Colaboraciones
Trilogía de la corrupción
19 enero, 2025 | Javier Úbeda Ibáñez
Alain Badiou, 2012.
Keffieh67.
La trilogía de la corrupción (así la llama el filósofo Alain Badiou, Rabat, Protectorado francés de Marruecos, 1937): el dinero, el placer y el poder, ideales que la sociedad capitalista y de consumo han autoimpuesto a los individuos, y que desvirtúan y denigran la dignidad de la persona.
Ideales que no dan plenitud, ni felicidad ni realización personal. Dichos ideales son cautivadores, minimizan las capacidades reflexivas de la persona, y se terminan convirtiendo en un dios al que es menester rendirse y adorarle, es decir, se han convertido en un ídolo y por ello el hombre comete pecado de idolatría.
Es una tentación constante de la fe. «No podéis servir a Dios y al dinero» (Mt. 6, 24).
En el pecado de idolatría divinizamos lo que no es Dios, colocamos algo como centro absoluto de nuestra vida que sólo debería corresponder al Dios único y vivo.
El Papa Francisco dice enérgicamente no a la nueva idolatría del dinero, no a una economía sin rostro y sin objetivo verdaderamente humano, en el fondo sostiene que la crisis financiera constituye una crisis antropológica (Cfr. Evangelii gaudium 55). La idolatría del dinero debe desarticularse por el amor a Dios y por amor al prójimo, como un acto de justicia y caridad en favor de los menos favorecidos.