Servicio diario - 12 de marzo de 2019


 

Retiro de Cuaresma: Las ciudades, "lugares ardientes de amor, de paz y de justicia"
Rosa Die Alcolea

Nicaragua: El Diálogo Nacional, en espera de reiniciarse, tras la renuncia de los obispos
Rosa Die Alcolea

La Guardia Suiza Pontificia presenta nueva página web
Rosa Die Alcolea

Venezuela: En la frontera con Colombia "hay gran urgencia y necesidad", asegura el Obispo de Cúcuta
Ana Paula Morales

`J.C. El sueño de Dios', nueva novela de Miguel Aranguren que narra la vida de Jesús de Nazaret
Redacción

México: Exposición fotográfica 'Rostros Desde la fe' en la Basílica de Guadalupe
Redacción

Padre Antonio Rivero: "Subamos a la colina del Tabor"
Antonio Rivero

Beata Dulce Lopes Pontes, 13 de marzo
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

12/03/2019-22:09
Rosa Die Alcolea

Retiro de Cuaresma: Las ciudades, "lugares ardientes de amor, de paz y de justicia"

(ZENIT — 12 marzo 2019).- Este martes, 12 de marzo de 2019, ha tenido lugar la tercera jornada del retiro de Cuaresma que realizan el Papa Francisco y los sacerdotes de la Curia Romana en la Casa del Divino Maestro de Ariccia, predicados por el abad benedictino Bernardo Francesco Maria Gianni.

Los ejercicios espirituales comienzan cada día con la celebración de la Santa Misa y concluye con las Vísperas y la Adoración Eucarística. Ayer, lunes, 11 de marzo, por la tarde, el religioso italiano reflexionó en torno a la propuesta: "Estamos aquí para reavivar las brasas con nuestro aliento".

El religioso ha predicado en este tercer día dos meditaciones, la matutina y la vespertina, sobre los temas "El presente de la infamia, la sangre, la indiferencia" y "¿Recuerdas?".

El abad de San Miniato al Monte en Florencia está proponiendo en sus meditaciones "conceptos entretejidos con citas" y "llamadas como suave soplo a las brasas de la esperanza y de la confianza", señaló.

El predicador orientó sus reflexiones hacia una mirada evangélica sobre las ciudades, a fin de que se conviertan en "lugares ardientes de amor, de paz y de justicia", citando al famoso político italiano católico Giorgio La Pira, incansable constructor de la paz, y evocando la poesía de Mario Luzi, uno de los poetas italianos más prestigiosos del Siglo )0(, haciéndose eco también del pensamiento del sacerdote, escritor y académico italiano muy conocido por el mismo Papa Francisco, Romano Guardini.

 

Reavivar el fuego

"Reavivar el fuego para contemplarlo con esperanza es lo que Mario Luzi nos hace cantar. La ciudad que fue el sueño de Giorgio La Pira, es una ciudad en la que reavivar el fuego, para que la humanidad vuelva a contemplarlo con renovada esperanza, reconociéndolo, como a menudo tratamos de decir, como "un lugar por donde pasa el Señor, un lugar visitado por el Señor", comentó el abad.

El benedictino recordó a los presentes que este tiempo de conversión nos permite reavivar el fuego que se ha vuelto menos ardiente "a causa de la resignación, la costumbre y la tibieza", que justamente reprochan algunas páginas importantes del mismo Apocalipsis.

El Abad Gianni también advirtió ante la presunción de no tener "necesidad de nada", con la que "nos consideramos verdaderamente dispensados de tener que tomar en serio y cuidar este inmenso don que el Señor nos ha dado", "con una vida de oración, de escucha de su Palabra, alimentándonos con la santa y divina Eucaristía, viviendo una fraternidad radical que brota de la escucha de la Palabra y de la conformación con la lógica eucarística con la que la vida divina se hace camino en nosotros". Y "se abre paso de verdad", señaló, "místicamente, con la fuerza del Espíritu Santo".

 

Renacer

Haciendo referencia a las palabras de Giorgio La Pira, "profeta de la esperanza", el monje afirmó que un hombre puede "nacer cuando es viejo" y señaló que esto sucede "si nos sentimos necesitados de la necesidad y deseosos del deseo".

Así, el predicador de los ejercicios de Cuaresma afirmó que se trata pues de "redescubrir que nuestra interioridad tiene una sinfonía, tiene una polifonía en el espíritu mucho más rica y articulada que la que el tiempo mecánico de nuestros relojes nos parece sugerirnos".

San Pablo, en su Segunda Carta a los Corintios —ha reflexionado el padre Gianni— usa palabras de extraordinaria fuerza evocativa y de gran verdad espiritual y antropológica: "Por eso no nos desanimamos, pero incluso si nuestro hombre exterior va deshaciéndose, el interior se renueva día a día".

 

Temas del miércoles

Los temas de mañana, miércoles 13 de marzo, día en que se cumplen 6 años de la elección de Francisco a la Cátedra de Pedro, serán: "Los deseos ardientes"y "Sus banderas de paz y amistad".

Como es habitual en el retiro, habrá una meditación por la mañana y otra por la tarde.

 

 

 

12/03/2019-21:05
Rosa Die Alcolea

Nicaragua: El Diálogo Nacional, en espera de reiniciarse, tras la renuncia de los obispos

(ZENIT — 12 marzo 2019).- El Diálogo Nacional en Nicaragua está actualmente en espera de reiniciarse, tras el decisión de los obispos de no participar en este debate político, y el anuncio del presidente Daniel Ortega de que no acepta unas elecciones adelantadas y condiciona la liberación de los presos políticos, si se detienen las sanciones internacionales.

La Iglesia nicaragüense decidió no estar presente físicamente en las negociaciones, así lo declararon en un comunicado emitido el pasado 8 de marzo de 2019: "No estaremos presentes físicamente en el foro de negociaciones, pero acompañaremos como pastores estos momentos cruciales de nuestra Patria, ejerciendo nuestra misión profética y dedicándonos a la oración y al ministerio de la Palabra".

Asimismo, recuerdan con el Santo Padre que hay que "saber cómo diseñar, en una cultura que privilegie el diálogo como forma de encuentro, la búsqueda de consensos y acuerdos, pero sin separarla de la preocupación por una sociedad justa, memoriosa y sin exclusiones". (Cf Evangelii Gaudium, 239).

 

Verdad y justicia

Los obispos esperan que estas negociaciones tengan este espíritu de búsqueda de la verdad y la justicia. Citando a San Juan Pablo II indican que "ha sonado la hora de los laicos". Por lo tanto, "sentimos que deben ser los laicos los que asuman directamente la responsabilidad de gestionar en este momento las cosas temporales de la Nación".

 

La OEA participará en el Diálogo Nacional

Al mismo tiempo, el Gobierno de Daniel Ortega invitó el sábado, 9 de marzo de 2019, a la Organización de Estados Americanos (OEA) a participar en las negociaciones establecidas con la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, que se encuentra en un impase, después que los obispos de la Conferencia Episcopal se retiraran de las negociaciones en calidad de testigos y acompañantes del proceso.

Sigue detenida la solicitud de la Alianza y de los obispos por la liberación de los prisioneros políticos, y la participación de garantes internacionales como la OEA y la ONU.

Así, los prelados exhortan una vez más al pueblo creyente a "intensificar, particularmente en este tiempo de cuaresma, sus oraciones y ayunos por nuestra Patria", indicaron.

En esta nota, los pastores nicaragüenses indicaron que la Conferencia Episcopal de Nicaragua reitera su agradecimiento al Gobierno y a la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, por su invitación a participar como Testigo y Acompañante Nacional en las conversaciones de la Mesa de Negociación instalada en el INCAE.

 

Acompañar al pueblo

Los obispos afirman de nuevo, como lo hicieron en el anterior comunicado (emitido el 4 de marzo), que consideran que "en este momento histórico nuestro mayor aporte como Pastores de esta Iglesia que peregrina en Nicaragua, seguirá siendo acompañar al pueblo en sus sufrimientos y dolores, en sus esperanzas y alegrías y elevando nuestras plegarias de intercesión para que Nicaragua encuentre caminos civilizados y justos para una solución pacífica en vista al bien común".

Desde el pasado 27 de febrero de 2019, el gobierno y los representantes de la oposición han intentado reanudar el diálogo, y los obispos se mostraron en un principio favorables al diálogo, después de que el Cardenal Leopoldo Brenes, Arzobispo de Managua y Presidente de la Conferencia Episcopal, se reuniera con el Papa Francisco en Roma, el pasado 25 de febrero de 2019.

 

Visita del Nuncio a los prisioneros políticos

Mons. Waldemar Stanislaw Sommertag, Nuncio Apostólico en Nicaragua, visitó a 16 presos políticos que detenidos en los Penitenciario integral de Mujeres y Penitenciario Nacional Jorge Navarro (La Modelo), y escuchó sus preocupaciones y esperanzas, informa Vatican News en español.

El Nuncio les recordó la importancia de la oración, especialmente en este tiempo de cuaresma, "para dejarnos consolar por la cercanía de Dios con los corazones llenos de confianza y con ánimos abiertos a la búsqueda de la verdadera paz", indican en el comunicado.

Asimismo, Mons. Stanislaw Sommertag exhortó a los detenidos a tener fe en Dios para "adentramos en el misterio de la misericordia divina que siempre espera, siempre perdona, porque siempre ama".

 

 

 

12/03/2019-16:52
Rosa Die Alcolea

La Guardia Suiza Pontificia presenta nueva página web

(ZENIT — 12 marzo 2019).- Nace el nuevo sitio web de la Guardia Suiza Pontificia. A través de ella, los aspirantes a guardias pueden descargar directamente los módulos para solicitar el alistamiento.

Esta semana se ha puesto a disposición online la nueva página en Internet. "Después de tantos años, era necesario actualizar técnicamente esta página online para estar al día", comentan la organización.

Lo más destacable del nuevo sitio es la visualización más clara y los comandos intuitivos. También cuenta con una innovación importante: un sistema simple para descargar los módulos digitalizados por parte de los futuros guardias suizos.

Asimismo, en la web se incluyen los perfiles de las redes sociales (Facebook, Youtube e Instagra,) y la posibilidad de ver nuestros vídeos, como por ejemplo la nueva serie #1056, la Guardia Suiza cuenta su historia también implica una innovación importante.

 

Revista 'Mensajero'

El nuevo sitio en internet está optimizado por smartphones y tablets y adapta automáticamente su contenido al tamaño de pantalla disponible. El sitio une a la Guardia Suiza activa, los ex-guardias suizos, la fundación para la Guardia y la fundación para el nuevo cuartel.

Otros contenidos disponibles son los contenidos de la revista Mensajero, referente a la Guardia Suiza y sus fundaciones. Las operaciones de donación también se pueden realizar ahora de manera más sencilla con un nuevo sistema. La Fundación de la Guardia Suiza y/o la Fundación de restauración de carteles pueden ser apoyadas con solo unos pocos clics.

 

¿Quiénes son?

La Guardia Suiza vela constantemente para garantizar la seguridad del Santo Padre y de su residencia, desde 1506. Ellos supervisan todas las entradas oficiales de la Ciudad del Vaticano, realiza el control de acceso y están disponible para los visitantes de todo el mundo para obtener información sobre el Vaticano.

Los Guardias también vigilan durante las audiencias y ceremonias de la Iglesia cuando el Santo Padre está presente. Al mismo tiempo que garantizan la protección personal del Papa, los guardias están uniformados, mientras que los oficiales están vestidos de civil.

Pequeños oficiales y oficiales de rango superior acompañan al Santo Padre en sus viajes apostólicos al extranjero.

Durante las visitas de presidentes, primeros ministros y embajadores, los guardias suizos prestan servicios de honor: en estas ocasiones los soldados del Papa dan la bienvenida al huésped con honores militares. También se brindan servicios de honor en misas, audiencias y en las entradas de la Ciudad del Vaticano.

 

 

 

12/03/2019-20:30
Ana Paula Morales

Venezuela: En la frontera con Colombia "hay gran urgencia y necesidad", asegura el Obispo de Cúcuta

(ZENIT — 12 marzo 2019).- En la situación fronteriza en Colombia con Venezuela —informa Vatican News— el grupo de migrantes ilegales y exiliados que pasan por las trochas, atravesando el río Táchira, llegan a confrontarse entre sí, provocando muerte y heridos. Por lo que la autoridad venezolana ha cerrado los puentes, bloqueándolos con containers.

Mons. Víctor Ochoa Cadavid, Obispo de la diócesis de Cúcuta, expresa ante las situaciones que se presentan, según Vatican News, que "en la frontera entre Colombia y Venezuela hay gran urgencia y necesidad" de parte de los venezolanos al no poder pasar la frontera en San Antonio y Ureña a Colombia, los dos principales problemas son la asistencia de los niños y de los enfermos.

La asistencia de los niños a la escuela: Los infantes venezolanos que van a estudiar a Colombia, no han podido pasar la frontera, por lo que, alrededor de 3.000 niños no han asistido a la escuela.

Con respecto al tema de los enfermos, el prelado señala que hay personas a las que les practican diálisis, quimioterapia o radio terapia en Cúcuta, no han podido pasar a Colombia, por lo que se presenta una gran urgencia médica.

Ante esta situación, Mons. Víctor Ochoa comenta que en apoyo a los hermanos venezolanos se tiene la Casa de Paso La Divina Providencia y ocho comedores en las parroquias cercanas a la frontera de Cúcuta, atendiendo entre 4.000 a 6.000 personas, dando alrededor de 10.000 comidas al día; el principio de atención.

El prelado señaló en la entrevista de Vatican News: "Ninguna mujer en embarazo se va sin comer, ningún niño se va sin comer, ningún anciano se va sin comer". Las trochas no sólo sirven de paso para los venezolanos que salen para Colombia, sino que se pasa alimentos, vehículos y gasolina también.

 

 

 

12/03/2019-12:29
Redacción

`J.C. El sueño de Dios', nueva novela de Miguel Aranguren que narra la vida de Jesús de Nazaret

(ZENIT — 12 marzo 2019).- Acaba de llegar a las librerías `J.C. El sueño de Dios', la nueva novela del reconocido escritor Miguel Aranguren (www.miguelaranguren.com), publicada en la editorial Homo Legens, narra buena parte de la vida de Jesús de Nazaret. Según algunos lectores, se trata de un "texto transformador, que conmueve y ayuda a acercarse a un Cristo muy cercano".

Se trata de un largo volumen de 577 páginas en el que, con un detallismo extraordinario, el lector entra de lleno en el momento más importantes de la Historia: la Encarnación de Jesucristo, con la fluidez de las mejores obras de ficción. A medida que avanza en su lectura, quien tiene el libro en las manos pasa a formar parte de las escenas como un personaje más.

Conmueve la forma con la que Aranguren interpreta los pasajes evangélicos y, muy especialmente, aquello que las Escrituras no nos cuentan acerca de la vida oculta de Jesús, especialmente los lazos que le unieron a José y María.

 

7 años de trabajo

Sin embargo, no se trata de una novela de carácter religioso o doctrinal, pues, según palabras del autor, "no está necesariamente dirigida a un público católico, ni siquiera cristiano. Mi esperanza es que este libro llegue a manos de muchos lectores sin fe, de muchos lectores que apenas sepan nada de Cristo. Confío en que mis personajes les hablen directamente al corazón, ya que es imposible que los protagonistas de los Evangelios nos dejen indiferentes".

Miguel Aranguren confiesa que la novela le ha supuesto un enorme esfuerzo: "Han sido siete años de trabajo, con muchas ilusiones, muchas dudas, algo de miedo y un asombro creciente ante una historia que creemos conocer pero por la que, por desgracia, muchas veces pasamos de puntillas".

Con el ritmo de las mejores obras de Aranguren, la novela está dividida en seis partes. "J.C. El sueño de Dios" arranca con la prisión de san Juan Bautista en la fortaleza de Maqueronte. Juan está debilitado y sufre momentos de debilidad y duda acerca del papel que Jesús viene a cumplir.

 

San Juan Bautista y san José

"Los santos son hombres y mujeres de carne y hueso", incide Miguel Aranguren. "Como cualquiera de nosotros, deben enfrentarse a sus limitaciones y aprender a abandonarse en la voluntad de Dios. Por eso el Bautista y san José son, sin duda, dos de los personajes que más sorprenden en esta novela".

El libro enlaza de forma prodigiosa las diferentes etapas de la Historia de la Salvación con la llegada de Jesús al mundo, dejando claro el sentido de todo el relato bíblico: "el del empeño de Dios por conducirnos al Cielo", en palabras del escritor.

 

El demonio, gran perdedor

La novela está muy bien documentada. Nos transporta a los paisajes y al tiempo en el que sucede la acción, de tal manera que `J.C. El sueño de Dios' se convierte, también, en una ayuda para todo aquel que desee descubrir una mirada nueva, más profunda, más humana y más divina, de las Escrituras.

Miguel Aranguren entra en la honda relación que mantuvieron entre sí los miembros de la Sagrada Familia, sin pasar por alto que no se libraron del rechazo, el recelo y la incomprensión de los suyos. Mención especial merece el final, que sobrecoge, así como la presencia continua del demonio, el gran perdedor de estos aconteceres dramáticos.

Aranguren ofrece pasajes llenos de ternura y otros ciertamente dolorosos, pero sobre las páginas de su novela flota una brisa de esperanza y una tensión que hace que la sea adictiva. Entre otras cosas, ha logrado que Jesús, María y José sean personajes vivos y cercanos, perfectamente adaptados a un entorno complejo en un tiempo muy difícil.

"—¡Qué forma de mirar! —clamó un pordiosero sentado contra la pared de los mendigos, después de que el muchachito le hubiera repartido unas tortas de harina—.

Tiene tus mismos ojos, María, pero más hondos. Y cuando me observa, parece como si conociera todo mi interior (....)".

 

 

 

12/03/2019-21:43
Redacción

México: Exposición fotográfica 'Rostros Desde la fe' en la Basílica de Guadalupe

(ZENIT — 12 marzo 2019).- La exposición Rostros Desde la fe, una mirada a la devoción guadalupanase inauguró este domingo en el Atrio de las Américas de Basílica de Guadalupe.

La muestra está conformada por 36 fotografías de siete jóvenes fotógrafos mexicanos que lograron captar, durante las fiestas guadalupanas de 2018, la esencia de una devoción de casi 500 años y que sigue creciendo año con año.

El Cardenal Carlos Aguiar Retes, Arzobispo Primado de México, fue el encargado de inaugurar la exposición este domingo. Ante feligreses, medios de comunicación y personal de la Arquidiócesis de México aseguró que esta muestra nos permite interiorizarnos en las vidas y motivaciones de los peregrinos que visitan año con año este recinto mariano.

"Esta exposición tiene este gran punto pedagógico para manifestar lo que aquí se vive en la Basílica de Guadalupe, la manera en que la persona llega a este lugar y expresa sus sentimientos, las cosas que necesita; o bien, sus situaciones difíciles, o de gratitud y de confianza", expresó.

El Cardenal Aguiar agradeció a los siete jóvenes fotógrafos que participaron: María Langarica, Daniela Márquez, Hilda Santiago, Ricardo Morales, Arturo Cerón, Luis Patricio García y Ricardo Sánchez. Así como a los patrocinadores de la exposición: la Universidad Anáhuac, la Universidad Iberoamericana y el banco Santander.

Las 36 fotografías de Rostros Desde la fe, una mirada de la devoción guadalupana miden 1x1.5 metros y fueron captadas por los fotógrafos como parte de la cobertura de las fiestas guadalupanas de diciembre de 2018 realizada por el semanario Desde la fe de la Arquidiócesis de México.

La inauguración contó con la presencia del rector de la Basílica de Guadalupe, monseñor Salvador Martínez, y el vicerrector, padre Gustavo Watson.

"Les doy la bienvenida a todos, ustedes saben que en la Basílica hay dos cosas imprescindible: la mamá y sus hijos; los rostros son de los hijos en relación de la mamá, nútranse de ellos", agregó el rector de Basílica.

La exposición permanecerá en el Atrio de las Américas hasta el 10 de mayo.

 

 

 

12/03/2019-12:39
Antonio Rivero

Padre Antonio Rivero: "Subamos a la colina del Tabor"

 

SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA

Ciclo C

Textos: Gn 15, 5-12. 17-18; Flp 3, 17 4,1: Lc 9, 28b-36

Antonio Rivero, L.C. Doctor en Teología Espiritual, profesor en el Noviciado de la Legión de Cristo en Monterrey (México) y asistente del Centro Sacerdotal Logos en México y Centroamérica, para la formación de sacerdotes diocesanos.

Idea principal: Subamos a la colina del Tabor.

Síntesis del mensaje: Después de haber leído y meditado el domingo pasado la lucha contra las tentaciones y el mal, hoy con el pasaje de la transfiguración se nos asegura que la vida cristiana termina con la victoria y la glorificación, si luchamos con y al lado de Cristo. Reflexionemos en la colina del Tabor. Sabemos que Occidente reposa sobre tres colinas: la Acrópolis, el Capitolio y el Gólgota. La Acrópolis está en Atenas y Atenas nos dio al mundo el hombre libre y pensador. El Capitolio está en Roma y Roma nos dio el hombre del derecho y del imperio. El Gólgota está en Jerusalén, que dio la síntesis de los hombres ateniense y romano: el hombre libre, no "de" sino "para", el mandamiento, la Iglesia ecuménica y los destinos eternos. Por tanto, Occidente descansa, culturalmente, sobre estas colinas: libertad, derecho y religión.

 

Puntos de la idea principal:

En primer lugar, hay una cuarta colina, que levanta del suelo apenas 588 metros, pero gloriosa por la gloria del Hijo de Dios que destelló en su cumbre, que trastorna el sentido y transfigura la visión de Atenas, Roma y Jerusalén. Y esa colina es el Tabor. Y un día Jesús dejó al pie a los apóstoles y, con Pedro, Juan y Santiago, subió a la cumbre del monte, en el momento en que bajaba una nube blanca, redonda y luminosa, que la cubrió. En la nube venía Dios y, con Él, los hombres de gran exponente en la historia de Israel, Moisés, legislador de Dios y libertador de su pueblo Israel. Y Elías, vidente de Israel y defensor de la religión de Yahvé. Venían a celebrar con Jesús, y nunca mejor dicho, una reunión en la cumbre. En esa cumbre Jesús autorizó por única vez, y que no sirvió de precedente, que la divinidad se le saliera por los poros del cuerpo y le convirtiera, por la luz interior de su gloria, en hombre de alabastro luminoso en la altura de la colina y de la noche. Habló entonces su Padre e hizo la revelación más trascendental de la historia: "Este es mi Hijo, el predilecto, escuchadle".

En segundo lugar, ¿por qué no subimos también nosotros a esa colina del Tabor? Me atrevo a gritar desde aquí: "Hombres y mujeres libres de Jesucristo, los que vivís instalados en la montaña mágica del bienestar material, los satisfechos con vuestra transfiguración económica, rechazad, por favor, la salida de tono burgués de san Pedro y hoy común a tantos: "¡Qué bien se está aquí...!". Pedro no sabía lo que decía, el pobre. Mirad hacia abajo, donde malviven los desgraciados del valle y los proletariados de la vida — que tanto nos recuerda y hasta la saciedad el Papa Francisco- : los que carecen de las primarias y urgentes libertades de un trabajo, un salario, un seguro, una pensión, un prestigio, un saber, un futuro personal y familiar. Estas son las urgencias de un hijo de la libertad, de un hijo de hombre, de un hijo de Dios. A estos, ¡escuchadlos!".

Finalmente, y sigo gritando desde la cumbre plana del Tabor, cuya gloria cambia del todo la visión del Capitolio de Roma y el sentido del hombre del derecho imperial: "Hombres y mujeres con los derechos humanos de Jesucristo, los que vivís instalados en la montaña fastuosa del poder (político, religioso, económico, social, cultural), satisfechos de vuestra propia transfiguración social, rechazad, por favor, la ocurrencia clasista de san Pedro: "Hagamos aquí tres chalés residenciales...". ¿Para quién? Y para los otros, ¿qué? Pedro no sabía lo que decía. Mirad hacia abajo, donde pululan en hormiguero los parias de la tierra. Los explotados por el dictador político, cultural, sindical, fiscal. O por el negrero de las tierras, Hacienda estatal, sindicato político, empresario o trabajador. Más los marginados sociales sin el título de un prestigio en la pared, sin un libro en la cabeza ni en el corazón la esperanza de un día levantar la cabeza. A éstos, hay que escuchar". Y si me permiten, sigo hoy también gritando así: " Hombres y mujeres de Jesucristo, los que vivís instalados en la montaña mística de esa religiosidad, los satisfechos de vuestra transfiguración espiritual, rechazad, por favor, el despropósito pietista de san Pedro: "¡Qué bien...! Hagamos tres chalés residenciales". A disfrutar de la gloria, ¿no? Y de los otros, los que se alejaron de Dios, prescindieron de la redención, los de espaldas a la Iglesia, los matrimonios fracasados y en otras uniones, los jóvenes que no pisan la Iglesia... ¿qué?".

Para reflexionar: ¿Prefiero ese quietismo cómodo y egoísta de san Pedro, cuando sé que sólo 1 de cada 4 ha oído hablar de Cristo, y de 10, sólo 2 se acercan a la Iglesia? ¿Soy de los que besuquean a Dios en el templo y fuera esquinan, o sea, dejan a un lado al hombre pobre, necesitado, agnóstico, indiferente o de otra cultura? ¿No son estos los hijos predilectos de Dios, la carne de Cristo, como nos dice el Papa Francisco?

Para rezar: Señor, dame fuerzas para subir la colina del Tabor. Dame ojos para ver tu gloria y hermosura, y desde allí ver las necesidades de mis hermanos. Dame corazón para sentir tu embeleso y conmoverme ante mi hermano pobre, que te representa. Dame oídos para escuchar la voz de tu Padre y la voz de mis hermanos excluidos. Dame pies para bajar de esa colina raudo e ir y buscar a esos hermanos y llevarlos a esa colina del Tabor para que también ellos hagan la experiencia de Ti y de tu amor. Y transfiguren su dolor en gozo.

Para cualquier duda, pregunta o sugerencia, aquí tienen el email del padre Antonio, arivero@legionaries.org

 

 

 

12/03/2019-11:59
Isabel Orellana Vilches

Beata Dulce Lopes Pontes, 13 de marzo

«Este ángel bueno de Brasil realizó una labor apostólica impresionante. Fundadora de las Hijas de María Siervas de los Pobres, puso en marcha colegios, bibliotecas, uniones obreras católicas, albergues, etc., además de una extraordinaria red hospitalaria»

María Rita de Souza Brito Lopes Pontes nació en Salvador de Bahía, Brasil, el 26 de mayo de 1914. Era la segunda de cinco hermanos. Su progenitor, Augusto, era dentista y profesor de la facultad de Odontología. Su madre, Dulce María, murió a los 26 años después de dar a luz a la benjamina. Entonces la futura beata tenía 6. Su padre iba a estar a su lado siempre, animándola y ayudándola en sus iniciativas apostólicas hasta el fin de sus días. Él mismo fue impulsor de importantes obras de acción social. De tres de los hijos habidos en el matrimonio: Augusto, Dulce y María Rita, se hicieron cargo sus tías.

Los tres hermanos tomaron la primera comunión en 1922. Cinco años más tarde, en plena adolescencia, Dulce sintió cómo se despertaba su interés por la vida religiosa. Se adentró en lugares deprimidos de la ciudad junto a una de sus tías y, a partir de entonces, la marginalidad y pobreza que vio a su alrededor le conmovieron poderosamente; tanto que ya no pudo apartarlas de su mente.

Introdujo en sus acciones cotidianas la ayuda a quienes sufrían múltiples carencias, dándole prioridad. Y para ello convirtió el sótano de su casa en un lugar asistencial, que fue sumamente apreciado por los que no tenían recursos para afrontar sus difíciles jornadas. Hacía todo lo que podía para paliar tan graves deficiencias. Les proporcionaba alimentos, ropa, medicinas...
En 1932, después de haber cursado estudios en la Escuela Normal de Bahía, profesó como terciaria franciscana. Se vinculó a este carisma conducida por su director espiritual, el padre Hildebrando Kruthaup, ofm. Tomó el nombre de Lucía. Pero al año siguiente ingresó en el Instituto de las Hermanas Misioneras de la Inmaculada Concepción de la Madre de Dios. De esta Orden le habían hablado en el convento de Nuestra Señora del Destierro en 1929.

Y al realizar los votos en agosto de 1934, eligió el nombre de Dulce en honor a su madre. Modelo para su vida fue Teresa de Lisieux. Estaba convencida de que debía imitar su conducta: «Creo que soy como el pequeño amor de mi pequeño corazón, que por más amor que tenga es poco para un Dios tan grande [4 A ejemplo de santa Teresita, creo que deben ser agradables al Niño Jesús todos los actos pequeños de amor por menores que sean».

Durante tres meses del año 1934 realizó una intensa actividad apostólica. Fue destinada a Salvador, y en el Hospital Español desempeñó diversos oficios, desde enfermera a portera, y también sacristana. Hizo un curso que la capacitó para la farmacia. Además, impartió clases en el colegio de Santa Bernadete, y trabajó con los obreros de Itapagipe. Con la firme convicción de que «el amor supera todos los obstáculos, todos los sacrificios», no halló barreras para un apostolado admirable, fecundo y eficaz. Luchó en todo momento sin desfallecer por el bien de los desfavorecidos.

Si se pudiera hablar en términos de curriculum, el suyo es impresionante: la fundación de las Hijas de María Siervas de los Pobres, colegios, bibliotecas, uniones obreras católicas, albergues, el colegio San Antonio para hijos de los trabajadores residentes en el barrio de Massaranduba, en Salvador, en el que también se dio formación a los adultos, etc., además de una extraordinaria red hospitalaria, y todo ello hallándose con su capacidad respiratoria al 30% durante los 30 últimos años de su vida. Era, sin duda, la gracia de Dios que la fortalecía y dilataba sus posibilidades de forma constante, sosteniéndola por encima de las penalidades y problemas que se le presentaron.

El origen del St. Anthony's Hospital, que inauguró con 150 camas en 1959, fue el fruto de su tesón, ya que tras poner en marcha el sindicato de trabajadores de San Francisco, en Bahía, se dedicó a recoger a personas enfermas y a darles cobijo en una isla de Salvador de Bahía, en casas que nadie habitaba. Cuando la obligaron a desalojarlas, echó mano de sus arrestos, que le sobraban, y las trasladó a un antiguo mercado de pescado, hasta que los expulsaron de allí. Sin perder jamás la confianza en Dios, condujo al gallinero de su convento a 70 personas enfermas.

Después de su apertura, este hospital llegó a contabilizar 3.000 pacientes diarios. Sus numerosas fundaciones se hallan aglutinadas bajo el nombre de Obras Sociales «Hermana Dulce». En 1979 el cardenal arzobispo de Salvador, Brandáo Vilela, le pidió que abriese fundación en Alagados.

El reconocimiento por su asombrosa labor propició que en 1988 fuese presentada como candidata al Premio Nobel de la Paz. Tuvo el consuelo de encontrarse con Juan Pablo II en dos ocasiones. La primera en julio de 1980, y la segunda en octubre de 1991, cuando se hallaba en el hospital donde permaneció 16 meses. El pontífice, que tan bien conocía el dolor en carne propia, hizo notar: «Este es el sufrimiento de los inocentes. Igual al de Jesús».

Dulce fue una religiosa fidelísima a su regla en momentos en los que en su congregación había quienes propugnaban que aquélla se mitigara. Una mujer de oración, sacrificada y penitente, que difundió entre los pobres, los operarios y los enfermos su amor al Sagrado Corazón de Jesús y a la Inmaculada.

Murió en el convento de San Antonio el 13 de marzo de 1992. El sepelio, realizado en medio de la consternación de la gente que la consideraba Madre de los pobres y ángel bueno de Brasil, fue una explosión de gratitud. Conducida en un coche de bomberos, fue escoltada por los cadetes de la policía militar y seguida por una imponente procesión de 6 km.

Así homenajeaban a la que ya había entrado de forma triunfante en la gloria. Su cuerpo permanece incorrupto. Fue beatificada en Salvador de Bahía por el cardenal Geraldo Majella Agnelo, en representación de Benedicto XVI, e1 22 de mayo de 2011.