Fe y Obras

Pedir, pedir, pedir para hacer, hacer y hacer

 

 

16.05.2014 | por Eleuterio Fernández Guzmán


Cuando, cada año, llega el tiempo de presentar la Declaración de la Renta, la Iglesia Católica, por imperativo de los acuerdos con el Estado, pone en función la campaña Xtantos.

Alguno habrá que diga que la Iglesia Católica siempre está pidiendo.

Y eso es más que cierto.

La Esposa de Cristo pide, primero, a los suyos, a sus fieles y luego, en segundo lugar, a toda aquella persona que sepa lo que hace la misma por la sociedad en la que vive y muere.

Por eso es muy importante que la Iglesia católica, nuestra jerarquía y hasta el sacerdote encargado de evangelizar en el pueblo más pequeño o aldea más perdida, digan a la sociedad lo que la sociedad ha de saber y que, a veces, parece que no escucha.

En efecto, la Iglesia católica pide, pide y pide.

Sin embargo, lo hace porque, en primer lugar, no vive del aire y, en segundo lugar porque sabe que lo que hace es tan bueno y tiene un efecto tan positivo que merece la pena el esfuerzo de poner la mano para que se afloje la cartera vía impuestos.

Pero todo depende, al fin y al cabo, de la Providencia de Dios.

Lo mejor de todo esto es que el contribuyente nada pierde diciendo que su tanto por cierto (pequeño, por cierto) de sus impuestos vaya destinado al sostenimiento de la Esposa de Cristo y, sin embargo, demuestra que sabe lo que vale la pena.

Y es que, ciertamente, desde la Iglesia católica se hace mucho. Eso todos los saben aunque, a veces, se disimule y se mire para otro lado.

Pero, para que se vea que se hace, hace y hace, esto otro:

-23.000 parroquias

-850 monasterios de clausura

-200 hospitales y ambulatorios

-300 guarderías

-900 orfanatos

-1.600 centros de acogida y reinserción Social y Familiar.

Además:

-Sacerdotes, obispos, religiosos y religiosas suman un total de más de 121.000 personas (21.000 sacerdotes, más de 27.700 religiosos, más de 58.000 religiosas de vida activa y 15.000 de vida contemplativa).

Todas estas cifras tienen consecuencias que son muy positivas para la sociedad:

-Más de 400.000 personas hospitalizadas y asistidas en centros hospitalarios de la Iglesia católica.

-Más de 850.000 personas asistidas en ambulatorios y dispensarios.

-Más de 60.000 personas asistidas residentes o asistidas en casas para ancianos o discapacitados.

-Más de 11.000 personas asistidas en orfanatos y centros de tutela de la infancia.

-Más de 11.000 personas asistidas en guarderías infantiles.

-Más de 54.000 personas asistidas en centros de educación especial.

-Más de 325.000 personas asistidas en otros centros de asistencia social.

-Más de 80.000 personas asistidas en consultorios familiares.

Además, la Iglesia católica, asiste, también, los centros penitenciarios (más de 130 capellanes dedicados a tal actividad) ocupándose de más de 46.000 presos.

Y esto, seguramente, no está actualizado porque nunca lo estará, tal es la naturaleza de la realidad de la Iglesia católica. Es a lo que se dedica, socialmente, la Iglesia católica.

Por tanto, pedir, pedir, pedir pero para hacer, hacer y hacer.

 

Eleuterio Fernández Guzmán
eleu@telefonica.net