Cartas al director

 

¿Sacerdotes casados en la Amazonia? (Xus D. Madrid)

 

 

13 septiembre, 2019 | por ForumLibertas.com


 

 

 

Lo que en la Amazonia se plantea como un problema práctico, en Occidente algunos lo ven como un precedente en una reformulación del sacerdocio.

Cómo llevar la predicación y los sacramentos a comunidades católicas en las selvas amazónicas es un problema práctico, que puede quitar el sueño a sus obispos pero que no tiene gran gancho periodístico. Pero si entre las Medidas propuestas se menciona la posibilidad de la ordenación de hombres casados, entonces todo es distinto y parece que estamos a las puertas de un cambio revolucionario.

Así ha ocurrido con motivo de la presentación del documento preparatorio del Sínodo de Obispos sobre la Amazonia, previsto para el próximo octubre.

Para valorar la novedad, no conviene perder de vista que en la Iglesia católica ya hay sacerdotes casados.

Las Iglesias católicas de rito oriental, unidas a Roma, cuentan con sacerdotes casados y con sacerdotes célibes, tradición que se ha mantenido. Y que tampoco está exenta de problemas, como advertía Sviatoslav Shevchuk, arzobispo de Kiev y cabeza de la Iglesia grecocatólica de Ucrania (ver “No es fácil contar con sacerdotes casados”, Aceprensa, 23-10-2018).

Igualmente, también en el mundo anglosajón hay antiguos clérigos anglicanos, episcopalianos, luteranos y otros que estaban casados al convertirse al catolicismo y a los que se les ha permitido seguir como sacerdotes católicos.

Tampoco puede decirse que sea la primera vez que se debate esta propuesta de ordenación de viri probati, hombres casados que han demostrado madurez en la fe y que podrían prestar este servicio en su comunidad. Siempre que en los últimos tiempos se habla de la escasez de vocaciones sacerdotales, salen a colación los viri probati, de los que parece haber una gran cantera, al menos sobre el papel.

Como hacía notar el vaticanista John Allen en Crux (18-06-2019), “tras cubrir los sínodos de obispos durante más de veinte años, no recuerdo muchos en los que no surgiera la idea de los viri probati, no en la agenda oficial, pero sí en el ambiente”.

Basta recordar el Sínodo sobre la Eucaristía en 2005, en el que obispos del Sur plantearon el problema de comunidades aisladas que quedaban sin sacerdotes por largos periodos de tiempo.

Pero, tras el debate, la idea fue descartada y el Sínodo reafirmó el valor espiritual y pastoral del celibato sacerdotal.

Lo nuevo sería que, en esta ocasión, el tema figura en el documento preparatorio. Pero el que una idea sea debatida no quiere decir que vaya a ser aprobada.