Servicio diario - 08 de agosto de 2019


 

Argentina: El arzobispo de Buenos Aires preside la Misa de la fiesta de san Cayetano
Redacción

Irak: El cristianismo, "al borde de la extinción"
Redacción

Filipinas: Mons. Lazo expresa sus condolencias por las víctimas de la tragedia de Iloilo
Redacción

Mozambique: Firma de un acuerdo de paz histórico
Larissa I López

Colombia: Mensaje de los obispos por el bicentenario de la independencia del país
Larissa I López

Egipto: El Gobierno legaliza otras 88 iglesias construidas sin permisos
Redacción

Monseñor Enrique Díaz Díaz: "Corazón podrido"
Larissa I López

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein), 9 de agosto
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

08/08/2019-17:35
Redacción

Argentina: El arzobispo de Buenos Aires preside la Misa de la fiesta de san Cayetano

(ZENIT — 8 agosto 2019).- El cardenal Mario Aurelio Poli, arzobispo de Buenos Aires y primado de Argentina, presidió la Misa central de la fiesta de san Cayetano, celebrada ayer 7 de agosto de 2019, en el santuario del barrio porteño de Liniers, donde acudieron miles de peregrinos.

Así informó ayer la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA).

En sus palabras dirigidas a los asistentes, el cardenal Poli resaltó el sentido religioso de esta fiesta "aunque quieran explicarla por razones sociales o económicas".

Y recordó que la peregrinación al santuario se realiza "porque es la fe lo que los mueve y el deseo de pan, paz, trabajo, unidad para nuestra familias y de todos los argentinos".

 

Dios te ama primero

Asimismo, el arzobispo se refirió al amor que Dios nos tiene, remitiendo al Papa Francisco, quien afirma que "la primera verdad es que Dios te ama". Y prosiguió, "lo dice como un porteño. Te lo quiero recordar de nuevo, nunca lo dudes, en cualquier circunstancia. Dios te ama".

"Como lo hacen los jóvenes y no tan jóvenes, Dios se tatuó el nombre de ustedes para tenerlos presente", dijo, y agregó: "Dios es fiel y su amor, sencillamente no es un amor volátil y cambiante como el nuestro".

Asimismo, alentó a los fieles a encontrarse con Dios en la oración, definiéndola como una "experiencia preciosa" que permite hablar con Él como a un amigo.

El primado argentino fundamentó su homilía en el pasaje del Evangelio del lavatorio de los pies y el mandamiento del amor. "Al lavar los pies a sus discípulos, los quiso mirar de abajo, y les mostró el valor del servicio bajándolo a las manos", describió.

 

Cristo nos salva hoy

"El Cristo que nos salvó en la cruz de nuestros pecados preside nuestro santuario de san Cayetano y sigue salvándonos y rescatándonos hoy. Podemos hacerle las mil y una, dice el Papa, pero Él siempre está dispuesto a abrazarnos después de cada caída y nos pone de pie", recalcó el arzobispo de Buenos Aires.

Asimismo, reseñó que "la imagen del santito, donde se reflejan tus anhelos y esperanzas, es testigo silencioso de muchas historias de conversión, de perdón y de dones recibidos, que millones podrían contar. Ustedes saben de qué les hablo".

Y aclaró, "cuando se cierran todas las puertas, siempre encontrarás abiertas las del santuario del santo del pan y del trabajo. Que nos dice: 'el bien que deseo para mí, también lo deseo para ti, mas no hay otro camino que rezar con frecuencia a la Virgen María'.

Después, indicó que en esa Misa "vamos a pedir que cada uno de los que vienen al santuario reciban las gracias materiales y espirituales que necesitan para seguir caminando",

Al finalizar la Eucaristía, el cardenal recorrió las dos filas que se hacen para entrar al santuario y bendijo a los peregrinos tal y como lo hacía su predecesor, el Papa Francisco.

 

 

 

08/08/2019-10:59
Redacción

Irak: El cristianismo, "al borde de la extinción"

(ZENIT — 8 agosto 2019).- En una entrevista con la organización benéfica católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), coincidiendo con el aniversario de la toma de las llanuras de Nínive por parte de Daesh (ISIS) en 2014, el arzobispo de Erbil, Mons. Bashar Warda declaró: "El cristianismo en Irak, una de las iglesias más antiguas, está al borde de la extinción".

Así, el cristianismo en Irak podría estar a punto de desaparecer por completo, según indica este arzobispo, uno de los líderes eclesiásticos más respetados de Irak.

Mons. Warda, quien — con el apoyo de ACN — supervisó el cuidado de los desplazados internos que huían de Daesh, declaró a la organización benéfica que la presencia cristiana en Irak ha sido diezmada en las últimas dos décadas.

Así, explicó: "En los años anteriores a 2003, llegamos a tener hasta un millón y medio, el seis por ciento de la población iraquí" e indicó que hoy en día "tal vez sólo queden 250.000 de nosotros. Tal vez menos. Los (cristianos) que quedamos debemos estar preparados para el martirio".

 

La ideología radical sigue presente

El arzobispo Warda manifestó que, aunque Daesh ha sido expulsado del norte de Irak, la ideología radical que lo engendró sigue presente.

"La derrota de Daesh no ha supuesto la derrota de la idea del restablecimiento del Califato (...). "Y con esta idea del Califato vienen todas las estructuras históricas formales de desigualdad intencional y discriminación contra los no musulmanes".

Igualmente, el arzobispo aclara que no solo se trata de Irak: "Vemos líderes en otros países de Oriente Medio que están actuando claramente y de una manera consistente con el restablecimiento del Califato".

 

Los cristianos, en extinción

Refiriéndose a la invasión de Daesh, que llevó al desplazamiento de más de 125.000 cristianos y la pérdida de sus hogares y negocios, relató: "Nuestros atormentadores confiscaron nuestro presente mientras buscaban borrar nuestra historia y destruir nuestro futuro".

Y continuó describiendo que "esta fue una situación excepcional, pero no aislada. Fue parte del recurrente ciclo de violencia en el Medio Oriente durante 1.400 años".

Por otra parte, subrayó que, "con cada ciclo sucesivo el número de cristianos disminuye, hasta que hoy estamos a punto de extinguirnos" y advirtió que elementos del pensamiento islámico han facilitado "ciclos regulares y recurrentes de violencia contra nosotros, como el genocidio otomano de 1916-1922".

También explicó que cualquier otra persona que fuera cristiano en Irak o en cualquier otro lugar de Oriente Medio, "nunca aceptaría ni por un momento la sombra bajo la que vivimos los iraquíes, y bajo la que hemos vivido durante siglos".

Y es que, de acuerdo a la Constitución del país, los cristianos, "somos ciudadanos de menor rango, vivimos a discreción de nuestros autoproclamados superiores. Nuestra humanidad no nos da derechos".

 

Falta de solidaridad en Occidente

El arzobispo Warda fue también muy crítico con lo que él percibía como la falta de solidaridad que los países occidentales han mostrado durante los ataques contra los cristianos.

Sobre ello, cuestionó: "¿Continuaréis aprobando esta persecución organizada e interminable contra nosotros?" (...) ."Cuando la próxima ola de violencia empiece a golpearnos, ¿alguien en vuestros campus organizará manifestaciones y llevará carteles que digan: 'Todos somos cristianos'?".

"Y sí, digo, la 'próxima ola de violencia', porque esto es simplemente el resultado natural de un sistema gobernante que predica la desigualdad y justifica la persecución. La ecuación no es complicada", puntualizó.

 

Perdón y reconciliación

Finalmente, el prelado destacó que "los cristianos somos un pueblo de esperanza. Pero enfrentarnos al final lleva a la claridad, y con ella el coraje para decir finalmente la verdad (...). "La violencia y la discriminación contra los inocentes deben terminar. Aquellos que lo predican deben detenerse".

Del mismo modo, Mons. Warda aludió a la necesidad de perdón y reconciliación entre los diferentes grupos religiosos del país.

"Y así decimos a nuestros vecinos musulmanes, aprended esto de nosotros. Permitidnos ayudaros a sanar. Vuestras heridas son tan profundas como las nuestras. Nosotros lo sabemos. Oramos por vuestra sanación. Sanemos juntos a nuestro herido y torturado país", concluye en la entrevista para ACN.

 

 

 

08/08/2019-12:25
Redacción

Filipinas: Mons. Lazo expresa sus condolencias por las víctimas de la tragedia de Iloilo

(ZENIT — 8 agosto 2019).- El arzobispo de Jaro, Mons. José Romeo Lazo, ha transmitido sus condolencias a las familias de las víctimas de la tragedia ocurrida el pasado 3 de agosto en el mar de Iloilo y ha urgido al Gobierno a tomar "medidas inmediatas a fin de evitar que estos accidentes vuelvan a ocurrir.

Así lo ha informado hoy, 8 de agosto de 2019, el servicio de noticias de la Conferencia Episcopal Filipina, CBCP News.

El arzobispo expresó su pesar por las docenas de vidas cobradas después de que tres lanchas volcaran frente al estrecho de Iloilo.

De acuerdo a las informaciones aportadas, se permitió a las embarcaciones navegar a pesar de las tormentas que se produjeron durante ese día. El número de muertes contabilizadas hasta el momento es de 31 y, según las autoridades, ya no hay más desaparecidos.

En sus declaraciones Mons. Lazo agradeció a los que ayudaron en las operaciones de búsqueda y recuperación de las víctimas desaparecidas, así como a los que asistieron a las personas afectadas por la tragedia.

"Continuemos orando, pidiendo la fortaleza del Señor en estos momentos de gran angustia", ha concluido Mons. Lazo.

El Gobierno ya ha suspendido el trabajo de algunos guardacostas y oficiales marítimos en Iloilo y en la isla de Guimaras, a la espera de una investigación sobre la tragedia.

 

 

 

08/08/2019-16:32
Larissa I. López

Mozambique: Firma de un acuerdo de paz histórico

(ZENIT — 8 agosto 2019).- El presidente Filipe Nyusi y el líder de la RENAMO (Resistencia Nacional Mozambiqueña), Ossufo Momade firmaron el pasado 6 de agosto un histórico acuerdo de paz en Mozambique que establece los términos del alto el fuego entre las dos partes, según informó la agencia Fides.

El documento firmado sigue el acuerdo establecido el 1 de agosto por los dos líderes y, además de suscribir los citados términos para la paz, compromete a los signatarios a celebrar elecciones generales pacíficas el 15 de octubre.

"Queremos asegurarle a nuestra gente y al mundo que hemos enterrado la mentalidad de usar la violencia como una forma de resolver nuestras diferencias", declaró Momade, de acuerdo a la misma fuente. "Este acuerdo abre una nueva era en la historia de nuestro país en el que ningún mozambiqueño usará armas para resolver conflictos", expresó, por su parte, el presidente Nyusi.

 

El camino hacia la paz

Según la citada agencia, el Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO), la ex guerrilla marxista que ostentó el poder durante 40 años, y la RENAMO (Resistencia Nacional de Mozambique), constituyeron los dos frentes que lucharon en la guerra civil mozambiqueña (1977-1992), que ocasionó cerca de un millón de muertes.

Gracias a los acuerdos de Roma, RENAMO se convirtió en el principal partido de oposición y entró en el sistema democrático del país.

En 2014, RENAMO rechazó los resultados electorales, recurriendo a las armas de nuevo. En diciembre de 2016 se logró negociar una tregua temporal que detuvo el conflicto armado.

Esta tregua, firmada por el entonces líder de RENAMO, Afonso Dhlakama, y el presidente electo Nyusi, incluía la aceptación del gobierno de revisar la Constitución para acelerar el proceso de descentralización del mismo y el inicio de un proceso de desmilitarización de RENAMO.

En agosto de 2018 se firmó un principio de acuerdo que estableció el itinerario a seguir para que se produjera el desarme de RENAMO, que empezó la semana pasada.

 

Colaboración de la comunidad San Egidio

Entre los actores que han participado en este largo proceso de negociaciones se encuentra la comunidad de San Egidio, en especial, don Angelo Romano, un sacerdote cuyo conocimiento de Mozambique le permitió convertirse en mediador de la Unión Europea en estas conversaciones, indicó Vatican News.

Sobre el final del proceso y el acuerdo, el padre Romano ha manifestado que "esta es la mejor garantía para un Mozambique de paz" y ha subrayado que la inminente visita del Papa Francisco al país ciertamente estimuló a las dos partes a firmarlo.

 

Próxima visita del Papa

Efectivamente, el pacto se ha producido a pocas semanas del viaje apostólico del Santo Padre a Mozambique, los días 5 y 6 de septiembre, y que lleva por lema "Esperanza, paz y reconciliación".

El programa de Francisco en esta nación presenta, entre otras actividades, la celebración de un encuentro interreligioso con los jóvenes y otro con los obispos, sacerdotes, religiosos/as, consagrados y seminaristas, catequistas y animadores.

Igualmente, el Santo Padre visitará la Casa "Matteo 25" y el Hospital de Zimpeto, además de celebrar la Misa en el estadio del mismo nombre.

 

 

 

08/08/2019-09:49
Larissa I. López

Colombia: Mensaje de los obispos por el bicentenario de la independencia del país

(ZENIT — 8 agosto 2019).- Con motivo de la celebración del bicentenario de la independencia de Colombia, la Conferencia Episcopal del país publicó, el pasado 5 de agosto de 2019, un mensaje dirigido al pueblo colombiano.

Dicho mensaje, que consta de ocho puntos, fue presentado en una rueda de prensa emitida en directo por Facebook Live y presidida por Mons. Óscar Urbina, arzobispo de Villavicencio y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia; Mons. Francisco Antonio Nieto Sua, obispo de Engativá y presidente de la Comisión de Comunicaciones del episcopado; y Mons. Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo auxiliar de Medellín y secretario general de la Conferencia Episcopal,

 

Mirar al futuro con esperanza

Los obispos de Colombia afirman que este bicentenario de la independencia es una oportunidad "para "mirar el pasado con gratitud y con objetividad" y "para asumir nuestro presente con suma responsabilidad, conscientes de la tarea inmensa que tenemos en la transformación de nuestra realidad".

Asimismo, sobre todo, consideran que esta celebración constituye "una invitación para mirar el futuro con esperanza, que para los cristianos no es mera ilusión ni simple optimismo, sino que nace de la confianza en Dios y en su Hijo Jesús".

Igualmente, invitan al pueblo de Colombia a dar gracias a Dios por la independencia "como lo hizo nuestro libertador Simón Bolívar con el Te Deum ofrecido en la capilla del Sagrario de la Catedral de Santa fe de Bogotá el 15 de agosto de 1819".

 

Palabras del Papa

El contenido del mensaje recuerda que la fe cristiana "iluminó y acompañó" al proceso de independencia, de manera que también es preciso agradecer el compromiso de sacerdotes, religiosos y fieles que colaboraron en ella.

Además, remite a las palabras del Papa Francisco sobre Colombia durante su visita en 2017: "Tiene algo de original, algo muy original..., su riqueza humana, sus vigorosos recursos naturales, su cultura, su luminosa síntesis cristiana, el patrimonio de su fe y la memoria de sus evangelizadores, la alegría gratuita e incondicional de su gente, la impagable sonrisa de su juventud, su original fidelidad al Evangelio de Cristo y a su Iglesia y, sobre todo, su indomable coraje de resistir a la muerte, no solo anunciada, sino muchas veces sembrada".

 

Amenazas para la nación

Por otro lado, el texto habla sobre cuáles son los "nuevos enemigos de la libertad en el país: el individualismo, la polarización que provoca el enfrentamiento entre hermanos, la brecha económica fruto de la injusticia social, la corrupción, las actividades económicas y culturales que afectan a la naturaleza, el narcotráfico y la destrucción de la vida humana.

Ante estas amenazas, los miembros del episcopado, resaltan que, aunque la lucha empieza "en el corazón de cada colombiano", también es necesario "abrir nuestras vidas para acoger a Cristo y su Evangelio", pues "Él ha venido a nosotros con todo el poder del amor de Dios para destruir el egoísmo y la soberbia, el odio, la violencia y la codicia".

 

Diálogo como impulso

Para alimentar la esperanza en el futuro, el texto apunta a que la nación precisa "el impulso permanente del diálogo para poner fin a la violencia, encontrar caminos de reconciliación, construir la unidad por encima de obstáculos, convertir en riquezas comunitarias las diferencias, erradicar las causas estructurales de la corrupción que engendra muerte y colocar en el centro de toda la vida política, social y económica la dignidad de la persona humana y el bien común".

"La familia, la escuela, la Iglesia y la sociedad están llamadas a generar una cultura del encuentro en los niños y en los jóvenes, pues ellos son esperanza para el país", continúa el documento.

 

Compromiso del episcopado

Al mismo tiempo, los representantes de la Iglesia colombiana confirman su compromiso "de comunicar a Cristo, Camino, Verdad y Vida, y de trabajar sin descanso para que la reconciliación reine en nuestra sociedad. Sin la auténtica reconciliación es imposible la paz, la justicia, el desarrollo integral y la vida digna para todos".

Por último, estos concluyen su mensaje señalando que el bicentenario de la independencia del país coincide este año con el centenario de la coronación de la imagen de la de la Virgen de Chiquinquirá, a la que le piden que "nos acompañe en la tarea de la renovación de nuestra Patria".

 

 

 

08/08/2019-15:17
Redacción

Egipto: El Gobierno legaliza otras 88 iglesias construidas sin permisos

(ZENIT — 8 agosto 2019).- En los últimos días, el comité gubernamental creado ad hoc para examinar los edificios de culto ha aprobado la legalización de otros 88 templos construidos sin autorización previa.

Así informó, el pasado 6 de agosto de 2019, la agencia de noticias Fides.

En Egipto se está produciendo un proceso de legalización de los espacios de culto cristianos construidos en el pasado sin los permisos requeridos. Hasta el momento, según indica la misma fuente, 1.109 iglesias y edificios han sido revisados y regularizados por dicho comité.

 

Verificación y regularización

Este proceso de verificación y regularización se inició tras la aprobación de la nueva ley sobre la construcción y administración de lugares de culto, ratificada por el parlamento egipcio el 30 de agosto de 2016.

Así, la comisión debe comprobar que miles de iglesias cristianas y lugares de oración construidos en el pasado sin las autorizaciones requeridas cumplen con los estándares marcados por la nueva ley. Los resultados de dichas verificaciones, en general, suelen comportar la regularización de estos espacios sagrados.

Estas construcciones erigidas sin autorización en las últimas décadas por fieles cristianos han servido en ocasiones como excusa para fomentar la violencia contra los cristianos entre los grupos islamistas.

 

Un avance relevante

De acuerdo a la citada fuente, la ley sobre los lugares de culto de agosto de 2016 supuso un avance favorable para las comunidades cristianas egipcias tras las denominadas "10 reglas", añadidas a la legislación otomana por el Ministerio del Interior en 1934.

En ellas se prohibía, entre otras cosas, la construcción de nuevas iglesias cerca de escuelas, canales, edificios gubernamentales, ferrocarriles y áreas residenciales.

En muchos casos, la aplicación de dichas reglas imposibilitaba la presencia de iglesias en ciudades y pueblos habitados por cristianos, especialmente en las zonas rurales del Alto Egipto.

 

 

 

08/08/2019-07:00
Larissa I. López

Monseñor Enrique Díaz Díaz: "Corazón podrido"

 

Sabiduría 18, 6-9: "Castigaste a nuestros adversarios y a tus elegidos nos cubriste de gloria"
Salmo 32: "Dichoso el pueblo escogido por Dios"
Hebreos 11, 1-2. 8-19: "Esperaban la ciudad de sólidos cimientos, cuyo arquitecto y constructor es Dios"
San Lucas 12, 32-48: "También ustedes estén preparados"

Irapuato ha sufrido sequías en los últimos meses y los pocos días que ha llovido lo ha hecho de una forma inusitada. La lluvia ha llegado con tempestad, vientos fuertes y tormenta. Esto ha provocado inundaciones, calles y caminos destrozados, bardas destruidas, casas derrumbadas y árboles caídos. Al contemplar un enorme pino que bloqueaba la carretera, los vecinos descubrieron que el centro del tronco ya estaba podrido y sus raíces deshechas, ya tenía la raíz podrida y no pudo sostenerse. "¡Cómo se iba sostener si tenía el corazón podrido!", sentenció uno de los lugareños.

Es contrastante el primero de los consejos que hoy da Jesús a sus discípulos. Por una parte, se expresa con diminutivos y con ternura que nos hacen pensar en lo frágil de la comunidad, pero por otra los invita a no tener miedo. La base de esta paz y seguridad no proviene de nosotros mismos, sino porque "tu Padre ha tenido a bien darte el Reino". Hemos llegado a una tremenda situación de miedo que se transforma en formas patológicas de temor que hacen a las personas encerradas en sí mismas, hurañas y agresivas. Es cierto, la violencia en el país nos lastima a todos, es cierto se pierde la confianza, pero también es cierto que debemos crear espacios de esperanza y creatividad que logren superar esos temores. No podemos renunciar a la libertad y a la esperanza en aras de la seguridad. Debe haber un cierto equilibrio entre la libertad y la seguridad; si no, terminaremos encerrados en nuestras propias prisiones. Hay muchos ataques externos y tenemos que estar muy atentos como el dueño de la casa que no deja que lo asalte el ladrón, debemos estar precavidos en aquellas cosas que nos pueden hacer daño, pero el verdadero discípulo siempre tendrá en su corazón un remanso de paz y un sano optimismo. ¿Qué sentimos cuando Cristo nos dice: "No temas, rebañito mío'"?

Cristo nos dice que no tengamos miedo, pero también advierte dónde puede crecer el mal y cuál es el más grave peligro. El corazón se enferma cuando no vive el amor. El corazón pierde su sentido cuando se le pegan las cosas y faltan los sentimientos. La acumulación de bienes es con frecuencia un comportamiento casi instintivo que surge del miedo a la miseria y al futuro. Pero no es raro que se transforme en egoísmo, en lujo desmesurado, en excesos de opulencia y finalmente en avaricia. A veces se quiere acallar la conciencia dando una limosna o donando lo que ya no sirve, pero el corazón se queda atascado en los bienes materiales. Frente a los hermanos se requiere una gran generosidad; y frente a los bienes, una verdadera libertad. Como en el ejemplo del administrador, los bienes no son nuestros, son de Papa Dios y son para toda la humanidad. San Basilio nos enseñaba: "El pan que guardas para ti, es del que tiene hambre; el manto que escondes en el ropero, es del desnudo; los zapatos que se quedan olvidados en un rincón, son del descalzo; el dinero que escondes, es del que tiene necesidad..." Es necesario fortalecer nuestro corazón y no dejarlo atarse a lo superfluo, aunque es remar contra el egoísmo, pero siempre nos hará más libres.

Los tres ejemplos que nos ofrece hoy Jesús tienen cada uno su propia enseñanza y nos cuestionan fuertemente sobre la forma de vivir nuestra existencia, de utilizar los bienes y de esperar la venida del Señor. La vigilancia del discípulo no es pura y simple expectación. Se refiere a un estilo de vida dinámico y creativo que busca, inquiere, espera, goza y trabaja en la construcción del reino. No es el administrador que maltrata, bebe, se embriaga y olvida que está por llegar el Señor, así sólo tendríamos una vida mediocre y egoísta que nos llevaría a la ruina. Uno de los riesgos que nos amenazan constantemente es el caer en una vida superficial, mecánica, rutinaria y masificada de la que no es fácil escapar. Con el correr de los años, con el luchar contra las dificultades, mucha gente se desalienta y termina viviendo una vida sin sentido, reduciendo sus ideales y empobreciéndose espiritualmente. Estar vigilantes es despertar cada día con ganas de vivir más y mejor, de ahondar el sentido de lo que hacemos, de encontrar felicidad en el servicio. Tiempo de vigilancia y de espera significa tiempo de gozo, tiempo de trabajo, tiempo de construcción, responsabilidad, fidelidad y tiempo de amar.

Con cada uno de los ejemplos, Jesús nos lleva a revisar nuestra vida y a buscar darle sentido.

El pasaje de este día tiene muchas posibilidades de reflexión. Necesitaríamos darnos cuenta cabal de cuáles son los ladrones que en verdad están robando nuestra paz, por dónde están entrando o si nosotros mismos los hemos invitado a casa. Es triste que, disfrazados de bienestar y comodidad, muchas veces metemos enemigos que socavan la paz y la armonía del hogar. Necesitamos estar alertas, pero también necesitamos hacer un chequeo muy minucioso del corazón, si no está lleno de egoísmo; si no se han obstruido sus arterias por tanta grasa de los bienes materiales; si no se ha endurecido por la envidia, el rencor o la venganza. Mirar los enemigos de fuera que pueden derrumbarnos, pero estar muy atentos a los enemigos de dentro que pueden contaminar el corazón. Ante todos estos peligros, escuchemos con mucha atención y cuidado los ejemplos de Jesús que nos invita a estar alertas, pero con la seguridad y la esperanza que nos dan sus palabras: "No temas, rebañito mío"

Dios, Padre Bueno, concédenos la sabiduría para descubrir las argucias del ladrón que quiere robarnos la paz interior y danos una gran generosidad para entender que el compartir nos da la felicidad. Amén.

 

 

 

08/08/2019-07:00
Isabel Orellana Vilches

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein), 9 de agosto

«Mártir carmelita de origen judío, destacada filósofa e incesante buscadora de la verdad, que halló tras la lectura de la autobiografía de Teresa de Jesús. Copatrona de Europa y patrona de la Jornada Mundial de la Juventud en 2005»

Esta extraordinaria mujer llevó su búsqueda de la verdad hasta las últimas consecuencias creyendo que detrás de ella se hallaba Dios. Nació en Breslau, Polonia (entonces Alemania), el 12 de octubre de 1891, en plena celebración del Yom Kippur hebreo. Su madre, de profunda fe judía, acogió gozosa a la undécima de sus hijos que vino al mundo justamente el día de la Expiación. Este signo premonitorio marcaría la vida de Edith que se vinculó a la Pasión redentora de Cristo. Su camino estuvo plagado de renuncias y sufrimientos de distinta índole, comenzando por la pérdida de su padre cuando apenas tenía 2 años. Era de temperamento nervioso e irascible, pero tras él se escondía una privilegiada inteligencia que le llevaba a reflexionar con inusual madurez a la edad de 7 años. Sin embargo, al llegar a la adolescencia, en una crisis aguda propia de la edad dejó aparcados sus estudios y las prácticas piadosas que su madre le había inculcado. Pasó gran parte de 1906 en Hamburgo junto a su hermana Else y al año siguiente, reconciliada consigo misma y con la vida en general, retornó a las aulas.

Era una alumna destacada. Por puro interés crematístico, dado que en un futuro debía ganarse el sustento, en 1911 tras haber realizado la reválida cursó estudios de historia alemana y psicología en la universidad de Breslau. Pero su verdadera pasión era la filosofía. Por ello, en 1913 ingresó en la universidad de Góttingen. Las tesis de Edmund Husserl, promotor de la corriente fenomenológica, causaban furor. Y Edith, como muchos alumnos, se afilió a ella. Husserl fue su profesor y director de tesis. En esos años trabó contacto con Max Scheler, y el atisbo de luz que ya había percibido en su búsqueda de la verdad junto a Husserl, si bien fue incompleta, al escuchar a Scheler despejó su camino y le mostró la vía del catolicismo. Era un paso crucial, ya que su trayectoria había estado marcada por un férreo ateísmo.

Aprobó el examen de Estado en 1915 con la brillantez acostumbrada, y realizó un curso de enfermería para auxiliar a los heridos de la Guerra Mundial en un hospital militar austriaco. En 1916, después de haber visto de cerca el sufrimiento y la muerte de tantos jóvenes combatientes, preparó y defendió la tesis que mereció la más alta calificación. Algunos de sus amigos y compañeros pudieron influirle en el camino de la fe, pero los elegidos para que diese el salto definitivo fueron el colaborador de Husserl, Adolf Reinach, y su esposa, convertidos al catolicismo. Cuando Adolf murió, Edith se halló frente a la fe y esperanza de su viuda, que acogía confiada el reencuentro con él en la vida eterna. Quedó desarmada: «Este ha sido mi primer encuentro con la cruz y con la fuerza divina que transmite a sus portadores... Fue el momento en que se desmoronó mi irreligiosidad y brilló Cristo».

Edith fue ayudante de Husserl desde 1916 hasta 1918. No volvió a verlo hasta 1930. Preocupada por el papel de la mujer, de la que fue activa defensora en conferencias y escritos, su condición femenina le creó muchos problemas para ejercer la docencia. Además, su origen judío constituyó un veto para obtener la habilitación acreditativa para impartir clases. Regresó a Breslau y se centró en la redacción de artículos. Entre sus diversas lecturas, introdujo la del Nuevo Testamento y los Ejercicios de san Ignacio de Loyola. En el transcurso de una corta estancia en el domicilio de su amiga Hedwig Conrad-Martius en 1921, leyó la vida de la santa de Ávila y le invadió una profunda conmoción: «Cuando cerré el libro, me dije: esta es la verdad». Se bautizó en enero de 1922 y en febrero recibió la confirmación. Pasó por el duro trance de ver con cuánto dolor acogía su madre la noticia. Quiso ingresar en el Carmelo, pero tampoco lo tuvo fácil. Los años siguientes ejerció como profesora, se dedicó a traducir textos, entre otros, de santo Tomás de Aquino, a impartir conferencias, y a escribir obras de gran profundidad filosófica.

En 1933, cuando el holocausto judío había estallado, le abrieron las puertas del Carmelo de Colonia. Volvió a su hogar y se despidió de su madre en medio de indecible sufrimiento. Las lágrimas de ambas rodando por sus mejillas no eran más que la pálida sombra de dos corazones que sin romperse jamás seguían dos caminos de fe divergentes. Cuando Edith abandonó su casa, junto al peso del ofrecimiento que hizo a Cristo, brillaba con inusitada fuerza el candil de la esperanza evangélica: «todo aquél que deje padre, y madre...». Sabía que esos jirones de su vida iban reconvirtiéndose en odres nuevos conforme se alejaba de los suyos para adentrarse en su apasionante destino. Tomó el hábito en 1934, a los 42 años, y el nombre de Teresa Benedicta de la Cruz. En 1936 culminaba su emblemática obra Ser finito y ser eterno. Profesó en abril de 1938 y ese mismo mes fallecía Husserl.

Su admirable vida, fraguada de trabajo, humildad, oración y sacrificios iba desarrollándose en este convento y en el holandés de Echt desde finales de 1938. Hasta que el 2 de agosto de 1942 los nazis la detuvieron a ella y a su hermana Rosa, que había seguido sus pasos y era portera del convento. «Ven, vayamos por nuestro pueblo», le dijo. En «Amor por la cruz» había escrito: «Solo puede aspirar a la expiación quien tiene abiertos los ojos del espíritu al sentido sobrenatural de los acontecimientos del mundo; esto resulta posible solo en los hombres en los que habita el Espíritu de Cristo, que como miembros de la Cabeza encuentran en Él la vida, la fuerza, el sentido y la dirección». De Amersfoort pasaron al campo de extermino de Westerbork. Recluidas en él hasta el 7 de agosto, el 9 las trasladaron a Auschwitz-Birkenau junto a 987 judíos, siendo sacrificadas en la cámara de gas. Frente a la ignominia y la sinrazón de la Shoah, Edith halló al pie de la cruz la luz redentora de Cristo. Juan Pablo II la beatificó el 1 de mayo de 1987, y la canonizó el 11 de octubre de 1998. El 12 de julio de 1999 la declaró copatrona de Europa.