Red Iberoamericana de

Estudio de las Sectas

 

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Nº 718

14 de ene. 2020

 

1. Vázquez Borau: la teología de la prosperidad “transforma a Dios en un poder a nuestro servicio”.

2. Santo Daime: así se usa la ayahuasca “espiritualmente”.

3. Una psicóloga española muestra las semejanzas entre la adicción a drogas y las sectas.

4. Ex adepto español de los testigos de Jehová: “ponen en contra hasta tu propia familia”.

5. Un documental revela posibles prácticas de envenenamiento por parte del líder de Nxivm.

6. Osho: el gurú de los Rolls Royce.

7. La decadencia del “zar”, rito egipcio entre el esoterismo y el exorcismo.

8. El satanismo filosófico: una nueva versión, peligrosa, del egoísmo de siempre.

9. España: el miedo al vudú impide identificar al responsable de la muerte de un bebé inmigrante.

10. Argentina: una tarotista acusada de estafa, en paradero desconocido.

 

 

1. Vázquez Borau: la teología de la prosperidad “transforma a Dios en un poder a nuestro servicio”.

FUENTE: Religión Digital

 

 

José Luis Vázquez Borau, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), ha publicado recientemente en el portal español Religión Digital un artículo titulado “¿El Evangelio de la Prosperidad o el Evangelio de la Navidad?”. Lo reproducimos a continuación.

Se viene difundiendo en todo el mundo, desde hace décadas, por parte de movimientos evangélicos y ministros neo-carismáticos, una «teología de la prosperidad», que en términos religiosos viene a decir que «la opulencia y el bienestar son el signo de la predilección divina que se consigue mágicamente con la fe». Este evangelio coloca el bienestar del creyente en el centro de la oración y transforma a su Creador en aquel que hace realidad sus pensamientos y deseos. El peligro de esta forma de antropocentrismo religioso, que pone en el centro al ser humano y su bienestar, es el de transformar a Dios en un poder a nuestro servicio, a la Iglesia en un supermercado de la fe, y la religión en un fenómeno utilitarista y eminentemente sensacionalista y pragmático.

Esta teología que surge del liberalismo económico nació en Estados Unidos pero se ha extendido en África (Nigeria, Kenia, Uganda y Sud-áfrica); en la República Popular China, gracias a las Iglesias de Wenzhou, regidas por empresarios locales; en América latina, gracias al uso de la televisión por parte de pastores carismáticos que hacen una lectura de la Biblia fundamentalista y pracmática. Hay que hacer aquí una mención especial a la «Iglesia universal del Reino de Dios», también conocida como «Pare de sufrir» de Brasil, donde el evangelio de la prosperidad y bienestar tiene un impacto en la vida política.

¿De dónde surgen estas corrientes teológicas?

Los investigadores de la fenomenología religiosa sitúan este movimiento en estados Unidos y concretamente en la figura del pastor metodista E.W. Kenyon (1867–1948) y que fue un pionero en las trasmisiones religiosas por radio en 1931 con su programa “La Iglesia de Kenyon en el Aire”. Las grabaciones y libretos de sus trasmisiones fueron el material que él utilizó para sus numerosos escritos y que constituyen su más importante legado. Su predicación principal consistía en el convencimiento de que «las realidades materiales concretas se pueden cambiar a través del poder de la fe». De lo que se concluye que «la fe puede conducir a la riqueza, a la salud y al bienestar, mientras que la falta de fe conduce a la pobreza, la enfermedad y la infelicidad».

Anteriormente, los llamados «padres peregrinos», la mayoría pertenecientes a confesiones protestantes de raíz calvinista que serían perseguidos en Europa y se refugiaron en colonias americanas de Inglaterra los siglos XVII y XVIII, imaginaron su emigración en clave de éxodo del pueblo judío hacia la Tierra Prometida. Allí promovieron un nuevo orden con separación entre la religión y el Estado, libertad religiosa y con la convicción de ser un nuevo “Pueblo de Dios” con una vocación divina de salvación universal.

Por otra parte, los grandes esfuerzos por fortalecer un país nuevo en los siglos XIX y XX llevaron a crear el American way of life basado en el American dream o convencimiento de que todo el mundo puede triunfar en la vida, si se esfuerza. Este «sueño» es la visión de una tierra y de una sociedad entendidas como un lugar de oportunidades abiertas. Históricamente fue la motivación que impulsó a lo largo de los siglos a muchos emigrantes económicos a dejar su propia tierra y a ir a los Estados Unidos para conseguir un lugar en el que su trabajo produjese resultados inalcanzables en su «viejo mundo». Así, este fenómeno, quiere ser también una tentativa de justificación teológica del neoliberalismo económico, contra el que el papa Francisco dice que «oscurece el evangelio de Cristo».

Los pilares del Evangelio de la Prosperidad

El principal impulsor de la «prosperidad evangélica» fue Kenneth Hagin (1917-2003) dentro del denominado «movimiento de la fe», quien dio una interpretación singular de algunos textos muy conocidos de la Biblia. Tal es el caso, por ejemplo, de Mc 11,23-24: «En verdad os digo que si uno dice a este monte: “Quítate y arrójate al mar”, y no duda en su corazón, sino que cree en que sucederá lo que dice, lo obtendrá. Por eso os digo: Todo cuanto pidáis en la oración, creed que os lo han concedido y lo obtendréis». Aquí están los pilares de este evangelio.

Hagin también enfatizó en que el milagro deseado se considere como ya sucedido. Es decir, se debe desplazar su realización del futuro al pasado. Para él, la fe milagrosa, para traducirse en obras, debe ser sin incertidumbres, especialmente en las cosas imposibles: debe declarar específicamente el milagro y creer que se lo obtendrá de la manera imaginada. Tanto Kenyon como Hagin comprendieron que la comunicación de masas era un instrumento fundamental para la rápida difusión de sus enseñanzas.

Otros predicadores han continuado sus enseñanzas: El primero de ellos es Kenneth Copeland, que con su programa televisivo «Believer’s Voice of Victory» ha difundido en gran parte del mundo estas doctrinas. Del mismo modo, Norman Vincent Peale (1889-1993), pastor de la Marble Collegiate Church de Nueva York, alcanzó popularidad con sus libros: El poder del pensamiento positivo; Cambia tus pensamientos y cambiará todo; Guía para una vida apacible. Peale llegó a mezclar marketing y predicación.

Las «megaiglesias» del «Evangelio diferente»

En los Estados Unidos millones de personas frecuentan asiduamente «megaiglesias» que difunden estas teologías de la prosperidad. Los predicadores, profetas y apóstoles enrolados en esta rama extrema del neopentecostalismo ocupan espacios cada vez más importantes en los medios de comunicación de masas, publican una enorme cantidad de libros que llegan a ser super ventas y pronuncian conferencias que muy a menudo llegan a millones de personas a través de todos los medios disponibles de Internet y de las redes sociales.

Joyce Meyer afirma que su programa televisivo «Enjoying everyday life» llega a dos terceras partes del mundo a través de la radio y la televisión y ha sido traducido a treinta y ocho idiomas. La predicación se centra en el bienestar económico y la salud. Al Espíritu Santo se lo reduce a un poder al servicio del bienestar individual. Jesucristo ha abandonado su papel de Señor para transformarse en un deudor de cada una de sus palabras. El Padre ha sido reducido «a una especie de botones cósmico que se ocupa de las necesidades y de los deseos de sus criaturas». Al mismo tiempo, enseñan que, tratándose de una «confesión de fe», los seguidores, con sus palabras, son responsables de lo que les sucede, trátese de la bendición o de la maldición económica, física, generacional o espiritual.

Fundamentados en una lectura literal de la Biblia, estas corrientes se sienten llamadas por Dios a la conquista y defensa de la (Nueva) Tierra Prometida y al uso, si hace falta, de la guerra, a semejanza de las conquistas del “Dios de los ejércitos” de Gedeón y de David. El mundo se tiene que dividir entre buenos y malos, y se acerca el momento de la lucha final, como interpretan que dice el Apocalipsis. El Génesis nos manda dominar la tierra al servicio de las personas y no cuidarlo ecológicamente. Así, quien es rico, sano y feliz es amado por Dios porque su fe es rotunda; quien es pobre, enfermo y desdichado no tiene bastante fe y Dios lo odia.

Por el contrario, quien es pobre tiene una doble culpa: por una parte se considera que su fe, demasiado débil, no llega a mover las manos providentes de Dios; y, por la otra, su situación de miseria es una imposición divina, un castigo que debe ser aceptado con sumisión. Y esto tiene un efecto perverso: no puede haber ningún intento de cambio social y convirtiendo a los pobres en inofensivos, a menudo explotados, indefensos, y encima culpables. No hay compasión por las personas que no son prósperas, porque, claramente, ellas no han seguido las «reglas» y, por tanto, viven en el fracaso y, consiguientemente, no son amadas por Dios.

Un Dios de «alianzas» y de «semillas»

Una de las características de estos movimientos es el énfasis que ponen en la «alianza» sellada por Dios con su pueblo. El texto de la alianza con Abraham ocupa un lugar central, en el sentido de la prosperidad que promete: Del mismo modo como los cristianos son hijos espirituales de Abraham, son también herederos de los derechos materiales, de las bendiciones financieras y de las ocupaciones territoriales terrenas. Así, «habiendo Dios establecido la alianza y estando entre los legados de esa alianza la prosperidad, el creyente debe tomar consciencia de que, hoy, la prosperidad le pertenece por derecho».

Otro concepto central de este evangelio relacionado con el anterior, es el principio de «siembra» o de «semilla», que hace referencia a Gál 6,7: «No os engañéis: de Dios nadie se burla. Lo que uno siembre, eso cosechará». Y uno de los textos preferidos es el vers. 2 de la Tercera Carta de Juan: «Querido, te deseo que la prosperidad personal de que ya gozas se extienda a todos tus asuntos, y que tengas buena salud».Y del Antiguo Testamento, el texto de referencia es Dt 28,1-14.

Pero estos pasajes son interpretados de manera totalmente funcionalista. Por ejemplo, la predicadora Gloria Copeland escribió, en referencia a donaciones para los ministerios como el suyo: «Das un dólar por amor al evangelio, y ya te tocan 100; das 10 dólares, y a cambio recibirás 1000 de regalo; das 1000 dólares, y a cambio recibes 100 000. Si donas un avión, recibirás cien veces el valor de ese avión. Regala un automóvil y obtendrás tantos automóviles que ya no tendrás necesidad de ellos durante toda la vida. Dicho brevemente, ¡Marcos 10,30 es un buen negocio!». Se valora el dar en términos de retorno de la inversión.

Un evangelio de corte neoliberal

Uno de los graves problemas que trae consigo el «evangelio de la prosperidad» es su perverso efecto en la gente pobre. Una de las conclusiones de esta teología es de naturaleza geopolítica y económica, ligada a los países de origen de la «teología de la prosperidad». Así se llega a la conclusión de que los Estados Unidos han crecido bajo la bendición del Dios providente del movimiento evangélico. En cambio, según esta teología, los habitantes del territorio que va del Río Grande hacia el Sur están hundidos en la pobreza justamente porque la Iglesia tiene una visión diferente, opuesta, que «exalta» la pobreza.

El peligro de estas ideas consiste en que los pobres que se sienten fascinados por este pseudoevangelio queden atados en un vacío sociopolítico que permite a otras fuerzas plasmar fácilmente su mundo, haciéndolos así inofensivos e indefensos. El «evangelio de la prosperidad» no es nunca un factor de cambio real, cambio que, por el contrario, es fundamental en la visión propia de la Doctrina Social de la Iglesia.

El testimonio de Jesús de Nazaret

Francisco de Asís, el trovador de Dios, captó la importancia de la Pobreza, vivida por Jesús. Se esposó con ella. Y hablar de Nazaret es hablar de humildad, servicio, amistad, fraternidad, pobreza, etc. El papa Francisco, la primera vez fue en Brasil, el 28 de julio de 2013 se dirigió a los obispos del Consejo Episcopal Latinoamericano, señalando el «funcionalismo» eclesial, que constituye «una suerte de “teología de la prosperidad” en lo organizativo de la pastoral». Esta termina entusiasmándose por la eficacia, el éxito, el resultado constatable y las estadísticas favorables. La Iglesia tiende así a asumir «modalidades empresariales» que son aberrantes y alejan del misterio de la fe».

Y hablando de nuevo a obispos, pero esta vez en Corea, en agosto de 2014, Francisco citó a Pablo (1 Cor 11,17) y a Santiago (2,17), que reprochan a las Iglesias que viven de manera tal que los pobres no se sienten en ellas en su propia casa. «Esta es una tentación de la prosperidad», comentó. Y prosiguió: «Estén atentos, porque su Iglesia es una Iglesia en prosperidad, es una gran Iglesia misionera, es una Iglesia grande. Que el diablo no siembre esta cizaña, esta tentación de quitar a los pobres de la estructura profética de la Iglesia, y les convierta en una Iglesia acomodada para acomodados, una Iglesia del bienestar… no digo hasta llegar a la “teología de la prosperidad”, no, sino de la mediocridad».

La visión de la fe propuesta por la «teología de la prosperidad» está en clara contradicción con la concepción de una humanidad marcada por el pecado y con la expectativa de una salvación escatológica, ligada a Jesucristo como Salvador y no al éxito de las propias obras. En efecto, en la exhortación apostólica Gaudete et exsultate escribió que hay cristianos empeñados en seguir el camino «de la justificación por las propias fuerzas, el de la adoración de la voluntad humana y de la propia capacidad, que se traduce en una autocomplacencia egocéntrica y elitista privada del verdadero amor». Esta se manifiesta en muchas actitudes aparentemente diferentes entre sí, entre ellas «el embeleso por las dinámicas de autoayuda y de realización autorreferencial» (n. 57).

Y en la misma exhortación el papa Francisco recuerda que el gnosticismo quiere por su propia naturaleza domesticar el misterio de Dios y de su gracia. «Usa la religión en beneficio propio, al servicio de sus elucubraciones psicológicas y mentales. Dios nos supera infinitamente, siempre es una sorpresa y no somos nosotros los que decidimos en qué circunstancia histórica encontrarlo, ya que no depende de nosotros determinar el tiempo y el lugar del encuentro». Una fe utilizada para manipular mentalmente, psíquicamente la realidad «pretende dominar la trascendencia de Dios» (n. 41). Se comprende, por tanto, que desde América lleguen ecos de querer sustituir a este papa, profeta de Dios.

Baste contemplar, como Francisco de Asís, al Niño-Dios, para darnos cuenta de que estamos hablando de otra cosa: En lugar de prosperidad, dar la vida. El camino que recorrió el Pobre por excelencia, desde Belén-Nazaret a el Calvario. En el Evangelio de la Navidad descubrimos como los pastores en la noche estrellada, el valor del silencio, de la contemplación, de la sencillez, la humildad y la pobreza. Se dice que Nazaret no es tan solo un lugar, sino «que es también un tiempo, el gran tiempo del silencio. En ningún otro lugar adquieren tanto peso y tanta fuerza la duración de las emociones silenciosas»; donde destaca la figura de José, el padre adoptivo de Jesús, que es «el patriarca del silencio» y la vida de Nazaret, es decir, «de humildad, de pobreza, de trabajo, de obediencia, de caridad, de recogimiento y de contemplación».

Y aquí viene una anotación importante para la Iglesia, esposa de Cristo. Si la Iglesia quiere responder a su llamada, si quiere ser fiel a su Maestro, tiene que ser pobre y utilizar siempre los medios pobres a todos los niveles: El lugar de reunión de los cristianos, la liturgia, los medios para la evangelización, nuestras residencias, etc. Resuena aquí el «Pacto de las Catacumbas» que en tantas cosas está por estrenar.

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2. Santo Daime: así se usa la ayahuasca “espiritualmente”.

FUENTE: Aleteia

 

 

Un joven español relata cómo vivió la experiencia del consumo ritual de la ayahuasca, sustancia alucinógena que cada vez está más de moda en los países occidentales en general. Lo cuenta en este artículo, que ha publicado el portal Aleteia, Luis Santamaría, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES).

España es el país europeo donde más rituales se producen con el consumo de esta droga, por la permisividad y poco control de entrada en los aeropuertos españoles, en gran medida por el desconocimiento por parte de las fuerzas de seguridad y por la falta de sensibilización de jueces y fiscales ante este problema.

Una sustancia considerada tóxica

En España la enredadera ayahuasca (Banisteriopsis caapi) y sus preparados están incluidos en la lista de plantas cuya venta al público está prohibida o restringida debido a su toxicidad, según la Orden SCO/190/2004. Por otro lado, de acuerdo con el Real Decreto 2829/1977, el DMT (que se encuentra en Psychoria viridis y Diplopterys cabrerana) se encuentra en la Lista I de sustancias cuyo “uso, la fabricación, importación, exportación, tránsito, comercio, distribución y tenencia, así como la inclusión en todo preparado” se encuentran prohibidos, excepto para fines científicos.

Habitualmente, no se trata de una droga de uso recreativo, sino que su consumo y promoción crecientes están vinculados a la espiritualidad y al crecimiento personal en la órbita de la Nueva Era (New Age). De hecho, sus defensores afirman que no se trata de una sustancia alucinógena, sino enteógena, es decir, para ponerse en contacto con la propia divinidad.

“Entidad religiosa” legal en España

Aunque el goteo de muertes en torno al consumo de ayahuasca es constante, la tónica general en los medios de comunicación es de informaciones positivas que van creando una “buena prensa” de la infusión también conocida como “yagé”. ¿Dónde están las víctimas? ¿Qué es lo que dicen? Escuchemos a una de las primeras víctimas españolas que se atreve a contar su experiencia. Esta es la historia de Nacho (nombre figurado), un joven español de 35 años que participó en la Iglesia del Santo Daime y consumió la ayahuasca proporcionada por esta organización.

Antes de continuar, cabe destacar que la Iglesia del Santo Daime de España fue incluida en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia en 2003, y en sus estatutos aprobados dicen que utilizan como sacramento una sustancia denominada “Daime”. Pero cabe dudar que en el Registro tuvieran pleno conocimiento de que lo que hay bajo este nombre, pues en ningún momento esos estatutos detallan que es una sustancia alucinógena que procede de Brasil y que entra en España de forma ilegal, atentando contra la salud pública.

El encuentro con el chamán

Los hechos sucedieron en el verano del año 2018. Nacho estaba en un momento especialmente delicado de su vida, con un fuerte sentimiento de soledad tras una experiencia traumática. Un amigo suyo, consciente de su situación personal, le habla “sobre un lugar donde hacer tomas de ayahuasca, más baratas que en otros sitios, y que él ya había probado”. La oferta no podía ser más atrayente: si el precio normal por toma era de unos 400 euros, en el Santo Daime podría “probarla” por 60.

Su amigo se encargó de organizar un grupo para una toma de ayahuasca e invitó a Nacho, que tuvo que reunirse previamente con el chamán –así se presentó este miembro de la Iglesia del Santo Daime–, que es quien determina quién puede participar y quién no. La reunión tuvo lugar en el porche de un chalé ubicado en el término municipal de El Álamo (Madrid), que afirmaron que pertenecía al grupo religioso y que era también la residencia familiar del chamán… aunque no aparece en el listado de “lugares de culto” registrados en el Ministerio de Justicia.

La impresión inicial de Nacho fue positiva: “además del chamán y su mujer había otras personas que entraban y salían. No parecía que hubiera ninguna jerarquía”, y sobre su anfitrión dice que “aparentemente creía en lo que decía; no transmitía que fuera un negocio, sino que lo hace por ayudar”.

La “sesión informativa”

En este encuentro primero, necesario para poder participar después en la ceremonia, Nacho se enteró de que hay dos tipos de tomas: “por un lado, para personas externas que quieran experimentar, estos rituales se llaman ‘vuelos del águila’, sin especificar el precio; por otro, los rituales del Santo Daime, una experiencia más ‘espiritual’ y apta sólo para los ‘elegidos’, de la que no dijeron precio ni condiciones”.

A continuación vino el interrogatorio: Nacho tuvo que dar su nombre –aunque no le pidieron documento ni identidad– y responder a cuestiones sobre su motivación para probar la ayahuasca, sus expectativas, si era una persona espiritual, si tomaba antidepresivos –”de ser afirmativo, no eres apto… aunque nadie comprobaba de verdad si se toman o no”–… No hubo ninguna pregunta sobre posibles experiencias traumáticas o sobre la vulnerabilidad de la persona, enfermedades cardiovasculares, etc.

El chamán, en esta ocasión, aprovechó para dar su “testimonio” como persona espiritual que comenzó practicando yoga, y que al leer una noticia negativa sobre el Santo Daime se sintió atraído y tiempo después acabó formando parte del grupo. “Aseguró haber estado muy perdido hace años, a punto incluso de perder su trabajo, pero finalmente lo conservó”. Nacho percibió que el chamán “parecía confiado en la legalidad de lo que hace”, aunque pidió discreción con respecto a la ceremonia, “consciente de que lo difícil es traer la ayahuasca a España”.

Cada vez que se refería a esto –a la entrada ilegal de la droga en el país– decía que “nos la trae la iglesia de Brasil”. A continuación vinieron las instrucciones para la toma: acudir vestidos de blanco (“símbolo de pureza”), en ayunas (un mínimo de 4 horas) y con saco de dormir (ya que allí se les darían esterillas). Además, Nacho pudo saber que en la noche del rito –que duraría desde las 23 horas hasta las 8 del día siguiente– tomaría la ayahuasca 3 veces… y entre las tomas le ofrecerían “otras sustancias, que ese día se nos explicaría cuáles eran, y podríamos elegir si queríamos tomarlas”.

No sólo eso: el chamán comentó los “beneficios para la salud” de la ayahuasca, añadiendo que “en Brasil, hasta los niños la toman”. Su ingestión, además, “puede hacerte sentir como juez de tus acciones, ya que experimentas la salida de tu propio cuerpo y así puedes juzgar las situaciones que has vivido”.

La noche de la toma

Unos días después, tuvo lugar la ceremonia. A la llegada, los miembros de la Iglesia del Santo Daime pidieron los datos personales de Nacho y de los demás asistentes, y les indicaron el precio. “Es el momento en el que descubres que cuesta 60 euros”, explica, “aunque aseguran no cobrar por la ayahuasca, que vale mucho más por el hecho de traerla de Brasil… los 60 euros son en concepto de gastos por las instalaciones, la esterilla, etc.”.

La toma se hizo en el jardín, sin entrar en ningún momento en la casa. Incluso “había baños portátiles instalados en el jardín”. Durante toda la preparación “los niños de la casa estaban presentes, pero en el comienzo de la toma entraron en ella y ya no volvieron a salir”. En el jardín había un altar donde se situaron el chamán y su mujer, junto a otras personas del grupo. Algunos tocaban instrumentos musicales y cantaban “canciones en bucle autorizadas por el Santo Daime”. Frente a ellos había una hoguera y, situados en semicírculo alrededor, los asistentes, cerca de 20.

La experiencia alucinógena

Nacho, al igual que los demás, se puso en una fila para hacer su primera toma de ayahuasca. “En las siguientes tomas, cuando algunos de los asistentes habían entrado en ‘trance’, eran los miembros del altar los que se acercaban a darles la ayahuasca. Siempre se tomaba ‘voluntariamente’, aunque resultaba complicado decidir libremente después de que hiciera efecto”, afirma.

A lo largo de la noche “cuando los participantes estábamos tumbados en las esterillas y en estado de ‘trance’, pasaron varias personas entre nosotros imitando el ruido de animales, para emular que nos encontrábamos en la selva”. Entre la primera y la segunda toma, “pasaron ofreciendo otra sustancia alternativa y voluntaria: era un colirio extraído de un sapo, cuyo efecto sería similar al de las setas alucinógenas. La mayoría de los presentes lo usaron”.

Aunque las dosis que le dieron a Nacho, por ser su primera vez, fueron pequeñas, la segunda le afectó más y vomitó. “El chamán se acercó a mí para felicitarme porque había expulsado lo negativo”. Lo que sucedió a continuación lo recuerda así: “me vi a mí mismo hablándole a otra persona, que era también yo, reprochándome muy duramente el no visitar a un familiar gravemente enfermo, insultándome por no haber actuado bien”.

Además, explica, “en aquel momento tuve recuerdos muy lúcidos de mi niñez. Una experiencia similar a la de que tu vida pase frente a ti de una manera muy rápida y con visiones rápidas”. Entre la segunda y la tercera toma de ayahuasca pasaron ofreciendo rapé (tabaco puro que soplan sobre la cara y debe respirarse). A mitad de la noche realizaron un ritual donde “los asistentes tirábamos nuestros sentimientos negativos a la hoguera”.

En aquel momento de gran emocionalidad grupal con cantos, “varias personas entraron en trance, y una estuvo a punto de caerse en la hoguera. Yo sentí miedo entonces por la percepción de pérdida de control y la intensidad del momento”, dice Nacho. Llegó el momento de la tercera toma de ayahuasca, y después se ofreció fumar marihuana. “Una vez finalizadas las 3 tomas, hubo personas que pidieron más ayahuasca, y se la dieron”, recuerda. “Durante la noche todos tomaron ayahuasca. Todos. Incluidos el chamán y su mujer. No hubo nadie que no la consumiera y que pudiera tener control sobre la situación”, reflexiona.

¿Y después de la ceremonia?

Tras las tomas, los participantes más “veteranos” se acercaron a Nacho y a los demás recién llegados, preguntándoles por la experiencia, preocupándose por cómo estaban… “Nos sentimos muy arropados por el grupo”, recuerda ahora. Nacho se dio cuenta de que a él no lo llamaron, pero sí a un amigo suyo que había pertenecido a otros grupos similares y tenía un carácter más “espiritual”. De hecho, el chamán “le había invitado a participar en rituales de la Iglesia del Santo Daime, lo que conlleva una espiritualidad mayor”.

Su percepción de grupo sectario se había iniciado desde el primer contacto con el chamán, “cuando alguien asevera de forma tan innegablemente que algo te puede cambiar la vida de una forma que parece como si sólo fuera esa la verdad absoluta”. Un mensaje que “se repite de una forma constante mientras dura la experiencia”. Y eso lo vio confirmado “cuando contactaron con algunos después del ritual para ofrecerles algo todavía más espiritual”, y de esta forma se dio cuenta de que el ritual al que había acudido –el “vuelo del águila”– “sirve como medio de captación de adeptos para nutrir la Iglesia del Santo Daime. En ella “sólo entran los elegidos, los que ellos consideran que están preparados espiritualmente para formar parte de la misma o recorrer el camino de integración en una secta”, concluye Nacho.

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3. Una psicóloga española muestra las semejanzas entre la adicción a drogas y las sectas.

FUENTE: Independientes

 

 

Con el título “Similitudes entre drogodependencia y adicción sectaria”, la psicóloga malagueña Ana Castaño ha publicado un artículo en la revista Independientes, especializada en adicciones. Lo recogemos a continuación.

La adicción sectaria hace referencia a la necesidad de vinculación con una secta destructiva por parte de una persona que ha sido manipulada psicológicamente por del líder de su grupo. Podríamos decir que la secta es la “sustancia” a la que recurren los sectadependientes, por lo que existen bastantes similitudes entre este y otros problemas adictivos.

Por ejemplo, uno de los factores que facilitan la dependencia a las drogas o a las sectas es la búsqueda de placer y nuevas experiencias. El padecimiento de ansiedad y otros tipos de psicopatologías, así como el sentimiento de rechazo por parte de la sociedad también se relacionan con el desarrollo de problemas adictivos. Así, la atracción por experimentar estados de trance y la necesidad de paliar el dolor emocional (ruptura amorosa, desempleo, pérdida de un ser querido, etc.) pueden facilitar también su aparición.

Por otra parte, pertenecer a un ambiente familiar desestructurado o inestable está muy relacionado con el acercamiento a sustancias adictivas y grupos sectarios, si bien no es condición indispensable para que esto ocurra.

Tanto las drogas como las sectas constituyen una vía de escape para aquellas personas que necesitan huir de una realidad en la que no se encuentran cómodas, o bien suponen una alternativa para quienes sienten insatisfacción y buscan “algo más”. Lo que queda claro, es que los factores de vulnerabilidad en ambos tipos de adicción tienen que ver, por una parte, con las circunstancias que rodean a la persona y, por otra, con sus características psicológicas. En ambos casos, la población vulnerable responde a un perfil similar.

Puesto que el consumo esporádico de una sustancia no implica necesariamente una adicción, ni tampoco el encuentro casual o la simpatía hacía un determinado grupo manipulativo; es importante entender la dependencia como un proceso. Para hablar de drogodependencia o adicción sectaria tiene que haberse producido un cambio entre el deseo de probar y la necesidad de hacerlo. En ambos contextos, el interés por el acercamiento surge cuando el grupo/sustancia se presenta como algo atractivo para la persona. Es entonces cuando esta corre el riesgo de dejarse “seducir” por los efectos que derivan de esta vinculación.

La drogadicción suele estar condicionada por el fácil acceso a las sustancias adictivas y por la normalización del consumo en el entorno cercano, entre otros factores. No obstante, la mayoría de consumidores poseen información sobre las posibles consecuencias negativas del abuso y conocen el riesgo en cuanto al desarrollo de problemas adictivos. A diferencia de ello, ninguna persona que sienta interés por un grupo sectario es conocedora (al menos a priori) de las intenciones reales del grupo, son engañadas desde el inicio y manipuladas hasta perder su identidad y autonomía. El objetivo de la secta es conseguir que el adepto abandone su vida anterior y se dedique en cuerpo y alma a cumplir los objetivos del grupo, por lo que la pérdida de vínculos afectivos es frecuente.

El verdadero peligro de la adicción sectaria es la dificultad para que la persona reaccione y perciba lo perjudicial de su relación con el grupo. No sólo es incapaz de identificar el abuso psicológico sufrido, sino que entiende la pertenencia a la secta en términos positivos: “¿Por qué abandonar algo que es bueno para mí?”, de ahí la necesidad de seguir informando sobre este fenómeno tan desconocido.

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4. Ex adepto español de los testigos de Jehová: “ponen en contra hasta tu propia familia”.

FUENTE: La Voz del Sur

 

 

Mikel Nájera Lorenzo fue expulsado de una congregación de los testigos de Jehová en Jerez de la Frontera (Cádiz, España) tras un juicio interno “cruel” y por un pecado que, diez años después, le devolvió su vida. “Tuve que resetearme por dentro, sigo yendo al psicólogo”, declara. Esta entrevista, publicada por La Voz del Sur, se la ha realizado Paco Sánchez Múgica.

—¿Ahora crees en Dios?

—No. Ahora no creo. No creo en Dios, ni en la Biblia.

—¿Por tu expulsión?

—Ahora veo que, por ejemplo, la Biblia tipifica la fornicación, la homosexualidad, el adulterio… como pecados sexuales, pero curiosamente no pone en ninguna parte que tener relaciones con un menor sea pecado. Incluso pone que el Rey David tenía concubinas muy jóvenes. Qué curioso que te digan un espectro de supuestos pecados sexuales y que de los abusos a menores no se diga nada. Conozco ahí dentro homosexuales que se han visto obligados a casarse o que han estado a punto de suicidarse. Les decían que podían cambiar…

Mikel Nájera Lorenzo, con 39 años, renació hace nueve. En los 29 años anteriores solo encuentra un gran vacío y una gran pregunta que revela su mirada: “¿Cómo no me di cuenta de esto…?”. Una enorme interrogante que no desaparece cuando da el primer mordisco a su tostada de jamón y sorbe el primer trago de café. Hace mucho frío este comienzo de enero. Ha pasado una parte de las vacaciones de Navidad en Andalucía, con los amigos que ha podido ir haciendo en estos años. No tiene pareja en la actualidad, pero podría tenerla, mantener relaciones sexuales, y no tener que casarse con ella.

Cerca de donde hemos quedado, hay un tenderete con revistas y folletos en los que puede leerse: ¿Conoces la Biblia? ¿Quieres una familia feliz? Mikel ahora está acabando la carrera de Ingeniería Informática porque hasta hace no mucho tener estudios superiores le estaba vetado. Este año ha podido comerse las uvas y, si quiere, el 7 de julio estará en el chupinazo para festejar, como buen pamplonica que es, los Sanfermines. El 11 de abril cumplirá 40 años. Mikel celebró su primer cumpleaños a los 30. Antes de eso, solo hay una elipsis y una enorme y devastadora pregunta: “¿Cómo no me di cuenta antes…?.

Antes de poder celebrar su cumpleaños o hacer el amor libremente, Mikel es captado a los cuatro años por los testigos de Jehová. El primero que entra es su hermano mayor. Luego su madre. Luego él, muy pequeño, “me adoctrinaron desde pequeñico, nunca conocí otra cosa”. A su padre, que murió cuando Mikel tenía 18 años, nunca le convencieron, aunque “por amor a mi madre acudía de vez en cuando a las reuniones en el Salón del Reino”. También les prestó alguna vez dinero, “siempre sacan algo”.

“Yo seguía todo a rajatabla, picaba las puertas (la típica imagen del testigo tratando de captar adeptos), hacía los estudios, iba a las reuniones…, te tienen muy, muy entretenido, hacen que estés muy ocupado para controlar tu forma de vida y que no tengas tiempo para pensar. Cuanto menos cuestiones, mejor”, relata en una céntrica cafetería de Jerez, donde da los últimos coletazos a las vacaciones con sus amigos para regresar a su puesto de trabajo en un instituto de FP de Pamplona.

Pronto hará diez años que Mikel fue expulsado de los testigos de Jehová. Mikel se casó virgen a los 25 años. Contrajo matrimonio en 2005 con una chica sevillana que, claro está, era testigo de Jehová. Ambos vivieron un año en Jerez. El padre de la chica trabajaba en El Puerto y era anciano en la congregación Norte jerezana. En esta ciudad del sur de Andalucía, donde los testigos llevan implantados más de medio siglo, hay alrededor de 600 adeptos. Anciano es el máximo estatus que puede tener un adepto en la congregación. Son una especie de líderes que, como en su caso, deciden si te destruyen y te expulsan. El hermano de Mikel ha llegado a anciano. Lleva diez años sin dirigirle la palabra. Ni él, ni su mujer, ni sus dos hijos.

—¿Cuándo se dio cuenta?

—En 2009. Es un tema bastante duro. Me hacen un comité judicial. Si cometes un pecado, que en mi caso fue ser infiel a la que era mi mujer, te sientes tan mal —Jehová “escudriña tu corazón y tu cabeza”— que te ves obligado moralmente a decir lo que has hecho; y ellos fueron extremadamente crueles…

—¿Quiénes?

—En mi caso, un comité judicial con cinco ancianos. Me encerraron a solas en el Salón del Reino y me hicieron una batería de preguntas abusivas: qué había hecho, qué posturas sexuales, qué había dejado de hacer… Esa parte de la religión no la había visto y me impactó. Se predica el amor y, de repente, me encuentro con una encerrona en la que no puedes ni defenderte. Lo pasé fatal, y me acabaron expulsando de la congregación, advirtiéndome: “Vuelve pronto porque si llega el Armagedón serás destruido”.

Acudimos a Wikipedia para ver si el milenarismo va a llegar. “Los Testigos de Jehová son una denominación cristiana milenarista y restauracionista con creencias antitrinitaristas distintas a las vertientes principales del cristianismo”. Santifican a Jehová, Jesucristo ya reina en la tierra, y rechazan el símbolo de la Cruz o la adoración de imágenes o fiestas de origen pagano. No hay infierno, solo el advenimiento del Armagedón que, paradójicamente, solo salvará a unos 144.000 ungidos, los testigos más especiales. Su entidad jurídica —la madre del cordero—, la Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania, fue fundada en 1881 por Charles Taze Russell, quien la presidió hasta su muerte, en 1916.

Según sus publicaciones oficiales, en la actualidad es dirigida por un Cuerpo Gobernante desde su sede principal en Warwick, Nueva York. Sus publicaciones se distribuyen en 240 países y cuentan con 8,4 millones de publicadores activos. Es ingente su patrimonio inmobiliario a base de construir y revender Salones del Reino que sufragan sus abnegados testigos. En El lado cómico de la Watchtower, John Henry Kurtz, su autor, trata de “abrir los ojos a los ciegos”. La confesión religiosa de los testigos cristianos de Jehová, desde su reconocimiento oficial en España en el año 1970 hasta el presente, no ha presentado un balance financiero a sus miembros, según diferentes publicaciones.

Lo peor para Mikel no llega con la culpa, los remordimientos, la humillación. Lo peor es la expulsión. El desierto. “Es un tema bastante cruel porque si te expulsan de la congregación, lo anuncian y todos los miembros de la congregación ya no pueden hablarte, ni te saludan, salvo que vuelvas, y volver es estar unos meses soportando en las reuniones que nadie te hable o te desprecien”.

—¿Contemplan el perdón?

—El perdón lo contemplan, pero con un severo castigo de exclusión social. Te dicen que como testigo solo puedes moverte y tener amistades que sean testigos de Jehová, por lo que si te echan lo pierdes absolutamente todo. Los ves en la calle y son personas amables, educadas, pero el control interno es muy férreo, muy totalitario, es sumisión total. Incluso mi hermano, que es anciano y no quiere perder su estatus, no me habla a día de hoy. Lleva diez años sin hablarme, ponen en contra hasta a tu propia familia.

—¿Y su madre le habla?

—Mi madre es testigo pero no es tan radical, aunque la relación se vio afectada. Mi hermano y su familia, en cambio, son como extraños. Cuando me echaron, no tenía a nadie con quien tomar café, no tenía amigos fuera. Estaba muy mal visto que tuvieras relaciones con quien no fuera testigo. A mi madre tengo que agradecerle que no fuera fanática y me siguiera hablando. Hay fanatismo. No todos lo son, pero sí hay mucho fanático, hasta el punto de preferir morir antes de que le hagan una transfusión de sangre.

—¿O que mueran sus hijos antes que eso?

—Eso es real, lo que pasa que ya la Justicia actúa y obliga al médico a hacer la transfusión necesaria. Pero es un auténtico conflicto, tienen un comité específicamente para eso. Si está consciente el enfermo y duda, van a presionar al médico y al adepto para que no se ponga sangre. Es terrible.

—¿Qué pasa cuando lo expulsan?

—Cuando me expulsaron me di cuenta del tiempo que me habían robado, no era consciente, tenía mucho libre. El día a día es estar muy ocupado, vas a varias reuniones a la semana, haces estudios personales, predicas un número de horas (para que estés bien visto dentro de esa presión social tienes que hacer unas doce horas semanales de picar puertas), estudias libros y revistas que llegan casi cada semana, compartes esos conocimientos con tu familia… Al final, si controlas la información de una persona, controlas a ese individuo. Cuando me echaron me puse a leer… vi que me habían engañado, fue terrible. Me sentía estúpido al ver que era tan obvio el engaño. Aquí intentan tenerte como un esclavo, es un chollo para la organización, consumes sus productos y los distribuyes, captando a más gente para hacer la misma labor que tú. De todo eso te empapas y convierten eso en tu modo de vida, no es una opción, tu vida se basa en eso, en la adoración de Jehová. No hay testigo no practicante.

—¿Hablamos de una secta?

—Tienen una apariencia muy amable, pero es una secta coercitiva totalmente. Llegaron a España en los 70 y se constituyeron como religión por tener un número de adeptos, pero si ves las pautas son las de una secta de manual: dependencia hacia el grupo, control mental y de la información, no puedes cuestionar al líder…

Desde dentro, en un reportaje publicado años atrás por La Voz del Sur sobre los testigos de Jehová en Jerez, rechazan esta consideración: “La terminología de secta significa personas que están siguiendo un líder, un líder humano se entiende, por lo que está fuera de contexto. Nada de eso coincide con lo que somos nosotros”. Hablando de la homosexualidad, en la misma pieza, aseguran: “La homosexualidad no tiene ningún fundamento bíblico que lo justifique. La conducta homosexual, al igual que el matrimonio entre personas del mismo sexo, no tiene base bíblica. Es incompatible en absoluto con la forma de vida del cristiano”.

—¿Nunca tuvo dudas antes del juicio y la expulsión?

—Antes del juicio nunca tuve dudas, estaba adoctrinado, era un autómata, no cuestionaba nada. He aprendido con terapia a cuestionar. Tienes que destruir lo que tienes en tu mente y volver a construirlo. Aunque dejes la organización, estás anulado; me pillaron de niño y me educaron en eso. Ahora más o menos estoy bien, pero gracias a la terapia. Porque volví a Pamplona e hice un amago de volver. Fui a las reuniones, no me hablaba nadie, intenté volver, me llamaron a través de mi madre. Estaba tan solo y tan hecho polvo que lo intenté. Cada cuatro o cinco meses hacen una asamblea, me dijeron que fuera —es muchísima gente y nadie me va a hablar, pensó—. Fue muy desagradable, todo palos. Te maltratan, pero dicen que te comprenden y que te dan la solución. Es el rollo de siempre. En la asamblea, ni siquiera mi hermano me dirigió la palabra, fue humillante. Y ahí dije que aquello era un infierno inaguantable y nunca más volví.

Mikel tuvo que reactivar su vida “poco a poco”. “Intentando socializar sin saber porque es como si te dejaran en medio del desierto. En el Salón del Reino lo tenía todo. Empecé la terapia y traté de ser una persona normal. Aún sigo yendo una vez al mes al psicólogo. Ha sido romper todo y volver a construir, como resetearte por dentro”.

—¿Cómo se siente ahora?

—Me siento muy realizado, pese a que ha sido muy complicado. Tuve que asumir con 35 años que me habían engañado, y eso es muy duro. No está constituido pero estoy en un grupo de ex testigos de Jehová a nivel nacional: tenemos un grupo de WhatsApp, hacemos quedadas, derivamos a gente que viene mal a psicólogos, le contamos nuestra experiencia… Nos hemos salvado de un auténtico infierno. Personalmente, tengo amigos y llevo una vida normal, me encuentro bien, y ese es el mensaje que quiero dar, que puedes estar bien, que no hay peligro como te advierten. Sé que hay gente que tiene dudas; si me leen será un empujón para que sean capaces. Cada vez salen más. Internet ha facilitado las cosas a quienes dudan. Yo estoy contento. Es como si sales de una cárcel, me siento liberado, ya no me siento culpable; puedo tener una novia y no me tengo por qué casar.

Mikel cuenta que hay quien lleva doble vida siendo testigo. Pueden expulsarte si fumas o si eres homosexual y, como ha habido casos, “no te casas con una mujer o no haces nada por cambiar”. Sin embargo, si conoces un caso de abuso sexual o de abuso a menores ahí dentro, olvídate de acudir a la Policía a denunciar. “No quieren escándalos, no quieren dañar la marca, por lo que ya ellos se encargan a nivel interno de abordar el asunto”. Cuando picas puertas, cuenta Mikel, hay rechazo y “portazos”, pero “se aprovechan de los vulnerables, de quienes por ejemplo ha perdido a un ser querido. Cuando llegas por primera vez al Salón del Reino es una bomba de amor, conoces a sesenta personas en media hora, todas te agasajan, todas te animan. Es un subidón. Pero luego llegan los palos. Hay tantas restricciones que a lo largo de tu vida, en alguna caes”.

¿Cómo no me di yo cuenta de esto?, disparan los ojos de Mikel, que habla pausadamente, como con algo siempre en su cabeza rondando. “No piensas, pero ahora me siento bien y realizado, me gusta mucho ayudar a la gente que sale, que lo hace muy machacada psicológicamente. Me hace sentir bien contar mi experiencia e ir ayudando. Me gustaría escribir un libro contando mi experiencia”.

—¿Está en contra de la religión?

—Adorar a Buda está muy bien, pero que sea una opción de vida voluntaria, que no te coaccionen, que no tengas que pagar este precio tan alto. Vas a la Iglesia el domingo solo si quieres…

El 11 de abril Mikel cumplirá 40 años. Volverá a celebrarlo. El Armagedón no habrá llegado. “Han dado tantas fechas… ya lo último que dicen es que será inminente”.

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5. Un documental revela posibles prácticas de envenenamiento por parte del líder de Nxivm.

FUENTE: Tribuna

 

 

Investigation Discovery (ID) transmitió el pasado mes de diciembre el documental “Las mujeres perdidas de Nxivm”, del investigador Frank Parlato. Según explica Eduardo Rivera Castro en el medio mexicano Tribuna, Parlato explora el papel del líder de la secta, Keith Raniere, de 59 años, en el envenenamiento de cuatro de sus ex compañeras de cuarto que contrajeron varias formas de cáncer.

En el documental, una de las mujeres, que sobrevivió al cáncer de vejiga después de vivir con Raniere durante años en su condominio en Halfmoon, Nueva York, presentó una muestra de cabello al experto forense Jason Kolowski. Los resultados mostraron que la mujer, que pidió permanecer en el anonimato, tenía rastros “significativamente más altos” de “metales pesados” conocidos como bario y bismuto de lo que se considera normal.

Las polémicas novias de Raniere, Barbara Jeske y Pam Cafritz, murieron de cáncer cerebral y renal, respectivamente. Kristin Keeffe, ex miembro de Nxium, sobrevivió al cáncer de cuello uterino después de tener una relación con Raniere. Los residentes que aún viven en el vecindario donde ocurrió la supuesta intoxicación están “aterrorizados”, según reportó la cadena Fox.

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6. Osho: el gurú de los Rolls Royce.

FUENTE: Car

 

 

Este mes de enero se cumplen 30 años de la muerte de Bhagwan Shree Rajneesh (1931-1990), hoy más conocido como Osho. Para los no iniciados en la meditación y en las filosofías orientales, el gurú indio está de actualidad porque Netflix ofrece desde hace tiempo la serie documental Wild Wild Country. En seis capítulos se cuenta la turbulenta historia de Osho y su comuna de seguidores en un rancho de Oregón (EE.UU.). Lo cuenta Guillermo Rodriguez Lahoz en la revista Car, especializada en temas automovilísticos (de ahí la orientación del artículo, que reproducimos a continuación).

Hace más de treinta años yo era un chaval que leía revistas de coches, y aún recuerdo cómo me impactó la foto de todos aquellos Rolls-Royce aparcados en batería. Bhagwan llegó a poseer más de noventa. Tengo un tío que es indio británico, así que le he preguntado sobre Osho y esto es lo que me ha dicho: “Todos esos se dedican a llevarse la pasta y a cepillarse a las turistas extranjeras que buscan experiencias trascendentales”. Pero mi tío Ranjiti es un escéptico que sólo cree en el whisky Macallan, de modo que quizá no es el experto que estaba buscando.

El documental de Netflix es muy interesante y describe el proceso que llevó a Bhagwan –pasó a llamarse Osho al final de su vida– y sus seguidores a trasladarse desde la India a un rancho de Oregón. Lo más criticable de la serie es que no profundiza en las ideas de Osho, que al fin y al cabo son la clave sobre la que se construyó todo. ¿Cuáles fueron las poderosas razones que hicieron que miles de occidentales, muchos de ellos profesionales de éxito, lo dejaran todo para ir a vivir en su comuna?

Bhagwan nació en 1931 en un pequeño pueblo. Sus padres se casaron con 7 y 10 años, tuvieron 11 hijos y él se crió con su abuelo. Siempre le quiso mucho, un hombre sin formación y ateo que disfrutó de la vida, y que según Osho le dio lo más importante, amor con libertad. “Si tienes eso eres un rey o una reina, ese es el verdadero reino de Dios”.

Nuestro protagonista fue un rebelde con una mente prodigiosa, y en el colegio ponía en aprietos a los profesores con sus reflexiones. Quiso estudiar filosofía por una curiosa razón: “Voy a luchar toda mi vida contra los filósofos, debo saber todo sobre ellos”. Pasaba mucho tiempo meditando y sus padres estaban preocupados. “Pensaban que no iba a ser bueno en nada, y estaban en lo cierto”. En los años sesenta se hizo profesor de filosofía y viajó por la India dando charlas y debatiendo con líderes religiosos. Visitó iglesias, mezquitas o templos hindúes.

Llevaba unas chanclas de madera, vestía con una especie de pareo y solía salir a pasear sin paraguas cuando llovía. “Un hombre que nunca ha andado bajo la lluvia, entre los árboles, no puede entender la poesía”, decía. Fundó una pequeña escuela de meditación a la que acudían estudiantes y profesores. “No dejaré de intentar que la gente despierte”. La esencia de su doctrina estaba en la práctica de la meditación como medio para alcanzar un nuevo nivel de conciencia.

El gurú del sexo

En contra de la religión, sus ideas eran, como poco, controvertidas, y en India le bautizaron con el gurú del sexo: “No quiero ser asociado de ninguna manera con la palabra religión. Toda la historia de la religión apesta. Es la misma historia repetida por todas las religiones del mundo: el hombre explotado en nombre de Dios”. Osho también era avanzado porque defendía los derechos de las mujeres y los homosexuales, en un país como la India y en unos tiempos en los que no estaban tan reconocidos como en la actualidad. En 1980 fue atacado con un cuchillo por un fundamentalista hindú.

En la India daba charlas en estadios donde iban a verle 20.000 o 30.000 personas, y se desplazaba en un Mercedes con chófer. Tras el atentado que sufrió, compraron un Rolls Silver Wraith (derivado del Shadow) limusina blindado. El propio Bhagwan recordaba que esa fue la primera vez que la prensa se acordó de él. En 1978 decía: “He trabajado durante veinte años. Miles de personas han transformado su vida, millones de personas me han escuchado y leído, y The Times of India nunca había publicado un artículo sobre mí. Pero el día que compramos el coche sacaron un gran artículo, ¡sobre el coche, no sobre mí!”.

Osho tenía respuesta para todo, y también una cara bastante dura: “Me preguntan por qué no puedo llevar una vida sencilla, y les respondo que mi vida es absolutamente simple. Tan simple que siempre estoy satisfecho con las mejores cosas. En una frase lo puedo decir: lo mejor. No hay complicación en ello. No me importa cuánto cuesta, quiero calidad, no cantidad. Para ellos, si alguien es un santo, debe vivir en la pobreza. Eso es una especie de masoquismo, debe torturarse a sí mismo. Vivir religiosamente significa vivir con alegría, vivir con meditación. Significa vivir esta vida como un regalo de Dios”.

En busca de una nueva sede en EE.UU. siempre fue conocido entre la gente como “el gurú de los Rolls”. A mediados de 1981 un grupo de sus seguidores encabezados por Sheela, su secretaria personal, viajaron desde India a EE.UU. para buscar un lugar donde asentarse y montar su nuevo “cuartel general”. Eligieron un rancho en una zona desértica de Oregón, a unos 200 km al sur de Portland.

Allí se trasladaron sus seguidores –conocidos como rajneeshees–, que en poco más de un año construyeron casas, carreteras, edificios, una central eléctrica y un pequeño aeropuerto. Hasta pizzería y tienda de ropa, aunque la oferta de colores era más bien limitada. Llegaron a vivir allí varios miles. Según las leyes de EE.UU. un grupo de al menos 150 personas –muchos seguidores eran estadounidenses– pueden fundar una ciudad, y la llamaron Rajneeshpuram. El flujo de dinero era constante y no solo de sus seguidores americanos, porque también había comunas en India, Australia, Italia, Alemania, Holanda, Suiza y Portugal.

Bhagwan llegó a la comuna al volante de un Rolls Camargue azul, el cupé diseñado por Pininfarina sobre la base mecánica del Shadow. Cuando los rajneeshees comenzaron a instalarse en Oregón, los habitantes de aquella zona veían pasar los camiones con casas prefabricadas, y en los periódicos locales se leía: “El gurú de los ricos ha comprado un rancho en Antelope”. Antelope era un pequeño pueblo que estaba a unos 30 km de la comuna. Los informativos locales contaban cómo sus seguidores se reunían a las dos de la tarde para ver pasar a su líder en un Rolls-Royce. Cubrían su coche de flores, y sus seguidoras lloraban de emoción cuando las miraba y las sonreía. Él les decía cosas como: “Si amas una flor no te la lleves. Porque entonces morirá y dejará de ser lo que tu amas. Si amas una flor, déjala ser. El amor no es posesión. El amor es una cuestión de estima, de apreciación”.

El gurú hablaba pausadamente, con una mirada hipnótica y apenas parpadeaba. En el video Hacer el amor, una experiencia sagrada, da instrucciones de todo tipo a los amantes, tanto respecto a “ir limpio al amor como quien va a un templo”, como a no tener prisa. Sin embargo sus detractores consideraban que Bhagwan fascinaba a sus seguidores con su brillante intelectualización de la religión, y que manipuló la unión sexual tántrica (mística) hasta transformarla en la promiscuidad sexual que se practicaba en su comuna. Eso sí, a sus seguidores se les veía muy felices.

El tío contaba estas cosas vestido con una especie de túnica, alguno de sus extravagantes gorros y un reloj repleto de diamantes, correa incluida, que le regalaron sus seguidores de Hollywood. También defendía sus Rolls: “La gente está celosa, y piensan que esos coches no encajan con la espiritualidad. No veo donde está la contradicción. Sentado en un Rolls he meditado. De hecho, en un carro tirado por bueyes es muy difícil meditar, un Rolls es lo mejor para el crecimiento espiritual”.

Le preguntaban que por qué tantos Rolls y respondía lo que se le ocurría: “Sin ellos nadie escribiría sobre lo que está ocurriendo aquí”. En otra ocasión proclamó: “Soy un gurú rico, bendecidos sean los ricos”, o “No tengo ni un Rolls, pertenecen a mis sannyasins. Soy el hombre más pobre del planeta, ni siquiera tengo un Honda”. Pero mientras Bhagwan pasaba el tiempo entre sus Rolls y sus entregadas seguidoras, el futuro se tornaba incierto. Y es que el enfrentamiento entre los habitantes de la zona, personas tradicionales de la América profunda, con los hippies de los ropajes rojizos, era inevitable. Ver a gente bailando sin música o abrazándose continuamente les asustaba. Un video con cámara oculta grabado por un alemán en un centro de terapia en la India, en el que aparecía un grupo de gente desnuda, llorando y gritando como posesos, tampoco ayudó a calmar los ánimos.

Un conflicto inevitable

Relatar la evolución del conflicto ocuparía mucho espacio y no es nuestro objetivo. Pero ocurrieron cosas como que los rajneeshees compraron casas en el pueblo, incluyendo el bar. De un día para otro, en la plancha dejaron de hacerse huevos con beicon y empezaron a freír plátanos. Entendemos que esto puede ser demasiado para un veterano de guerra que no sale de casa sin su sombrero y su revólver. Entonces, los granjeros comenzaron a poner en sus pick up pegatinas de rezaban: “Mejor muerto que rojo”, un lema que hacía referencia a la ropa de los rajneeshees pero que también se usó como rechazo al comunismo durante la Guerra Fría. Si los seguidores de Osho creyeron que podían doblegar al Gobierno de Ronald Reagan, calcularon mal sus fuerzas.

Bajo la dirección de Sheela, la extremista secretaria del líder, perpetraron una intoxicación masiva con salmonela en varios restaurantes para evitar que los habitantes de Antelope fueran a votar. También compraron unos cien fusiles de asalto como medida de “autoprotección” y comenzaron a hacer prácticas de tiro. Todo estaba yendo demasiado lejos y las autoridades pensaban que acabarían en un enfrentamiento armado, así que a mediados de 1983 el fiscal general del Estado de Oregón se puso en marcha contra la comuna. Estaba fresco en la memoria el suicidio colectivo de una secta en Guayana en 1978, donde murieron más de 900 personas, la mayoría estadounidenses.

Las autoridades americanas condenaron a Sheela a cuatro años y a Bhagwan le declararon culpable por violar las leyes de inmigración, al pactar matrimonios entre americanos y extranjeros para que lograran la residencia. No obstante, le ofrecieron suspender la condena si abandonaba el país, de modo que en 1985 volvió a India. Sobre si Bhagwan estaba al corriente de los delitos cometidos por Sheela, hay versiones para todos los gustos.

Tres décadas después de la muerte del gurú, la comuna de Oregón se ha convertido en un centro cristiano para jóvenes que defienden la abstinencia sexual, pero las ideas de Osho siguen vivas. En el documental su abogado se emociona al recordarlo: “Él fue un regalo, la verdad está en él. Sigue siendo el maestro entre los maestros”. Los libros de Osho se siguen editando con éxito y la organización que lleva su nombre cuenta con el espectacular Osho International Meditation Resort en Pune (India). En sus instalaciones hay jardines, un enorme auditorio con forma de pirámide, un completo spa, pistas de tenis y hasta una “vibrante vida nocturna”. Según ellos es un lugar perfecto “para alguien cuyos pies están firmemente en el suelo, como Zorba el griego, y cuyas manos pueden tocar las estrellas, como Gautam el Buda”. ¿Para cuando un Rolls Phantom “Osho Edition”?

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7. La decadencia del “zar”, rito egipcio entre el esoterismo y el exorcismo.

FUENTE: Efe

 

 

El humo del incienso invade la sala, retumba el sonido de los tambores, amuletos de plata y oro se bañan en la sangre de un animal sacrificado como ofrenda a los espíritus del zar, el poseído entra en trance y los espíritus abandonan su cuerpo. Fatima Abu al Ela, de 70 años, aprendió este ritual exorcista conocido como “zar” de su madre cuando apenas tenía 12 años. Ella es una de las últimas que realizan este ritual, que ofician mayoritariamente mujeres y que está en vías de extinción. Lo relata Esther Alaejos para la agencia Efe.

“Se está perdiendo, los únicos que permanecemos en Egipto somos nosotros (…), lo hemos aprendido sin método, de Dios, y nadie puede aprenderlo”, afirma en una entrevista a Efe Abu al Ela, líder o “sheikha” del grupo Mazaher. “Cuando escuchas la música empiezas a liberarte”, explica poco antes de la representación de música zar que cada miércoles realiza junto a 5 ó 6 músicos egipcios en el centro cultural Makan, situado en el centro de El Cairo.

Cuenta que “en este lugar el zar es acústico y la gente solo viene a escuchar”, y que las prendas que lleva durante la actuación “son más elegantes” que las empleadas en un ritual espiritista real, en el que además de la música realizan otros ritos para liberar a los espíritus. Esta actuación simula la música empleada en los rituales de zar reales, dividida en tres partes representa la diversidad de canciones que tiene la música zar.

Primero retumban los tambores y afloran las melodías de la música zar que alaban al profeta Mahoma. Más tarde, el sonido de los acordes de la guitarra africana conocida como “tamboura” se funde con el chasquido de una falda con pezuñas de cabra llamada “mangour” y la sintonía de una flauta de caña, melodías típicas del zar sudanés. La actuación finaliza con los cánticos y los ritmos empleados en las ceremonias egipcias.

Hay registros del zar desde principios del siglo XIX en Abisinia (antigua Etiopía) y un rastro que le lleva también por Irán, Sudán, Egipto y otros países del golfo Pérsico. Sin embargo, no se puede ubicar su origen en una única sociedad, según explica la antropóloga y escritora Hager El Hadidi en su libro Zar. En Egipto el zar es aceptado por la población musulmana debido a la mención del “genio o djinn” en un capítulo del Corán. Sin embargo, ha sufrido una gran represión durante cientos de años por parte de los islamistas conservadores.

El Hadidi cuenta que hay 66 espíritus organizados en familias, tienen su propio género, profesión y personalidad, habitan lugares contaminados, como baños o basureros, y la primera experiencia exorcista se produce en un baño doméstico cuando el poseído es adolescente. El zar libera a los espíritus mediante rituales musicales como el que representa el grupo Mazaher o con el zar silencioso que organiza una ceremonia con incienso, gena y velas, realizan un sacrificio animal de gallinas, cabras u ovejas conocido como “Madyafa”.

Los devotos y el poseído cocinan y comen la carne del animal, dan como ofrenda a los espíritus los amuletos zar del poseído bañados en la sangre de estos animales y esparcen gotas de esta sangre por el baño doméstico de la persona poseída, cuenta El Hadidi. La antropóloga relata que el zar forma parte del cine árabe y la población egipcia conoce este ritual porque aparece en películas egipcias como en “Daqqa zar”.

Pero esta tradición camina hacia su extinción. Afirma que en el año 2005 contaron más de 200 músicos de zar en El Cairo. Sin embargo 14 años después el grupo Mazaher es el único que continúa realizando este ritual. “Antes había mucha demanda y ahora casi no hay”, comenta a Efe Ibrahim Fauzy Ibrahim, un músico de Mazaher. “A mis hijos no les quiero enseñar una tradición que no tiene futuro”, explica cabizbajo.

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8. El satanismo filosófico: una nueva versión, peligrosa, del egoísmo de siempre.

FUENTE: La iglesia de Baler

 

 

En el blog La iglesia de Baler, Iván Cantero ha publicado hace unos días un artículo de opinión sobre el evento de estudio del satanismo que tuvo lugar recientemente en Madrid y al que InfoRIES dedicó un boletín monográfico del que se hace eco Cantero. Reproducimos su artículo, titulado “Ser un poco más egoísta”, a continuación.

A finales de noviembre del año pasado se celebraron en la Universidad Complutense de Madrid unas extrañas jornadas de diálogo interreligioso organizadas por la AJICR (Asociación de Jóvenes Investigadores en Ciencias de las Religiones), que generaron una cierta polémica por tratar la religión satánica. No había en realidad motivo para trapisonda, porque la asociación satanista invitada como ponente era, en realidad, un simple club de hedonistas en busca de dignidad en forma de reconocimiento público y, probablemente, subvenciones, que insiste en el carácter ateo o agnóstico de su movimiento; y en tres largas entrevistas en la prensa no son capaces de explicar por qué se consideran una religión cuando afirman que para ellos Satanás no es una divinidad, sino un simple referente literario y filosófico.

Sus trasfondos intelectuales resultan bastante limitados y reduccionistas, al omitir figuras fundamentales (e incómodas) como Aleister Crowley, negar el ritualismo de Lavey, y manipular la figura de escritores como J.K. Huysmans, que presentan como referente del satanismo por una anecdótica incursión temporal en los temas esotéricos (tan frecuente en el vicio que resultaba del aburrimiento en los intelectuales de la época) que resultó en su reconversión definitiva al catolicismo.

No queda muy claro, por tanto, el interés cultural o antropológico de invitar como ponente religioso a un grupo inofensivo que no lo es, salvo para blanquear al satanismo real (que, por otro lado, sí se analizó su retrato en la ficción)... O cometer la irresponsabilidad de negar su existencia, como deslizan el propio portavoz de los luciferinos descafeinados y Alejandro Amenábar, siguiendo la estela indocumentada y paracientífica del negacionismo de la brujería y la relativismo acerca de la figura de Satán de Margaret Murray.

Y es que, como ha difundido recientemente la RIES (Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas), parece que el blanqueamiento de los grupos pseudo religiosos destructivos o de cualquier índole puramente lucrativa, es un fenómeno al alza, como muestra el cierre del teléfono de ayuda a las víctimas de estos grupos por parte del gobierno holandés. ¿Parte de la agenda espiritual del Imperio?

Lo que sí tienen en común los satanistas de mentira y los reales es la fundamentación filosófica del nihilismo y hacer un dios del propio individuo y, por tanto, de hacer ley su voluntad sin preocuparse demasiado de las consecuencias en los demás. Esto último, en cristiano, es el egoísmo de toda la vida, sólo que ahora se le pretende dar de este modo un trasfondo místico e incluso humanista y científico, que es lo más peligroso. ¿Cuántas veces no habremos oído aconsejar, principalmente a madres sufridoras y entregadas a su familia, que “deben ser más egoístas”? Hoy en día ya es una especie de mito que se emplea con suma ligereza, a menudo sin reflexionar demasiado de dónde viene, como tantas otras gilipolleces popularizadas por personajes televisivos, pero tiene sin duda un triste origen, cada vez más degradado.

No hay quien se haya leído un manual de autoayuda (la mayoría de los cuales, en mi opinión, dadas las tendencias proteccionistas imperiales actuales, deberían estar tanto o más perseguidos legislativamente como las terapias para curar la homosexualidad) o que vaya a terapia psicológica que no repita aquella máxima como clave “para ser más feliz” como un papagayo. Evidentemente, un psicólogo responsable no va a transmitir literalmente tal cosa a su paciente, pero hay demasiada gente desesperada que, por desconocimiento o mal consejo, acude a un curandero de la mente para hacer terapia y le puede recomendar tan pronto el egoísmo como una tirada de cartas de tarot.

Especialmente peligrosos en este sentido, por su supuesto halo cientificista, son los que sin haber pisado la universidad o leído algún libro de Freud, se dicen psicoanalistas por haber hecho un curso de fin de semana, y hacen de sus gabinetes verdaderas escuelas de egoísmo. También pudiera ser que el paciente malinterprete la indicación de su psicólogo cuando le habla de tenerse en cuenta también a sí mismo... O que entendiéndolo, no sea capaz de transmitirlo de una manera adecuada a los demás al intentar explicarlo.

El caso es que, como pasa ya con la mitad de los medicamentos, las prescripciones psicológicas ya las receta con vehemencia en el bar o en el salón de casa cualquier hijo de vecino con la EGB mal acabada, y se populariza la idea de que entregarse a los demás, en el grado que sea, es algo trasnochado y sobre todo, nocivo. De este modo, leo en las redes sociales este tipo de idioteces a modo de propósitos para el año nuevo, creyendo que se están haciendo algo positivo. ¿Qué pensarían, como sugirió un día el propio Íker Jiménez en la editorial de su programa, si supiesen que están promoviendo exactamente los mismos fundamentos que un satanista?

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9. España: el miedo al vudú impide identificar al responsable de la muerte de un bebé inmigrante.

FUENTE: El Día

 

 

El miedo a las posibles represalias ligado posiblemente a rituales de vudú de los migrantes que venían en la patera del bebé fallecido es una de la razones por las que los agentes de la Policía Nacional de Arrecife (Islas Canarias, España) no han podido identificar al patrón o tripulantes de la barquilla interceptada el pasado 8 de enero por la Salvamar Al Nair cuando se encontraba a la deriva y sin gasóleo a unos 27 kilómetros de las costas de Lanzarote, según informa D. Rivero en El Día.

La identificación del patrón es clave para poder sentarlo en el banquillo de los acusados. Y es que el Juzgado de Instrucción número 4 de Arrecife ha incoado un procedimiento por la presunta comisión de un delito de homicidio imprudente por el fallecimiento del bebé contra quién pudiera ser el patrón de la patera. Sin embargo, hasta el momento ninguno de los ocupantes de la patera ha identificado a los encargados de traer la embarcación desde Tan-Tan, en Marruecos, hasta Lanzarote.

No es la primera vez que el vudú está detrás de las mafias relacionadas con la inmigración irregular o la trata de blancas. En estos casos, antes de empezar el viaje a Europa las víctimas son sometidas a un ritual de vudú, teniendo que jurar que no van denunciar los hechos ni a delatar a los organizadores del viaje.

Aunque en este caso, la investigación policial sigue en marcha para determinar quienes son los patrones de la patera y averiguar todas las circunstancias que han rodeado a este trágico viaje, no se descarta que los migrantes hayan podido contraer alguna deuda para poder pagar el viaje. De esta forma, el vudú funcionaría como un mecanismo de coacción hacia las víctimas para garantizar el pago de los gastos del viaje.

En la embarcación viajaban un total de 42 personas (incluido el bebé fallecido) de origen subsahariano. Son precisamente las personas que proceden de esta parte del continente africano las que por su cultura se exponen a los ritos relacionados con el vudú. Se da la circunstancia que en la patera viajaban once mujeres (dos embarazadas) y 17 menores, entre ellos cuatro niñas.

Otro de los problemas a los que se está enfrentando el departamento de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote es el de determinar si varios de los menores de corta edad se encuentran en total desamparado o embarcaron realmente con sus madres. Y es que se cree que varias mujeres se niegan a reconocer a sus hijos por temor a una posible repatriación junto a sus pequeños.

El Cabildo ya ha alojado a una de las madres con su hijo en el piso de acogida para víctimas de violencia de género que existe en la isla dado que no hay otro recurso asistencial para este tipo de casos. El resto de las mujeres con hijos irán a Fuerteventura donde sí existe un centro para las migrantes con menores a su cargo.

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10. Argentina: una tarotista acusada de estafa, en paradero desconocido.

FUENTE: La Capital

 

 

En marzo de 2019, dos marplatenses, un hombre de 37 y una mujer de 34, entregaron fuertes sumas de dinero a una tarotista chilena. Cuando fueron a buscar explicaciones sobre por qué no funcionaban sus hechizos se dieron cuenta de la estafa. Un caso de bizarra realidad que cuenta Fernando del Rio en el diario La Capital, de Mar del Plata (Argentina).

“Sé uno más que ha triunfado con mi ayuda”, decía la frase en el folleto que destacaba entre frases y promesas a un Cupido presto a lanzar su flecha amorosa. Un poco más arriba, el nombre de la señora Carolina, una “doctora en parapsicología” que podía solucionar todos los problemas que cualquier agobiado le pusiera sobre la mesa. Pero el gran pase de magia no fue el que esperaban sus dos clientes sino el de su propia desaparición. Una fuga millonaria por los millones de sus víctimas, parecida a la de la provincia de Santa Fe años atrás y protagonizada por una tarotista que se terminó por convertir en un fantasma sin identidad.

Fue la desesperación de recuperar a una ex pareja que llevó al hombre de 37 años a consultar a Carolina en un departamento de Arenales al 2800 en marzo de 2019. Mar del Plata empezaba a contraerse tras las vacaciones de verano, los chicos ya regresaban a las escuelas y la señora Carolina repartía sus folletos en busca de algún incauto. En esos primeros días de marzo el hombre fue tras las respuestas mágicas frente a la imposibilidad de arreglar la relación por su cuenta o resignarse a buscar un nuevo amor. Algún amigo podría haberlo ayudado con un consejo, de esos que dicen que todo pasa y cosas por el estilo. Pero no, el hombre, compungido, tocó el portero del 3°A y subió al encuentro de la magia. Además de los padeceres del corazón también negoció por una mejora laboral y Carolina le dijo que no había problema, pero que semejante esfuerzo le iba a costar 100.000 dólares. Eso sí, por las dudas que pagara los 2.000 pesos de la consulta.

El hombre pudo conseguir 10.000 dólares y se los entregó como un adelanto del “trabajo”. Unos días después, cuando regresó a tocar el mismo timbre sintió que se había equivocado. No sólo porque nadie contestaba sino también por una mujer que, en el umbral del edificio de la calle Arenales, se angustiaba por lo mismo.

Una fortuna

La mujer, de 34 años, era una comerciante. Vivía en el barrio Los Pinares. Tal vez siga viviendo allí y continúe trabajando como comerciante. Lo que está claro es que su vida no sigue siendo la misma después del 27 de marzo de 2019 cuando en la puerta del edificio de Arenales al 2800 se dio cuenta de que la habían estafado.

El 15 de marzo fue el día en que recibió el diagnóstico de la tarotista Carolina. Sentada junto a la mesa de “trabajo”, con su pelo platinado y rodeada de símbolos paganos, estatuillas y otros amuletos, la vidente chilena le dijo a la mujer que veía cosas feas. “Veo muerte y cosas oscuras”, escuchó la comerciante que, naturalmente, se estremeció.

Preguntó con temor a la respuesta qué era lo que se podía hacer y la señora Carolina le sugirió un trabajo de limpieza que tenía un costo. En el trance, en la desesperación de una salida reparadora, en el temor a la muerte o vaya a saberse en cuántas urgencias más, alguien puede perder la noción de la realidad. Debe haberle pasado eso a la mujer para no darse cuenta de que la tarotista le había fijado la sesión en 100.000 dólares y algunas refuerzos: 4 perfumes importados, un pantalón de jean azul, una remera blanca con un arco iris en un hombre y unas zapatillas John Foos, color cremita y número 38.

Esas mismas cuestiones de la perturbación hicieron que la mujer comerciante regresara poco después con 180.000 dólares y 20 monedas antiguas de oro. Al precio de hoy cerca de 15 millones de pesos tirados al cesto de basura de la superstición, como advirtió la mujer al escuchar a su compañero de desconsuelo en el mismo lamento.

La policía se enteró del piquete en la puerta del edificio aquel 27 de marzo del año pasado y el fiscal David Bruna, de Delitos Económicos, se encargó de investigar. No fue mucho a donde se pudo llegar, apenas a reconstruir lo sucedido y a obtener algunas imágenes de las cámaras de seguridad de la inmobiliaria en la que Carolina y un hombre habían alquilado el departamento por 15 días a un costo de 67.500 pesos. Ese hombre usó la identidad chilena de Daniel Pérez Nicolini para formalizar el contrato pero, evidentemente, eran datos falsos. También se pudo saber que se movilizaban en un automóvil marca Nissan y que no era la primera vez que actuaban de esa forma.

El pasado

En el año 2017 la ciudad santafesina de San Lorenzo fue atravesada por la incredulidad de los crédulos. Un hombre que no podía recibirse de abogado pidió ayuda y pagó 98.000 pesos pero dos días más tarde, cuando regresó a exigir soluciones, ya nadie habitaba aquel lugar de la calle San Martín al 1000.nUn jubilado entregó 100.000 pesos para sanar a su mujer de una enfermedad y vio cómo la tarotista chilena, que se hacía llamar Luciana, rompía algunos billetes. “Esto los recuperarás en tres días”, le dijo y el hombre volvió a los tres días para encontrarse con la desazón de una ausencia.

Meses después, en febrero de 2018, fue otra localidad santafesina, Casilda, la que sufrió a la tarotista durante 23 días. Estafó a varias personas y escapó en una camioneta… marca Nissan. A fines de 2019 la redacción del diario La Capital recibió el llamado de un hombre que aseguraba ser cercano a la estafadora. Del otro lado de la línea se escuchaba una voz caribeña y segura: “Yo puedo hacer que la detengan”. El fiscal Bruna fue puesto al tanto de la situación, pero ese hombre, como la tarotista, desapareció. Parecía tener buena información, aunque nunca decidió compartirla por completo. Hoy, casi un año después de la estafa en Mar del Plata, la tarotista chilena sin identidad sigue desaparecida. Acaso se prepare en otras ciudades para dar un nuevo golpe.

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