Servicio diario - 09 de junio de 2020


 

El Papa crea el Fondo Jesús Divino Trabajador para la diócesis de Roma
Rosa Die Alcolea

España: Celebración del Corpus Christi en tiempos de pandemia
Larissa I. López

Comienza el juicio de los asesinatos de los jesuitas españoles en El Salvador
Rosa Die Alcolea

Costa Rica: Obispos exhortan a dar a conocer el protocolo del “aborto terapeútico”
Larissa I. López

España: 152 monasterios de clausura logran sobrevivir a la pandemia
Redacción

Bolivia: “Actuar con responsabilidad”, la mejor forma de combatir el coronavirus
Larissa I. López

Infancia Misionera: Jóvenes comprometidos durante el confinamiento
Larissa I. López

Píldoras de esperanza: “Ésta es la luz de Cristo, yo la haré brillar”
Ricardo Grzona

Argentina: El Papa acepta la renuncia del obispo de San Luis
Larissa I. López

P. Antonio Rivero: “¿Quieres entrar en la Alianza de Dios para alcanzar la salvación?”
Antonio Rivero

Beato Eduardo Juan María Poppe, 10 de junio
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

El Papa crea el Fondo Jesús Divino Trabajador para la diócesis de Roma

Para afectados por la crisis

junio 09, 2020 14:25

Papa y Santa Sede
Roma

(zenit – 9 junio 2020).- Nace, por voluntad del Papa Francisco, el Fondo Jesús Divino Trabajador, un proyecto para la diócesis de Roma de apoyo a los afectados por la crisis económica debido a la pandemia de coronavirus.

La iniciativa se ha dado a conocer en una carta escrita por el Santo Padre al cardenal Angelo De Donatis, vicario general para la diócesis de Roma, publicada el 9 de junio de 2020 por el propio Vicariato de Roma.

“Como Obispo de Roma he decidido establecer en la diócesis el Fondo ‘Jesús Divino Trabajador’, para recordar la dignidad del trabajo, con una asignación inicial de un millón de euros a nuestra Caritas diocesana”, indica el Pontífice en su misiva.

El Fondo, que será presentado a la prensa el viernes 12 de junio, se trata pues de una iniciativa dirigida a quienes “corren el riesgo de quedar excluidos de la protección institucional y necesitan una ayuda que los acompañe, hasta que puedan volver a caminar autónomamente”.

Este proyecto es un signo “capaz de instar a todas las personas de buena voluntad a que ofrezcan un gesto concreto de inclusión, especialmente para aquellos que buscan consuelo, esperanza y reconocimiento de sus derechos”, describe el Obispo de Roma, quien apela especialmente a los sacerdotes para que sean “los primeros en contribuir al Fondo” y se conviertan en “partidarios entusiastas de la compartición en sus comunidades”.

 

Sectores más afectados

En la carta dirigida al vicario general de Roma, el pensamiento del Santo Padre se dirige “al gran número de trabajadores jornaleros y ocasionales, a los que tienen contratos a tiempo determinado no renovados, a los pagados por hora, a los practicantes, a los trabajadores domésticos, a los pequeños empresarios, a los trabajadores autónomos, especialmente a los de los sectores más afectados y a sus industrias conexas”, también a tantos padres y madres “que se esfuerzan por poner la mesa para sus hijos y garantizarles el mínimo necesario”.

“Me gusta pensar”, escribe el Papa Francisco, “que podría convertirse en la ocasión de una verdadera y propia alianza para Roma en la que cada uno por su parte, se sienta protagonistas del renacimiento de nuestra comunidad después de la crisis”.

De este modo, el Pontífice invita a todas las instituciones y a todos los ciudadanos de la capital italiana a “compartir generosamente lo que tienen a su disposición en este tiempo tan extraordinario y tan cargado de necesidades”. Así se ha dirigido “al buen corazón” de todos los romanos, exhortándoles a “considerar que en este momento no basta con compartir sólo lo superfluo”.

 

“Solidaridad de la puerta de al lado”

“Quisiera ver florecer en nuestra ciudad la solidaridad ‘de la puerta de al lado’ –es el deseo del Papa Francisco–, las acciones que recuerdan las actitudes del año sabático, en el que se perdonan las deudas, se abandonan las disputas, se pide el pago según la capacidad del deudor y no del mercado”.

 

Agradecimiento del cardenal Donatis

El cardenal vicario Angelo De Donatis afirma estar “profundamente agradecido” al Santo Padre por la institución del Fondo Diocesano Jesús Divino Trabajador, para recordar “la dignidad del trabajo” y ayudar a todos aquellos que han perdido el trabajo durante la pandemia.

“De la carta se desprende todo el amor y la preocupación que nuestro obispo nunca deja de mostrar hacia los hombres y mujeres de nuestra ciudad”. Estoy seguro de que, junto con las instituciones –empezando por la Región del Lacio y la de Roma Capital– “cada uno por su parte”, responderemos todos unidos y comprometidos a crear “una verdadera y propia alianza para Roma”, para ser “protagonistas del renacimiento de nuestra comunidad después de la crisis”.

 

 

 

 

España: Celebración del Corpus Christi en tiempos de pandemia

Mensaje de los obispos españoles

junio 09, 2020 14:04

Conferencias Episcopales

(zenit – 9 junio 2020).- En un año especial, ya que no se verán las tradicionales procesiones del Corpus Christi por las calles de las ciudades debido a la pandemia del coronavirus, la Conferencia Episcopal Española (CEE) envía un mensaje y las diócesis preparan las celebraciones dentro de las posibilidades actuales.

60 días después del Domingo de Resurrección, se rememora la institución de la Eucaristía, la fiesta del Corpus Christi, que tuvo lugar el Jueves Santo durante la Última Cena, cuando Jesús convirtió el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre. No obstante, en algunas diócesis de España la celebración se traslada al domingo, pues en el calendario civil no se contempla como día festivo.

En su mensaje para esta fiesta de la Iglesia, la CEE alude al “singular ayuno eucarístico” que la emergencia sanitaria de la COVID-19 ha generado, deseando que este “haya acrecentado en nosotros el deseo de la Eucaristía y la necesidad de profundizar en su ser y significado”.

 

Dios necesita de todos

Reflexionando sobre el pasaje de los discípulos de Emaús, que abandonaron la comunidad porque se sintieron abandonados por Jesús tras su muerte y cuyo encuentro con Jesús como Peregrino “fue disipando sus dudas y tocando su corazón”, los obispos recuerdan que en estos días también muchas personas se han sentido desengañadas.

En este sentido, resaltan que “Dios necesita de cada uno de nosotros para hacerse presente a tantos caminantes de Emaús que avanzan sin rumbo y sin ánimo”, pues “esta pandemia no solo nos está dejando dolorosas muertes, sino que está provocando además una grave crisis económica y social”.

 

Ser discípulos misioneros

Con respecto a la celebración del día de la Eucaristía indican que “además de alabar y dar gracias a Dios por haberse quedado con nosotros hasta el fin de los tiempos, hemos de acoger con gozo su invitación a colaborar con Él en el anuncio del Reino, en la atención a los hermanos y en la transformación del mundo”, pues en la Eucaristía “experimentamos la alegría de vivir y recibimos el alimento necesario para reparar nuestras fuerzas desgastadas en el servicio a los hermanos”.

Finalmente, los prelados subrayan que “no podemos quedarnos bloqueados por el dolor”: “El Señor nos llama constantemente a ser discípulos misioneros, a salir a los caminos y encrucijadas de la historia para convocar a todos, especialmente a los desesperanzados, a los pobres y excluidos, a los que experimentan la violencia y la persecución y a los que habitan en las diferentes periferias de nuestro mundo”.

A continuación se describe la manera en la que algunas diócesis con gran tradición en la celebración del Corpus Christi se han adaptado a las condiciones sanitarias actuales para celebrar esta festividad de la Iglesia.

 

Toledo

La Catedral Primada de Toledo acogerá el próximo 11 de junio la solemnidad del Corpus Christi con la celebración de la Misa en rito hispano-mozárabe. La ceremonia dará comienzo a las 11, pero este año el aforo del templo será limitado y solo se podrá acceder a él mediante invitación.

A la celebración eucarística solo podrán asistir algunas autoridades y una pequeña representación de cada uno de los capítulos y de las cofradías que habitualmente participan en procesión solemne que sigue a la Misa, así como del clero de la ciudad y cinco representantes de cada una de las parroquias del arciprestazgo de la ciudad de Toledo.

Finalizada la Eucaristía, el Santísimo Sacramento procesionará por el interior de las naves del templo. En la procesión solo participarán los miembros del cabildo primado. En el atrio exterior, el arzobispo impartirá con el Santísimo la bendición a la ciudad. A este acto podrán asistir algunos fieles, que deberán ocupar los espacios señalados por las autoridades municipales en la plaza del Ayuntamiento, hasta completar el aforo.

El domingo por la tarde, alrededor de las 19 horas, tendrá lugar la procesión eucarística por el interior del templo, conocida con el sobrenombre de “Corpus Chico”.

 

Sevilla

Desde el Cabildo de la Catedral de Sevilla han informado que la Misa comenzará a las 10 h. y el aforo se verá limitado a 611 personas. Para cumplir con el mismo, solo serán invitadas las autoridades civiles, militares y universitarias.

La procesión con el Santísimo Sacramento se realizará en el interior mismo de la catedral. Igualmente, para evitar la aglomeración de personas, el cortejo procesional quedará reducido al Consejo de Cofradías, la Junta de Gobierno de la Archicofradía Sacramental del Sagrario, el Cabildo Catedral, el vicario general, el obispo auxiliar, el arzobispo y las primeras autoridades.

Además, se ha previsto que procesionen dos personas en representación de los colectivos esenciales durante la pandemia (personal sanitario, farmacéuticos, centros de personas mayores, UME, Guardia Civil, Policía, Protección Civil, Bomberos y miembros de Cáritas y de Cruz Roja).

La Eucaristía no contará con la compañía de los pasos de los santos sevillanos y el arzobispo bendecirá a todos los fieles de la archidiócesis desde la puerta de la Asunción de la Catedral. Finalmente, el Cabildo Catedral ha informado que la Octava posterior al Corpus Christi de adoración al Santísimo con el tradicional baile de Seises “queda suprimida”.

 

Granada

El arzobispado de Granada ha informado en una nota que el jueves 11 de junio la celebración de la Eucaristía será a las 10 horas. Esta será emitida por el canal de televisión de la diócesis, Virgen de las Angustias Televisión.

A continuación, se celebrará una Hora Santa y, acto seguido, habrá una procesión claustral por el pasillo central con un trono pequeño. Durante el recorrido de la procesión, el Santísimo Sacramento irá acompañado por miembros de las distintas hermandades, cofradías y asociaciones eucarísticas.

Al mismo tiempo, como cada año, se mantiene la Misa en la catedral durante toda la Octava del Corpus. Esta se celebrará a las 19 horas hasta el jueves 18 de junio inclusive y en ella participan distintas hermandades sacramentales y asociaciones eucarísticas, así como el pueblo cristiano allí congregado.

 

 

 

 

Comienza el juicio de los asesinatos de los jesuitas españoles en El Salvador

El 16 de noviembre de 1989

junio 09, 2020 18:41

Guerra y terrorismo

(zenit – 9 junio 2020).- Esta semana comenzó el juicio contra los responsables de los asesinatos de los jesuitas españoles en El Salvador, un proceso iniciado hace más de diez años e impulsado por los jesuitas y por la Asociación Pro Derechos Humanos de España (APDHE).

Dicha asociación presentó hace un año la acusación contra el coronel Inocente Montano Morales y el teniente René Mendoza Vallecillos, del Ejército de la República de El Salvador, por el asesinato, en la madrugada del 16 de noviembre de 1989, de los sacerdotes jesuitas españoles Ignacio Ellacuría Beascoechea, Ignacio Martín Baró, Segundo Montes Mozo, Amando López Quintana y Juan Ramón Moreno Pardo, y del también sacerdote jesuita Joaquín López López, la empleada Julia Elba Ramos y la hija de ésta Celina Mariceth Ramos, los tres últimos de nacionalidad salvadoreña.

El juicio comenzó el lunes, 8 de junio de 2020, en Madrid, y es transmitido en directo, para de esta forma dar cumplimiento -en tiempos de COVID 19- al principio de publicidad y oralidad de los debates de la justicia penal.

 

Prescripción de delitos

Las sesiones se han iniciado con el planteamiento y resolución de la reciente solicitud del acusado Mendoza de que se excluya su responsabilidad penal por la prescripción de los delitos que se le imputan, señala la Asociación Pro Derechos Humanos.

Yushi René Mendoza Valdecillos era un joven oficial del Ejército Salvadoreño cuando los hechos tuvieron lugar, indica APDHE y “ha mantenido desde entonces una posición procesal de colaboración con la  justicia y reparación de las víctimas, para el completo esclarecimiento de los hechos, la instrucción de la causa y la celebración de este juicio”.

 

Operativo militar del ejército

El director del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad José Simeón Cañas (UCA), padre José María Tojeira, ex provincial de los jesuitas centroamericanos, narra en Vatican News memoria de lo sucedido aquel 16 de noviembre relata: “Cuando a las 6:30 de la mañana del 16 de noviembre de 1989 fuimos a ver los cadáveres de nuestros compañeros y de la que varios años fue cercana colaboradora y su hija, nos dimos cuenta de que se trataba de un operativo militar dirigido desde el Estado Mayor del ejército salvadoreño”.

Tal y como describe la asociación española, dichas estructuras paralelas del ejército salvadoreño emplearon “procedimientos clandestinos de guerra sucia y terrorismo de estado durante el conflicto armado interno en el país centroamericano” con la finalidad de alterar la paz pública e infundir terror en la población mediante acciones tales.

Ejecuciones extrajudiciales de opositores, ataques indiscriminados contra la población, desapariciones forzadas, torturas y otros atentados contra la vida y la integridad física y moral de las personas… entre los que cabe destacar el asesinato en 1980 de monseñor Óscar Arnulfo Romero, arzobispo de San Salvador, y sucesivos ataques con bombas contra la sede de la Universidad Centro Americana, UCA, que en ningún caso podía ser considerada un objetivo militar.

 

Asesinato de Ignacio Ellacuría

Esa cadena de agresiones manifiestamente violatorias del Derecho Internacional Humanitario, culminó en 1989 con el asesinato de Ignacio Ellacuría y sus compañeros, decidido por el Estado Mayor del Ejército Salvadoreño, y ejecutado de manera premeditada y alevosa por el Batallón Atlacatl que acabó con la vida de todas las víctimas por heridas múltiples de arma de fuego.

Treinta años después del asesinato de los jesuitas en El Salvador, la APDHE reitera su compromiso de seguir acompañando a las víctimas en esas causas por la justicia, y defendiendo el ejercicio de la jurisdicción universal en nuestros tribunales al tiempo que propugna la recuperación del marco legislativo por dos veces indebidamente restringido por nuestros legisladores con incumplimiento de las obligaciones previamente contraídas por España.

 

Un plan pensado y ejecutado

Los jesuitas de Centro América y de la Universidad José Simeón Cañas, por su parte, anunciaron en un comunicado publicado el 8 de junio que quienes decidieron el asesinato de los jesuitas de la UCA, de Julia Elba y su hija Celina, saben perfectamente que no perpetraron “simples asesinatos”.

Los religiosos aseguran que la masacre “fue el resultado de un plan pensado y ejecutado, en la lógica del terrorismo de Estado, calificado como un crimen de lesa humanidad y crimen de guerra” e indican que “mataron a personas inocentes, personas de bien, que dedicaron su vida a defender a los pobres, a impulsar la justicia social y promover el bien común desde la razón y el conocimiento académico”.

 

 

 

 

Costa Rica: Obispos exhortan a dar a conocer el protocolo del “aborto terapeútico”

Antes de su aprobación

junio 09, 2020 11:56

Conferencias Episcopales

(zenit – 9 junio 2020).- Los obispos de la Conferencia Episcopal de Costa Rica exhortan a las autoridades responsables de elaborar y sancionar el Protocolo referido al “aborto terapéutico” a dar a conocer el contenido del mismo a la opinión pública antes de su aprobación.

A través de una carta dirigida al presidente de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Román Macaya, el presidente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica y arzobispo de San José, monseñor José Rafael Quirós, manifiesta que “actualmente, la gran mayoría de la ciudadanía desconoce los alcances y contenidos de dicho Protocolo que será aprobado por el Ministerio de Salud”.

 

Norma técnica

El arzobispo de refiere Norma Técnica para el procedimiento médico del “aborto terapéutico”, que vinculado con el artículo 121 del Código Penal, fue aprobada por el presidente de la República, Carlos Alvarado, el 12 de diciembre de 2019.

Efectivamente, el dirigente del país firmó el 13 de diciembre un decreto que contiene el “reglamento técnico” sobre la despenalización del aborto

Esta norma permitirá poner fin al embarazo en caso de violación, malformación del feto o riesgo para la madre. Tras la firma, el Ministerio de Salud, con el aval de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), obtuvo un plazo de seis meses para redactar dicho documento y sus protocolos de actuación.

En aquel momento, los obispos costarricenses expresaron su “contundente rechazo e indignación” por medio de un comunicado titulado “La vida humana es sagrada”. En él explican que dicha norma “contradice el sentimiento expresado, con total claridad, por un pueblo convencido de su amor a Dios y a la vida naciente”.

 

Transparencia

Dado que el cumplimiento del plazo para la presentación del Protocolo y la entrada en vigor de la Norma es inminente, en la citada misiva se indica que es de suma importancia “la transparencia en la toma de decisiones de las autoridades sanitarias” en materia del derecho humano fundamental a la vida  y, en consecuencia, que “la ciudadanía, que convive en un régimen democrático participativo, tenga el derecho a expresar su opinión”.

“La vida humana es un don de Dios y nuestra responsabilidad es defenderla, conservarla y cuidarla desde el momento de su concepción hasta su término natural”, recuerda el presidente del episcopado.

Finalmente, el presidente del episcopado apunta que los obispos continúan “rogando a Dios en estos tiempos de pandemia debido a la COVID-19, por la vida humana y la salud integral que requiere de la solidaridad y del bien común”.

 

 

 

 

España: 152 monasterios de clausura logran sobrevivir a la pandemia

Con la Campaña “Tu Clausura Mi Clausura”

junio 09, 2020 19:29

Órdenes religiosas

Madrid, 9 de junio de 2020.- Cierra la Campaña “Tu Clausura Mi Clausura” tras casi dos meses de su lanzamiento. Desde entonces “ha sido enormemente impactante la generosidad de cientos de personas hacia nuestros religiosos” apunta Santos Blanco, uno de los iniciadores de esta causa que buscaba ayudar en el sostenimiento de las personas de vida contemplativa que quedaron sin recursos durante la pandemia.

1776 religiosos, de 152 monasterios en España han logrado sobrevivir con los casi 150 mil euros recaudados a través de la web creada para la campaña: tuclausuramiclausura.org y repartidos a través de la Fundación “De Clausura” dedicada desde hace 14 años a atender y promover la vida contemplativa.

“Nos quedamos impresionados. Las personas no sólo donaron, también muchos de ellos nos mandaron peticiones de oración. Parece que esta campaña y sus circunstancias han vuelto a reunir en comunión la vida de la Iglesia entre todos sus miembros”, afirma Agustín de Asís, secretario general de esta fundación.

Además, los creadores de este movimiento invitan a través de la web a “acercarse al monasterio más cercano y conocer el torno online” que pone a disposición de todos productos artesanales realizados en conventos y disponibles en declausura.org.

Las monjas han grabado un video de agradecimiento para todas aquellas personas que pensaron y rezaron por su sustento.

 

 

 

 

 

 

Bolivia: “Actuar con responsabilidad”, la mejor forma de combatir el coronavirus

Labor de concienciación en hospital de Potosí

junio 09, 2020 17:32

Iglesia católica
Medicina y salud

(zenit – 9 junio 2020).- “Actuar con responsabilidad” frente a la pandemia del coronavirus es el principal pedido a la población del Hospital Nuestra Señora Inmaculada Concepción de la diócesis de Potosí, Bolivia.

Dicha responsabilidad implica cumplir disciplinadamente con las recomendaciones de bioseguridad, tales como el lavado de manos o el uso de barbijos (mascarillas), indica Iglesia Viva, medio católico en Bolivia.

Frente a la situación de emergencia sanitaria, el mencionado hospital, que se encuentra ubicado en la zona minera de la ciudad de Potosí, se encarga de formar la conciencia de la población a través de iniciativas concretas y efectivas: como cumplir ellos mismos los protocolos establecidos, capacitar a los usuarios del hospital, coordinar con las autoridades departamentales y confeccionar barbijos.

 

Labor de concienciación

En una entrevista al citado medio, la dra. Marlene Flores, jefe médico del hospital, habla sobre la experiencia en esta labor de concienciación. La doctora apunta que, al estar ubicado en la zona alta de la ciudad de Potosí, próxima al cerro, este centro hospitalario “beneficia principalmente a mineros y personas provenientes del área rural que habitan en la periferia de la ciudad”.

Según Flores, las primeras iniciativas concretas realizadas frente a la pandemia “fueron principalmente dirigidas a los usuarios internos del hospital, concretamente capacitación bajo la responsabilidad del comité de vigilancia epidemiológica del hospital en diferentes temas de bioseguridad y manejo de protocolos COVID- 19”.

Igualmente, señala que existió una actividad de coordinación con el Servicio Departamental de Salud (SEDES) de Potosí en actividades de vigilancia epidemiológica como detección, notificación de casos sospechosos, apoyo en vigilancia comunitaria, entre otros, así como la promoción y prevención del coronavirus en consulta externa con los usuarios del hospital y la fabricación de barbijos.

 

Dificultades y recomendaciones

En cuanto a las dificultades con las que se enfrentan, la sanitaria describe que estas son “la adquisición de insumos de bioseguridad y ropa de protección personal que se elevaron en costos inclusos 10 veces más del costo inicial” y también la la “irresponsabilidad y falta de consideración de la población hacia el personal de salud”.

Es por ello que desde el Hospital Nuestra Señora Inmaculada Concepción se pide a la población el cuidado de su salud y de los demás poniendo en práctica las recomendaciones de las medidas de bioseguridad, como el lavado de manos, el distanciamiento social, el uso de mascarillas y evitar automedicarse.

 

 

 

 

Infancia Misionera: Jóvenes comprometidos durante el confinamiento

Misioneros en su propia casa

junio 09, 2020 18:18

Misión

(zenit – 9 junio 2020).- El boletín de información misionera de la Secretaria General de la Obra Pontificia de la Infancia Misionera (POIM-IAM) presenta una panorámica sobre cómo han vivido este tiempo de coronavirus los niños y adolescentes.

Efectivamente, tal y como informa la agencia misionera Fides en una nota, la COVID-19 ha afectado a todo el mundo, ha condicionado fuertemente la vida de todas las personas, familias y comunidades, también en el campo eclesial y misionero.

 

Misioneros desde casa

En el nuevo número del boletín de POIM-IAM, “Especial COVID-19”, se ofrece una amplia muestra de las actividades realizadas en este tiempo en países como Madagascar, Mozambique, Inglaterra y Gales, Polonia, Argentina, Honduras, Bolivia, Italia e India.

Si bien el aislamiento ha detenido las actividades de grupo, los niños y jóvenes de la POIM-IAM han mantenido su compromiso espiritual, convirtiéndose en “misioneros en su propia casa”, utilizando las redes sociales para permanecer en contacto entre ellos e implicando también a la familia.

Así vivieron la Cuaresma, el tiempo de Pascua y el mes mariano (mayo) desde una dimensión misionera, guiados por los subsidios que sus animadores les han propuesto y conectados con el mundo entero en una gran cadena de oración y solidaridad universal que el coronavirus no ha podido aplacar.

 

Antes del aislamiento

En la citada publicación se encuentran también las crónicas de los acontecimientos celebrados antes del confinamiento exigido por la pandemia: la celebración de la Infancia Misionera y de la Jornada de la Epifanía en Malawi; el entusiasmo de los niños misioneros de la diócesis de Chilaw, en Sri Lanka, “que hablan de Jesús sin vergüenza ni artificiosidad”; la Infancia Misionera de Rajshahi, Bangladesh, que está trabajando mucho en la formación de los animadores y de las comunidades tribales.

Asimismo, se ofrece la experiencia del “Campo de amistad” de la diócesis de Pala, en Chad, promovido para dar a los niños un lugar de aprendizaje y de participación de los valores evangélicos, intelectuales, humanos y pastorales; así como la labor misionera en las escuelas católicas de la diócesis de Goroka, en Papúa Nueva Guinea, compartida también por los niños de otras iglesias cristianas y de otras confesiones que acuden a dichas escuelas.

Por otra parte, la diócesis de Aliway, en Sudáfrica, organizó talleres para niños sobre la aceptación y el amor a quienes no conocen, sobre la globalización y sobre la mentalidad xenófoba; y en la diócesis de Mongomo, Guinea Ecuatorial, más de 1500 niños acompañados por muchas familias celebraron en la catedral la Jornada de la Infancia Misionera.

 

Oración de los niños contra el COVID-19

Finalmente, el boletín especial en torno a la COVID-19, concluye con la “Oración de los niños a Dios contra la difusión del coronavirus”, preparada por los niños de Tanzania: “Nosotros, tus niños, nos presentamos a ti con gran humildad y te pedimos que nos salves de esta pandemia extremadamente contagiosa causada por el coronavirus. Con fe profunda nos unimos al mundo implorando tu misericordia…”, reza la misma.

“En este tiempo de pandemia hemos constatado con alegría que es importante y esencial para la vida de cada uno la presencia del otro, la relación con el otro, la cercanía y el compartir. Nos hemos visto obligados a relacionarnos de manera diferente, hemos hecho una especie de purificación también de los pensamientos y de los gestos ordinarios”, relata sor Roberta Tremarelli, secretaria general de la POIM-IAM, en el editorial del nuevo número del boletín de la organización.

“En todo tiempo la fe en Cristo resucitado y el don del Espíritu Santo reavivan en nosotros la esperanza y podamos dar gracias al Señor mirando a lo que los niños y los adolescentes, en varias partes del mundo, han vivido y realizado con espíritu misionero y según el carisma de la Santa Infancia”, añade.

 

 

 

 

Píldoras de esperanza: “Ésta es la luz de Cristo, yo la haré brillar”

Martes, 9 junio 2020

junio 09, 2020 10:02

Espiritualidad y oración

 

Reflexión de los Evangelios diarios

Invocamos al Espíritu Santo

“Ven Espíritu Santo, ven a mi vida y llena de alegría y paz mi corazón y dale sabiduría a mi mente para poder entender la Palabra de Dios. Amén”.

 

Evangelio según San Mateo 5, 13-16

“Ustedes son la sal de la tierra, pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué se salará?, ya no sirve para nada más, sino para ser arrojada fuera y ser pisada por personas que pasan.

Ustedes son la luz del mundo. No se puede esconder una ciudad construida en una colina. Tampoco nadie enciende una lámpara para ponerla debajo de una canasta; sino por el contrario, se coloca en su lugar adecuado para iluminar a todos los que están en la casa. De modo que la luz de ustedes brille para que otros puedan ver las buenas obras que hacen y alaben a su Padre en los cielos”.

Palabra del Señor

 

¿Qué dice el texto?

“De modo que la luz de ustedes brille para que otros puedan ver las buenas obras que hacen y alaben a su Padre en los cielos”.

 

 ¿Qué nos dice Dios el día de hoy a nosotros a través de este texto?

Es interesante descubrir que san Mateo, después de este gran discurso sobre la felicidad, ponga estas frases dichas por Jesús. Es como cuando en una sinfonía después de la obra maestra vienen unos acordes bien fuertes, para remarcar lo más importante.

Jesús habla de la sal y de la luz, como conceptos muy importantes. La sal era usada principalmente para preservar las carnes y los pescados. Era tan importante que se usaba como moneda, pero Jesús advierte que la sal puede perder su sabor y entonces servirá como combustible para avivar el fuego. Lo mismo dice da la luz. Recordemos que las lámparas de aceite eran usadas en la época de Jesús y cuando entraba la noche, sólo con estas lámparas podría alumbrarse una habitación. Obviamente, ni modo de esconderla una vez que está encendida.

Con esos dos ejemplos Jesús compara a sus seguidores, para que la sal y la luz sean un motor que nos impulse y que nos vaya llevando hacia esa felicidad de la que hablamos anteriormente.

En estas dos sería oportuno preguntarme junto con toda la Iglesia que ora con este texto, ¿hasta que punto yo soy sal de este mundo y evito que se descomponga? Puesto que ese es el uso de la sal, evitar que las cosas se pudran… así hoy cada uno debe ser modelo de evitar corrupción de cualquier tipo. Ser sal es estar en un lugar para ser modelos de honradez y honestidad, evitando con la sola presencia que los demás cometan errores.  Estoy seguro que en tu vida conociste a alguien que marcó estos valores. Ahora es el tiempo de serlo también para los demás.

Ser luz en las buenas obras para que los demás crean en el Señor. Es cierto que hemos sido testigos de cristianos que públicamente oscurecieron a muchos a su alrededor. Pero tal vez, la luz de Cristo que brilla en la mecha de nuestras vidas, pueda esparcir estas oscuridades. No nos escandalicemos de otros si nosotros no somos capaces de brillar para el mundo.

Te invito que con estos textos puedas repetir como una oración, esa canción de la Vigilia Pascual:

¡Ésta es la luz de Cristo, yo la haré brillar, brillará, brillará sin cesar!

Te invito a conocer más de nuestro trabajo diario sobre la Lectura Orante de la Biblia

 

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Argentina: El Papa acepta la renuncia del obispo de San Luis

Y nombra a su sucesor, Mons. Barba

junio 09, 2020 12:30

Iglesia católica

(zenit – 9 junio 2020).- El Santo Padre ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de San Luis (Argentina) presentada por Mons. Pedro Daniel Martínez Perea.

Igualmente, el Papa Francisco ha nombrado obispo de San Luis a Mons. Gabriel Bernardo Barba, hasta ahora obispo de Gregorio de Laferrere, informa hoy, 9 de junio de 2020, la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

De acuerdo a la Agencia Informativa Católica Argentina AICA, Mons. Pedro Daniel Martínez Perea, de 64 años, ha sido designado por el Papa como administrador apostólico “sede vacante” de la diócesis de San Luis hasta la toma de posesión canónica de su sucesor.

 

Mons. Gabriel Bernardo Barba

Nació en Morón (Buenos Aires) el 24 de abril de 1964. Completó sus estudios primarios en el Colegio de la Inmaculada en Castelar y sus estudios secundarios en el Colegio Marista San José en Morón. Es licenciado en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Católica Argentina.

En 1984 ingresó en el Seminario San José de Morón, diócesis para la que fue ordenado sacerdote el 12 de agosto de 1989.

Después de la erección de la diócesis de Merlo-Morenus en 1997, se incardinó en ella y desempeñó allí los siguientes ministerios: vicario parroquial de San Judas Tadeo y San Francisco de Asís; administrador parroquial y luego párroco de Cristo de Perdón; secretario del Vicariato Episcopal de la Juventud ; canciller de la Curia Diocesana.

También ha sido miembro del Colegio de Consultores y del Consejo Presbiteral; instructor de la Comisión Judicial Diocesana y de las Causas Sacerdotales; director de la Escuela Diaconal y encargado de la Formación de Diáconos Permanentes; vicepresidente de Cáritas Diocesana; pro-vicario general; vicario general y moderador de la Curia.

El 19 de diciembre de 2013 fue nombrado obispo de Gregorio de Laferrere, recibiendo la ordenación episcopal el 1 de marzo de 2014.

En el seno de la Conferencia Episcopal Argentina es miembro de la Comisión Permanente y presidente de la Comisión Episcopal de Comunicaciones Sociales.

 

 

 

 

P. Antonio Rivero: “¿Quieres entrar en la Alianza de Dios para alcanzar la salvación?”

Domingo XI del Tiempo Ordinario

junio 09, 2020 09:22

Espiritualidad y oración

Ciclo A

Textos: Éxodo 19, 2-6; Romanos 5, 6-11; Mateo 9, 36 – 10, 1-8

 

Antonio Rivero, L.C. Doctor en Teología Espiritual, profesor en el Noviciado de la Legión de Cristo en Monterrey (México) y asistente del Centro Sacerdotal Logos en México y Centroamérica, para la formación de sacerdotes diocesanos.

Idea principal: Nuestro Dios es un Dios de Alianzas porque quiere ofrecernos la salvación.

Resumen del mensaje: Dios, para salvarnos, hizo una Alianza con el hombre en el Antiguo Testamento, a través de Moisés (primera lectura). Y con la sangre de Cristo hizo la Nueva Alianza (segunda lectura) comenzando con los doce apóstoles (evangelio). La palabra Alianza proviene del término hebreo: BERIT (בְּרִית מִילָה), pacto, que significa las relaciones recíprocas entre dos partes con todos los derechos y deberes que de tal reciprocidad se siguen; es decir, bienestar, integridad total de la persona y de cuanto le pertenece. Dios hace Alianza con su pueblo y promete buscar su felicidad total. Alianza que exige, por parte del hombre, una voluntad, una fe, una obediencia a sus cláusulas, una reciprocidad de amor. Con la primera Alianza Dios nos hace un reino de sacerdotes y una nación santa (primera lectura). Con la Nueva Alianza en Cristo nos hace un pueblo misionero para salir a las periferias (evangelio).

 

Puntos de la idea principal:

En primer lugar, en el Antiguo Testamento, la alianza (berit) aparece claramente como el fundamento de la vida social, moral y religiosa del pueblo de Israel. Los profetas aluden indirectamente a ella para señalar la singularidad de los vínculos que unen a Dios con su pueblo y con la imagen de la alianza nueva alimentan la esperanza y la ilusión de un futuro de bienes, de paz y de familiaridad profunda entre Yahveh e Israel. A la luz del Antiguo Testamento se puede decir muy bien que “Israel vivió de la alianza” y que Dios es el Dios de la alianza, que pronuncia palabras de alianza al pueblo de la alianza y hace culminar estas relaciones en una suprema alianza.

El Antiguo Testamento resalta continuamente y con energía tanto la gratuidad de la alianza que tiene como fundamento exclusivo la benevolencia divina, como sus efectos salvíficos (redención, perdón, solicitud, providencia, misericordia) y la necesidad de la adhesión libre del hombre a la misma. Del encuentro entre la libertad de Dios y la de Israel (del hombre) se derivan frutos de bien, de paz, de armonía, en una palabra, la salvación. Hoy, el Señor dijo en la Alianza que hizo con Moisés en el Antiguo Testamento y que leímos en la primera lectura: “Si me obedecéis y guardáis mi alianza, seréis mi propiedad personal…y un reino de sacerdotes y una nación santa” (primera lectura). “Propiedad personal” de Dios, ¡qué privilegio! “Sacerdotes” mediadores de la esperanza y de la alegría de Dios para con los demás, ¡qué honra! “Nación santa” para santificar a los que están a nuestro alrededor, ¡qué responsabilidad!

En segundo lugar, según los autores del Nuevo Testamento, la alianza (diathéke, διαθήκη) asume un carácter de novedad, de plenitud y de definitividad, gracias al don del Hijo y del Espíritu que hace el Padre a la humanidad. En la sangre de Cristo se estipula el pacto nuevo y eterno que liga a los hombres con Dios, haciéndolos un pueblo Nuevo, llamado a vivir en comunión con su Señor. Por este motivo, la realidad de la alianza encuentra su manifestación histórica en la Eucaristía, sacrificio agradable que elimina el pecado y restablece la comunión perdida. En la Nueva Alianza, Jesús da un paso más: llama a unos hombres con nombre y apellido –los apóstoles–, los prepara y forma, y los envía en su nombre para llevar la salvación a todos, especialmente a esas ovejas sin pastor y a esos campos de mies que necesitan más “braceros” para la cosecha (Evangelio). Salvación que le supuso la entrega de toda su sangre para reconciliarnos con su Padre (Segunda Lectura).

Finalmente, Cristo quiere seguir ofreciendo su Alianza a tantos hombres y mujeres que están cansados, desorientados, como ovejas sin pastor, buscando el sentido de la vida. Estos hermanos nuestros, nos deberían conmover las entrañas del corazón y lanzarnos a anunciar el mensaje salvador de Cristo, especialmente a los marginados de la sociedad, y que viven en las periferias existenciales, pues “debemos salir de la propia comodidad y atrevernos a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio” (Papa Francisco, Evangelii gaudium, n. 20). Por eso, Cristo necesita hoy de manos, de bocas, de pies, de corazones…para que llegue su Alianza a todos. “Es vital que hoy la Iglesia salga a anunciar el Evangelio a todos, en todos los lugares, en todas las ocasiones, sin demoras, sin asco y sin miedo” (Papa Francisco, Evangelii gaudium, n. 23).

¿Qué implica el que Dios quiera hacer una alianza con nosotros? El corazón mismo de nuestra alianza con Dios implica que ambas partes tienen sus propias responsabilidades que cumplir. Por la parte de Dios, el Señor nos promete darnos su Espíritu Santo, grabar sus leyes en nuestro corazón, perdonarnos y cuidarnos para nuestro bienestar y felicidad. A su vez, Dios nos pide que, por nuestra parte, vivamos como el pueblo de su propiedad, es decir que lo amemos, seamos fieles a su voluntad, recurramos a él cuando necesitemos ayuda, rechacemos toda forma de idolatría y cumplamos fielmente sus mandamientos.

Para reflexionar: Hay mucha mies, se necesitan brazos. ¿Por qué no ofreces los tuyos? Hay muchos rostros que enjugar, ¿por qué no ofreces el pañuelo de tu ternura? Tú, vehículo de esta Alianza de Jesús.

Para rezar: Gracias Señor Jesús por ser siempre fiel a tus promesas, especialmente a la de estar siempre con nosotros. Que tu presencia misericordiosa nos mueva a caminar en fe confiando en tu eterno amor y fidelidad.  “Mi fidelidad y mi amor lo acompañarán, mi Nombre le asegurará la victoria” (Salmo 89, 25). Me he dejado engañar, de mil maneras. Escapé de tu amor, pero aquí estoy otra vez para renovar mi alianza contigo. Te necesito, rescátame de nuevo, Señor. Acéptame una vez más. Entre tus brazos redentores. Porque yo quiero estar contigo.

 

Para cualquier duda, pregunta o sugerencia, aquí tienen el email del padre Antonio, arivero@legionaries.org

 

 

 

 

Beato Eduardo Juan María Poppe, 10 de junio

Apóstol de la Eucaristía

junio 09, 2020 09:00

Testimonios de la Fe

 

“Pedagogo de la Eucaristía, devoción que difundió por doquier. Creador del Círculo del Catecismo y una Liga de Comunión. Un gran sacerdote que se dejó llevar por esta honda convicción: santificarse para santificar a los demás”

Las verdaderas raíces del desaliento son las deficiencias personales, las flaquezas, el conjunto de debilidades que no se han depurado y de las cuales se aprovecha el diablo. Con independencia de su origen, cuando aquél se presenta solo cabe pedir auxilio a Cristo. Eso hizo este beato cuando pasó por esta experiencia.

Nació en la localidad belga de Moerzeke el 18 de diciembre de 1890. Aparentemente, la profesión de su padre, que fue panadero, pudo condicionar su vida. Pero, sin duda, Dios lo había signado desde toda la eternidad para que estuviese vinculado estrechamente al Santísimo Sacramento, amasando el Pan de la Eucaristía durante ocho años, y difundiendo su amor por ella a través de escritos y predicaciones. Cuando tenía 16 años perdió a su progenitor. Él y su cristiana madre habían dado a la Iglesia siete de sus once hijos de los cuales algunos apenas sobrevivieron. La influencia materna fue determinante para que Eduardo ingresara en el seminario de San Nicolás, de Waas, en 1909. Al año siguiente tuvo que cumplir con obligaciones civiles en el ejército, aunque siguió estudiando.

Al estallar la Primera Guerra Mundial fue reclutado y desempeñó labores de enfermería. Allí tuvo ocasión de mostrar en qué grado deseaba realizar la voluntad de Dios ejercitando la caridad hasta quedar extenuado en circunstancias poco amables para una persona sensible como él. Tuvo que compartir la rudeza, malos modos, y pésimas chanzas de soldados entregados obligatoriamente al sinsentido de la batalla. Entonces aprendió aspectos importantes de la psicología humana que luego iban a servirle pastoralmente.

La lectura de la autobiografía de Teresa de Lisieux le dejó profunda huella y experimentó gran sintonía con ella en su forma de vivir la oración. Por su amor a la cruz redentora elegía a san Francisco de Asís, aunque también se sentía cercano a san Luís María Grignon de Montfort en su devoción a María. Pensando en la misión sacerdotal, tuvo claro que la santidad se transmite si se vive en primera persona: “Santificarse para santificar a los demás”. Este hecho indiscutible que viene avalado por el mismo evangelio, donde queda claro que nadie puede dar lo que no tiene, no fue entendido por algunos. Le dijeron que esa apreciación era fruto de una visión idealista, lo cual introdujo en su ánimo la duda respecto a la viabilidad de su santidad personal. Todo ello en medio de un proceso de aridez que no se disipaba ni siquiera al encomendarse a María. Con la puerta abierta al desánimo, se sentía tan poca cosa que no entendía cómo Dios podía amarle. Su confesor le ayudó: “Diga con frecuencia: ‘Señor, yo creo, pero ayúdame’. Sobre todo, no se desanime. Mire el crucifijo; en él encontrará la paz gozosa del sacrificio”. Siguiendo este consejo, con ayuda de la gracia salió adelante.

En 1914 otro sacerdote, que le asistió en un instante en el que lo recogieron casi moribundo, le infundió la devoción a san José. Dos años más tarde fue ordenado sacerdote y destinado como vice-párroco a Santa Coleta en Gante, iglesia erigida en un barrio marginal. En el dintel de su casa escribió “Porta patet, cor autem magis” (la puerta está abierta, pero más el corazón). No fue una bella frase o una simple consigna. Como había hecho antes, prodigó la misericordia a manos llenas: socorría a todas las personas que vivían situaciones de marginación, pobreza, enfermedad, a los niños y moribundos. Sorprendentemente, multiplicaba las horas de adoración delante de la Eucaristía. De ella brotaba el manantial de bondad que derramaba a manos llenas. A un sacerdote que se interesó por él al verlo ante el altar, le respondió: “…le estoy haciendo compañía a Nuestro Señor. Me encuentro demasiado cansado para hablarle, así que estoy descansando a su lado”.

Difundió entre los niños su profunda devoción por la Eucaristía a través del semanario ilustrado Zonneland (País del Sol), de su autoría. Y su “Método educativo eucarístico” fue calificado por el cardenal Mercier como una obra maestra. Es considerado por muchos “pedagogo de la Eucaristía”. Promovió asociaciones seglares y sacerdotales, incluyendo la renovación litúrgica y catequética. Creó el Círculo del Catecismo y una Liga de Comunión. Sufrió mucho cuando le indicaban que se alejara de sus campos de acción apostólica, y siempre obedeciendo rogaba a Cristo que le ayudase. “¡Sufrir y obedecer!”, escribía tomando como modelo al Salvador y a san José. Los frutos apostólicos se multiplicaban.

Casi al final de su vida fue capellán de una comunidad religiosa en Moerzeke. Se dedicó a la contemplación, al estudio y a la predicación. Escribió contra el marxismo, el materialismo y la secularización. Fue de salud débil toda su vida y tuvo periodos largos en los que se vio obligado a permanecer en cama. Según confió en su última carta a su director espiritual, se ofreció a Cristo por las vocaciones, especialmente las sacerdotales. La muerte le sorprendió paralizando su corazón, después de tres crisis cardíacas, el 10 de junio de 1924 mientras se hallaba en Leopoldsburgo. Había llegado en 1922 para asistir a los sacerdotes que cumplían servicio militar. Tenía 34 años. Juan Pablo II lo beatificó el 3 de octubre de 1999.