COMPARTIENDO DIÁLOGOS CONMIGO MISMO

 

HAY QUE EJERCITAR LA PENITENCIA

 

 

"Cada cual consigo mismo debe conciliar miradas para volver al Salvador y, además ha de sentir el verso divino en el verbo humano, haciendo oír las plegarias en íntima unión con la cruz de Cristo, para la reconciliación de todos los penitentes”

 

 

 

Víctor Corcoba Herrero, Escritor | 11.03.2023


 

 

 

I.- ESCUCHAR LA VOZ VIVA DE CRISTO

En la voluntad mística del Creador,
germina la recreación a la creación,
el júbilo de Dios cimentado en luz,
la dicha de quien nos ha concebido,
para la vida y una vida en plenitud.

Animados por el andar del Señor,
y reanimados por el soplo celestial;
vamos tejiendo acordes allá arriba,
y destejiendo el mal de aquí abajo,
pues el bien es lo que nos hace ser.

Contemplando al vivo Crucificado,
siguiéndolo con tenaz convicción,
conseguimos advertir que está ahí,
en camino con nosotros cada día,
sólo hay que acogerlo para sentirle.

 

 

II.- CRISTO TIENE SED DE NUESTRO AMOR

La pasión del Redentor fue firme,
en sus marchas abrigó el esfuerzo;
se percibió sediento para saciarnos,
y se hizo pobre para enriquecernos,
volviéndose mortal para acogernos.

Como un Padre bueno y sensible,
anhela para nosotros todo el don;
esta bondad emerge de él mismo,
encarnado como sol que nos guía,
para hacernos el acceso más dócil.

Dejémonos ir por quien nos ama,
abandonemos nuestras miserias,
reconduzcamos nuestros andares,
que sea el apego místico del aire,
el que nos aclare y nos esclarezca.

 

 

III.- A LOS PIES DE CRISTO RECONCILIADOR

Con el Unigénito todo se concilia
y se reconcilia, hasta armonizarse,
venciendo con la muerte en la cruz,
y convenciendo con la gran verdad,
a las metas del mal que nos lapidan.

Hay que reconocerse arrepentido,
salir de estos lenguajes mundanos,
abrirse a los espacios del donarse,
y hacer corrección de uno mismo,
para poder rehacerse como espíritu.

La renovación viene de lo sublime,
surge con el gozo de la enmienda,
germina de levantarse tras la caída,
florece con el retorno al Altísimo,
en comunión y en unión fraternal.

 

 

Víctor Corcoba Herrero
corcoba@telefonica.net
11 de marzo de 2023