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Impresionante testimonio de David Bereit, fundador de ‘40 Días por la Vida’: “La oración y el ayuno lo cambia todo”

 

La organización provida ha salvado más de 16.000 niños y ha conseguido cerrar más de 150 centros abortistas

 

 

05/02/21


 

 

 

 

 

La Fundación EUK Mamie-HM Televisión ha entrevistado David Bereit, cristiano católico una de las voces más activas en la defensa de la vida en los Estados Unidos.

Bereit fue fundador y, durante más de diez años, director nacional de «40 días por la Vida», una organización que defiende la vida en campañas de oración y ayuno que tienen lugar dos veces al año.

 

16.000 niños salvados

Gracias a la labor realizada desde «40 días por la Vida» se ha conseguido el cierre de 104 centros abortistas, cerca de 180 trabajadores de esos centros han dejado de practicar abortos tras una conversión de corazón, y lo que es más importante, se han salvado más de 16.000 niños. Unos 725.000 voluntarios de 40 países forman parte de esta organización.

David Bereit comprendió en un momento dado de su vida que el Señor le pedía dejar su carrera profesional en una empresa farmacéutica para dedicarse, en cuerpo y alma, a defender a los no nacidos.

Esa decisión tuvo enormes consecuencias a todos los niveles de su vida, especialmente para su fe. En este breve vídeo, «Un primer paso: una lucha por la vida», Berit narra cómo fueron esos primeros momentos de «40 días por la vida» y dirige un llamamiento a que nos involucremos en la lucha por la vida.

 

Todo comenzó en Texas

En el vídeo, cuenta que él vivía en un pueblo Texas donde Planned Parenthood anunció que iba a construir un centro abortista en su zona. Entonces se reunieron muchas personas cristianas, pero sobre todos cristianos católicos, para frenar ese centro porque "estaban llamados a ser la voz de los que no pueden hablar por sí mismos".

David Bereit no quería tener nada que ver con esto pero su mujer le dijo: "David tenemos que involucrarnos. Desgraciadamente el centro abortista abrió sus puertas y muchas mujeres abortaron".

"En esa época Dios puso en mi corazón la necesidad de ser algo más que voluntario. El 26 de junio de 2001 experimenté una clara llamada de Dios a dejar mi carrera profesional en la industria farmacéutica y meterme en esa organización provida", dice en el vídeo.

Durante los años siguientes su labor fue desde una bendición hasta un reto increíble. Pero un día, en verano de 2004 fue un momento crucial para ellos: los niños seguían muriendo y las mujeres seguían siendo heridas, y "nosotros como cristianos, no estábamos haciendo lo suficiente", expresa.

 

"Dios nos muestra de verdad qué quiere que hagamos"

Entonces, aquel grupo se sentó en su pequeña oficina provida y estuvieron rezando durante una hora invocando a Dios para que les mostrara lo que quería que hicieran. "Cuidado con rezar estas oraciones porque Dios de verdad nos muestra lo que quiere que hagamos", señala.

En esa hora de oración, Dios les mostró un tiempo bíblico, los 40 días que Dios ha utilizado para llevar a cabo una transformación y para poner a fidelidad a su pueblo. "Sentíamos que se nos ponía a prueba nuestra fidelidad mientras los niños morían y las mujeres seguían siendo dañadas. Pero a la vez sentíamos que necesitábamos una transformación en nuestra comunidad y que toda esta injusticia del aborto".

 

Ayuno y transformación

De allí invitaron a toda la comunidad a rezar y a ayunar para el fin del aborto, porque con la ayuda de Dios todo es posible. "Yo nunca había ayunado, solo mi maravillosa mujer católica me decía lo que era el ayuno en cuaresma y nos pusimos a ayunar. La primera vez que ayuné pensé: con el ayuno podemos cambiar el mundo a nuestro alrededor. Durante nuestro tiempo de ayuno, nos transforma Dios. Él nos cambia y a través de Él, cambiamos a otros".

El segundo reto que les pidió el Señor fue acudir donde las mujeres estaban en peligro, haciendo vigilia, sin juzgar ni gritar, ni condenar solo rezar para que el "Espíritu Santo nos utilizase, ir y ser fieles, y eso durante las 24 horas del día en vigilia. Y el tercer paso fue llevar la buena noticia a toda la comunidad", relata David Bereit.

 

Se salvaron 100 vidas

"Estaba aterrorizado pero nos dimos cuenta que si no actuábamos así, los niños morirían", afirma. Así tuvo lugar el primer "40 días por la Vida" donde participaron más de mil personas y en aquel primer encuentro los abortos en nuestra comunidad se redujeron en un 28%. "Más de cien vidas fueron salvadas por la gracias de Dios y la fidelidad de su pueblo", recuerda.

Ahora "40 Días por la Vida" está extendido a nivel internacional y más de un millón de personas participan. "Dios ha actuado de una manera profunda y poderosa", dice.

La primera campaña de "40 Días por la Vida" removió el corazón de Abby Johnson que tras ver un aborto, se arrepintió y comenzó su propio camino de sanación siendo hoy una activista provida.

 

Conversión a la Iglesia católica

Posteriormente, David que era presbiteriano, recibió la comunión en el seno de la Iglesia Católica y recibió la Eucaristía y la Confirmación con su mujer como madrina de confirmación. "Dios hace milagros si estas dispuesta a abrirle tu corazón".

David considera que están asistiendo a ser testigos del comienzo del fin del aborto.