Servicio diario - 22 de enero de 2019


 

Mons. Ulloa: "Gracias Papa, por hacer una Jornada para la juventud de las periferias"
Rosa Die Alcolea

JMJ Panamá: El Papa confía su viaje a Santa María la Mayor
Anne Kurian

Comienza la Jornada Mundial de la Juventud en Panamá
Rosa Die Alcolea

Mensaje final del EMJI: "¡Ha llegado el momento de vivir con alegría el rostro indígena de la Iglesia!"
Rosa Die Alcolea

Viaje del Papa a Arabia Saudí: ZENIT habla con el Vicario Apostólico, Obispo Paul Hinder
Deborah Castellano Lubov

JMJ 2019: La primera imagen peregrina de la Virgen de Fátima está en Panamá
Rosa Die Alcolea

Camino Neocatecumenal: 25.000 jóvenes participan en la JMJ de Panamá
Redacción

Santa Marianne Cope, 23 de enero
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

23/01/2019-03:09
Rosa Die Alcolea

Mons. Ulloa: "Gracias Papa, por hacer una Jornada para la juventud de las periferias"

(ZENIT – 22 enero 2019).- “Gracias queridos jóvenes”, ha dicho el Arzobispo, “porque ustedes, en frente de todas las dificultades han sabido saltar los escollos y se han querido reunir en este pequeño pueblo, en esta pequeña Iglesia, que podemos decir desde hoy se convierte en la capital de la Juventud”.

Así ha comenzado su homilía el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, en la Eucaristía de apertura de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), celebrada el martes, 24 de enero de 2019, a las 17 horas, con la participación de 75.000 personas, entre jóvenes, sacerdotes y obispos a la celebración de inauguración de la JMJ.

"Gracias Papa Francisco, por confiar y darnos la oportunidad de hacer una Jornada para la juventud de las periferias existenciales y geográficas", ha señalado Mons. Ulloa.

“Anhelamos que sea un bálsamo para la difícil situación con la que conviven sin esperanzas muchos de ellos, especialmente la juventud indígena y afrodescendiente, la juventud que migra por la casi nula respuesta de sus países de origen, que los lanzan a cifrar sus esperanzas en otros países, exponiéndolos al narcotráfico, la trata humana, la delincuencia y tantos otros males sociales”.

 

Santos en el mundo de hoy

"No tengamos miedo, queridos jóvenes", les ha exhortado Mons. Ulloa, "tengan el coraje de ser santos en el mundo de hoy, con esto no renuncian a su juventud o su alegría; todo lo contrario, mostrarán al mundo que es posible ser felices con tan poco, porque Jesucristo, la razón de nuestra felicidad, ya nos ganó la vida eterna, con su Resurrección".

Sigue la homilía completa del Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, en la Misa de apertura de la Jornada Mundial de la Juventud 2019.

***

 

Homilía del Arzobispo José Domingo Ulloa

Permítanme en primer lugar saludar a los que son los verdaderos protagonistas de este encuentro, como son ustedes, queridos peregrinos que han venido de más de 140 países para encontrarse juntos y juntos soñar que un mundo y una Iglesia nueva es posible.

Gracias queridos jóvenes, porque ustedes, en frente de todas las dificultades han sabido saltar los escollos y se han querido reunir en este pequeño pueblo, en esta pequeña Iglesia, que podemos decir desde hoy se convierte en la capital de la Juventud y hablar de jóvenes es hablar de esperanza, porque solo el cambio en el mundo, solo el cambio en la Iglesia vendrá de la mano de ustedes, queridos jóvenes.

Queridos jóvenes:

Nuestro gozo es inmenso ante la presencia de todos ustedes. Panamá hoy los recibe con el corazón y los brazos abiertos. Gracias por aceptar el llamado de encontrarnos en este pequeño país, en el que la fe llegó de la mano de María, bajo la advocación de Santa María la Antigua. Un país que ha hecho su mejor esfuerzo para que cada uno de ustedes tengan un encuentro con Jesús: Camino, Verdad y Vida.

Somos la primera diócesis en tierra firme, y desde aquí, un 9 de septiembre de 1530, se irradió el evangelio al resto del continente americano, siempre bajo el amparo de María, la Madre. Ella siempre nos ha acompañado, por eso no es extraño que ese encuentro con Jesucristo en esta Jornada Mundial de la Juventud, sea María quien nos ha animado y nos seguirá animando para la celebración de este evento histórico que viviremos todos unidos: los jóvenes cronológicos y los que contamos con más de 60 pero nos sentimos jóvenes, porque solo dejamos de ser jóvenes si dejamos de soñar.

Damos gracias a Dios, por ser la sede de la primera Jornada Mundial de la juventud donde María -"la estrella de la evangelización"- ha sido propuesta a ustedes como modelo de valentía y coraje. Ella, la joven estuvo disponible para cumplir con el proyecto de Dios, para el que le había elegido y cuya respuesta es el lema de este JMJ: "He aquí la sierva del Señor, hágase en mi según tu palabra".

Hoy podemos decir todos nosotros: Gracias Papa Francisco, por confiar y darnos la oportunidad de hacer una Jornada para la juventud de las periferias existenciales y geográficas. Anhelamos que sea un bálsamo para la difícil situación con la que conviven sin esperanzas muchos de ellos, especialmente la juventud indígena y afrodescendiente, la juventud que migra por la casi nula respuesta de sus países de origen, que los lanzan a cifrar sus esperanzas en otros países, exponiéndolos al narcotráfico, la trata humana, la delincuencia y tantos otros males sociales.

Para la Iglesia otras comunidades de fe en nuestro país, pero particularmente para en comunión del Secretariado del Episcopado de América Central, que comprenden todos los obispos de la región, ustedes son muy importantes. Por ustedes toda una maquinaria humana se organizó para hacer posible que puedan tener las condiciones mínimas necesarias para que vivan su peregrinación en este pequeño país.

Ustedes queridos peregrinos de distintos países de nuestro planeta tierra, encontrarán en Panamá un pedacito del mundo entero. Nuestra historia de servicio, de ser punto de encuentro, de unidad en la diversidad, sin distinción de credo, raza, edad, sexo, nos convierte en una nación bendecida.

Gracias a vuestra presencia este país desde este momento junto a ustedes es desde ahora la capital de la juventud del mundo, en el que con el cálido calor humano, y también del clima para esta época, crean las condiciones propicias para que puedan convivir entre sus pares compartiendo sueños, esperanzas, proyectos, que por la fuerza del Espíritu Santo, los comprometan a hacer la revolución del amor, que no será fácil, pero tampoco imposible si la confianza, como María, la colocamos en Dios.

 

¿Qué país están encontrando ustedes, peregrinos?

Una muestra de lo que vivirán los peregrinos en esta semana la han tenido quienes han tenido la experiencia de días en las diócesis, tanto en Panamá como en Costa Rica.

Nuestro pueblo está preparado para recibirlos, para compartir sus tradiciones, la riqueza multiétnica y pluricultural, pero muy especialmente para compartir la alegría de la fe en un Dios, que está actuando entre nosotros, en nuestra historia personal y comunitaria. En las parroquias y en los hogares de acogida se ha tenido la preparación necesaria para dar lo mejor de lo nuestro, el cariño, la cercanía, la fraternidad, el adoptarlos como verdadera familia, la familia de Dios.

 

Disponibilidad a la escucha de Dios

En estos días de la JMJ tendrán la oportunidad de estar en las catequesis con obispos de distintos países; contarán con una formación interesante; el Parque del Perdón, con están los lugares para la confesión; reconciliarse con Dios; el Festival de la Juventud en el que la variedad del talento de los distintos países ofrecen unas posibilidades para alimentar el espíritu. Y el encuentro tan especial con Jesús Eucaristía, alimento espiritual para enfrentar los desafíos de la vida.

Este encuentro de ustedes jóvenes con Jesucristo debe llevarlos a la confrontación consigo mismos y con el adoctrinamiento del sistema de anti valores que impera sustentado en la búsqueda de una falsa felicidad, que es tan fugaz que los lleva a experimentar desesperadamente con tantas cosas que dañan la mente y el espíritu y que al final no lograr llenar el vacío existencial.

Jóvenes: El llamado sigue vigente, perenne, intenso, pleno de una ternura que solo sabe comunicar Cristo. Quizá como Iglesia no hemos podido transmitirle esto con la claridad suficiente, porque a veces los adultos pensamos que los jóvenes no quieren escuchar, que son sordos y están vacíos. Sin embargo la realidad es otra. Les hace falta orientación, acompañamiento, y pero sobre todo que los puedan escuchar.

Sabemos que ustedes no se dejan impresionar fácilmente. No funcionan las frases hechas, los discursos teatrales o los slogans diseñados para afiebrar sus emociones. Sabemos que al igual que en los tiempos de Jesús, los jóvenes buscan testigos, referentes llenos de contenido y experiencia; con camino recorrido a pie, con kilometraje, y no un Dios aprendido e intelectualizado; ustedes buscan de quien les muestre con su vida a Dios, y no quien les hable de Él.

 

Jóvenes verdaderos protagonistas de la JMJ

En la Iglesia estamos en espera de esta primavera juvenil. Confiamos en ustedes, esperamos mucho de ustedes, porque estamos plenamente convencidos, que los verdaderos protagonistas para los cambios y las transformaciones que requiere la humanidad y la Iglesia están en sus manos, en sus capacidades, en su visión de un mundo mejor.

Para asumir este gran desafío deben prepararse en conciencia conociendo su historia personal, familiar, social y cultural, pero sobre todo su historia de fe. Solo así, de la mano de sus abuelos y sus mayores, podrán transformar con la alegría del evangelio aquellas situaciones de injusticia y de inequidad, que hieren a la sociedad.

La Virgen María, la jovencita de Nazaret, es un modelo confiable a seguir por su disponibilidad y servicio al plan de Dios. Es aquella joven que se atrevió a dar el SI al proyecto de Dios, no temió, a pesar de lo que implicaba eso en medio los riesgos que esto significaba en esos momentos. Pero aún así, dijo sí, porque Ella conocía la promesa de Dios hecha a su pueblo, que habría de enviar al Salvador. Su vida de fe le dio la fuerza y la confianza en Dios la sostuvo para asumir ser madre del Dios hecho hombre.

En los ojos de María, cada joven puede redescubrir la belleza del discernimiento; en su corazón puede experimentar la ternura de la intimidad y la valentía del testimonio y de la misión.

Por ello, esta JMJ se le ha confiado a María. Confiar en María no es solo pedirle que nos ayude o pedirle su intercesión en todo; es también actuar como Ella. Imitemos su
disponibilidad a servir, como lo hizo con su prima Isabel. ¿Estemos dispuestos a que una espada nos atraviese el corazón como le pasó a María, al vivir la pasión de su Hijo y esperar pacientemente su gozosa Resurrección?

En la Iglesia, durante la preparación de la JMJ hemos visto y descubierto jóvenes capaces de darse en la entrega por los demás. Han ido emergiendo los talentos y los liderazgos juveniles que han sostenido la organización de esta Jornada, han dado a tiempo y destiempo. Esta es una valiosa muestra que si pueden asumir proyectos impensables.

 

Visibles juventud indígenas y afrodescendientes

Una maravillosa experiencia también se ha tenido con los jóvenes indígenas y afrodescendientes. Han tenido sus encuentros previos a la JMJ, para abordar sus realidades específicas. Esto marca un hito en las Jornadas, porque por primera vez tienen un espacio específico.

La Jornada Mundial de la Juventud en esta región no podía ser sin visibilizar su situación, porque representan un significativo número de la población del continente, que viven en situación de exclusión y discriminación, que los ubican en la marginalidad y la pobreza.

En el Foro JMJ afrodescendientes, líderes juveniles de diversas religiones e ideologías han mostrado su capacidad generar juntos respuestas a su situación de discriminación y exclusión demandando políticas públicas en el marco de la justicia, la educación, el trabajo, y la reivindicación de la mujer desde su cultura y etnicidad, no solo en los espacios sociales sino también religiosos. La importancia de recuperar la memoria histórica con los abuelos y adultos mayores, ha sido también de vital importancia para la juventud afrodescendiente.

Los jóvenes indígenas realizaron su Encuentro Mundial, donde también enfocaron en la memoria viva de sus pueblos, en la lucha por mantener armonía con la Madre Tierra desde la riqueza de sus culturas a la luz de Laudato Si' y, la importancia de su participación activa en la construcción de otro mundo posible. Para la juventud indígena ha sido alentador el mensaje del Papa Francisco.

 

Una herramienta de formación: DOCAT

En el acompañamiento de la formación de nuestra juventud, estamos proponiéndoles el aprendizaje de la Doctrina Social de la Iglesia, a través de una herramienta tecnológica, que fortalecerá el liderazgo juvenil.

Este es un sueño del Papa Francisco que también queremos sea asumido por ustedes jóvenes peregrinos, especialmente de la región centroamericana, porque una manera de enfrentar las adversidades desde la fe, es conociendo el pensamiento social de la Iglesia, para hacer realidad la revolución del amor y de la justicia.

El regalo del Papa a los jóvenes Centroamericanos es el DOCAT Libro y DOCAT App que será entregado durante la JMJ y es una oportunidad para que puedan asumir responsablemente su protagonismo.

 

Santos para transformar la realidad

En su exhortación apostólica sobre "El llamado a la santidad en el mundo actual", el Papa Francisco destaca que la santidad tiene sus riesgos, desafíos y oportunidades. Porque a cada uno de nosotros, el Señor nos eligió «para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el amor» (Ef 1,4)".

Y ser santo no es tener rostros de figuras de las estampitas que compramos por ahí. No, queridos hermanos y queridos jóvenes. Todos podemos ser santos: Aun cuando podamos pensar que nuestra existencia no tiene un gran valor por todos los pecados cometidos. Todos podemos vivir y llegar a la santidad.

El Santo Padre nos dice que para ser santo hay que ir contracorriente; hay que saber llorar, es salir de la lógica "del pare de sufrir", que nos hace gastar "muchas energías por escapar de las circunstancias donde se hace presente el sufrimiento". El ser santo nos hace salir de la corrupción espiritual y material, de todo aquello que nos causa mal y ofende a Dios.

Un santo defiende a los indefensos: al no nacido, pero también al nacido en miseria; defiende a los migrantes, busca la justicia; ora, vive y ama a la comunidad; es alegre y tiene sentido del humor; lucha siempre, sale de la mediocridad, vive la misericordia de Dios y la comparte con el prójimo.

Ser santo no es un mito, es una realidad palpable. El testimonio de vida de santos y santas de la JMJ son una prueba de ello: San Martín de Porres, Santa Rosa de Lima, San Juan Diego, San José Sánchez del Río, San Juan Bosco, Beata Sor María Romero Meneses, San Óscar Romero, Juan Pablo II. Todos ellos nos muestran que es posible la vida de santidad, en todas las culturas y etnias, sin diferencia de sexo, ni de edad. La entrega generosa de sus vidas por Dios y el prójimo les hizo llegar a la santidad.

No tengamos miedo queridos jóvenes, tengan el coraje de ser santos en el mundo de hoy, con esto no renuncian a su juventud o su alegría; todo lo contrario, mostrarán al mundo que es posible ser felices con tan poco, porque Jesucristo, la razón de nuestra felicidad, ya nos ganó la vida eterna, con su Resurrección.

Queridos jóvenes que se han preparado para la Jornada Mundial de la Juventud, los invito para que estén dispuestos a vivir desde este momento con la humildad y disponibilidad de creyentes esta histórica experiencia en este istmo panameño, donde hace más de 500 años llegó la fe. Esperamos que hoy podamos decir al concluir la JMJ que hemos enviado al mundo esos nuevos discípulos de Jesucristo para irradiar en toda la tierra la alegría del evangelio. El evangelio de la misericordia y el amor de Dios. Durante estos días la ciudad Panamá será una gran “Casa de oración y de promoción cristiana”. La palabra de Dios resonará en todos los momentos y por todas las esquinas de Panamá.

Todo está preparado para vivir la fiesta del amor de Dios en medio de nosotros. Pero no olviden que quien nos va a llevar de su mano será María, y el papa Francisco como vicario de Jesucristo, nos afianzará y confirmará en la fe.

 

 

22/01/2019-20:13
Anne Kurian

JMJ Panamá: El Papa confía su viaje a Santa María la Mayor

(ZENIT — 22 enero 2019).- En la víspera de su partida para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Panamá, el 22 de enero de 2019, el Papa Francisco visitó la Basílica romana de Santa María la Mayor.

El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, publicó un tweet anunciando la visita, con dos fotos del Papa recogido.

Como lo hace antes y después de cada uno de sus viajes internacionales, el Papa confió su viaje a la Virgen Salus populi romani, querida por los romanos, cuyo icono se encuentra en la basílica.

El icono ha sido objeto de especial devoción desde el siglo XIII. Según la tradición, fue pintado por el evangelista Lucas. Desde 2003, también ha sido el icono de la JMJ.

Según el blog cercano a la Santa Sede II Sismografo , se trataría de la 67' visita del Papa argentino a este lugar desde su elección.

Se espera que el Papa esté en Panamá el 23 de enero a las 16:30 hora local (22:30 h. en Roma) en el Aeropuerto Internacional de Tocumen. Durante cuatro días en el país, se reunirá con las autoridades, los obispos de América Central, los presos y presidirá las grandes celebraciones de las Jornadas Mundiales de la Juventud: Vía Crucis, el sábado por la noche, la misa del domingo.

© Traducción de Zenit, Raquel Anillo

 

 

22/01/2019-10:31
Rosa Die Alcolea

Comienza la Jornada Mundial de la Juventud en Panamá

(ZENIT – 22 enero 2019).- Con la ola de alegría, ilusión y fuerza que los jóvenes peregrinos de todos los rincones del mundo traen a Ciudad de Panamá, comienza hoy, martes, 22 de enero de 2019, de forma oficial la Jornada Mundial de la Juventud 2019 (JMJ).

La Santa Misa de Apertura de la JMJ, celebrada por el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, tendrá lugar esta tarde, a las 17 horas. La ceremonia tendrá lugar en el Campo Santa María La Antigua, donde se ha instalado una tarima con una capacidad para 2.400 jóvenes, una estructura de 8 metros de altura y 4 niveles.

 

Llegada del Papa

El Papa Francisco llegará a Ciudad de Panamá mañana, miércoles 23 de enero de 2019, a las 16:30 horas al aeropuerto internacional de Tocumen, donde será recibido por el Presidente de la República de Panamá, Juan Carlos Varela Rodríguez y la Primera Dama, Lorena Castillo García, y el Arzobispo de Panamá, Mons. Ulloa Mendieta. (Ver la agenda completa del Papa).

Ayer, lunes 21 de enero de 2019, llegó al aeropuerto internacional de Tocumen la primera imagen peregrina de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, donde la recibió el Arzobispo Mons. Ulloa Mendieta y una delegación portuguesa encabezada por el Rector del Santuario de Fátima.

Esta imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima estará presente en los actos y celebraciones principales de la JMJ. En el programa se tienen previstos momentos de oración, celebración y visitas propias, que incluye, entre otras actividades, la visita a las reclusas del Centro Penitenciario, la mañana del día 23; pacientes del Hospital Oncológico Nacional el día 28. La imagen volverá a Portugal en el 29 de enero de 2019.

 

Festival de la Juventud

Asimismo, hoy inicia el Festival de la Juventud, gratuito y abierto al público que se celebrará por toda la Ciudad hasta el próximo domingo, 27 de enero, en 7 tarimas oficiales e identificadas con los nombres de los Santos Patronos de la JMJ Panamá 2019.

El Festival de la Juventud Alégrate une a jóvenes de todo el mundo compartiendo sus talentos artísticos y religiosos, y también a través de experiencias de fe y de vida. Más de 500 artistas participan en este evento internacional, con presentaciones artísticas de música, danza, teatro y cine, exposiciones, conversatorios y debate.

Las tarimas son Santa María La Antigua, en Cinta Costera; San Joselito, en 5to Centenario; Beata M. Menéses, en Barraza; San Oscar Arnulfo Romero, en Figali Santa Rosa de Lima — ACP; San Juan Diego, en el Parque Omar; San Martín de Porres, en el Parque Urraca; y San Juan Bosco, en el Parque Francisco Arias Paredes.

 

Parque Cristonaut@s

El Parque Omar —tarima llamada 'San Juan Diego'— es un lugar estratégico, ya que está en una zona muy céntrica de la Ciudad de Panamá y dispone de un gran espacio, y es sede del parque Cristonaut@s, una iniciativa de la Fundación Ramón Pané, donde se han instalado áreas para la Reconciliación, para la música, el dibujo, la realidad virtual y diferentes stands con plataformas juveniles y de entretenimiento.

Simultáneamente, numerosas experiencias artísticas tendrán lugar en 33 sedes distribuidas por el área metropolitana de Ciudad de Panamá, que combinarán distintas donde la música, la danza, las artes plásticas, el cine y el teatro, así como la pintura, y la fotografía serán herramientas de conexión cultural para los jóvenes.

 

 

22/01/2019-19:29
Rosa Die Alcolea

Mensaje final del EMJI: "¡Ha llegado el momento de vivir con alegría el rostro indígena de la Iglesia!"

(ZENIT – 22 enero 2019).- Los cientos de jóvenes nativos que han participado en el Encuentro Mundial de la Juventud Indígena (EMJI), del 17 al 21 de enero de 2019, en Soloy, Comarca Ngabe-Bugle, Diócesis de David, como antesala a la Jornada Mundial de la Juventud 2019 (JMJ) en Panamá, han redactado un mensaje al término del encuentro.

“Hacemos un llamado a los gobiernos y a la sociedad en general que se reconozcan y demarquen los territorios indígenas, y proporcionen una educación que respete las culturas de nuestros pueblos como culturas distintas, con sus propias riquezas y sabidurías", denuncian los muchachos.

En el EMJI se han congregado jóvenes de los diversos pueblos originarios del mundo para reflexionar y celebrar la fe en Cristo desde la riqueza milenaria de sus culturas.

Responden así a la invitación del Papa Francisco a la juventud de "ser agradecidos por la historia de nuestros pueblos y valientes frente a los desafíos que nos rodean para seguir adelante llenos de esperanza en la construcción del otro mundo posible", señalan los organizadores.

A continuación, ofrecemos el mensaje de los jóvenes indígenas que han participado en el Primer Encuentro de la Juventud Indígena.

***

 

Mensaje del Encuentro Mundial de los Jóvenes Indígenas

A los pueblos indígenas del mundo, a los hermanos y hermanas que comparten con nosotros la fe católica y a las personas de buena voluntad:

Nos hemos reunido, llenos de esperanza, jóvenes indígenas de 12 países representando a 40 pueblos originarios, del 17 al 21 de enero de 2019 en Soloy, Comarca Ngäbe-Bugle, Panamá, para compartir nuestra fe en Jesucristo desde la riqueza milenaria de nuestras culturas. Tratamos temas como de la memoria viva de nuestros pueblos, la importancia de vivir en armonía con la Madre tierra y ser protagonistas en la construcción del otro mundo posible. Nos alegró recibir el mensaje del Papa Francisco al inicio del EMJI donde invita a la juventud indígena “hacerse cargo de las raíces, porque de las raíces viene la fuerza que los va a hacer crecer, florecer y fructificar”.

En un ambiente de danza, música y oración, también compartimos impactantes testimonios que nacen de las realidades de nuestros pueblos, como sus luchas, anhelos, sueños, esperanzas y dolores, de los cuales brota un grito de la Madre Tierra y de sus hijos oprimidos. Entre las numerosas violaciones a la dignidad de nuestros pueblos, escuchamos de las invasiones y explotación de territorios originarios, gobiernos que violan las leyes de protección ciudadana, las transnacionales y los grandes proyectos económicos que violan a la Casa Común a través de la minería, deforestación, construcción de hidroeléctricas y el turismo invasivo. Así mismo, reconocemos con dolor que las autoridades y gobiernos, quienes deberían de cuidar a la población en general, especialmente a los más débiles, crean alianzas con poderes económicos para llevar a cabo sus intereses individuales marginando a los demás.

Sentimos el sufrimiento que vive particularmente el pueblo Naso y Emberá en Panamá por la falta de respuesta del gobierno para la demarcación de su territorio, la masacre de los pueblos indígenas en Brasil, especialmente los Guarani, Kaiowa y Karipuna que viven con una amenaza inmediata de genocidio y la masacre de los jóvenes nicaragüenses por defender los derechos de sus pueblos. De igual manera nos preocupa la amenaza y el asesinato de líderes indígenas cuando defienden los derechos de sus pueblos y la Madre Tierra.

Por eso, nosotros los jóvenes indígenas, reunidos en una sola voz, exigimos el respeto de nuestra diversidad, cosmovisiones y nuestros modos de vivir, manifestados en las practicas del Buen Vivir. De la misma forma nosotros como pueblos indígenas reconocemos que la tierra es nuestra madre, por eso demandamos el cuidado de la Casa Común para que todos los pueblos tengan vida y un futuro que ofrecer a las nuevas generaciones debido a que en esta tierra estamos entretejidos.

Hacemos un llamado a los gobiernos y a la sociedad en general que se reconozcan y demarquen los territorios indígenas, y proporcionen una educación que respete las culturas de nuestros pueblos como culturas distintas, con sus propias riquezas y sabidurías.

A nuestra querida Iglesia, pedimos los espacios apropiados para vivir nuestras espiritualidades, desde nuestras cosmovisiones, herencias de nuestras abuelas y abuelos, y el respeto a las teologías particulares de nuestros pueblos, frutos de la síntesis entre nuestra fe ancestral y la plenitud de nuestra esperanza en la persona de Jesucristo.

¡Ha llegado el momento de vivir con alegría el rostro indígena de la Iglesia!

 

 

22/01/2019-20:28
Deborah Castellano Lubov

Viaje del Papa a Arabia Saudí: ZENIT habla con el Vicario Apostólico, Obispo Paul Hinder

(ZENIT — 22 enero 2019).- "Celebrar la primera misa pública en los Emiratos Árabes Unidos es un regalo para la comunidad católica" dice a ZENIT el Vicario Apostólico en Arabia Saudí, Mons. Obispo Paul Hinder.

El prelado no tiene dudas: "Ya sea que se trate de cristianos entre musulmanes o de musulmanes entre cristianos, tenemos que aprender a vivir en armonía unos con otros", dice, esperando el próximo viaje internacional del Papa Francisco a los Emiratos Árabes Unidos, el 3 al 5 de febrero de 2019, un pequeño país en la Península Arábiga, donde los católicos son generalmente pequeñas minorías en todas partes. No es la primera visita de Francisco a un país islámico, después de sus viajes a Turquía, Bosnia, Azerbaiyán, Egipto y Bangladesh. Pero el anuncio de este viaje, como confirma el Obispo Hinder, tomó a todos por sorpresa.

Obispo Hinder, franciscano, de 76 años, nacido en Suiza, es el ex obispo auxiliar (desde 2003) y el Vicario Apostólico (desde 2005) de Arabia, específicamente de Yemen, Omán, Arabia Saudita, Qatar, Bahrein, y Emiratos Árabes Unidos.

En 2011, el Vicariato árabe se dividió y se convirtió en el Vicariato Apostólico del sur de Arabia, incluido Yemen, Omán y los Emiratos Árabes Unidos. En este territorio, los católicos, todos los extranjeros, son alrededor de un millón de personas. Comprometidos sobre todo en algunos sectores (construcción, escuelas, servicios, y trabajo doméstico), provienen de más de 100 países: principalmente Las Islas Filipinas, India, y otros países asiáticos.

Hablando con la corresponsal de Zenit, Deborah Castellano Lubov (que viajará a los Emiratos Árabes Unidos nuevamente en el vuelo papal) en una entrevista exclusiva, el Obispo Hinder explica la importancia de este evento histórico para las comunidades católicas locales, la composición multiétnica de estos, y el reto de vivir la fe cristiana en los países islámicos. "Sabemos que a través del diálogo se puede lograr mucho, y el Papa es un verdadero embajador de la paz", dice el prelado.

 

ZENIT: El Papa Francisco será el primer Papa visitar a la Península Arábiga. Cómo cayó la elección de este destino, en particular, en los Emiratos Árabes Unidos?

Obispo Hinder: De hecho, ¡es un evento histórico! Un papa visitará por primera vez a la Península Arábiga. El Papa Francisco realiza esta visita a Abu Dhabi al aceptar la invitación de Su Alteza el Jeque Mohammed bin Zayed Al Nahyan, Príncipe Heredero de Abu Dhabi, para participar en la Reunión Interreligiosa sobre “Fraternidad Humana”. Además, la visita es también una respuesta a la invitación de la Iglesia Católica en los Emiratos. Por lo tanto, fue una serie de visitas de varias delegaciones gubernamentales, antes de la invitación formal, y una relación que maduró y culminó en esta visita.

ZENIT: El anuncio del viaje del Papa tomó a todos por sorpresa. Usted, como Vicario Apostólico  del sur de Arabia desde 2003, alguna vez esperaría dar la bienvenida al Papa a Abu Dhabi algún día?

Obispo Hinder: Sí, llevo en los Emiratos Árabes Unidos y en la región más de 15 años. Tal vez parecía imposible cuando llegué por primera vez a Abu Dhabi, pero en los últimos dos años, ha habido muchos cambios en la forma en que los países del Golfo se han promovido y se han proyectado como naciones globalmente responsables. Han iniciado y dirigido muchas campañas humanitarias, por lo que creo que crear una sociedad diversa es un avance natural de esta visión. Entonces, en los últimos años después de ver las muchas visitas de los líderes estatales del CCG (Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo) al Santo Padre en el Vaticano, no era una realidad demasiado lejana y, ahora que está sucediendo en unos pocos días, es increíble.

ZENIT: ¿Qué bienvenida está preparada para el Papa Francisco? ¿Cuáles son los sentimientos de la población islámica, que forma la mayoría  de los habitantes, esperando este evento?

Obispo Hinder: El Papa Francisco será un invitado del Estado y, como tal, el Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos ha hecho todos los esfuerzos posibles para establecer y proporcionar todos los arreglos necesarios para la visita de Su Santidad a Abu Dhabi. La disposición para celebrar la primera misa pública también es un regalo a la comunidad católica en los EAU por parte de las autoridades. Hasta ahora, no ha habido reacciones negativas a la visita del Papa Francisco. Esperamos y oramos para que el Señor continúe sus bendiciones para que este viaje sea un éxito para nosotros y para los Emiratos Árabes Unidos.

ZENIT: La Iglesia Católica en los Emiratos Árabes Unidos está compuesta exclusivamente por extranjeros de diferentes nacionalidades y orígenes. ¿Qué significa esto para la vida pastoral de las comunidades?

Obispo Hinder: Es cierto, somos una “Iglesia migrante” y yo soy un “obispo de los migrantes”. Una de mis cartas pastorales de 2015 se tituló “Si es posible, por tu parte, vive en paz con todos”, tomada del Capítulo de Romanos 12, verso 18. Comencé mi carta con estas palabras: “En estos días leemos casi todos los días sobre personas que son discriminadas, torturadas, e incluso asesinadas: algunas porque pertenecen a una tribu o raza en particular; Algunos porque tienen una religión diferente”.

Entonces, lo que quiero decir es que, aunque podamos ser diferentes en nuestra apariencia, etnicidad, cultura, y vestimenta, todos somos iguales y queremos lo mismo: fe, esperanza y amor. Nuestras creencias nos unen, aunque venimos de diversos orígenes, podemos vivir juntos en paz y armonía. Nuestras parroquias, en los Emiratos Árabes Unidos y en el resto de los países del CCG, prosperan con estas diferencias y son muy vibrantes y están vivas. Toda cultura se celebra con sus costumbres y devociones; por ejemplo, hay una serie de Misas de nueve días celebrada por la comunidad filipina antes de Navidad en todas las parroquias de los Emiratos Árabes Unidos. A ella asisten miles de fieles, ya sea antes del trabajo en la mañana o en la tarde. De manera similar, la comunidad católica de habla árabe de diferentes iglesias y ritos, con miembros del Líbano, Siria, Jordania, Egipto, Irak y Palestina y más allá es un testimonio de que nuestra fe nos une.

ZENIT: Entre los países cristianos y musulmanes, la idea de “libertad religiosa” y “libertad de culto” es muy diferente. ¿Cómo describiría la situación de las minorías religiosas en los Emiratos Árabes Unidos?

Obispo Hinder: Hemos podido adorar y orar en nuestras áreas designadas de adoración durante las últimas seis décadas aquí en los Emiratos Árabes Unidos. Los Emiratos Árabes Unidos es una sociedad muy tolerante. La primera iglesia en Abu Dhabi se inauguró en 1965 y asistió el padre fundador de los EAU, el difunto Jeque Zayed Bin Sultan Al Nahyan; La iglesia fue construida en un terreno dotado en 1963 por Su último Jeque Shakbout, el entonces gobernante de Abu Dhabi.

Aparte de las iglesias católicas, nuestros hermanos ecuménicos también tienen iglesias en todos los Emiratos. Otros credos que tienen lugares de culto en los Emiratos Árabes Unidos incluyen a los hindúes y sikhs.

Es cierto que hay dos entendimientos diferentes entre “libertad religiosa” y “libertad de culto”, pero si la libertad de culto que experimentamos en el país nos permite practicar nuestra religión sin ninguna malicia, es encomiable. Como residentes de la nación tenemos que obedecer sus leyes y jurisdicciones, que también son válidas para cualquier otra nación.

ZENIT: El tema básico de la visita del Papa a los Emiratos será, es fácil de prever, el diálogo islámico-cristiano. Para vosotros es un tema crucial y vivo. En primer lugar, les pregunto: ¿hasta qué punto es posible este diálogo, entre religiones y culturas tan diferentes?

Obispo Hinder: Este no es el primer diálogo islámico-cristiano en el que participará el Papa Francisco. En 2017, cuando asistió a una conferencia religiosa en El Cairo, Egipto, declaró claramente: “Digamos una vez más un firme y claro ‘¡No!’ A todas las formas de violencia, venganza, y odio llevadas a cabo en nombre de la religión o en el nombre de Dios”.

Entonces, de esto sabemos que a través del diálogo se puede lograr mucho y que el Papa Francisco es un verdadero “embajador de la paz”, ha cruzado valientemente las fronteras, fomentando encuentros personales con líderes religiosos, jefes de estado, y organizaciones humanitarias en el mundo árabe.

El Papa Francisco ha visitado varios países islámicas, entre ellos Turquía, Bosnia, Azerbaiyán, Egipto y Bangladesh. Continúa esta misión para generar un diálogo y resolver las tensiones religiosas en algunos de estos países entre musulmanes y cristianos.

ZENIT: ¿Cuál debería ser el objetivo realista de este diálogo?

Obispo Hinder: En conferencias como estas, los puntos de vista religiosos se comparten y no se trata de establecer un objetivo sino de llegar a un consenso que dará forma a la acción para provocar un cambio en el “pensamiento” y la “percepción” del hombre común. Todos queremos la paz, es el primer criterio humanitario básico, y que vivamos en paz con nuestros vecinos, sin importar cuál sea su religión, credo, o raza. Ya sea cristianos entre musulmanes o musulmanes entre cristianos, tenemos que aprender a vivir en armonía unos con otros.

ZENIT: Según diversas voces del Occidente cristiano, el Islam es incompatible con los derechos humanos, la libertad de la persona, y la democracia. ¿Cuál es tu opinión?

Obispo Hinder: Habiendo vivido en un país islámico durante más de una década, me permito disentir. Sí, hay varios conceptos erróneos e ideologías que están asociados con el Islam y es por estas razones que el diálogo interreligioso es necesario. Algunas prácticas culturales pueden haber sido interpretadas como prácticas islámicas y esto es lo que las conferencias y discusiones pretenden corregir.

Esperamos que a medida que avancemos para ser una sociedad más tolerante, inculcando estos valores en los jóvenes y las generaciones futuras, el mundo será una sociedad mucho más interconectada.

ZENIT: En muchos estados de la Península Arábiga, las condiciones de los cristianos son muy difíciles. ¿Esperas que el viaje del Papa produzca mejoras?

Obispo Hinder: Sí, somos muy conscientes de que en los países devastados por la guerra en la región muchas minorías cristianas han sufrido atrocidades. Pero también es cierto que las minorías musulmanas también han sufrido un destino similar; Esta no es una guerra de religiones, sino ideologías mal interpretadas que atacan a personas inocentes en nombre de la religión. El Papa Francisco ha denunciado muchas veces tales acciones y ha denunciado con vehemencia tales atrocidades con un claro “No” al odio o crimen.

ZENIT: Entre los países que forman parte de su Vicariato Apostólico también se encuentra Yemen, donde hay una guerra que ha fomentado una tensión entre la población. El Papa también mencionó esto en el mensaje navideño de Urbi et Orbi y en la bendición. ¿Puede el viaje del Papa ser una oportunidad para llamar la atención sobre esta guerra olvidada?

Obispo Hinder: Nuestra esperanza para Yemen es que se restablezca la paz y que muchos niños y familias inocentes que padecen de hambre y enfermedades reciban la ayuda necesaria que merecen. Una vez más, esta es una crisis humanitaria y el mundo no puede ignorer esta realidad.

El Papa Francisco siempre ha hecho saber su punto de vista con valentía y seguramente hará lo mismo en caso de que surja la oportunidad. Un claro ejemplo de esto es cuando visitó Bangladesh. El Papa Francisco dijo audazmente a un grupo de 16 refugiados en una reunión interreligiosa en la capital, Dhaka: “La presencia de Dios hoy también se llama Rohingya”.

Por lo tanto, esto nos da la esperanza de que su visita no dé frutos inmediatamente, sino que pone en marcha muchos movimientos positivos que arrojarán luz sobre las crisis humanitarias olvidadas.

 

 

23/01/2019-04:03
Rosa Die Alcolea

JMJ 2019: La primera imagen peregrina de la Virgen de Fátima está en Panamá

(ZENIT — 22 enero 2019).- La primera imagen peregrina de Nuestra Señora del Rosario de Fátima estará presente en los actos y celebraciones principales de la Jornada Mundial de la Juventud, en Panamá, del 22 al 27 de enero de 2019.

La imagen llegó la noche del pasado 21 de enero al Aeropuerto Internacional de Tocumen, en Panamá.

En el programa, está previsto que la talla esté presente en algunos momentos de oración, celebración y visitas propias, que incluye, entre otras actividades, la visita a las reclusas del Centro Penitenciario, la mañana del día 23; pacientes del Hospital Oncológico Nacional el día 28. La imagen volverá a Portugal en el 29 de enero.

 

Delegación portuguesa

Fue presentada por una delegación portuguesa encabezada por el Rector del Santuario de Fátima, el Padre Carlos Cabecinhas, la imagen peregrina fue recibida por una delegación encabezada por el Arzobispo de Panamá, Mons. Domingos José Ulloa, y, entre otros invitados, el Embajador de Portugal en Panamá, Pedro Pessoa e Costa, y la embajadora de Panamá en Portugal, Ilka Varela Bares.

Mons. José Domingos Ulloa entregó a la imagen la identificación como peregrina N° 2 de la Jornada Mundial de la Juventud, siendo que el Papa Francisco es el peregrino N° 1.
Después de la acogida oficial, la imagen siguió en caravana automovilística a la Iglesia de Nuestra Señora de Lourdes donde fue entronizada, en celebración presidida por el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de la Ciudad de Panamá, Mons. Uriah Ashley, que agradeció mucho la importante presencia de la imagen de la Virgen de Fátima.

 

Indulgencia Plenaria

Estos días, los peregrinos y fieles podrá obtener la Indulgencia Plenaria, ante la Presencia de la Primera Imagen Peregrina de Nuestra Señora del Rosario de Fátima en Panamá.

La Arquidiócesis de Panamá recibió el beneplácito de parte de la Penitenciaria Apostólica del Vaticano, el día 8 de enero de este año, para que se pueda obtener la indulgencia plenaria ante la presencia de la Imagen Peregrina de Fátima siempre que los fieles cumplan con las condiciones habituales para estas circunstancias de confesarse, participar en la eucaristía y comulgar; y rezar por las intenciones del Santo Padre.

De acuerdo con las normas de Sor Lucía, la más antigua de los tres videntes de Fátima, la Imagen Peregrina de Nuestra Señora de Fátima fue donada por el Obispo de Leiria y coronada solemnemente por el Arzobispo de Évora, dos diócesis en Portugal el 13 de mayo de 1947.

A partir de esa fecha recorrió en varias ocasiones el mundo, visitó 64 países de los diversos continentes, algunos de ellos en varias ocasiones. No sale de Portugal desde el año 2000. En los últimos años está entronizada en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en el Santuario de Fátima, de donde sólo sale en ocasiones especiales.

 

 

22/01/2019-23:05
Redacción

Camino Neocatecumenal: 25.000 jóvenes participan en la JMJ de Panamá

Ciudad de Panamá, 22/01/2019.- El Camino Neocatecumenal estará presente en la JMJ de Panamá. Desde hace unos días, jóvenes procedentes de diversas partes del mundo han comenzado a llegar a al país, y otros muchos lo harán estos días para encontrarse con el Papa Francisco.

Se espera que alrededor de 25.000 jóvenes del Camino participen en los actos centrales y en el tradicional Encuentro Vocacional que el Camino celebrará el próximo lunes 28, como conclusión a esta JMJ.

Los jóvenes se encuentran peregrinando por diversos países de Centroamérica y ciudades del propio Panamá. Realizan por las calles auténticas “misiones populares” en las que anuncian el Evangelio, el Kerigma, es decir, la Buena Noticia, y dan su experiencia personal de su encuentro con Jesucristo. A su vez, cantan los cantos del Camino y danzan, invitando a todo el que lo desee a participar y unirse a ellos.

La mayor parte de estos jóvenes proceden de América, y en concreto de Centroamérica, de países con grandes índices de violencia y delincuencia. Allí, el Camino —vivido en pequeñas comunidades— ha ayudado y ayuda a tantos de ellos a hacer frente a esta situación. La escucha del Kerigma y la iniciación cristiana que es el Camino ayuda a los hermanos a permanecer en la fe y no desfallecer ante estas situaciones. La experiencia vivida en primera persona de perdón y salvación es la que estos días llevan y comparten en Panamá.

A pesar de las dificultades que sufren, los jóvenes han respondido así a la llamada de Francisco, que a su vez quiere encontrar, sostener y apoyar a los jóvenes de Centroamérica cuyos sufrimientos conoce bien.

 

Más de 8.000 jóvenes de Centroamérica

Como no podría ser de otro modo, los más numerosos proceden de Centroamérica y el Caribe: más de 8.000 jóvenes. Desde Costa Rica se desplazarán 1.500, de Nicaragua 1.500, de El Salvador 1.046, de Honduras y Guatemala 1.500 y 244, respectivamente. Y de República Dominicana 250.

Del mismo Panamá asistirán unos 3.400. De las Antillas Neerlandeas acudirán unos 100.

Desde América del Sur participan 4.320. Desde Brasil lo harán 2.200 jóvenes. De Chile 500, Perú 250, Colombia 300 y Ecuador 700. De Argentina acudirán 120 peregrinos, de Venezuela 120 y de Bolivia 150.

De América del Norte cerca de 5.000. Desde Estados Unidos más de 4.000, de Puerto Rico 300. Desde México unos 400 y 40 de Canadá, entre otros.

Desde Oceanía acuden 300, en concreto 250 de Australia y el resto de Kiribati, un archipiélago ubicado en la zona central oeste del océano Pacífico.

De Europa acudirán 1.000 jóvenes. Unos 300 jóvenes lo harán desde Italia, y 760 desde España. Desde Portugal llegarán a Panamá 120 jóvenes. De Alemania 80, Islandia 14, Francia 40 y desde Polonia 250 jóvenes.

A todos ellos hay que sumar otros miles que pertenecen al Camino y acuden a través de otros grupos.

 

Encuentro vocacional

Como es tradición en cada JMJ, el Camino celebrará un Encuentro Vocacional para recoger los frutos, tras la escucha de las numerosas palabras que el Santo Padre ofrecerá a los jóvenes estos días.

El equipo internacional del Camino, formado por Kiko Argüello, Ascensión Romero y el P. Mario Pezzi, será el encargado de guiar el encuentro. En el mismo participarán también cientos de catequistas itinerantes, presbíteros y familias en misión.

El Encuentro se celebrará el lunes, 28 de enero de 2019, en el Estadio Rommel Fernández, el mismo en el que el Papa Francisco se reunirá con los voluntarios de la JMJ el día anterior antes de regresar a Roma.

Por el momento, han confirmado su asistencia 5 cardenales y 19 obispos.

El Encuentro consta de diversos momentos: la presentación de los jóvenes llegados desde las diferentes naciones, así como los cardenales y obispos; la proclamación de un Evangelio; el anuncio del Kerigma y la llamada vocacional al presbiterado, la vida consagrada, o a las propias familias a ir en misión allí donde sea necesario.

El Encuentro es el sello final a toda la peregrinación que los jóvenes han realizado durante días y a los momentos vividos junto al Santo Padre.

 

El Camino Neocatecumenal en Panamá

En Panamá hay 130 comunidades del Camino, la mayoría en Ciudad de Panamá, la capital, en 20 parroquias. De 8 diócesis con la que cuenta la Iglesia en Panamá, el Camino está presente en 7 de ellas.

El Camino llegó al país en 1975 de la mano de los itinerantes Rino Rossi, Natividad Aramburú y el P. Emiliano Jiménez.

Desde 1990, el equipo responsable de la nación está formado por Javier Cuartero y Sandra Samperi, y desde el 2005 en el equipo está también el P. Miguel Chiner.

 

 

22/01/2019-07:28
Isabel Orellana Vilches

Santa Marianne Cope, 23 de enero

«Esta heroína de Molokai unió su amor a los enfermos al del padre Damián, que se hallaba gravemente enfermo cuando llegó a la isla. Valiente, generosa y sensible, hizo de aquél mundo de sufrimiento un escenario de paz, belleza y esperanza»

El lamento de los débiles convierten en suyo los santos, desafiando obstáculos y riesgos, con la mirada puesta en Dios y la sensibilidad a flor de piel por toda deficiencia humana, lo que les lleva a actuar con premura en servicio del prójimo. No hay otro modo de transitar si verdaderamente se aspira a la unión con la Santísima Trinidad. Marianne —Bárbara de nombre de pila— emuló al padre Damián de Veuster (san Damián de Molokai) ayudándole, y secundándole de forma admirable en su labor cuando él falleció. De origen alemán —había nacido el 23 de enero de 1838 en Heppenheim, Hessen-Darmstadt, Alemania—, cuando tenía corta edad, sus padres que habían sido agricultores se trasladaron a Útica (Nueva York) y se convirtieron en ciudadanos americanos. Bajo el apellido Cope, Marianne se formó y trabajó como obrera en una fábrica durante más de una década. Poseía muchas cualidades, visión y capacidad organizativa, junto a una incontestable vocación por los desfavorecidos, los enfermos y débiles. Era una adolescente cuando se propuso ingresar en la vida religiosa. Pero tuvo que esperar. Ser la primogénita de una familia con dos discapacitados —ambos progenitores—, y tres pequeños hermanos a su cargo, le impusieron un compás de espera de nueve años, en el transcurso de los cuales aguardó llena de confianza y paciencia, haciendo gala de esa alegría que caracteriza a los apóstoles de Cristo.

A los 24 años se integró en una rama de las Hermanas de San Francisco de Filadelfia. Y dado que el carisma estaba en la enseñanza de los hijos de inmigrantes alemanes —como había sido ella— volvió a sus orígenes aprendiendo alemán y poniéndose al frente de nuevos centros docentes. Activa y clarividente fue un puntal en el gobierno (designada y reelegida superiora) en una época de gran fecundidad apostólica para su comunidad, que impulsó una cincuentena de centros hospitalarios, algunos de los cuales llegaron a gozar de gran prestigio, categoría que ostentan en la actualidad los de Santa Isabel de Útica (1866) y el de San José de Syracuse (1869). Dotados de medios inusuales sumamente apreciados por los ciudadanos, cualquier enfermo, sin distinción alguna, podía acceder a ellos. La sombría apreciación de quienes tienden a buscar lo negativo y congelan el aliento cuando se trata de ensalzar lo positivo perseguía a Marianne, que atendía con exquisita delicadeza a los alcohólicos y a las madres solteras, sin descuidar ni un instante a los más desfavorecidos de la sociedad.

Cuando en 1883 supo que buscaban enfermeras para atender a los leprosos en Hawai, se ofreció sin dudarlo: «No tengo miedo a la enfermedad. Para mí será la alegría más grande servir a los leprosos desterrados...».Superaba el medio centenar de comunidades religiosas que fueron reticentes a esta llamada del rey Kalakaua.

Impactada por las deficiencias que halló en la leprosería de Kakaako (Honolulú) modificó sus planes que la hubieran llevado a Syracuse. Su presencia fue una gracia para todos los enfermos. Contó con el apoyo del gobierno que le propuso abrir un hospital general en Maui. Bajo la poderosa convicción: «Solo por Dios», se ocupó de que no les faltase nada ni a los leprosos ni a sus hijos en una admirable labor por la que fue condecorada por el monarca hawaiano.

En 1888 al clausurarse el hospital de Oahu los enfermos tenían que ser asistidos en Molokai. Allí se encontraba el padre Damián. El santo había contraído la lepra en 1884 y cuando llegó Marianne solo le quedaban cinco meses de vida. Ella fue el alma materde la isla de Kalaupapa durante treinta años en los que se desvivió por los pacientes, que quedaron bajo su amparo tras el fallecimiento del religioso en 1889. Justamente en ese momento le ofrecieron regresar a Syracuse, pero se negó. Y realmente fue una bendición para los enfermos. Hombres, mujeres y niños tuvieron en esta valerosa mujer el consuelo y ayuda que la sociedad les negó. Dio un vuelco al escenario en el que se desenvolvía su drama cotidiano. Y junto con la dignidad de trato que nunca les faltó, convirtió el árido entorno en un vergel cuajado de árboles y delicadas flores que contribuían a sobrellevar tanto sufrimiento. En este paisaje amable que había brotado de su sensibilidad por la belleza, introdujo pulcritud y espacio para la distracción de aquel colectivo. Los niños recibían formación y muestras de ternura a raudales.

La inquietud por todos a quienes llevaba el amor de Dios, se tradujo también en un insistente clamor para que se respetaran los derechos de los menores, petición que fue escuchada por el gobierno. Alzó su voz con fuerza para exigir comida y medicación para los enfermos; hizo construir un hospital para mujeres, e impulsó el «Memorial Hospital» de Maui. Lavanderías, iglesias, colegios, talleres de costura, y manualidades fueron también objeto de su quehacer.

Cuando el escritor Robert L. Stevenson llegó a Hawai y vio la labor que hacía la santa y las religiosas que la secundaban quedó conmovido. Les dejó como obsequio un piano para que la música entrara en tan doloroso ambiente, y además, les dedicó un poema sobre la compasión, cuya conclusión es que «solo un mundo necio puede negar a Dios ». Marianne falleció el 9 de agosto de 1918 cuando tenía 80 años de edad. Con humildad y sencillez había escrito: «No espero un lugar elevado en el cielo. Estaré muy agradecida de tener un rinconcito donde pueda amar a Dios por toda la eternidad».Fue beatificada por Benedicto XVI el 14 de mayo de 2005. Y él mismo la canonizó el 21 de octubre de 2012. El Martirologio la incluye el 9 de agosto, fecha de su muerte, pero en Estados Unidos se la recuerda en el día de hoy.