolin y apuntó: "El Santo Padre pide al presidente que haga todo lo posible para poner fin a esta catástrofe humanitaria, a fin de proteger a la población indefensa, especialmente a los más vulnerables, en el respeto del derecho internacional humanitario". El Papa Francisco ha realizado llamamientos a la comunidad internacional para que ayude a la "amada y atribulada Siria" durante años, y también ha encabezado iniciativas de sensibilización, como el ayuno por Siria.

 

"La mayor crisis humanitaria de nuestro tiempo"

La guerra que comenzó en Siria en marzo de 2011 ha causado lo que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados denomina "la mayor crisis humanitaria de nuestro tiempo".

Conforme a los datos de 2016, la agencia de la ONU estimó que la emergencia humanitaria ha afectado a 13,5 millones de sirios, incluidos 6 millones de niños. La mayoría, casi 9 millones de personas, viven en situación de inseguridad alimentaria, sin acceso a suministros básicos.

 

"Campaña Hospitales Abiertos"

El evento de la Embajada, en el que la corresponsal de zenit en el Vaticano conversó recientemente con el nuncio apostólico, comenzó con los saludos institucionales del embajador Pietro Sebastiani y los ponentes: el cardenal Mario Zenari, nuncio apostólico en Damasco; el cardenal Gualtiero Bassetti, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana; el embajador de Hungría ante la Santa Sede, Eduard Habsburg-Lotharingiai; Giovanni Raimondi, presidente de la Fundación Gemelli; Emmanuele FM Emanuele, presidente de la Fundación Internacional Tercer Pilar; Giampaolo Silvestri, secretario general de la Fundación AVSI. Maria Gianniti, corresponsal de TG1 — redacción internacional, moderó.

La crisis de salud en el país inspiró la "Campaña Hospitales Abiertos". Esta iniciativa fue lanzada por AVSI junto con Cor Unum y la Fundación Gemelli, a finales de 2016, con el objetivo de desarrollar las actividades de tres hospitales sirios sin ánimo de lucro.

La Fundación AVSI, según su sitio web, es una de las 16 organizaciones internacionales presentes en Siria que trabaja en varios frentes para apoyar al pueblo sirio. En Damasco promueven actividades para mujeres y niños, y, en Alepo, respaldan el trabajo de Custodia Terra Sancta.

"Este trabajo era necesario ante una crisis sanitaria sin precedentes: casi 11,5 millones de personas, el 40 por ciento de las cuales son niños, no reciben una adecuada atención médica", señala la web de la fundación: "En Alepo, más de 2 millones de personas no tienen acceso a los hospitales, en Damasco, más de un millón. El sistema de salud no puede hacer frente a la demanda y las familias no pueden pagar sus facturas médicas".

 

Otro ciclón por venir

El cardenal, dirigiéndose a zenit y a los periodistas, reconoció que otros conflictos y naciones a menudo tienen la atención de los medios de comunicación durante algún tiempo y luego esta se pierde. "Esto hace mucho daño, ser olvidado", dijo.

Tras señalar que Siria ha entrado en el noveno año de guerra, lamentó que la atención de los medios de comunicación haya disminuido con el tiempo. Sin embargo, subrayó, el ciclón debe ser anticipado.

"Y creo -resaltó- que otro ciclón más está llegando a Siria. Y sería necesario alertar a la comunidad internacional sobre lo que se está gestando".

"Creo que, desafortunadamente, seremos testigos de nuevos desplazamientos de personas. Desde principios de marzo hasta mediados de mayo, 300.000 refugiados de la provincia de Idlib... y después los muertos, los heridos, la destrucción..."

En toda Siria -porque decenas y decenas, si no cientos de hospitales fueron destruidos o inutilizados-, es necesario, ante todo, "antes de la reconstrucción de edificios y puentes", "reconstruir la persona humana, su cuerpo" y, haciendo esto, "curar las heridas físicas y, junto con ellas, las morales".

 

Gratitud de cristianos y no cristianos

El proyecto "Hospitales abiertos" es una iniciativa abierta a personas enfermas y pobres de cualquier grupo étnico o religioso. Ante ello, expuso, existen dos objetivos: curar las heridas físicas y mejorar las relaciones interétnicas e interreligiosas.

"Aquí," elogió, "hay algunos ejemplos muy hermosos. Las religiosas que sirven en estos tres hospitales me hablan de hermosos ejemplos de gratitud por parte de personas no cristianas".

"Siempre pienso en la pobre Siria, ¿cuándo saldrá de este ciclón en Oriente Medio? Un terrible ciclón está a punto de estallar. "Basta pensar en los problemas de la cuestión palestina- israelí, en los desacuerdos entre Irán y Arabia Saudita, en los que las potencias internacionales todavía están presentes. Es un verdadero huracán y Siria está precisamente en el ojo de este ciclón".

Dado que tantos países libran sus guerras por mediación en Siria, es difícil decir que Siria pueda salir de esta situación mañana, afirmó, "cuando existe un ciclón que se desata en todo Oriente Medio".

 

Llamamiento y gratitud a los Buenos Samaritanos y Verónicas

El representante Vaticano conversó con zenit sobre esto y cómo, obviamente, los acontecimientos en la nación han puesto a prueba la fe de muchos. Los únicos signos de esperanza son verdaderamente "los Buenos Samaritanos" que han ayudado en el camino.

El cardenal relanzó su llamamiento a la comunidad internacional: "¡No os olvidéis de Siria! ¡No os olvidéis de Siria!".

 

Signos de esperanza en el camino

Admitió que el sufrimiento indescriptible, especialmente cuando ves con tus propios ojos la muerte y el padecimiento de niños y madres, es "una enorme prueba de fe".

Sin embargo, dijo que no debemos olvidar esos signos de esperanza.

"Hay muchos Buenos Samaritanos, muchos Buenos Samaritanos, que se encuentran en Siria en este largo camino del Calvario; mucha gente buena que perdió la vida", dijo. "Estos son signos que dan esperanza".

"Muchas Verónicas que limpian la cara de esta pobre gente, muchos voluntarios, muchos Cireneos; lo que hacen y han hecho, debe ser resaltado".

 

Pequeñas semillas en el desierto

Además, contó a zenit, "la solidaridad, la ayuda, no falta, pero las necesidades son enormes. Hay muchas semillas de solidaridad que no se ven, pequeñas semillas en el desierto, que un día crecerán, y Siria se volverá verde de nuevo".

Cuando zenit preguntó sobre cómo la oración le ayuda a perseverar en todo lo que ha presenciado, reflexionó: "He visto tanto sufrimiento, tantas guerras civiles, padecimientos de niños, de madres, estoy inmerso en una labor de reflexión sobre todo este sufrimiento que he visto, veinte años de sufrimiento, y el Señor me da vida; los años me ayudarán a repensar, a comprender, a tratar de comprender.

"El sufrimiento es una prueba, el sufrimiento de los niños, de los inocentes, es una prueba enorme para la fe."

 

 

 

23/07/2019-15:01
Larissa I. López

Cuba: Los obispos celebran el indulto concedido a 2.604 personas

(ZENIT- 23 julio 2019).- La Comisión Nacional para la Pastoral Penitenciaria de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, junto con los obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos, se unen a la alegría de las familias que, "con gozo y cariño, reciben a sus seres queridos privados de libertad y que han sido beneficiados del indulto otorgado por el Consejo de Estado de la República de Cuba a 2.604 personas (...).

Así informó, el pasado 20 de julio, la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, en una nota de prensa firmada por Mons. Enrique Serpa Pérez, obispo emérito de Pinar del Río y presidente de la citada Comisión.

Efectivamente, tal y como indica la agencia de noticias Fides, conforme a la nueva Constitución de la República que favorece la reintegración social de los encarcelados, el Consejo de Estado de Cuba ha otorgado recientemente una amnistía destinada a aquellos presos que han demostrado buen comportamiento.

Igualmente, se ha considerado el tiempo cumplido de las penas, los hechos por los que fueron condenados, la edad y las enfermedades que algunos de ellos presentan.

Las personas que se han beneficiado especialmente de estos indultos son las mujeres, los jóvenes y los mayores. Asimismo, en todos los casos, los individuos han cumplido como mínimo un tercio de su condena.

La nota de la Comisión del episcopado señala que este indulto es "un gesto humanitario de misericordia" en sí mismo, y manifiesta que dicha misericordia es "superior a la animosidad", favoreciendo "la reinserción en la sociedad de las personas beneficiadas y una mejor convivencia social".

Todo ello, recuerdan, conforme a las enseñanzas del Papa Francisco "con ocasión del Año de la Misericordia y su visita a nuestro país (...)" en el año 2015 como "Peregrino de la Misericordia".

Por otra parte, el texto anima "a las comunidades a una mayor sensibilidad y apoyo con esta acción específica de la pastoral penitenciaria sustentada en la enseñanza de Jesús
(---)"

Asimismo, los obispos católicos de Cuba solicitan súplicas con el fin de que "continúe realizándose un análisis periódico de situaciones particulares, que permitan este tipo de decisión en beneficio de aquellos que puedan reinsertarse a la habitual vida ciudadana".

Finalmente, encomiendan a la Virgen de la Caridad, "madre de todos los cubanos, a los indultados y a cuantos se alegran con su regreso al hogar" y piden la protección maternal de la misma "sobre quienes permanecen sin libertad y sus familias".

 

 

 

23/07/2019-17:35
Larissa I. López

Ecuador: Denuncian "la otra cara" del proyecto minero 'Mirador'

(ZENIT- 23 julio 2019).- Varias organizaciones revelaron en un comunicado, publicado el pasado 17 de julio de 2019, la "otra cara" de la inauguración del proyecto minero Cóndor Mirador, puesto en marcha en Ecuador.

Se trata de la Comunidad Amazónica de Acción Social Cordillera del Cóndor Mirador (CASCOMI), la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos, la Pastoral Social Cáritas Ecuador y la Red Comunitaria Luchadores por el Agua.

En dicho comunicado se denuncia que el modelo extractivista, que se ha aplicado en Ecuador y en otros países de la Amazonía, constituye un sistema que únicamente concibe el territorio como un capital, un espacio para la extracción de recursos y que, además, no genera beneficios para las poblaciones afectadas.

Así, el texto pretende dar voz y defender a los pueblos indígenas y campesinos que habitan en el lugar que ha sido explotado y que se han visto amenazados por una actividad minera a gran escala facilitada por "las decisiones cómplices del gobierno" y "a favor del lucro económico para pocos y en otros lugares del mundo".

 

Consecuencias para la comunidad

Las organizaciones señalan que la instalación de este proyecto de extracción minera ha constituido una auténtica "pesadilla" para las familias autóctonas, indígenas y campesinas, que se han visto obligadas a abandonar sus tierras y sus hogares.

Igualmente, subrayan que esta realidad ha sido también percibida por representantes de organismos internacionales de protección de los derechos humanos, como la relatora de pueblos indígenas de la ONU, y por organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos, gobiernos locales, instancias de rendición de cuentas estatales, medios de comunicación y organizaciones sociales.

Por otra parte, manifiestan que, aunque la empresa encargada de construir la infraestructura, EcuaCorriente S.A. (ECSA), defiende haber invertido 1,7 millones de dólares en programas de apoyo a comunidades autóctonas, existe una grave deuda social y ambiental que no puede ser compensada económicamente y que exige reconocer las consecuencias reales que esta iniciativa ha supuesto para los derechos de la comunidad y del medio natural.

Varias comunidades presentan un estado precario porque no poseen agua limpia ni acceso a fuentes hídricas y esto les ocasiona problemas de salud. Tal es el caso de Yanúa Kin, una población cuyos cultivos, animales y viviendas fueron destruidos y contaminados debido a la tierra y los sedimentos generados por la empresa, lanzados a los ríos Wawayme, Tundayme y Kimi.

Además, debido al desvío del cauce del río Tundayme, las personas que dependen de él también tuvieron problemas.

 

Respuesta del Estado

Las asociaciones denuncian que el Estado no ha prestado atención a la demanda constitucional planteada en contra de dicha empresa y el propio Estado por los desalojos impuestos en las 11 concesiones que sobrepasan la extensión permitida, ya que conforme el Art. 4 del Mandato Minero un mismo titular no puede ostentar más de tres concesiones mineras.

Por otra parte, el Ministerio de Minería indica que el tiempo de vida del proyecto es de 30 años, pero la Ley menciona que la duración de una concesión minera es, como máximo, de 25 años.
Asimismo se puntualiza que no debe producirse actividad minera en áreas con alto valor ecológico y que el valle del Quimi, Tundayme, El Guismi y parte del Pangui, donde se despliega este plan minero, forman parte de la cordillera del Cóndor, una reserva de biodiversidad de 150 Km2 de superficie. En ella se localizan 16 ecosistemas reguladores de los regímenes de agua en la zona y en el bosque protector se han registrado 227 fuentes de agua.

 

Desalojo violento de familias

La empresa ECSA ha desalojado de forma violenta a 32 familias de la región, un total de 116 personas. Entre ellas, se encuentran 52 niños y adolescentes, 12 personas de 65 años o más años y 58 adultos, de la parroquia Tundayme y El Güismi.

Según la cronología expuesta en el comunicado, el 12 de mayo de 2014, unos 50 policías destruyeron una escuela y una iglesia, propiedades donadas a la comunidad, en el barrio de San Marcos.

El 30 de septiembre de 2015, 16 familias de las zonas Vía Cóndor Mirador y San Marcos fueron expulsadas de sus viviendas por 135 policías y sus cultivos fueron destruidos y enterrados.

El 16 de diciembre del mismo año, con presencia policial, de funcionarios de la comisaría, de fiscales, y de trabajadores de la empresa, se produjeron nuevamente desalojos y destrucción de casas por parte de la maquinaria pesada de ECSA. La policía usó la fuerza para evitar la resistencia y facilitar el desarme de los hogares por parte de dichas máquinas.

El 4 de febrero de 2016, por último, se forzó a la anciana Shuar Rosario Wari, de 95 años, a abandonar su vivienda, intentando justificarlo como una falsa "intervención social".

Ante todos estos hechos, el caso judicial, presentado por la comunidad de CASCOMI, se encuentra ya en la Corte Constitucional del Ecuador y se espera la resolución de la Acción Extraordinaria de Protección para reclamar la reparación total de los derechos violados.

 

 

 

23/07/2019-14:01
Redacción

Perú: Los obispos lanzan "Redes de solidaridad con los pueblos originarios de la Amazonía"

(ZENIT- 23 julio 2019).- Este año, con la campaña solidaria "Compartir, iniciativa anual de la Conferencia Episcopal Peruana, los obispos buscan "visibilizar, comprender y valorar la diversidad y situación de los pueblos indígenas, como una expresión de la riqueza que Dios ha puesto en el corazón de cada persona, de los pueblos y naciones".

Así lo expresó Mons. Lino Panizza en la presentación de la campaña, el pasado 19 de julio de 2019. En representación de los obispos del Perú, el obispo de Carabayllo indicó que la campaña solidaria "Compartir 2019" está dirigida a los pueblos originarios de la Amazonía, con el título "Redes de solidaridad con los pueblos originarios de la Amazonía".

 

Riquezas del ser humano

Esta campaña pretende hacer comprender que "la diferencia cultural no es una amenaza para el desarrollo de los pueblos", sino "la constatación de las enormes potencialidades y riquezas del ser humano" y busca "despertar y alentar las reflexiones y compromisos en favor de la ecología integral que el Papa Francisco señala constantemente", señalaron los obispos peruanos.

En la conferencia de prensa, realizada en el auditorio de la Conferencia Episcopal Peruana, también participaron el padre jesuita Jaime Regan, que habló sobre la situación de los pueblos indígenas, el doctor Ismael Vega Díaz, director del Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP), que departió sobre el territorio indígena y la Consulta Previa, y el Padre Guillermo Inca, secretario general adjunto de la Conferencia Episcopal.

 

Colecta pública

La colecta pública de la Campaña "Compartir 2019" se realizará a nivel nacional el 23 de agosto, en las principales calles y avenidas del país, con el apoyo de voluntarios que estarán identificados con un mandil, brazaletes amarillos y una lata color tierra, con el logo de la campaña.

Del mismo modo, la colecta parroquial tendrá lugar el 25 de agosto durante las misas dominicales en todo el país.

 

Campaña "Compartir"

El pasado año, en 2018, la solidaridad de todos los participantes en esta iniciativa permitió poner en marcha proyectos de ayuda social en Ayacucho, Chachapoyas, Huacho, Lurín, Yurimaguas, Lima, Callao, Tarma, Chiclayo, Piura, Tacna, Chimbote, Puno, Ica, Trujillo, Pucallpa, Moyobamba.

El objetivo fundamental de la Campaña "Compartir es animar y fortalecer la práctica de la solidaridad cristiana, junto a la oración, la celebración litúrgica y la limosna.

Desde 1990, la campaña escoge un tema diferente cada año, siempre a favor de las poblaciones más necesitadas del país. Su finalidad es financiar diversos proyectos sociales gracias al aporte de instituciones y personas naturales.

 

 

 

23/07/2019-07:00
Antonio Rivero

Padre Antonio Rivero: "El Wi-Fi de Dios está siempre conectado. ¿Sé la contraseña?"

 

DÉCIMO SÉPTIMO DOMINGO TIEMPO COMÚN

Ciclo C

Textos: Gn 18, 20-21.23-32; Col 2, 12-14; Lc 11, 1-13

Antonio Rivero, L.C. Doctor en Teología Espiritual, profesor en el Noviciado de la Legión de Cristo en Monterrey (México) y asistente del Centro Sacerdotal Logos en México y Centroamérica, para la formación de sacerdotes diocesanos.

Idea principal: Nuestra línea telefónica y nuestro whatsapp con Dios es la oración, que debe ser confiada, perseverante, humilde e intercesora. El Wi-Fi de Dios está siempre conectado.

Síntesis del mensaje: Lucas, que nos acompaña en este ciclo C, es el evangelista que más veces hace alusión a Jesús orante, tanto en comunidad como en solitario, en momentos de alegría o de crisis. El domingo pasado nos invitaba Jesús, en la casa de Marta y María, a escuchar la Palabra y a dar prioridad a la oración antes que a la acción. Hoy nos ayuda a entender la importancia de la oración en nuestra vida, enseñándonos el Padrenuestro y también indicándonos las cualidades que debe tener nuestra oración. La oración no es una cuestión de técnicas; una oración buena es la que nos hace encontrar a Dios y poco a poco nos transforma interiormente.

 

Puntos de la idea principal:

En primer lugar, veamos la oración de Abraham. Es una oración porfiada de intercesión, a favor de los habitantes de Sodoma y Gomorra, a pesar de su gran pecado. Es entrañable —y típico oriental- el "regateo" de Abrahán ante Dios. Le pide con confianza "rebajas", aunque conocía el gran pecado de aquella ciudad. Y Dios le escucha, aunque no haya encontrado ni siquiera esos diez justos que le sugería Abrahán. Aprendamos de Abrahán a pedir por la Iglesia, por nuestras naciones, por los enfermos y ancianos, por los jóvenes, por los que sufren, por los pecadores, por las familias, por la paz del mundo, por los gobernantes. Oración de intercesión.

En segundo lugar, veamos la oración de Jesús. Jesús ora con frecuencia y largamente; algunas veces, como nos recuerdan los evangelistas, pasa incluso toda la noche en oración (cf. Lc 6, 12). Jesús ora antes de tomar cualquier decisión importante: por ejemplo, antes de escoger a sus apóstoles; antes de salir para Jerusalén; antes de enviar a los discípulos en misión. Jesús ora en la soledad. A veces se levanta muy pronto por la mañana, para poder orar tranquilamente, aunque el día anterior haya tenido que ocuparse durante mucho tiempo de los enfermos (cf. Mc 1, 32.35). ¿Por qué ora? Porque siente un intenso deseo de vivir en unión con su Padre del cielo. Su ejemplo suscita en los discípulos el deseo de ser instruidos en la oración. Por eso le piden: "Señor, enséñanos a orar". Y nos enseña la más sublime oración, el Padrenuestro: la primera parte dirigida a Dios (sea alabado y santificado su Nombre, implorado su Reino, cumplida su Voluntad). La segunda es para nosotros: le pedimos el pan material y espiritual; perdón de nuestras ofensas, nos aparte de la tentación y nos libre del mal y del maligno.

Finalmente, analicemos nuestra oración. Tengamos nuestro whatsapp con Dios actualizado y siempre abierto. La contraseña para entrar en el whatsapp de Dios es ORACIÓN. ¿Qué es la oración? "Para mí, la oración es un impulso del corazón, una sencilla mirada lanzada hacia el cielo, un grito de reconocimiento y de amor tanto desde dentro de la prueba como en la alegría" (Santa Teresa del Niño Jesús, Manuscrito C, 25r). "La oración es la elevación del alma a Dios o la petición a Dios de bienes convenientes" (San Juan Damasceno, Expositio fidei, 68). Y para san Agustín, la oración es el encuentro de la sed de Dios y de la sed del hombre. Dios tiene sed de que el hombre tenga sed de Él. Y el Catecismo dice en el número 2564: "La oración cristiana es una relación de Alianza entre Dios y el hombre en Cristo. Es acción de Dios y del hombre; brota del Espíritu Santo y de nosotros, dirigida por completo al Padre, en unión con la voluntad humana del Hijo de Dios hecho hombre". ¿A qué vamos a la oración? A alabar y adorar a Dios, a darle gracias, a pedirle perdón e implorarle por nuestras necesidades. ¿Cómo debemos rezar? Con sencillez y humildad, con atención y confianza, con perseverancia. ¿Qué obstáculos encontramos en nuestro día a día para rezar bien? El miedo al silencio, a la soledad y a encontrarnos con nosotros mismos, las distracciones, el pensar sólo en las cosas materiales, el peso de nuestros pecados, la tibieza y la mundanidad, de la que tanto habla el papa Francisco. ¿Y los frutos de la oración? Frutos tanto individuales como para la comunidad. Estos frutos son lo que nos permiten decir que la oración no es algo puramente psicológico, porque tiene consecuencias. Si permanecemos fieles a la oración, poco a poco nos volvemos más apacibles, más delicados, más atentos a los demás. Comunicamos la paz de Dios. Luego están los santos, que gracias a la oración han logrado hacer grandes obras de amor impensables en un principio. Gracias a la oración uno puede llegar a sentir —a percibir sensiblemente- la presencia de Dios, su ternura y su alegría. De lo que se trata es que cada vez sea menos una oración de pensamiento, de cabeza, y cada vez más una oración de corazón, que se abra a Dios, en una apertura y abandono que hace que la oración sea profunda.

Para reflexionar: ¿Reservo unos diez o quince minutos diariamente en mi whatsapp espiritual para encontrarme con Dios y consagrar ese momento a Él? ¿Estoy conectado al Wi-Fi de Dios todo el día para ver sus mensajes? ¿He reflexionado que las actitudes esenciales para orar y relacionarnos con Dios son tres: un acto de fe, de esperanza y de amor, y no tanto, la sensibilidad ni la inteligencia? ¿Todo lo espero de Dios o también pongo mi parte? ¿Grito al Señor día y noche? ¿Rezo por los demás como Abraham por Sodoma y Gomorra?

Para rezar: "Señor, estoy ante ti como un pobre, veo todos mis pecados y mi fragilidad, pero no es un problema porque Tú eres mi esperanza. Es de ti que espero mi salvación, Señor,. es de ti que espero la gracia que podrá curarme, purificarme y transformarme. Señor, no siento gran cosa y me gustaría comprenderlo todo, pero creo aún así con todo mi corazón que estás aquí".

 

Para cualquier duda, pregunta o sugerencia, aquí tienen el email del padre Antonio, arivero@legionaries.org

 

 

 

23/07/2019-07:00
Isabel Orellana Vilches

Beato Cristóbal de Santa Catalina, 24 de julio

«Fundador español. Apóstol de los pobres y de los enfermos. Dios obró por medio de él prodigios y milagros diversos»

En este beato extremeño confluyeron dos carismas: el franciscano y el hospitalario; ambos configuraron su vida y acción apostólica. Intervinieron también en ellas la fe y perspicacia de un religioso atento a su entorno que vio reflejadas en el joven Cristóbal las cualidades de una gran vocación sacerdotal.

Desde que nació en Mérida, Badajoz, España, el 25 de julio de 1638, la pobreza de su familia y el espíritu de generosidad, que junto a ella aprendió y ejercitó cotidianamente, le dispusieron para ser paño de lágrimas de numerosos infortunados. La cercanía de los padres franciscanos, a los que quiso unirse antes de cumplir los 8 años, incrementó su piedad y extrajo de él sus muchas virtudes. Con ellos se impregnó de ese carisma, que fue para el beato como una segunda piel, unido al de los religiosos de San Juan de Dios, en cuyo hospital desempeñó la tarea de enfermero. El director del mismo fue quien atisbó que podía hallarse ante un futuro presbítero y llamó su atención hacia la vida sacerdotal. Cristóbal estaba acostumbrado al esfuerzo y al sacrificio. Era pronto, dispuesto, muy responsable. Al ser el sacristán del convento de las franciscanas concepcionistas, solía madrugar para ayudar en misa.

Cursó estudios eclesiásticos en Badajoz y fue ordenado en esta capital en 1663. Cuando trabajaba en el hospital de su ciudad natal había dicho: «cuán suave es el Señor servido en sus pobres». De modo que al regresar a Mérida, junto al ejercicio de su ministerio, retomó la labor ya que su atracción por el mundo de los enfermos sin recursos seguía intacta. Auxilió y consoló a quienes habían perdido la salud y con ella otros bienes materiales y espirituales. En esta misión se hallaba inmerso cuando fue reclamado para sumirse en un escenario virulento: el de la guerra que se libraba entre España y Portugal; fue capitán de uno de los tercios españoles. Noche y día intentaba sanar las heridas del cuerpo y las del alma, atendiendo a los infelices soldados heridos y enfermos que yacían en el suelo. En distintos momentos estuvo a punto de fenecer. Así, se libró milagrosamente de la muerte en el fragor de la lucha, hallándose debajo de un árbol, en medio de una emboscada, y en otras circunstancias. Finalmente, la grave enfermedad que contrajo lo devolvió a su hogar. Entonces comenzó otro hito de su vida: el desierto.

La invitación a sumirse en la experiencia eremítica se tomó especialmente apremiante en su interior. Por eso, y aún en medio de dudas y de cierta reserva, como sopesaba esta vía, rechazó la oferta de un acaudalado ciudadano que quiso poner en sus manos la administración de sus bienes. Sin embargo no tomó partido por ella hasta que murió un íntimo amigo. Entonces no demoró más su respuesta. Conocía la existencia de monjes en la serranía cordobesa y eligió ese destino. Llegó en 1667, tras recorrer a pie más de doscientos kilómetros. Le animaba este afán: «Mi ánimo, oh Dios, es servirte en la soledad. Mi viaje no ha de ser por camino conocido. Guíame para que, sin ser visto, pueda llegar al desierto donde Tu amor me llama». El hermano encargado de franquearle la entrada del eremitorio debió conmoverse cuando le oyó decir: «Soy un pecador que viene buscando quien le enseñe a hallar a Dios por el camino de la penitencia, porque no tiene otro el que ha pecado. Te pido que me recibas como hijo y me enseñes como Padre que yo prometo ser obediente a tus mandatos».

Inicialmente nadie supo que era sacerdote. Hizo de la oración, el ayuno y el trabajo su pauta de conducta, sin escatimar sacrificios ni mortificaciones, con toda fidelidad y obediencia a las indicaciones que le fueron proporcionando. Profesó como terciario franciscano en 1670 con el nombre religioso por el que es conocido. Pasado el tiempo, los ermitaños que admiraban su virtud, le tomaron como guía y dieron lugar al nacimiento de la congregación de Ermitaños de San Francisco y San Diego, de espíritu franciscano. Allí comenzaron a conocerse algunos de sus prodigios.

Pero su meta apostólica era Córdoba. Cuando viajaba a la ciudad observaba la radical diferencia existente entre ricos y pobres, la desidia de aquéllos y de las autoridades ante tantas carencias esparcidas por sus calles: un mundo de miseria, abandono e injusticia tal que removió su sensibilidad llegándole a las entrañas. «Serviré a Dios sustentando pobres», se dijo. Y este castigadísimo colectivo fue para siempre el objeto de su caridad. En 1673 abrió un humilde hospitalito presidido por un Jesús Nazareno con esta leyenda: «Mi Providencia y tu fe han de tener esto en pie»; le ayudó a superar las dificultades y contrariedades que fueron llegando. Comenzó con seis camas, pero sus desvelos y afanes por estos desheredados, que le traían y llevaban por todos los rincones de la capital, fue despertando conciencias y se abrieron otras opciones. Hombres y mujeres iban uniéndose a él, y muchos quisieron entregarse por completo a esta labor, siendo origen de los Hermanos y Hermanas Hospitalarios de Jesús Nazareno, para «servir a los pobres». Si sus seguidores se sentían tambalear, decía: «Tened confianza porque la mano de Dios sabe abrirse para el socorro cuando las necesidades aprietan».

Su ardiente caridad se hizo patente en detalles delicados como las flores que perfumaban los lechos de sus enfermos. Niños, ancianos, jóvenes, prostitutas, incluso facinerosos bandoleros sabían de su bondad. Paciencia, humildad, generosidad diseminadas en todos los rincones. Los milagros se multiplicaban en medio de gestos que recuerdan a los del Poverello. Cuando salía a pedir limosna la gente contemplaba en él al auténtico discípulo de Cristo. El cólera azotó severamente la ciudad en 1690. Le faltaban manos para atender a los enfermos en las calles y dentro del hospital, y se contagió. Falleció el 24 de julio de ese año. Fue beatificado en Córdoba el 7 de abril de 2013 por el cardenal Angelo Amato, en representación del papa Francisco.