Rosa Regás abandona por fin la Biblioteca Nacional
(EFE / PD).- La directora de la Biblioteca Nacional, la polémica escritora Rosa Regás, ha presentado la dimisión irrevocable de su cargo tras comprobar que carece de la confianza del ministro de Cultura, César Antonio Molina.
Regás, comunicó su dimisión en una carta remitida a las nueve de esta mañana al ministro, con quien mantuvo una entrevista el pasado viernes en la que Molina, según la escritora, le dijo que "no había hecho nada" durante su gestión de más de tres años al frente de la Biblioteca Nacional.
"A la vista de esa afirmación, que supone una total falta de confianza, he tomado la decisión de presentar mi dimisión", explicó Rosa Regás, quien fue nombrada directora de la Biblioteca Nacional en mayo de 2004.
Regàs ha dicho que tenía "un compromiso de cuatro años con el Gobierno socialista" que, "desgraciadamente" no podría continuar, pese a tener "muchos proyectos" en marcha en la Biblioteca Nacional. En este sentido, la escritora ha reconocido que, dado que su carrera "no es administrativa", no tiene sentido que "permanezca en el puesto".
EXPOLIO EN LA BIBLIOTECA NACIONAL
Sin dudas, sus últimas declaraciones públicas, pletóricas de sectarismo e intransigencia, hicieron que el Gobierno socialista y el flamante ministro de Cultura, César Antonio Molina, la situaran como un lastre del cual debían deshacerse con urgencia. La gota que colmó la paciencia de Molina fue la revelación de que la Biblioteca Nacional que ella dirigía no tenía a la seguridad entre sus prioridades. Es decir, el expolio del patrimonio no preocupaba en los más mínimo a la escritora catalana hasta que este fin de semana se supo del robo de mapamundis del año 1492 de un valor incalculable por fallos, precisamente, en la seguridad.