Vaticano

 

Nueva carta del Papa Francisco sobre la liturgia: “Demasiadas personas no saben hoy qué es la Misa”

 

“Puede que ni siquiera seamos conscientes, pero cada vez que vamos a Misa, el motivo principal es porque nos atrae el deseo que Él tiene de nosotros”, afirma

 

 

 

30/06/22


 

 

 

 

 

El Papa Francisco ha publicado una nueva carta apostólica: Desiderio Desideravi: Sobre la formación litúrgica del Pueblo de Dios.

Con esta carta, el Santo Padre pretende recordar el sentido profundo de la celebración eucarística surgida del Concilio Vaticano II e invitar a la formación litúrgica. Contiene 65 párrafos en los que desarrolla los resultados de la plenaria de febrero de 2019 del Dicasterio del Culto Divino en continuidad con el motu proprio Traditionis custodes.

En todo momento, Francisco pretende insistir en la comunión eclesial, dejar los enfrentamientos y polémicas sobre la liturgia (sobre todo la misa en latín que ha limitado el Santo Padre) .

 

La belleza de la celebración litúrgica

Según Vatican News, no se trata de una nueva instrucción ni de un directorio con normas específicas, sino de una meditación para comprender la belleza de la celebración litúrgica y su papel en la evangelización. Y concluye con un llamamiento: "Abandonemos las polémicas para escuchar juntos lo que el Espíritu dice a la Iglesia, mantengamos la comunión, sigamos asombrándonos por la belleza de la Liturgia”.

Francisco una vez más utiliza la pedagogía para estos tiempos y va al centro de la cuestión. Así dice,  que demasiadas personas hoy no saben lo que es la Misa, y por eso, “no debemos permitirnos ni un momento de descanso, sabiendo que todavía no todos han recibido una invitación. a esta Cena o sabiendo que otros la han olvidado o se han perdido en el camino en las vueltas y vueltas de la vida humana”.

 

Por qué vamos a Misa

En el punto 6, explica por qué vamos a Misa: "Antes de nuestra respuesta a su invitación – mucho antes – está su deseo de nosotros: puede que ni siquiera seamos conscientes de ello, pero cada vez que vamos a Misa, el motivo principal es porque nos atrae el deseo que Él tiene de nosotros. Por nuestra parte, la respuesta posible, la ascesis más exigente es, como siempre, la de entregarnos a su amor, la de dejarnos atraer por Él. Ciertamente, nuestra comunión con el Cuerpo y la Sangre de Cristo ha sido deseada por Él en la última Cena".

Explica también que la Eucaristía no es una representación de la Última Cena. "Con esta carta quisiera simplemente invitar a toda la Iglesia a redescubrir, custodiar y vivir la verdad y la fuerza de la celebración cristiana. Quisiera que la belleza de la celebración cristiana y de sus necesarias consecuencias en la vida de la Iglesia no se vieran desfiguradas por una comprensión superficial y reductiva de su valor o, peor aún, por su instrumentalización al servicio de alguna visión ideológica, sea cual sea. La oración sacerdotal de Jesús en la última cena para que todos sean uno ( Jn 17,21), juzga todas nuestras divisiones en torno al Pan partido, sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de caridad", dice Francisco en el punto 16.

 

No es magia

Y para los escépticos, aclara: “La Eucaristía no es mágica, ya que viene de Dios, no del diablo: Nuestro primer encuentro con su obra pascual es el acontecimiento que marca la vida de todos los creyentes: nuestro Bautismo. No se trata de una adhesión mental a su pensamiento ni de la aceptación de un código de conducta impuesto por Él. Más bien, es un ser sumergido en su pasión, muerte, resurrección y ascensión, un ser sumergido en su obra pascual. No es magia. La magia es lo contrario de la lógica de los sacramentos porque la magia pretende tener un poder sobre Dios, y por eso proviene del Tentador”.