Servicio diario - 08 de julio de 2017


El Papa recibe a Scalfari que confiesa: “Tengo el rostro mojado con lágrimas de conmoción”
Sergio Mora

Milán: Renuncia el cardenal Scola. El Papa nombra al Mons. Delpini
Redacción

Cuba: nuevo obispo para Ciego de Ávila
Redacción

Santa Paulina del Corazón Agonizante de Jesús (Amabile Lucía Wisenteiner) – 9 de julio
Isabel Orellana Vilches

Carta circular de la Congregación para el Culto Divino a los obispos sobre los requisitos de las hostias y del vino para la eucaristía
Redacción


 

8 julio 2017
Sergio Mora

El Papa recibe a Scalfari que confiesa: “Tengo el rostro mojado con lágrimas de conmoción”

Artículo del diario La República en la que su fundador que se define ‘no creyente’, cuenta el coloquio que tuvo con el Santo Padre

(ZENIT – Roma, 8 Jul. 2017).- El papa Francisco recibió este viernes en visita privada Eugenio Scalfari, fundador del diario La Repubblica, que hoy sábado publica un artículo en el cual además de las preocupaciones del Santo Padre sobre el G20, deja ver la relación de amistad que el sucesor de Pedro tejió con un no creyente como él, quien escribe que el tema principal de la conversación fue “Dios único, creador único de nuestro planeta y del Universo entero”.

Scalfari señala que “el Papa sabe naturalmente que no soy un creyente, pero que aprecio mucho la predicación de Jesús de Nazaret”. Y que “sobre este punto nació nuestra amistad”, y es “el motivo que volvió tan perfecta e insólita la amistad entre el jefe de la Iglesia y un no creyente”.

La conversación aborda muchos temas –contados por Scalfari de memoria– en los que se habla entre otros de la Ética de Spinoza y su excomunión, de Pascal y si merecería ser beatificado, y de la sinodalidad de la Iglesia.

El fundador del diario Repubblica, 15 años más anciano que Francisco, deja la residencia Santa Marta y cuenta que el Santo Padre lo acompaña hasta el auto y se preocupa por él hasta que allí está debidamente sentado. Scalfari concluye confesando: “tengo el rostro mojado por lágrimas de conmoción”.

Sobre el G20 que concluye hoy en Hamburgo

Sobre el G20 el Santo Padre le indica –señala Scalfari citando de memoria– su temor de “las alianzas muy peligrosas entre potencias que tienen una visión tergiversada del mundo: Estados Unidos y Rusia, China y Corea del Norte, Putin y Asad en la guerra de Siria”.

“El peligro concierne a la migración. Nuestro problema principal y desgraciadamente cada vez mayor en el mundo de hoy es el de los pobres, los débiles, los excluidos, de los que los migrantes forman parte“, y señaló a los países que “tienen pocos pobres locales y temen la invasión de los migrantes”.

Consideró que cada vez más Europa, el continente “más rico del mundo”, va a atraer a las poblaciones pobres seguirán llegando a sus puertas.

En cambio este viernes el Papa envió una carta a la canciller alemana Angela Merkel, deseando que el G20 pongan en el centro el problema de las migraciones y refugiados. En particular “la trágica situación en Sudán del Sur, en el lago Chad, en el Cuerno de África y en Yemen, donde 30 millones de personas no tienen nada para comer y necesitan agua para sobrevivir”.

Leer también el texto de la carta del Santo Padre al G20: El Papa al G20 pide ‘prioridad absoluta’ para los refugiados y situaciones de pobreza

 

 

08/07/2017-09:48
Redacción

Milán: Renuncia el cardenal Scola. El Papa nombra al Mons. Delpini

(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 8 Jun. 2017).- El papa Francisco nombró este viernes como nuevo arzobispo metropolitano de la ciudad italiana de Milán, a Mons. Mario Enrico Delpini, tras la renuncia del cardenal Angelo Scola.
“El Santo Padre ha aceptado la renuncia al gobierno de la archidiócesis metropolitana de Milán (Italia), presentada por Su Eminencia Reverendísima el señor cardenal Angelo Scola. El Papa ha nombrado arzobispo metropolitano de la archidiócesis de Milán (Italia) a Su Excelencia Reverendísima Mons. Mario Enrico Delpini, hasta ahora obispo auxiliar y vicario general de la misma archidiócesis”, indica el comunicado de la Santa Sede.
El número dos de la diócesis ocupará así el puesto del purpurado que se retira por límite de edad. El cardenal Scola fue patriarca de Venecia y nombrado arzobispo de Milán por el papa Benedicto XVI, el 28 de junio de 2011. Era uno de los cardenales ‘papables’.
La Archidiócesis de Milán, una de las más antiguas del mundo, sigue en rito ambrosiano dejado por San Ambrosio en el siglo IV, enteramente unido a Roma, pero con algunas diferencias del rito romano. Cuando el Papa Gregorio I, a fines del siglo VI cambió, reorganizó y amplió a toda la Iglesia y el rito romano, la liturgia ambrosiana, dado la gran importancia y el peso de la iglesia en Milán, logró sobrevivir a la supresión de los ritos occidentales menores, como el rito mozárabe. Su legitimidad se mantuvo con el Concilio de Trento.
Mons. Delpini, era obispo auxiliar y vicario general de la Archidiócesis. Nació en Gallarate el 29 de julio de 1951, fue ordedando sacerdote 7 de junio de 1975, encardinado en la Archidiócesis de Milán. Obtuvo el Grado en Letras en la Universidad Católica del Sacro Cuore de Milán y la Licenciatura en Teología Patristica en la Augustinianum de Roma y Entre 1987 y 1989 estudió en el Seminario Lombardo de Roma.

 

 

08/07/2017-11:55
Redacción

Cuba: nuevo obispo para Ciego de Ávila

(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 8 Jun. 2017).- El papa Francisco nombró a Juan Gabriel Díaz Ruiz nuevo obispo de Ciego de Ávila, en Cuba, tras la renuncia por motivos de edad de Mario Eusebio Mestril Vega, informó este sábado la oficina de prensa de la Santa Sede.
En abril de 2016, el P. Díaz Ruíz, a quien familiarmente se le conoce como el P. Juanín, fue designado Administrador Diocesano de Camagüey , elegido por el presbiterio de la Diócesis. El arzobispo Mons. Juan García Rodríguez había sido nombrado Arzobispo de la Habana, y la sede estuvo vacante hasta febrero del presente año en que Mons. Wilfredo Pino Estévez se hizo cargo de la sede camagüeyana.
El nuevo obispo nacido en Camaguey el 14 de noviembre de 1960, antes de entrar en el seminario estudió ingeniería civil. En 2012 se contabilizaron un total de 146 832 habitantes en el municipio de Ciego de Ávila.
Posteriormente realizó estudios filosóficos y teológicos en los seminarios San Basilio Magno en Santiago de Cuba y San Ambrosio en La Habana. Obtuvo la licenciatura en Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto bíblico de Roma.
Y en la diócesis de Camaguey fue administrador diocesano. Entre sus diversos encargos ha sido vicario parroquial en Nuestra Señora de la Candelaria, en Morón, y vicario parroquial en Nuestra Señora del Carmen en Florida, de la que es el actual párroco.
Mons. Mario Eusebio Mestril Vega, celebró el pasado mes de febrero 25 años de episcopado. Nacido en Nuevitas el 6 de marzo de 1940 fue ordenado presbítero el 4 de agosto de 1964 y consagrado obispo el 9 de febrero de 1992. Ha ejercido su ministerio al frente de la Diócesis durante 21 años. Mons. Mestril continúa como Presidente de la Comisión Nacional de Pastoral de Asistencia a la Salud (PAS).
En la actualidad permanece vacante la Diócesis de Guantánamo-Baracoa en donde el P. Mario Maffi ejerce como Administrador Diocesano, a la espera del nombramiento del nuevo obispo.

(Con información de Holguín Católico).

 

 

08/07/2017-04:45
Isabel Orellana Vilches

Santa Paulina del Corazón Agonizante de Jesús (Amabile Lucía Wisenteiner) – 9 de julio

(ZENIT – Madrid).- Una enferma de cáncer en fase terminal acogida por Amabile fue el origen de la fundación de las Hermanitas de la Inmaculada Concepción, impulsada por esta gran mujer, nacida el 16 de diciembre de 1865 en Vígolo Vattaro, provincia de Trento, Italia. Su escasísima formación no implicaba cortedad de miras. Al contrario. Tuvo la visión de crear la estructura precisa para que los desheredados de cariño, de salud y de recursos materiales, hallaran lo preciso para sobrevivir con la máxima dignidad posible.
Creció en el seno de una familia que se vio obligada a emigrar a Brasil junto a otros compatriotas. Buscaban una mejor calidad de vida, como legítimamente continúan persiguiendo los millones de personas que dejan atrás su país. El largo centenar de italianos que acompañó en este forzado exilio a la familia Wisenteiner llevaba clavado en el corazón las hondas raíces heredadas de sus antepasados. Cuando en 1876 se afincaron en el estado brasileño de Santa Catalina, en Trento, dieron a la nueva ciudad el nombre de Vígolo. Puede que fuese una forma de perpetuar emotivamente los inolvidables lazos que siempre les atarían al lugar que les vio nacer. Entonces Amabile tenía 10 años, y ya había experimentado en su tierra lo que significa trabajar duramente en una fábrica de seda; comenzó a los 8, una edad en la que debería haber estado jugando a las muñecas. Ni qué decir tiene que sus padres no deseaban este futuro para sus hijos.
Alrededor de los 12 años recibió la primera comunión y, con ella, se inició su itinerario espiritual. Primeramente colaboró en la parroquia como catequista de los niños, visitaba a los enfermos y se ocupaba también de mantener aseada la capilla. A ello añadía las tareas del hogar, que atendía ayudando a su madre. Pero ésta murió en un mal parto en 1886, y Amabile, que ya pensaba en la vida religiosa, se encontró con la enorme responsabilidad de cuidar a sus doce hermanos; fue su punto de referencia. Cuando su padre contrajo segundas nupcias tuvo vía libre para cumplir su anhelo.
En 1890, junto a otra amiga que solía visitar enfermos como ella, inició una vida en común de acuerdo con el padre Rossi que asumía la dirección espiritual de ambas. Adquirieron una casa en Nueva Trento y se trazaron un sencillo programa espiritual. Fue allí donde cobijaron y asistieron a la enferma de cáncer. El grupo de mujeres creció movido por la virtud que apreciaban en Amabile, y el padre Rossi y ella juzgaron que era el momento de instituir una Congregación. La fundación fue acogida por el prelado de Curitiba, monseñor Camargo. Tres de sus integrantes, incluida la santa, profesaron en 1895 y ésta tomó el nombre religioso con el que pasaría a la posteridad.
En 1903 se trasladaron a Ipiranga, São Paulo. Desde allí Amabile iba a impulsar la creación de cinco provincias permitiéndole extender su acción caritativa a muchos enfermos y pobres brasileños. Ese año fue elegida superiora general «ad vitam». Pero surgieron graves problemas internos dentro de la Congregación, y en 1909 el arzobispo monseñor Duarte Leopoldo e Silva la convocó para anunciarle que quedaba destituida. Su director espiritual, el padre Rossi, narró que en ese instante ella «se arrodilló... se humilló... respondió que estaba totalmente dispuesta a entregar la congregación... se ofrecía espontáneamente para servir en la congregación como súbdita». La respuesta del arzobispo fue: «Viva y muera en la congregación como súbdita». Su más preciado anhelo era que Dios «fuera conocido, amado y adorado por todos en todo el mundo»; junto a él le preocupaba la pervivencia de la fundación. Para ello siguió refugiada en la oración y en el trabajo, envolviendo en la Eucaristía los sufrimientos. Nadie en el hospicio de San Vicente de Paúl en Bragança Paulista, São Paulo, donde fue destinada a trabajar con los ancianos y los enfermos, pudo conocer la hondura de sus padecimientos. La difamación y las murmuraciones no socavaron su fe ni un ápice. Tampoco mermaron sus esfuerzos. Su ardiente caridad fue recompensada con el afecto, el respeto y la admiración de los que iban conociéndola, muchos de los cuales eran acreedores de sus gestos serviciales, generosos.
En 1918 su sucesora, la superiora general Vicência Teodora, de acuerdo con el arzobispo Don Duarte, la trasladó a Ipiranga, a la casa madre. Su cometido fue asistir a las religiosas que se hallaban enfermas. Fuera de ello pasó el resto de su vida sin notoriedad alguna, orando, llena de fe y de confianza en Dios, sostenida por la Eucaristía. Tenía gran devoción por la Inmaculada y por san José. En una ocasión confió al padre Rossi: «La presencia de Dios me es tan íntima, que me parece imposible perderla, y esta presencia le da a mi alma una alegría que no puedo explicar».
Era diabética, y a partir de 1938 la enfermedad comenzó a recrudecerse después de lesionarse uno de los dedos de la mano cuando cortaba leña. Se gangrenó y se lo amputaron, pero la necrosis seguía invadiendo el brazo y en una segunda intervención quirúrgica hubo que cercenar su mano. No hubo modo de poner coto definitivo a la gangrena y en una tercera operación seccionaron su brazo derecho. Finalmente, quedó ciega. El 12 de julio de 1940 redactó su testamento espiritual. Lo que decía era fruto de su experiencia: «Sed muy humildes. Confiad siempre y mucho en la Divina Providencia; nunca, jamás, os desaniméis, aunque vengan vientos contrarios. Nuevamente os digo: Confiad en Dios y en María Inmaculada; manteneos firmes y ¡adelante!». Murió en Ipiranga el 9 de julio de 1942 diciendo: «Hágase la voluntad de Dios». Juan Pablo II la beatificó el 18 de octubre de 1991. Él mismo la canonizó el 19 de mayo de 2002.

 

 

08/07/2017-11:09
Redacción

Carta circular de la Congregación para el Culto Divino a los obispos sobre los requisitos de las hostias y del vino para la eucaristía

(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 8 Jul. 2017).- La Congregación para el Culto Divino, dicasterio del Vaticano, envió una carta circular a los obispos del mundo sobre el pan y vino que se debe usar en la Eucaristía.
La carta firmada por su prefecto, el cardenal Robert Sarah y el arzobispo secretario Arthur Roche, precisa que fue escrita por encargo del papa Francisco. Esto porque en los últimos tiempos sea las hostias que los vinos se venden también en supermercados o por internet, no garantizando los ingredientes que los hacen pan y vino.
Señalan abusos graves como introducir azúcar o miel, o con otros cereales. Sí con harina de Ogm. Además señala que quienes hacen las hostias tienen que ser personas expertas en esto.
Carta circular a los Obispos sobre el pan y el vino para la Eucaristía
1. La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, por encargo del Santo Padre Francisco, se dirige a los Obispos diocesanos (y a quienes se les equiparan en el derecho) para recordar que les compete, sobre todo, a ellos proveer dignamente lo necesario para la celebración de la Cena del Señor (cf. Lc 22,8.13).
Compete al Obispo, primer dispensador de los misterios de Dios, moderador, promotor y custodio de la vida litúrgica en la Iglesia a él confiada (cf. CIC can. 835 §1), vigilar la calidad del pan y del vino destinados a la Eucaristía y, por tanto, a aquellos que los preparan. Con el fin de ayudar, se recuerdan las disposiciones vigentes y se sugieren algunas indicaciones prácticas.
2. Mientras que hasta ahora, por lo general, algunas comunidades religiosas se ocupaban de preparar el pan y el vino para la celebración de la Eucaristía, hoy se venden también en los supermercados, en otros negocios y a través de internet. Este Dicasterio, para no dejar dudas acerca de la validez de la materia eucarística, sugiere a los Ordinarios dar indicaciones al respecto, por ejemplo, garantizando la materia eucarística mediante certificados apropiados.
Es el Ordinario el que debe recordar a los presbíteros, en particular a los párrocos y a los rectores de las iglesias, su responsabilidad para comprobar quién es la persona encargada de proveer el pan y el vino para la celebración, así como la idoneidad de la materia. Además, corresponde al Ordinario informar y recordar a los productores del vino y del pan para la Eucaristía el respeto absoluto de las normas.
3. Las normas acerca de la materia eucarística, indicadas en el can. 924 del CIC y en los números 319 – 323 de la Institutio generalis Missalis Romani, han sido ya explicadas en la Instrucción Redemptionis Sacramentum de esta Congregación (25 de marzo de 2004):
a) “El pan que se emplea en el santo Sacrificio de la Eucaristía debe ser ázimo, de sólo trigo y hecho recientemente, para que no haya ningún peligro de que se corrompa.
Por consiguiente, no puede constituir la materia válida, para la realización del Sacrificio y del Sacramento eucarístico, el pan elaborado con otras sustancias, aunque sean cereales, ni aquel que lleva mezcla de una sustancia diversa del trigo, en tal cantidad que, según la valoración común, no se puede llamar pan de trigo.
Es un abuso grave introducir, en la fabricación del pan para la Eucaristía, otras sustancias como frutas, azúcar o miel. Es claro que las hostias deben ser preparadas por personas que no sólo se distingan por su honestidad, sino que además sean expertas en la elaboración y dispongan de los instrumentos adecuados” (n. 48).
b) “El vino que se utiliza en la celebración del santo Sacrificio eucarístico debe ser natural, del fruto de la vid, puro y sin corromper, sin mezcla de sustancias extrañas. [...] Téngase diligente cuidado de que el vino destinado a la Eucaristía se conserve en perfecto estado y no se avinagre. Está totalmente prohibido utilizar un vino del que se tiene duda en cuanto a su carácter genuino o a su procedencia, pues la Iglesia exige certeza sobre las condiciones necesarias para la validez de los sacramentos.
No se debe admitir bajo ningún pretexto otras bebidas de cualquier género, que no constituyen una materia válida” (n. 50).
4. La Congregación para la Doctrina de la Fe, en la Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucarística (24 de julio de 2003, Prot. N. 89/78 – 17498), ha indicado las normas respecto a las personas que, por diversos y graves motivos, no pueden tomar pan preparado normalmente o vino normalmente fermentado:
a) “Las hostias sin nada de gluten son materia inválida para la Eucaristía. Son materia válida las hostias con la mínima cantidad de gluten necesaria para obtener la panificación sin añadir sustancias extrañas ni recurrir a procedimientos que desnaturalicen el pan” (A. 1-2).
b) “Es materia válida para la Eucaristía el mosto, esto es, el zumo de uva fresco o conservado, cuya fermentación haya sido suspendida por medio de procedimientos que no alteren su naturaleza (por ejemplo el congelamiento)” (A. 3).
c) “Es competencia del Ordinario conceder a los fieles y a los sacerdotes la licencia para usar pan con una mínima cantidad de gluten o mosto como materia para la Eucaristía. La licencia puede ser concedida habitualmente, mientras dure la situación que la ha motivado” (C. 1).
5. Además, dicha Congregación ha decidido que la eucarística preparada con organismos genéticamente modificados puede ser considerada materia válida (cf. Carta al Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos acerca de la materia eucarística preparada con organismos genéticamente modificados, 9 de diciembre de 2013, Prot. N. 89/78 – 44897).
6. Los que preparan el pan y producen el vino para la celebración deben ser conscientes que su obra está orientada al Sacrificio Eucarístico y esto pide su honestidad, responsabilidad y competencia.
7. Para que se cumplan estas normas generales, los Ordinarios, si lo estiman oportuno, pueden ponerse de acuerdo como Conferencia Episcopal, dando indicaciones concretas. Vista la complejidad de situaciones y circunstancias, así como la falta de respeto en el ámbito sagrado, se advierte la necesidad práctica que, por encargo de la Autoridad competente, haya quien garantice efectivamente la genuinidad de la materia eucarística por parte de los fabricantes como de su conveniente distribución y venta.
Se sugiere, por ejemplo, que una Conferencia Episcopal pueda encargar a una o más Congregaciones religiosas u otra Entidad capaz de verificar las garantías necesarias sobre la producción, conservación y venta del pan y del vino para la Eucaristía en un determinado país y en los países en los que se exportan. Se recomienda también que el pan y el vino destinados a la Eucaristía sean convenientemente tratados en los lugares de venta. En la sede de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, a 15 de junio de 2017, solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo.

Robert Card. Sarah Prefecto

Arthur Roche Arzobispo Secretario